Activado el sistema mundial de agencias espaciales para grandes desastres

La JAXA japonesa ha solicitado orientación de todos los satélites una hora después del terremoto

ALICIA RIVERA - Madrid
La agencia espacial japonesa ha activado hoy el sistema mundial de agencias espaciales para los grandes desastres (International Charter Space and Mayor Disasters) apenas una hora después del terremoto. El aviso significa que 14 agencias de todo el mundo ponen a disposición de la emergencia sus satélites de observación de la Tierra y proporcionan los datos libre y gratuitamente. "Un terremoto se ha producido en el noreste de Japón causando extensos daños y disparando un tsunami. El terremoto es de magnitud 8,9 y ha provocado fuegos en Tokio. Se teme que haya bastantes víctimas", dice la notificación nipona a las demás agencias.
A partir de ese momento, los medios espaciales coordinados están suministrando información a la JAXA sobre las zonas asoladas, el tsunami, o las inundaciones provocadas. Una veintena de satélites funcionan en el consorcio, en operación desde hace una década. "No se trata de datos para la predicción del tsunami, sino de información útil para la ayuda, para gestionar la crisis y para las evaluaciones después", explica a EL PAIS Phylippe Bally, desde el centro de la Agencia Europea del Espacio (ESA) dedicado a la observación de la Tierra, ESRIN, en Italia. "Nosotros hemos activado dos satélites: el Envisat y el ERS-2, de imágenes de radar, que ven a través de las nubes". El radar de Envisat, con una resolución de 25 metros es muy útil para ver grandes zonas, mientras que alemán TerraSAR, con resolución de cinco metros, se centra en los detalles, comenta Bally. Ambos son muy útiles, por ejemplo, para medir con precisión cuánto y cómo se eleva la tierra en un terremoto.
Otros satélites, como los Spot de la agencia espacial francesa CNES, o los Landsat estadounidenses, del Servicio Geológico estadounidense, toman imágenes ópticas de alta resolución. "El Spot-5, por ejemplo, tiene una resolución de 2,5 metros, y los estadounidenses tienen acuerdo con satélites privados que tienen resolución inferior a un metro", continúa el experto de la ESA. Esta información puede resultar esencial para la labor de los equipos de rescate, los bomberos, las alertas a la población, etcétera.
Hoy, en cuanto se ha recibido la alerta de la JAXA, las demás agencias han actuado según los planes previstos. Los expertos de la ESA han programado sus dos satélites para funcionar de la manera más útil ante la emergencia. Todos los datos e imágenes captados por el sistema se están enviando a la agencia japonesa y a un instituto de Bangkok como alternativa, dado que la propia JAXA está sufriendo problemas con sus comunicaciones, explica Bally.

Fuente: http://www.elpais.com/

Descubren intacta una escalinata en el mayor centro ceremonial de El Salvador


Por Agencia EFE
San Salvador, 10 mar (EFE).- Una escalinata que data del período clásico temprano, del 300 al 600 d.C, fue descubierta intacta en el interior de la gran pirámide del sitio arqueológico Tazumal, en el oeste de El Salvador, dijo hoy una fuente oficial.
La escalinata parece construida "de arena y cemento y estamos hablando del periodo clásico temprano", declaró a Efe el director de Patrimonio de la Secretaría de Cultura de El Salvador, Ramón Rivas.
"Estas escalinatas fueron construidas de una especie de argamasa, que naturalmente es una mezcla que ellos hacían, y aquí pudo haber existido piedra caliza (...), barro y naturalmente piedra, lo que hace un efecto increíble, porque es prácticamente cemento", añadió.
Rivas señaló que el hallazgo en la pirámide, que era usada como templo ceremonial, confirma, "una vez más, la presencia de diferentes pueblos a lo largo de muchos años en ese importante sitio".
"Los arqueólogos están diciendo que (...) en primera instancia la pirámide fue construida por los mayas y dicen que cuando los mayas empezaron a sucumbir y empezaron a dispersarse fueron retomadas por los pipiles y después se habla también de los teotihuacanos", afirmó.
Destacó, asimismo, que este descubrimiento ratifica que "la pirámide fue construida en diferentes periodos".
Un integrante de la Fundación Nacional de Arqueología de El Salvador (FUNDAR), Paul Amaroli, dijo a Efe que este descubrimiento "abona más a lo ya se sabía de que la pirámide es una estructura increíblemente compleja que creció con el crecimiento de Chalchuapa (que actualmente es una ciudad) como un pueblo maya durante el periodo clásico".
Según la página web de FUNDAR, Tazumal es "el primer parque arqueológico" en el país "y se encuentra entre los más antiguos de la región centroamericana".
En el lugar se erigen dos pirámides -una principal y otra secundaria-, una cancha de juego de pelota que usaban en ese entonces los mayas, así como otras edificaciones pequeñas.

