El Museo Arqueológico de Alcoy (Alicante) acoge una muestra de restos óseos humanos que permiten conocer las enfermedades que se sufría en la antigüedad

La muestra está compuesta por catorce paneles explicativos y restos óseos encontrados en Alcoy (Alicante) que escriben la historia de las patologías más comunes en la Prehistoria. Tumores, heridas de arma, lesiones o tradiciones son algunos de los aspectos más reflejados en los huesos estudiados y expuestos a todos los visitantes.

Lo huesos, los antepasados y las enfermedades más comunes de la Prehistoria son el eje principal de la exposición «Cuidar, Guarir, Morir. La malaltia llegida en els ossos». Un paseo por el pasado que pone de manifiesto que algunas de las patologías más sufridas en la actualidad ya lo eran muchos siglos atrás. La muestra, compuesta por varios restos óseos y catorce paneles explicativos, ilustra al visitante las enfermedades que acechaban a las tribus, así como algunas tradiciones que dejaban huella en el cuerpo humano.

El director del museo Arqueológico de Alcoy, Joan Josep Segura, indicaba que la exposición nacía el pasado mes de noviembre tras el congreso de Paleopatología que se realizó en el Museo de la Universidad de Alicante. Un encuentro en el que expertos de ámbito nacional e internacional presentaron una larga lista de conclusiones sobre todas las enfermedades analizadas en los restos óseos.

Durante el congreso, los museos de Elche, Alcoy, Novelda, Crevillente, Villena y otros de la provincia prestaron restos óseos para que los expertos pudieran ilustrar sus conclusiones y así realizar a su vez esta interesante exposición que ha iniciado su andadura en Alcoy y que visitará otros museos de la provincia.

Amplio abanico de patología

Además de la información escrita, lo más interesante se refleja en los restos encontrados en «El Puig» o «El Castellar». En los cráneos hallados se pueden ver tanto afecciones por tradiciones que reportaban malformaciones en el cráneo o muestras de heridas de espada. También se ha podido observar en los análisis que eran comunes las malformaciones craneales por tumores, una patología que todavía acecha al ser humano actual.

Otro de los aspectos reflejados en las muestras halladas son los indicios de canibalismo, restos con señales de haber sido mordidos para el sustento o por venganza. Se han hallado también cantidad de afecciones en las articulaciones y lesiones que demuestran que han sido muy frecuentes en el humano desde la prehistoria.


El director agradeció la dedicación de Mª Paz de Miguel Ibáñez en el montaje de la exposición así como por su dedicación durante más de treinta años al análisis de todos los restos extraídos en las excavaciones realizadas en la ciudad de Alcoy.

Para finalizar, Segura, invitó a todos los ciudadanos y visitantes a disfrutar de esta exposición que estará abierta hasta el 25 de febrero y que es completamente gratuita en el horario del museo.

Fuente: diarioinformacion.com | 25 de diciembre de 2017

Vilafranca (Castellón) desvela dos nuevos hitos para el arte rupestre levantino con 7.000 años de antigüedad

Jabalí de La Ferranda retocado. INÉS DOMINGO

Se llaman L’Abric de la Volta Espessa y l’Abric de la Ferranda. Apenas los separan 20 minutos de camino a pie por el margen del río Monlleó, en el término de Vilafranca (Castellón) y vuelven a situar a la provincia en la élite del arte rupestre mundial. Son los dos yacimientos de este arte prehistórico más importantes que han salido a la luz en la Comunidad Valenciana en los últimos 30 años. Descubiertos en noviembre de 2013 y marzo de 2016, respectivamente, no ha sido hasta hoy cuando se ha desvelado el nombre y la ubicación exacta de ambos abrigos de arte rupestre levantino –declarados BIC desde 1985 y Patrimonio Mundial desde 1998- con pinturas de 7.000 años de antigüedad.

Por cuestiones de seguridad “se había mantenido en secreto su localización. Había mucha expectación a nivel científico, pero hasta que no estuvieran protegidos no podíamos dar nombres. Y ahora lo están”, explica Inés Domingo (izquierda), arqueóloga del ICREA / Universitat de Barcelona y codirectora del proyecto. Ella, junto al otro pilar de la investigación, el también arqueólogo Dídac Román (derecha), han presentado en Castellón los trabajos de cierre de sendos yacimientos, que permiten dar a conocer al público y a la órbita científica internacional los hallazgos. Los dos proyectos han sido promovidos por el ayuntamiento de Vilafranca y financiados por el Ministerio de Cultura.

El contenido de ambos yacimientos los hace únicos. La Ferranda contiene una batida de caza, casi exclusiva en el arte levantino, de una manada completa de jabalíes. Solo hay otro ejemplo, de los más de 1.000 yacimientos que salpican la costa mediterránea, y es el de una batida de caza de ciervos en la Cova dels Cavalls, en el parque castellonense de la Valltorta, de la que este 2017 se ha conmemorado el centenario de su descubrimiento. “Han tenido que pasar cien años entre uno y otro”, apostilla Inés Domingo.

Pinturas encontradas en Vilafranca. INÉS DOMINGO

Por su parte, La Volta Espessa (cuyo nombre se debe al meandro del río donde se levanta el abrigo) reúne doce figuras que incluyen a todas las especies mayoritarias del arte levantino: toros, un ciervo, una cabra y caballos, “y además dos escenas de caza y figuras humanas muy singulares, porque están en posiciones que no son comunes, sin paralelos”, indica la arqueóloga.
Escuchar el relato de Inés Domingo supone un viaje en el tiempo. La descripción que da de los abrigos pincela el modo de vida de la especie humana prehistórica. No obstante, la experta asegura que todavía quedan cabos sueltos.

"Los dos conjuntos hablan de caza, pero lo que seguimos sin saber, y a ello vamos a dedicar ahora nuestros esfuerzos, es si los autores de las pinturas son los últimos cazadores recolectores o los primeros agricultores de la península Ibérica”. Ello ayudaría a “entender por fin” si las figuras representadas están marcando un territorio para defenderse de la llegada de poblaciones foráneas, que serían los agricultores procedentes del Próximo Oriente; o si por el contrario son los primeros agricultores y, por lo tanto, lo que hacen con las pinturas es explorar el nuevo territorio, marcando con este arte zonas de caza o de celebración de ceremonias.

