Ayacucho: cerámica hallada en capital Wari revela origen del primer imperio del Perú

Ejemplar de cerámica descubierta en el complejo arqueológico Wari que revela valiosa información sobre el origen del primer Estado imperial del Perú. ANDINA/Juan Carlos Guzmán.

Un conjunto de piezas de cerámica descubierta en el complejo arqueológico Wari, en Ayacucho, desentraña el origen de esta civilización andina, el primer Estado imperial del Perú, base del desarrollo del imperio de los incas.

José Ochatoma Paravecino, arqueólogo de la Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga y responsable de las investigaciones en el complejo Wari, sostuvo en diálogo con la Agencia Andina, que las imágenes esculpidas y pintadas en las 45 piezas de cerámica que han sido reconstruidas hasta ahora revelan que los orígenes de Wari están vinculados a las culturas Nasca y Huarpa.


Los investigadores han determinado que en el complejo Wari se asentó la capital de esta bien organizada civilización prehispánica, surgida entre los años 600 y 1,200 d.C.

Las figuras en los ceramios de diversas etapas del desarrollo Wari representan a animales de la costa y productos marinos (algas, peces, pulpos), similares a los encontrados en la iconografía de la cultura Nasca. Esto indica que la civilización que se desarrolló en el ahora territorio del departamento de Ica influenció en el origen de Wari.


"Las investigaciones nos revelan que no es cierto, como se creía anteriormente, que Wari había surgido de la influencia simultánea de las culturas Nasca y Tiahuanaco. Hay una primera influencia, muy decisiva, de la cultura Nasca. Posteriormente vino la influencia Tiahuanaco, en la época de mayor desarrollo Wari, lo cual se evidencia en la figura del dios estilizado que sostiene con sus manos los báculos cuya punta tiene forma de cóndor, como la que se observa en la Puerta del Sol", anotó.


El complejo arqueológico está ubicado a 25 kilómetros al noreste de la ciudad de Ayacucho. Forma parte del proceso de conservación y puesta en valor del patrimonio cultural Wari. El arqueólogo sostuvo que la labor de reconstrucción de la cerámica descubierta en el lugar demanda mucho tiempo y dedicación debido a que las piezas se encuentran en pedazos de diverso tamaño.

"Los estudios realizados dan cuenta que había una costumbre en la civilización Wari de destruir ritualmente la cerámica. En algunos casos se encontraron las piedras utilizadas para romper las vasijas y otras piezas de cerámica. Por eso es muy difícil reconstruir por completo algunos ceramios", puntualizó.


Refirió que la secuencia y superposición de las edificaciones encontradas en las excavaciones han permitido observar las diversas fases de desarrollo cultural del complejo arqueológico.
Respecto a la cultura Huarpa, antecesora de Wari, el arqueólogo Ochatoma afirmó que se conoce muy poco. "Lo que vamos encontrando en las investigaciones es que debajo de la ocupación urbana Wari existe una ocupación Huarpa bastante densa", aseveró.


Agregó que los hallazgos indican que la sede de la civilización Huarpa, contemporánea de Nasca, Moche y Recuay, es la misma que tiempo después tuvo la civilización Wari.
Las investigaciones también dan cuenta que Wari, aún después de su colapso, influenció en la civilización Chanka, que reinó en la sierra centro sur del Perú, y rivalizó con los incas, que empezaban a expandirse desde el Cusco.


"Hemos encontrado que los Chankas sepultaban a sus muertos en la ciudad capital Wari de Ayacucho. Tenemos evidencia de que la mayoría de entierros encontrados pertenecen a la civilización Chanka. Lamentablemente, las tumbas Wari han sido saqueadas. En los cuatro años que hemos excavado no hemos encontrado ninguna tumba Wari intacta", comentó.
Sin embargo, Ochatoma consideró que es probable que existan tumbas Wari intactas porque lo excavado hasta ahora solo representa una mínima parte de la ciudad capital.