El misterio de la pequeña momia

La historia podría protagonizar un cuento de García Márquez o un programa sobre fenómenos paranormales. Se trataba, hasta ahora, de una leyenda, pero ha resultado ser verdad. Un reciente inventario en el Museo de Cádiz ha permitido redescubrir la momia de una niña hallada en la iglesia de San Lorenzo, de la que hasta ahora nunca se había publicado noticia, aunque en el barrio se hablaba del asunto. De hecho, el actual párroco se quedó perplejo cuando supo que la niña momia existía, a consultas de este periódico, porque pensaba que se trataba de un viejo cuento.
El misterio, de todos modos, continúa. El lugar de los hechos, la iglesia de San Lorenzo; el año, 1987. Las obras de restauración en el templo gaditano sacaron a la luz el cuerpo momificado de una niña pequeña. Oculto en una grieta bajo la bóveda de la parroquia, no enterrado, el cadáver estaba envuelto en una esterilla de esparto y llevaba puesto un vestido de encaje, cosido con máquina de coser, medias de lana y zapatos, lo que indica una procedencia social más bien acomodada. Nada se sabe de su identidad. Solo que se data entre finales del siglo XIX y principios del XX. Nadie sabe porqué fue enterrada allí, un lugar extraño e inaccesible, sin ataúd, porque en esa fecha ya estaban prohibidos los enterramientos en las iglesias. Ninguna de estas incógnitas ha tenido respuesta hasta el momento. Quienes la vieron entonces recuerdan que tenía un rictus de dolor en la cara que resultaba espeluznante.
Según el informe que elaboró en 1999 la profesora Milagros Macías López, la pequeña se encontraba boca arriba, con el hombro derecho más elevado que el izquierdo, y la cabeza girada hacia el mismo, dando la impresión de una «postura antiálgica», es decir, una postura que se adopta para evitar un dolor.
Tras el hallazgo, los restos fueron enviados a la Facultad de Medicina y más tarde al Hospital Naval de San Carlos, en San Fernando, donde se llevó a cabo un estudio radiológico para determinar la edad de la menor y las posibles lesiones óseas. La autopsia fue realizada por el doctor Blanco Villero, anatomopatólogo del Hospital Naval.
Las radiografías revelaron que se trataba de una niña de 4 o 5 años, que presentaba una luxación de la cabeza del húmero, un hundimiento de la novena costilla y una diferencia de altura entre la cintura escapular derecha e izquierda. El informe apunta otras malformaciones y lesiones, posiblemente de tipo congénito. No aclara si fueron lesiones producidas antes o después de la muerte.
El hombro malformado de la pequeña, que podría sufrir la enfermedad genética de Sprengel, sufrió una luxación a causa de un traumatismo o golpe de gran intensidad. En este sentido, apunta la experta que «la niña murió sin que la luxación fuese reducida, lo que hace pensar en que los acontecimientos de la muerte y del traumatismo estuvieron próximos en el tiempo». Sin embargo, los estudios realizados, «no han revelado ningún dato que se pueda relacionar con la causa de la muerte». Eso sí, líneas más abajo añade que «se puede especular con una hipótesis que relacione las lesiones congénitas, la luxación del hombro y la defunción».
La teoría más plausible sería que la pequeña padeciera «crisis convulsivas que producen violentas contracciones musculares, que al actuar sobre unos tejidos blandos anómalos o ausentes del hombro derecho, pudieron producir su desarticulación». En este sentido, la autora se decanta por la epilepsia.
Experta en arqueología y medicina, Milagros Macías, firma su texto con una conclusión que reconoce que los ataques epilépticos llevaron a la pequeña a un status epiléptico y después, a la muerte. Aun así, el misterio sigue sin resolverse, ya que no se sabe por qué el cuerpo se ocultó en un resquicio bajo los cimientos de la iglesia, en lugar de darle sepultura en un camposanto.