Arquero de La Volta Espessa. INÉS DOMINGO

Para que la balanza se incline hacia una u otra opción, faltan dataciones absolutas. Asegura que no se puede poner fecha a los pigmentos con carbono 14 porque no se conserva materia orgánica. “Hay que esperar a otros métodos de datación; estamos probando con series de uranio-torio para ver si obtenemos dataciones mínimas, pero no tenemos aún resultados”.

A la espera de dar este paso, lo que sí tiene claro el equipo que ha trabajado en sendos abrigos es que "suponen el descubrimiento de arte rupestre levantino más destacado en la Comunidad Valenciana de las últimas tres décadas, por lo menos. Lo son por la cantidad de figuras y escenas representadas, y por la calidad de conservación”, añade Inés Domingo. También porque el hallazgo de "ambos yacimientos llenan un vacío geográfico en esta zona interior, pues se pensaba que sólo estaban los conjuntos de Remigia (en el parque castellonense de la Gassulla-Valltorta) y del Bajo Aragón (Teruel), y estos yacimientos conectan ambos territorios y demuestran que hay un hilo entre los dos, por las similitudes estilísticas”.

Una de las pinturas rupestres halladas en Vilafranca (Castellón)

"La Volta Espessa y La Ferranda enriquecen la oferta cultural en una zona interior cada vez más condenada a la despoblación, y aportan elementos nuevos para atraer un turismo sostenible”, señala la arqueóloga. Para materializar este tipo de visitas, hay que facilitar los accesos. Ambos enclaves están en una zona muy remota, a una hora en coche de Vilafranca y a la que sólo se puede acceder en todoterreno por pistas forestales. El ayuntamiento del municipio está estudiando qué protocolo seguir para que los abrigos puedan visitarse.

Junto a la vertiente turística, la científica prosigue su camino. Ahora le toca el turno a los especialistas en geomorfología para hacer el análisis de los pigmentos, al tiempo que otro equipo internacional asumirá las dataciones. Mientras, y con el interés planetario posado ya en la provincia de la mano de ambos yacimientos, el arte rupestre levantino, patrimonio mundial por la Unesco, clama seguir escalando posiciones. “No lo estamos poniendo a la altura que merece”, concluye Inés Domingo.

Cierre de Volta Espessa.

Fuente: elpais.com| 25 de diciembre de 2017

Las pirámides de Guiza siguen seduciendo 4.500 años después

Las pirámides de Guiza, en Egipto - ABC

El revuelo desatado por el anuncio del supuesto descubrimiento de una cámara en el interior de la Gran Pirámide de Guiza, desmentido por las autoridades egipcias, constata el extraordinario interés que despiertan los secretos del antiguo Egipto

El revuelo desatado por el anuncio del supuesto descubrimiento de una cámara en el interior de la Gran Pirámide de Guiza, desmentido por las autoridades egipcias, ha vuelto a constatar el extraordinario interés que despiertan los secretos del antiguo Egipto y la incesante labor por desvelarlos.

La revista Nature publicó el pasado 2 de noviembre un estudio del proyecto ScanPyramids -que desde 2015 analiza las pirámides con una técnica innovadora- que revelaba la existencia de un «gran hueco» -de más de 8 metros de alto, entre 1 y 2 metros de ancho y 30 metros de largo- en la Pirámide de Keops, conocida como Gran Pirámide. El equipo de científicos -integrado por franceses, egipcios y japoneses- aseguró que ese era el primer descubrimiento en el interior de esta pirámide desde el S.XIX y constituía un «gran avance» para entender su estructura.

Los expertos descubrieron el hueco mediante una radiografía con rayos cósmicos conocidos como «muon» (que se activan cuando partículas subatómicas procedentes del espacio exterior entran en contacto con la atmósfera terrestre), una técnica no invasiva que se está empleando en diferentes ámbitos, sobre todo en la arqueología. Los «muon» presentan diferentes trayectorias cuando penetran en la piedra o atraviesan el aire, lo que permite diferenciar las estructuras sólidas de las cavidades, como la detectada en la Gran Pirámide, ubicada por encima de su principal galería.

La función de la cámara


El equipo de ScanPyramids admitió que, de momento, se desconoce la función de la cámara o hueco, pero destacó en el artículo de Nature que esta era la primera vez que se descubría una estructura en el interior de una pirámide desde el exterior, gracias a la física de partículas. Sin embargo, el Ministerio de Antigüedades egipcio -que colabora con ScanPyramids y le autoriza para analizar el monumento más preciado del país- acusó al equipo investigador de haberse precipitado y de haber usado «términos propagandísticos» en su anuncio, que tomó por sorpresa a las autoridades egipcias.

El Departamento señaló en un comunicado que ya se conocía la existencia de «numerosos huecos» dentro de las tres pirámides de Guiza, por lo que no se podía hablar de hallazgo o descubrimiento. El secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades egipcio, Mustafa Waziri, explicó que «existen muchos huecos, porque no podemos calificarlos de cámaras, pero no sabemos» cuántos ni dónde están localizados, ni para qué servían.

Además, otros dos equipos, uno estadounidense y uno japonés, van a realizar nuevos análisis para corroborar los resultados obtenidos por ScanPyramids, según Waziri. Sin embargo, el arqueólogo consideró que el escaneado de las pirámides «no va a ofrecer la verdadera historia» que se encuentra detrás de estas enigmáticas construcciones.
Monumentos funerarios

La Gran Pirámide -construida en honor a Khufu, segundo faraón de la IV Dinastía que reinó de 2550 a. C. a 2527 a. C. y a quien Herodoto llamó Keops-, junto a las vecinas pirámides de Kefrén y Micerino, son los monumentos funerarios más destacados del Reino Antiguo, levantadas para enterrar y recordar a los reyes a los que deben su nombre.