“Se estima que en el área donde se construyó la ciudad capital existen palacios, mausoleos, centros de producción artesanal, conjuntos habitacionales, entre otros espacios que componen toda gran urbe”, acotó.


Dificultades en la investigación

El responsable del proyecto de investigación en el complejo arqueológico Wari sostuvo que la labor desplegada con mucho esfuerzo desde hace siete años tuvo, lamentablemente, un involuntario receso durante el año 2018 debido al desinterés del entonces gobierno regional que recibió una importante partida del Ejecutivo.

"Lamentablemente, durante el 2018 no se pudo avanzar nada pese a que había presupuesto. El Ejecutivo transfirió 4 millones 700,000 soles al gobierno regional, que estaba en su último año de gestión, y no destinó financiamiento alguno para el proyecto arqueológico", manifestó Ochatoma.


Indicó que el entonces gobierno regional designó un supervisor y un residente para el proyecto arqueológico, pero ambos funcionarios regionales no hicieron un trabajo adecuado. "Nos compraban implementos sobrevalorados que eran entregados a destiempo; nos quitaban los obreros, entre otros problemas", denunció.

Ochatoma destacó las gestiones de congresistas por Ayacucho para la creación de una unidad ejecutora para el sitio arqueológico Wari. "Con una unidad ejecutora el manejo financiero sería más fluido y eso permitiría un mejor trabajo de conservación, restauración y puesta en valor. Si bien se ha creado la Unidad Ejecutora, esta carece de presupuesto. El actual gobernador regional tiene voluntad de apoyar, pero nos ha dicho que no tiene presupuesto porque este fue elaborado el año pasado por la anterior administración", anotó.


Dijo que esta falta de recursos económicos los obligó a desarrollar una labor de conservación preventiva, cubriendo con calaminas las zonas excavadas, y que representan apenas el 2% de lo que representa el área total de este complejo urbano.

Para que las labores de excavación, restauración, conservación y puesta en valor se desarrollen de manera sostenida, la unidad ejecutora requeriría un presupuesto de al menos 5 millones de soles anuales, estimó Ochatoma Paravecino.

Reinicio de trabajos en el complejo

Pese a las dificultades, Ochatoma Paravecino anunció que gracias al apoyo de la Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga, que destinó significativos recursos propios procedentes del canon gasífero de Camisea, han previsto reiniciar esta semana los trabajos en el complejo arqueológico Wari.

Precisó que no se excavarán zonas nuevas, sino que se continuarán trabajando en aquellos lugares donde se tuvo que suspender las excavaciones por falta de presupuesto.


"Hemos identificado tres zonas donde falta completar las investigaciones: Vegachayoq Moqo, donde se encuentra un patio ceremonial en cuyo interior se detectó unas escalinatas. Otro sector es Capillapata, donde existe un centro ceremonial en forma de letra 'D' mayúscula que cuenta con espacios construidos con piedras labradas. Y el tercero es un sector nuevo llamado Sullu Cruz, que está cerca de Capillapata, donde también hay un centro ceremonial. Para estas intervenciones contamos con la autorización del Ministerio de Cultura", detalló.


Adelantó que han proyectado, para fin de año, publicar los resultados de las investigaciones. Las piezas de cerámica y los demás objetos restaurados los entregarán al Ministerio de Cultura para su adecuada conservación y exposición al público.

Atractivo turístico

Ochatoma adelantó que otro objetivo de las investigaciones arqueológicas es lograr que el complejo arqueológico Wari se convierta en un atractivo turístico importante en Ayacucho.
"Vamos a tratar que se haga un circuito turístico en las áreas ceremoniales en forma de letra "D" mayúscula para descentralizar la visita. Si bien el turismo se ha incrementado en Ayacucho, es necesario ofrecer más alternativas. Nuestra idea es que la ciudad Wari se convierta en un atractivo turístico de primer orden, dado que se trata de la capital del primer Estado imperial en los Andes del Perú", enfatizó.