Crece la polémica por los supuestos 'fósiles alienígenas'

La NASA ha hecho público un comunicado en el que se desmarca de la investigación y deja solo a su experto ante las críticas

JOSE MANUEL NIEVES / MADRID
Ante la avalancha de comentarios y reacciones al supuesto descubrimiento de «fósiles alienígenas» en dos meteoritos por parte de un reputado científico de la NASA, la Agencia Espacial Norteamericana ha hecho público un comunicado en el que se desmarca de la investigación y deja solo a su experto ante las críticas. Numerosos investigadores han expresado también sus opiniones y, por otra parte, han empezado a llegar a Journal of Cosmology, la revista donde apareció el polémico artículo, los comentarios solicitados por su editor a más de cien científicos para que juzgaran el trabajo.
Pero repasemos la historia, que se está convirtiendo en un auténtico «culebrón científico». El pasado domingo se dio a conocer un artículo de Richard Hoover, del Centro Espacial Marshall, en el que afirmaba que «los complejos filamentos y estructuras» hallados en el interior de dos meteoritos «son los restos de microfósiles indígenas de cianobacterias y otros procariotas».
«Estas bacterias fósiles -decía Hoover- no son contaminantes terrestres, sino restos fosilizados de organismos vivientes que existieron en los lugares de origen de estos meteoritos, por ejemplo cometas, lunas y otros cuerpos celestes». Hoover acompañaba sus conclusiones con extensos análisis y numerosas fotografías en las que se podían ver estructuras de apariencia orgánica, muy parecidas a ciertas bacterias terrestres.
Desde la noche del domingo, ABC se hizo eco de la noticia, no sin antes advertir a sus lectores de que el trabajo de Hoover, igual que otros similares, «han suscitado ya agrias polémicas entre los investigadores» y remitiéndose a las futuras valoraciones de la comunidad científica antes de despejar las dudas sobre el sensacional anuncio.

Ataques contra el artículo de Hoover

Las reacciones, sin embargo, no se hicieron esperar. Paul Myers, biólogo de la Universidad de Minnesota y autor de un prestigioso blog científico, fue de los primeros en atacar con dureza tanto el artículo de Hoover como a la revista que lo había publicado, una página web mantenida por «un pequeño grupo de académicos chiflados y obsesionados con las ideas de Hoyle y Wickramasinghe de que la vida se originó en el espacio exterior y simplemente llovió sobre la Tierra».
Por su parte, Carl Pilcher, director del Instituto de Astrobiología de la NASA declaraba a Associated Press que «no hay nadie en la comunidad científica, y ciertamente nadie en la comunidad de análisis de meteoritos, que haya apoyado estas conclusiones. La explicación más sencilla para los resultados del señor Hoover es que estuvo analizando microbios de la Tierra». Microbios que contaminaron los meteoritos después de su llegada a nuestro planeta.
Además, otras informaciones señalaban que el mismo trabajo de Hoover había sido presentado con anterioridad a revistas científicas de prestigio, que lo habían rechazado. ABC decidió entonces modificar su información y recoger las críticas al trabajo del astrobiólogo de la NASA.

La NASA no puede apoyar este hallazgo

La propia agencia espacial, presionada por los acontecimientos, hizo público un comunicado, firmado por Paul Hertz, director científico del Science Mission Directorate de la NASA en Washington, en el que decía que la agencia «no puede estar detrás, o apoyar un hallazgo científico a menos que haya pasado el proceso de «revisión por pares» o haya sido examinado a conciencia por otros expertos cualificados».
«Este artículo -prosigue el comunicado- fue enviado ya en 2007 al International Journal of Astrobiology. Sin embargo, el proceso de revisión por pares no se completó. La NASA desconoce por completo la reciente presentación del artículo a Journal of Cosmology y su consiguiente publicación. Otras preguntas y cuestiones deberán ser dirigidas al autor del artículo».
Apenas unas horas después intervenía también Rocco Mancinelli, el editor de International Journal of Astrobiology (la revista a la que Hoover había presentado su trabajo en 2007) para corregir el comunicado de la NASA y asegurar que el artículo sí que había pasado el proceso de revisión por pares, y que había sido rechazado.
Sin embargo, y a pesar de las críticas recibidas, los espectaculares resultados anunciados por Richard Hoover no pueden descartarse sin más. Y si bien es cierto que su trabajo no ha sido publicado por revistas científicas de primer nivel, también lo es que tampoco existe ninguna investigación «seria» que aporte pruebas de que Hoover no tenga razón.
Al contrario, durante los últimos años, se han sucedido numerosos descubrimientos (debidamente publicados y aceptqados por la comunidad científica internacional) que demuestran la existencia de numerosos compuestos orgánicos en el espacio, desde aminoácidos a moléculas de carbono. Pequeños pasos que apuntan decididamente a que la vida es posible «ahí fuera».
La propia NASA, que ahora se desmarca de uno de sus investigadores, está gastando miles de millones de dólares para encontrar vida fuera de la Tierra, y actualmente centra sus esfuerzos en Marte y en varias lunas de Júpiter y Saturno, como Encelado, Europa o Titán. Ningún científico serio, además, duda de que esa «vida extraterrestre» es posible, y que estamos muy cerca de encontrarla. Pero la importancia de un hallazgo de tal categoría hace necesario que, antes de hacer un anuncio global, no quede ni la menor sombra de duda sobre la autenticidad del descubrimiento.
Los astrobiólogos (y la propia NASA) tienen la triste experiencia de haber realizado ellos mismos un «anuncio oficial» que después tuvo que ser desmentido. Fue en verano de 1996, y entonces la agencia espacial norteamericana proclamó a los cuatro vientos que se habían encontrado restos de vida orgánica en el interior de un meteorito procedente de Marte, el ALH84001.