Su método de construcción sigue siendo un misterio a día de hoy, al igual que muchas otras incógnitas que aún rodean a los antiguos egipcios y que «algún día conoceremos», en opinión de Waziri. «Las pirámides son conocidas por todo el mundo porque son la construcción más compleja, más famosa y más importante de la historia», destaca el secretario.

Además de la pasión por parte de los amantes de la egiptología, los expertos que hagan algún descubrimiento destacado «saben que su nombre estará en la historia para siempre», añade Waziri, explicando de esta forma el gran interés que tienen arqueólogos de todo el mundo en Egipto.

Prueba de ello es la polémica que el británico Nicholas Reeves protagonizó en 2015 tras formular una hipótesis según la cual detrás de la pared norte de la tumba del famoso faraón Tutankamón, en Luxor, habría una cámara en la que estaría enterrada la reina Nefertiti, lo que también generó una expectación desmesurada hasta que las autoridades egipcias lo negaron tras varios exámenes.

Fuente: ABC

Los osos pardos ibéricos no descienden de los huidos del norte en la Edad de Hielo

Tras la última glaciación en Europa Occidental, el sur de Europa pudo ser un refugio para algunas especies de osos llegados del norte, según una hipótesis científica ampliamente aceptada. Sin embargo, estudios recientes han matizado esta idea. Ahora, un equipo de científicos de la Universidad de A Coruña ha reconstruido la dinámica de las poblaciones de úrsidos en la península ibérica.

“Hemos investigado el ADN de las mitocondrias [las ‘fábricas’ de energía celular] de un importante número de muestras de osos actuales, holocenos y pleistocenos, en el contexto europeo, y hemos visto que la teoría de los refugios glaciares, comúnmente aceptada, no funciona para esta especie”, explica a Sinc Aurora Grandal Danglade (izquierda), investigadora de la Universidad de A Coruña y coautora del estudio que publica la revista Historical Biology.

En su trabajo recogieron datos sobre la cronología y el genoma mitocondrial de osos pardos (Ursus arctos) de Europa occidental, añadiendo nuevas secuencias de los actuales del Cantábrico.
“Mediante el estudio de osos actuales, se había visto que los osos pardos del sur de Escandinavia eran del mismo linaje que los ibéricos actuales. Esto dio pie a formular la hipótesis de que la Península habría servido como refugio glaciar a los osos pardos, que al finalizar el último máximo glacial, habrían recolonizado el oeste de Europa desde aquí”, explica Ana García Vázquez, coautora de la investigación.

En el norte de la península ibérica existían tres linajes maternos durante el Pleistoceno: uno más numeroso y otros dos de los que solo se conservan restos de un único individuo de cada grupo. La coexistencia de tres linajes distintos de osos es algo que ocurre, por ejemplo, en Rusia en la actualidad. Sin embargo, en la Península solo existe uno, lo que significa que los otros dos linajes llegaron de zonas muy distantes y no tuvieron continuidad en el tiempo.

Fósil de oso pardo (Ursus arctos) / Ana García Vázquez

Esto implica que el linaje pleistoceno se perdió, y los osos holocenos, después del último máximo glacial, entraron en la península desde alguna zona no identificada –probablemente Francia– y lo hicieron 5.000 años después de haber recolonizado las islas británicas.

“Sería necesario obtener más secuencias mitocondriales de osos de otras regiones de Europa occidental para aclarar si la presencia de estos linajes maternos es casual o, por el contrario, no se encontraron otros representantes debido a la escasez de datos”, puntualiza la científica.

El retraso en la recolonización de la península ibérica podría deberse a las características orográficas de los Pirineos y a la abundante presencia de seres humanos en la entrada natural de la Península. Sin embargo, como no hay continuidad de ninguno de los linajes pleistocenos en el Holoceno, Grandal y su equipo proponen la existencia de un refugio críptico en la Europa continental del Atlántico, “desde donde los osos se expandieron a medida que el hielo retrocedió”, concluye.

Fuente: SINC | 26 de diciembre de 2017

Descubren una extensa red de fortificaciones militares de hace 4.000 años en Siria

Vista, hacia el este, del grosor del muro norte de Qal'at al-Rahiyya. Foto: M.-O. Rousset mission Marges arides

Hace unos 4.000-3.500 años, durante la Edad del Bronce, se levantó un extenso sistema de fortificaciones en una región situada al este de Hama (Siria), de unos 7.000 km². Esta estructura, excepcional en cuanto a su extensión, fue erigida con el fin de proteger las zonas urbanas y sus territorios circundantes.
Las fortificaciones fueron construidas con grandes bloques de basalto en bruto que formaban muros de varios metros de anchura y altura. El sistema defensivo incluía fortalezas, fortines, torres y recintos que corrían a lo largo de las regiones montañosas que dominan las estepas del centro de Siria. Los sitios fortificados estaban ubicados de tal forma que se pudiera establecer un contacto visual entre los mismos, por ejemplo con señales de luz o de humo.

Vista hacia el noroeste que muestra la rampa de acceso situada en Qal'at al-Rahiyya. Foto: M.-O. Rousset mission Marges arides.

Esta extensa red de fortificaciones militares ha sido descubierta por primera vez en el territorio sirio tras el análisis de imágenes aéreas y satelitales por parte de unos investigadores franceses del Laboratoire Archéorient (Environnements et sociétés de l’Orient ancien-CNRS/Université Lumière Lyon 2) y de la Dirección General de Antigüedades y Museos de Siria, según informó ayer el CNRS de Francia.

La fortificación de Rubba.Foto: B. Geyer mission Marges arides.

Esta red regional probablemente fue construida para defender el territorio, para vigilar y proteger los corredores de transporte y, sobre todo, para proteger las tierras más atractivas. "El acceso a las observaciones aéreas y satelitales, desde 1960 hasta la actualidad, ha hecho posible reconstruir la red más allá de los límites de la zona que se estaba explorando. Así se ha podido detectar una red que se extiende de norte a sur y a lo largo de unos 150 kilómetros", concluye el comunicado del CNRS.

Fuente: National Geographic | 22 de diciembre de 2017

Kozarnika (Bulgaria)

Entrada de la cueva de Kozarnika (Bulgaria). Fuente: Wikipedia.

Hace algunos años tuve la oportunidad de visitar el yacimiento localizado en la cueva de Kozarnika, situada al noroeste de Bulgaria, no lejos de la frontera con Serbia. La ocasión surgió con motivo de dos conferencias en el Instituto Cervantes de Sofía, que nos permitió contactar con los dos únicos equipos de arqueólogos que trabajaban en sendos yacimientos de ese país. Como suele ocurrir entre vecinos muy próximos, los miembros de los dos equipos no tenían una relación fluida. Así que no quedó más remedio que quedar con ellos en días diferentes.

El arqueólogo Nikolay Sirakov lideraba las excavaciones en la cueva de Kozarnika junto con un colega francés. Sus medios eran muy limitados, en un país donde una gran parte de la población había tenido que emigrar. Durante nuestro viaje por carretera (algo más de 200 kilómetros) desde la capital y la pequeña aldea cercana a la cueva fue imposible encontrar un solo lugar para detenernos a tomar un café. Es más, atravesamos una ciudad fantasma, totalmente abandonada tras la desmembración de la Unión Soviética y que en su día fue un lugar próspero dedicado a la minería. Al menos disfrutamos de un paisaje espectacular de montes y bosques vírgenes.


En un valle idílico se abría la entrada, alta y estrecha, de la cueva de Kozarnika. Sirakov nos relató que tiempo atrás había sido utilizada para guardar material bélico. Pero la cueva fue abandonada por los militares y pudieron iniciarse excavaciones. Varios sondeos de pocos metros cuadrados habían permitido llegar hasta los niveles más profundos, que habían proporcionado varias herramientas de piedra de manufactura muy arcaica. Su datación se ha fijado entre 1,4 y 1,6 millones de años por lo que esas esas herramientas representan la evidencia más antigua conocida de la primera ocupación del continente europeo desde la península de Anatolia a través del Bósforo. Si los humanos ya estaban en la República de Georgia, a las puertas de Europa, hace al menos 1,8 millones de años, la ocupación del continente tuvo que suceder muy poco después de esa fecha. Será fascinante conocer algún día el aspecto de aquellos primeros europeos.

Hace más de diez años de aquel viaje y Sirakov ha conseguido algunos logros junto al equipo francés con el que colabora. Se han realizado sondeos escalonados para obtener datos de épocas distintas. En uno de los sondeos, datado entre 128.000±13.000 y 183.000±14.000 años mediante el método de luminiscencia (OSL) se localizó en 2013 un húmero infantil junto a una abundante industria musteriense. Su estudio se publicado en la revista Journal of Human Evolution, en un trabajo liderado por la paleoantropóloga francesa Anne-Marie Tillier. La edad del individuo al que perteneció este húmero, que apenas mide 69 milímetros, se ha estimado entre tres y seis meses después del nacimiento. A pesar de ello, este fósil muestra ya algunos de los caracteres diagnósticos de los neandertales. No es una sorpresa que los neandertales ocuparan el noreste de la península balcánica, pero resulta interesante encontrar restos de la especie en una zona muy poco explorada por falta de recursos.


Radio infantil recuperado en la cueva de Kozarnika. Fuente: Journal of Human Evolution

Esta región fue lugar de paso de todas las poblaciones que colonizaron Europa, y la cueva de Kozarnika se encuentra en el lugar oportuno. Quizá tengamos ocasión de escuchar con más frecuencia este nombre por futuros hallazgos, y cabe desear que se lleve a cabo una exploración arqueológica intensa de todo este territorio, que tiene muchas claves para conocer la naturaleza de las diferentes entradas de grupos humanos en Europa occidental.

Fuente: quo.es | 19 de diciembre de 2017

Incógnitas sobre la expansión de Homo sapiens

Restos humanos de la cueva de Zhiren, sur de China. Fuente: PNAS.

La cueva de Zhiren (Zhirendong) se encuentra situada en las montañas de Mulan, cerca de la ciudad de Chongzuo, en la provincia de Guangxi (sur de China). En uno de los niveles estratigráficos del yacimiento que rellena la cueva se obtuvieron en 2007 un fragmento de mandíbula y dos dientes humanos, junto a restos de elefantes (Elephas kiangnanensis y Elephas maximus) y un número indeterminado de restos de pequeños mamíferos. El 25% de las especies de estos mamíferos (la mayoría roedores) ya están extinguidas. En la sección estratigráfica se localizaron tres depósitos secundarios de carbonato cálcico (espeleotemas). El hecho de que en esta región la concentración de uranio sea elevada permitió datar con notable precisión los tres espeleotemas mediante el método de las series del uranio. Los datos obtenidos sugieren que los restos fósiles tienen más de 100.000 años de antigüedad.

En 2010, y con el apoyo del profesor estadounidense Erik Trinkaus, nuestro colega Liu Wu y otros investigadores del Instituto de Paleontología de Vertebrados y Paleoantropología de Pekín, publicaron los datos de la cueva de Zhiren en la revista PNAS de la Academia de USA.

La simple imagen de los dientes, que reproducimos en este post, permite asignarlos a nuestra especie. En mi opinión, la mandíbula de Zhiren también perteneció a un miembro de Homo sapiens. Su mentón no está muy pronunciado, pero tiene todos los caracteres que definen este rasgo. En ciertos fósiles del Pleistoceno se observa un leve abultamiento en la región anterior de la mandíbula, que tal vez anuncia lo que mucho más tarde terminaría por transformarse en una característica exclusiva de nuestra especie.

Sin embargo, la discusión y las conclusiones de Liu Wu y sus colegas fueron increíblemente enrevesadas. Presentaron dos alternativas: la primera defendía el surgimiento de una población con rasgos “sapiens” a partir de las antiguas poblaciones de Homo erectus, como sucedió en otras partes de África y Eurasia (Teoría multirregional). La segunda hipótesis proponía la hibridación de grupos de Homo sapiens en su expansión por África y Eurasia.