La NASA se había equivocado

El propio presidente de los Estados Unidos, Bill Clinton, pronunció un discurso «histórico» el 7 de agosto de aquél año para celebrar el acontecimiento. «Este es el producto -dijo entonces Clinton- de años de exploración y meses de estudios intensivos por parte de algunos de los científicos más prestigiosos del mundo». Menos de dos años después, la revista Science publicaba un estudio que demostraba que la NASA se había equivocado y que una buena parte de los restos detectados en el meteorito marciano eran producto de la contaminación por parte de organismos terrestres.
Se necesita, pues, más investigación y menos ansias de protagonismo. Algunos investigadores han empezado ya a publicar sus comentarios y mensajes en Journal of Cosmology. Y no todos son críticos. Es el caso de Michael Engel, de la Universidad de Oklahoma, quien afirma que «dada la importancia de este hallazgo, resulta esencial seguir buscando nuevos criterios más robustos que la similitud visual (en la que se basa el trabajo de Hoover) para clarificar el orígen de estas notables estructuras».

Fotos del Ashmolean Museum de Oxford









































He tenido que abandonar Terrae Antiqvae

¡Hola!

Soy Ferran Lagarda Mata, arquéologo y creador del grupo Arqueología de Menorca dentro de la red social Terrae Antiqvae.

Acabo de recibir este email del administrador y propietario de dicha red:

“”José Luis Santos Fernández te ha enviado un mensaje en Terrae Antiqvae - Arqueologia - Historia Antigua y Medieval

Asunto: Hola Ferran

------------
Veo que replicas los post que envías aquí en el CLON, junto a las noticias de ovnis''. He eliminado tu post, y tendrás que decidir dónde quieres trabajar. Aquí son expulsados los miembros que también están alli. Ya me dirás.””

El CLON, como el lo llama, es esta otra red hospedada también en NING:

ARQUEÓLOGOS: Red Española de Historia y Arqueología (REHA)

Me parece intolerable que el citado José Luis Santos pueda decirme a qué red puedo o no pertenecer (es como si me dijera que si estoy en Facebook no puedo estar en Twitter). Que me pueda prohibir estar en una si no quiero verme expulsado de la suya, a pesar de que, hasta ahora, consideraba ésta más interesante. Y, además ignoro la razón de todo ello.

Por todo ello, he decidido, muy a mi pesar, darme yo de baja de Terrae Antiqvae (a no ser que que el mismo se vuelva atrás en su amenaza), llevarme la Biblioteca Digital de Arqueología e Historia de Menorca (de mi casi absoluta propiedad, pues hasta ahora sólo dos personas habían contribuido a ella con un par de títulos) al grupo Arqueología de Menorca de Arqueólogos, donde aún no estaba porque me dedicaba más a Terrae Antiqvae, y cerrar el grupo.

Me veo obligado a hacerlo en aras de mi propia libertad y respeto de mi intimidad (no creo que tenga él por qué saber en dónde estoy yo apuntado y, si lo sabe, porque es público, tampoco tiene por qué inmiscuirse en mi vida privada).

Ya que me dan a elegir entre estar en una u otra red, lógicamente prefiero continuar en la que no me amenaza, aunque hubiera preferido estar en las dos.

Dicho esto, desde este que básicamente era el mensaje de despedida que he mandado a mis antiguos contertulios del grupo Arqueología de Menorca de Terrae Antiqvae, os invito a apuntaros al de nombre similar en Arqueólogos. Sed bienvenidos.


Ferran Lagarda Mata