La primera hipótesis era la preferida por nuestros colegas de China, entre los que se encontraba el profesor Wu Xin-Zhi. Tuve el honor de conocer al profesor Wu en 1992. Ya está retirado, pero a sus 91 años sigue activo y trabaja en su despacho al menos una vez por semana. Hace un par de años tuve la suerte de volver a coincidir con él en Pekín y su lucidez a la hora de debatir sobre evolución humana es asombrosa. Wu Xin-Zhi ha sido uno de los mayores defensores del origen multirregional de Homo sapiens, junto al estadounidense Milford Wolpoff y el australiano Alan Thorne. Wu Xin-Zhi ha tenido una influencia enorme en la paleoantropología de China y solo los científicos más jóvenes se han decantado definitivamente por la teoría del origen africano de Homo sapiens. Pero la influencia y el respeto por los ancianos forma parte de la cultura oriental. No es pues de extrañar que aquel artículo de PNAS se discutiera una vez más la interpretación multirregional a partir de los fósiles de la cueva de Zhiren.

La segunda interpretación defiende que los restos humanos de Zhiren pertenecieron a individuos mestizos, resultantes de la hibridación de poblaciones autóctonas con miembros de nuestra especie. En esta segunda interpretación se nota la influencia de Erik Trinkaus en las investigaciones de la cueva de Zhiren, que durante años ha defendido la Teoría de la Asimilación (ver post de 2 de noviembre en este mismo blog). Para este investigador, la población humana actual es el resultado de una mezcla a gran escala entre todas las poblaciones del Pleistoceno y los miembros de Homo sapiens. Aunque Erik Trinkaus no acepta que los restos de la cueva de Zhiren pertenecieran a nuestra especie, de manera implícita está reconociendo la presencia de Homo sapiens en China hace más de 100.000 años.

Ahora ya sabemos que ciertamente hibridamos con las poblaciones autóctonas en nuestra expansión por Eurasia, pero el porcentaje de ADN de esas poblaciones en nuestro genoma es muy bajo (2-4%). Los restos de Zhiren demuestran que Homo sapiens ya estaba en el sur de China hace más de 100.000 años, y sabemos que el viaje hacia Australia pudo suceder hace unos 70.000 años. En cambio, la entrada definitiva en Europa se demoró hasta fechas en torno a los 40.000 años antes del presente, que coinciden con las evidencias en la regiones centrales y septentrionales de China. Esa misma antigüedad se ha obtenido en yacimientos como los de las cuevas de Tianyuan o Zhoukoudian, situadas aproximadamente a una latitud de 40º N.

Antes estos datos podemos plantear dos escenarios: 1) los miembros de nuestra especie colonizaron rápidamente las regiones más templadas y cálidas del planeta, tras su salida del continente africano. La posible presencia de otros grupos humanos en esas regiones no fue un obstáculo para su expansión. El clima más frío de las regiones del centro-norte de Eurasia fue el verdadero impedimento para demorar su colonización de las tierras situadas en latitudes septentrionales; 2) los miembros de nuestra especie no encontraron resistencia de las poblaciones autóctonas que vivían en el sur de Eurasia, pero no pudieron romper la barrera demográfica de los neandertales en Europa y de los Homo erectus del norte en el resto de Eurasia.

En mi opinión, el primer escenario es más sencillo que el segundo. Los grupos de neandertales o de Homo erectus que vivían en el sur de Eurasia seguramente opusieron tanta resistencia al avance de nuestra especie como los del norte. Pero Homo sapiens, que se había gestado en los climas cálidos de África, tardó muchos milenios en adaptarse a las condiciones climáticas del norte de Eurasia. Solo entonces, y apoyados en nuestros progresos culturales, pudimos colonizar la regiones templadas y frías de este continente.

Fuente: quo.es| 21 de diciembre de 2017

El Museo Arqueológico de Granada saca pecho con una exposición sobre su propia historia

Una exposición repasa el siglo de historia del Museo Arqueológico de Granada en la patrimonial Casa de Castril, un edificio en rehabilitación que volverá a abrir como espacio museístico en el primer trimestre del próximo año aunque solo con tres de sus salas para ofrecer sus principales piezas.

El Museo Casa de los Tiros acoge esta muestra dedicada a recordar la historia del Museo Arqueológico de Granada, ubicado en la casa renacentista de Castril, en el entorno del conocido Paseo de los Tristes y a las faldas de la Alhambra.

Lo hará con una veintena de paneles ideados para recorrer la historia de este espacio museístico y las vicisitudes por las que ha pasado en sus casi 140 años de vida.

El Arqueológico alberga fondos del paleolítico, el neolítico y la Edad de Bronce, salas destinadas a las colonizaciones, el arte andalusí o el mundo íbero, entre otros.
Esta infraestructura cultural se fundó en 1842 aunque hasta 1879, cuando se registró como museo, se articulaba como un Gabinete de Antigüedades dependiente de la Comisión de Monumentos de Granada.
El delegado de Cultura, Turismo y Deporte de la Junta en Granada, Guillermo Quero, acompañado del director del Museo Arqueológico, Isidro Toro, inauguraron ayer la muestra Domus Antiqua. 100 años de la adquisición de la Casa de Castril para museo, que estará abierta al público hasta el 31 de enero de 2018.

Quero señaló que la iniciativa responde al objetivo de dar a conocer el museo y su contenido, pese a que esté cerrado, como ya se hizo hace unos meses con las piezas significativas que se exhibieron en el Cuarto Real de Santo Domingo.

El delegado anunció además que "si no surge ningún problema" el Arqueológico, cerrado por las deficiencias del edificio desde 2010, reabrirá en el primer trimestre del próximo año con tres salas para ofrecer las piezas más significativas de su gran colección.

Esta reapertura parcial permitirá ver el diente del primer homínido de Europa encontrado en Orce o las sandalias y las diademas de la Cueva de la Carigüela, entre otras piezas.

La compra de la Casa de Castril, sede del Arqueológico, tuvo como protagonistas a los herederos del catedrático de la Universidad de Granada, Leopoldo Eguilaz, último propietario de la casa, y al granadino Natalio Rivas, que desde sus responsabilidades en el Gobierno de España estuvo atento a las necesidades de su provincia.

Tras la adquisición de la Casa el Estado se vio obligado a realizar diferentes obras para adecuarlo a museo entre 1917 a 1941, proyectos dirigidos por el arquitecto Fernando Wilhelmi, que realizó una importante reforma del edificio principal y otras estancias.

En 2017 se cumplen además 150 años de la aprobación en marzo de 1867 del Real Decreto de creación el Museo Arqueológico Nacional y de una red de museos arqueológicos provinciales, así como un cuerpo especializado de funcionarios para su gestión.

Fuente: granadahoy.com | 22 de diciembre de 2017

Descubren en Israel los restos de un monasterio bizantino con un colorido mosaico

Los restos de un monasterio e iglesia de 1.500 años de antigüedad, con un colorido suelo de mosaico, han sido desenterrados en Israel.

La Autoridad de Antigüedades de Israel (IAA, por sus siglas en inglés) anunció que el monasterio bizantino (el complejo donde se encontraba la iglesia) fue descubierto durante las excavaciones de salvamento que tuvieron lugar antes de una construcción en Beit Shemesh, una ciudad al oeste de Jerusalén.


"Durante la excavación, descubrimos ante nuestros ojos los restos de muros construidos con mampostería de piedra trabajada y una serie de elementos arquitectónicos, incluida una base de un pilar de mármol decorada con cruces y mamparas igualmente de mármol", dijo Benyamin Storchan, director de las excavaciones, en un comunicado.


El mármol no era de una fuente local, sino que había sido enviado desde Turquía, explicó Storchan. En una de las salas de la iglesia, el equipo reveló "un hermoso suelo de mosaico decorado con pájaros, hojas y granadas", añadió Storchan. En un video de IAA, Storchan afirma que "la iglesia probablemente disfrutó de una gran cantidad de riqueza en la antigüedad".



Entre lo las artefactos encontrados durante las excavaciones se encuentran una pequeña cruz de bronce que puede haber sido parte de un conjunto de alhajas y lámparas de aceite de cerámica ennegrecidas por la antigua carbonización.

La iglesia parece haber sido abandonada en el siglo VII, durante los inicios de la conquista islámica, dijo Storchan, pero los investigadores están tratando de descubrir por qué la iglesia dejó de usarse.


Comparada con otras iglesias que se encuentran en las estribaciones judías de Shephelah o Judea, Storchan dijo que "esta tiene una preservación excepcional" y es una de las más grandes halladas en la región. "A menudo solo encontramos pequeñas piezas, pero aquí estamos descubriendo la iglesia completa".

El cristianismo se extendió por todo Israel después de que el Imperio bizantino se formara en el siglo IV, dijo Storchan, y esas tempranas iglesias a menudo se asociaron con sitios bíblicos o tumbas de santos y mártires. Justo al sur de la iglesia está el Valle de Ella, que, según la Biblia, es el lugar donde David luchó contra Goliat.

"Tal vez tenían la idea de que este es el valle", dijo Storchan en el video. "Todo esto es especulación, pero es completamente posible".

Fuente: Live Science | Fotos | 21 de diciembre de 2017

La estética fue crucial en el desarrollo de las primeras aleaciones de cobre

Objetos de oro en la tumba más rica en un cementerio del V milenio en Varna, Bulgaria. Esta tumba contiene cerca de 3kg de artículos de oro que decoran el cuerpo de un difunto. Varna es considerada uno de los sitios arqueológicos clave en la prehistoria mundial.


Si bien los estudios de metalurgia antigua del oro y las características de color de las aleaciones de oro son bien conocidas por la investigación moderna, las propiedades de color de las aleaciones de cobre prehistóricas, como el bronce estañado o el bronce con arsénico (los tipos de metal más abundantes en la prehistoria), han sido durante mucho tiempo desconocidas. Hasta ahora.

En un estudio publicado en Journal of Archaeological Science, un equipo internacional de investigadores serbios y británicos ha desarrollado un diagrama de color del Cu-As-Sn (cobre-arsénico-estaño) para descubrir los colores originales que tenían ciertos artefactos arqueológicos y cuya pátina perdieron a través del tiempo y la exposición.

El estudio fue impulsado por el descubrimiento realizado en Serbia, cuatro años atrás, de artefactos realizados en bronce estañado -con unos 6.500 años de antigüedad-, y el consiguiente debate sobre el papel que jugó el color en el avance las tecnologías metalúrgicas.

La Dra. Miljana Radivojevic (izquierda), autora principal del estudio e investigadora del Instituto McDonald de Investigación Arqueológica de la Universidad de Cambridge, afirma: “Dada la importancia reconocida de la estética en la metalurgia antigua, decidimos replicar experimentalmente las aleaciones prehistóricas más comunes, hechas de combinaciones binarias y ternarias de cobre, arsénico y estaño, y producir una carta de colores que nos permita mostrar el brillo original de los artefactos del pasado. Para ello nos inspiramos en la fabricación de joyas modernas utilizando cartas de colores similares a las creadas para explorar las propiedades de las aleaciones de oro, cobre y plata".


Carta de colores de 64 muestras de metal con composiciones variables de cobre-estaño-arsénico creadas para usar en el estudio.

Por su parte, Zeljko Kamberovic (derecha), coautor del estudio y profesor de la Facultad de Tecnología y Metalurgia de la Universidad de Belgrado, señala que “Nuestro laboratorio es uno de los pocos en Europa que posee una licencia para experimentar con arsénico, por lo que nos propusieron desarrollar el estudio y producir 64 muestras de metales con composiciones variables de cobre-estaño-arsénico. Las cartas de colores ternarios de cobre-estaño-arsénico nos permitieron reevaluar la afirmación de que las primeras aleaciones de bronce estañado en los Balcanes tenían un tono dorado distintivo".

"Es muy probable que la producción de esta nueva aleación en los Balcanes, al mismo tiempo que el oro, pueda haber sido dictada por la demanda de una exótica tonalidad dorada, o su imitación más cercana”, añade la Dra. Radivojevic.

"Esta investigación, aunque impulsada por el estudio del caso de los Balcanes, proporciona una valiosa representación del color de las aleaciones prehistóricas más comúnmente producidas en todo el mundo. Ahora tenemos los medios para llevar el brillo original a los artículos que han perdido su atractivo estético original durante varios milenios de deposición bajo tierra", afirmó el profesor Marcos Martinón-Torres (izquierda), del Instituto de Arqueología del UCL, donde se realizaron análisis químicos y colorimétricos para este estudio.
La Dra. Radivojevic agregó que anticipa que estas tablas de colores serán ampliamente utilizadas en la enseñanza o en exhibiciones de museos, "ayudando a los estudiantes y visitantes de museos a imaginar cómo se veía la mayoría de los objetos metálicos antiguos hace un par de miles de años".

Fuentes: QUO | EurekAlert! | Historia y Arqueología | 21 de diciembre de 2017

La Policía turca recupera más de 26.000 piezas en una gran operación contra el contrabando de antigüedades

Espadas micénicas, bustos de Alejandro Magno, coronas de oro, estatuas hititas y egipcias, fósiles y cientos de monedas componen el mayor alijo de piezas robadas incautado en la historia de Estambul, y que supera al inventario de un museo medio.



Un total de 26.456 objetos de valor histórico fueron confiscados por la policía turca durante una macro operación contra el contrabando de antigüedades llevada a cabo en cuatro ciudades, incluyendo Estambul, y que ha sido calificada como la mayor de su tipo en la historia de esta ciudad.


Medios turcos informaron el jueves que un total de 19 sospechosos fueron detenidos como parte de la investigación, bautizada “Operación Zeus” por las fuerzas de seguridad turcas y que durante tres meses siguió la pista a una red de contrabando de objetos históricos que pretendía sacarlos de Turquía para venderlos en el extranjero a museos o a coleccionistas privados.


Las primeras detenciones se habrían producido el pasado 12 de diciembre, cuando seis personas implicadas en la trama fueron capturadas en la provincia noroccidental de Düzce, al este de Estambul, cuando intentaban vender algunas de las piezas. Otras siete personas más fueron detenidas posteriormente. Por ahora no está claro cómo la banda logró hacerse con semejante cantidad de objetos históricos, que ahora serán entregados al Museo de Arqueología de Estambul.



Entre los objetos que el jueves fueron expuestos por la policía turca a los medios de comunicación para informar de esta gran operación, la mayor llevada a cabo hasta la fecha en Estambul contra el contrabando de antigüedades, se encontraba una espada micénica de 3.000 años de antigüedad atribuida al héroe Aquiles de Troya, un busto de Alejandro Magno hecho por orden de un antiguo monarca durante sus campañas en la India, o la corona de una reina adornada con hojas de oro e inscripciones en honor al dios Helios, y datada en el período helenístico.

También se encontraba una estatua de una diosa hitita datada en más de 3.000 años, cientos de monedas antiguas, varios fósiles, estatuas de origen egipcio, artesanía de origen fenicio, y varios artefactos datados en los primeros años de la llegada del Islam a Anatolia. En un comunicado, la policía de Estambul afirmó que en conjunto los objetos históricos recuperados “son más valiosos que los artefactos que existen en el inventario de la mayoría de los museos”.

Fuente: Hispanatolia, 22 de diciembre de 2017

Arqueólogos españoles reescriben la gran revolución monoteísta de Akenatón

El relato de la revolución político-religiosa más antigua de la historia, la implantación del monoteísmo en el Egipto de los faraones hace unos 3.300 años, está siendo reconstruido por un equipo de arqueólogos españoles, liderado por Francisco Martín Valentín y Teresa Bedman (ambos, abajo)


En una entrevista a Efe, los arqueólogos desvelan que a lo largo de su última campaña de excavaciones en Luxor, en el sur de Egipto, desarrollada entre octubre y diciembre, han logrado las pruebas que corroboran de forma "casi matemática" la tesis de la corregencia entre el faraón Amenhotep III y su hijo Akenatón, que defienden desde hace años.

Bedman detalla que la misión española ha encontrado este año estelas y tapones de jarras que "dejan mucho más claras" las fechas de los acontecimientos de esa época, una de las más convulsas de la historia del antiguo Egipto.

Hasta ahora, ese periodo también era uno de las más oscuros, porque los faraones posteriores ordenaron borrar todo rastro de esos dos reyes, que se levantaron contra el clero, instauraron el monoteísmo y se proclamaron dioses vivientes.

Por ello, hasta ahora nunca estuvo claro si Akenatón había llevado a cabo la revolución religiosa a solas tras la muerte de su padre, ni si habían compartido o no el poder, un hecho que el equipo español cree haber demostrado con el hallazgo de unos jeroglíficos en 2013 y corroborado ahora.

"Si no tienes un momento cronológico que sea como un mojón que todo el mundo diga 'esto es así', te lo pueden discutir. Lo teníamos, lo habíamos probado y ahora lo confirmamos. Sabemos qué pasó y cuándo. (...) El tema es grandioso, una vez que lo desarrollemos será un hito desde el punto de vista historiográfico", sentencia Martín.
Los arqueólogos han logrado precisar que Akenatón subió al trono en el año 28 del reinado de su padre y que ambos compartieron el poder durante una década.

Sin embargo, Martín incide en que a partir del año 30 de esa era, Amenhotep se transforma en dios Atón y su hijo continúa a su lado como rey y sumo sacerdote.

Estos detalles, apunta el egiptólogo, son fundamentales porque explican una lucha por el poder con el clero que se remonta a los inicios de la dinastía XVIII.

"Se trata de quién tiene el poder, quién lo ejerce. Inventaron un sistema grandioso, hacen un solo dios, que se puede ver y al que se puede pedirle cosas, sin hacer falta la intermediación sacerdotal. Eso es una revolución política, religiosa e intelectual de primer orden", explica Martín.
Sin embargo, todavía hay incógnitas por desvelar, por ejemplo, los españoles todavía dudan de si en efecto el sistema fundado por Amenhotep III se trataba de monoteísmo o si, en cambio, admitía la existencia de otros dioses subordinados a Atón.

Estos hallazgos obligan a recortar la cronología de la dinastía XVIII en once años, lo que implica "reubicar" a los personajes más famosos del antiguo Egipto, entre ellos Akenatón, Nefertiti o Tutankamón.


El equipo de la misión 'Viisir Amen-Hotep Huy', junto a la Tumba 'AT-28), localizada en Asasif (Luxor). / PROYECTO VISIR AMEN-HOTEP HUY / IEAE.

"Podemos proponer con solidez que Amenhotep III, y no Akenatón, fuera el padre de Tutankamón. Eso cambia todo 180 grados, da la vuelta a todo el tema y es uno de los casos que es consecuencia de esta documentación", prosigue Martín.

Los hallazgos de la misión española son fruto de las excavaciones que llevan a cabo desde 2009 en la tumba del visir Amenhotep Huy, quien fue gobernador del faraón homónimo y que se opuso férreamente a la revolución religiosa, lo que le costó caer en desgracia y, tal vez, ser "liquidado".
Siglos después, tras la restauración del politeísmo en Egipto, los faraones restituyeron la figura del visir y convirtieron su tumba en un lugar de culto sagrado.

La tumba sirvió incluso a lo largo de los siglos como fábrica de momias -la única que se conoce- y después ha continuado siendo considerado como un lugar "mágico".

Los arqueólogos han encontrado documentos muy recientes, de los siglos XVIII y XIX, que dan cuenta de que se seguían haciendo conjuros y rituales mágicos en ese lugar, lo que muestra que "la tumba tiene una vida constante en el imaginario tebano y que, de hecho, la civilización faraónica no se ha cortado hasta hoy".

Fuente: eldiario.es | 20 de diciembre de 2017

Roma muestra las influencias entre egipcios y etruscos

El encuentro y la influencia recíproca entre egipcios y etruscos, dos de las antiguas civilizaciones que florecieron a las orillas del Mediterráneo, es el tema de una muestra inaugurada hoy en la capital italiana.

Titulada “Egipcios Etruscos. De Eugene Berman al Escarabajo Dorado”, la exposición incluye un total de 250 objetos, incluidos restos recientemente descubiertos en la zona arqueológica de Vulci, en el centro de Italia, además de piezas egipcias de la colección del escenógrafo ruso Eugene Berman (1889-1972).
Fíbula de disco de oro hallada en la Tumba de los Ori, en la necrópolis de Polledrara de Vulci

“Los intercambios entre etruscos y egipcios fueron comerciales en el periodo que va del siglo VIII al siglo VII antes de Cristo, durante el cual la cultura egipcia llegó a costas de lo que hoy es Italia y dejó rastros que han sido encontrados en la civilización etrusca”, dijo el superintendente de bienes arqueológicos de Roma, Carlo Parisi Presice, uno de los curadores de la muestra.

En entrevista con Notimex, resaltó que en algunas piezas arqueológicas etruscas se encontraron referencias al faraón egipcio Bocchotis, lo que indica que hubo un contacto directo entre las dos culturas. “Además de ese contacto directo, lo importante es que estas dos civilizaciones compartieron el significado de los símbolos del poder, el significado del oro como material que indicaba la incorruptibilidad de la materia, el significado de las divinidades para ambas civilizaciones y el sentido que daban a la vida después de la muerte”, explicó.

Escarabajo escarabajo con bisel giratorio plateado.

Subrayó que el culto a los muertos era similar en ambos pueblos, como lo han demostrado las tumbas descubiertas por los arqueólogos en las que fueron encontrados ajuares con objetos que debían servir para la vida ultraterrena. Asimismo, dijo que ambas culturas se parecieron en el tipo de joyas usadas para embellecer el cuerpo y, sobre todo, en el desarrollo de la cosmética.

Alfonsina Russo, también curadora de la muestra, informó que de la misma forman parte piezas de los siglos VIII y VII antes de Cristo descubiertas entre 2013 y 2017 en las excavaciones de Vulci, una localidad de origen etrusco ubicada en el centro de Italia. Dijo que, en particular, en 2013 fue hallada en la Necrópolis de la Osteria de Vulci una joya en forma de escarabajo dorado de origen egipcio.
Escarabajo esteatita con marco dorado.

“Este escarabajo estaba decorado con elementos referentes al faraón Bocchoris y es el testimonio tangible del hilo que vinculó durante siglos a dos de las más importantes civilizaciones del Mediterráneo”, señaló.

De la exposición forma parte también la colección de piezas egipcias que el escenógrafo y artista ruso Eugene Berman donó a Italia, al lado de objetos prestados por el Museo Nacional Arqueológico de Florencia.
Estatua funeraria de un león hallada en Vulci.

Hay desde joyas, estatuas, utensilios decorados hasta sarcófagos, esfinges y momias que muestran los intensos intercambios comerciales, pero sobre todo el diálogo cultural entre las dos civilizaciones que compartieron la idea de legalidad, símbolos del poder y prácticas religiosas, dijo Russo. Destacó que egipicos y etruscos se encontraron fundamentalmente durante dos momentos históricos. El primero fue entre los siglos VIII y VII antes de Cristo, “cuando el Mediterráneo era un mar que unía y no dividía como hoy”, y el segundo entre los siglos III y II antes de Cristo.

Patera de plata dentro del medallón de escarabajo con cabeza humana y disco solar.


Detalle de la patera plateada dentro del medallón de escarabajo con cabeza humana y disco solar. Tumba Castellani, Palestrina, Colección Castellani - Museos Capitolinos Fotografía Zeno Colantoni.

El recorrido expositivo está dividido en cinco secciones tituladas “El metal de los dioses. El oro como símbolo”, “Faraones y Príncipes”, “El sueño de la inmortalidad”, “Diosas y dioses del Antiguo Egipto a Etruria”y “El oro de Nefertum. Perfumes de Oriente”. La muestra, que permanecerá abierta hasta el próximo 30 de junio en el museo de la Central Montemartini de Roma, concluye con el ajuar fúnebre de la Tumba del Escarabajo Dorado, encontrada en Vulci.

Fuentes: 20minutos.com | artemagazine.it | 20 de diciembre de 2017