Subrayó que la civilización Wari construyó la red de caminos que dieron lugar al Qhapaq Ñan o gran Camino Inca, teniendo en cuenta que sus dominios se extendieron hasta Cajamarca por el norte y hasta Moquegua por el sur. Entre los enclaves administrativos destaca Pikillaqta en Cusco. Asimismo, crearon los "quipus" o sistema contable que fue muy utilizado por los incas.


Y en arquitectura, los Wari innovaron con el diseño trapezoidal presente en puertas y ventanas de las edificaciones incas. "La base del desarrollo y organización política, económica y social, e incluso militar de los incas se inspira en la cultura Wari. Por eso queremos contribuir al conocimiento de la vida cotidiana mediante la investigación, reconstrucción, conservación y puesta en valor de este complejo arqueológico que es un hito importante en la identidad e historia ayacuchana y peruana", remarcó.

José Ochatoma lidera un equipo integrado por tres arqueólogos titulados; a quienes se suman 30 universitarios (20 bachilleres y 10 estudiantes de arqueología) y 30 obreros.

Fuente: andina.pe | 15 de mayo de 2019

Arranca la cuarta campaña en el yacimiento Neolítico de Nahal Efe (Israel), liderada por el CSIC

Arqueólogos en el yacimiento Neolítico de Nahal Efe (Israel), donde está teniendo lugar la investigación (Proyecto Nahal Efe / EP).

Arqueólogos españoles e israelíes han iniciado nuevas excavaciones en el yacimiento de Nahal Efe (Israel), considerado el mayor poblado de la época -hace 10.000 años- del desierto del Neguev, para tratar de averiguar, entre otras cosas, cómo se expandió el Neolítico por esta zona árida.

El proyecto, que dirigen Ferran Borrell (izquierda), de la Institución Milà i Fontanals del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IMF-CSIC), y Jacob Vardi (derecha), de la Israel Antiquities Authority (IAA), quiere estudiar cómo era la sociedad de los últimos cazadores recolectores de la región.

Borrell ha explicado que las excavaciones de este año tienen por objetivo estudiar el proceso de difusión del Neolítico en las regiones semidesérticas del Oriente mediterráneo (Neguev, Sinaí, sur de Jordania) y conocer la interacción entre los últimos cazadores recolectores de dichas regiones con las poblaciones vecinas, ya plenamente agrícolas durante el Neolítico Precerámico B.

Otro objetivo es estudiar cómo interaccionaba la sociedad con el entorno en condiciones muy áridas, así como averiguar si los cambios climáticos del Holoceno Inicial tuvieron algún impacto en el desarrollo de las primeras comunidades agrícolas del sur del Levante mediterráneo.

Excavación de una de las estructuras de hábitat circulares en piedra que conforman el poblado. De pie, el Dr. Ferran Borrell – Nahal Efe Project.

El yacimiento, de una extensión de cerca de 2.000 metros cuadrados, ha puesto al descubierto un poblado formado por cabañas semicirculares de piedra de alrededor de entre 3 y 5 metros de diámetro.

Hasta ahora han excavado tres cabañas y una docena más han sido identificadas en superficie, con una conservación excelente, con los muros de piedra preservados hasta casi un metro de altura, ha destacado el arqueólogo. Los trabajos de las campañas anteriores se centraron en definir la extensión del yacimiento, verificar su cronología y estimar el estado de conservación.

El minucioso trabajo de fotogrametría y registro con estación total (arriba a la derecha) de todos los elementos arquitectónicos y del resto de materiales arqueológicos permitirá elaborar la reconstitución tridimensional del poblado – Nahal Efe Project.

Ahora quieren establecer el grado de contemporaneidad de los distintos edificios excavados, conocer la organización interna del poblado, así como las técnicas arquitectónicas usadas en la construcción de las grandes cabañas circulares de piedra documentadas.

“Esto nos aportará los primeros datos sobre el número de personas que podría haber formado dicha comunidad, así como su grado de movilidad”, ha precisado Borrell, que también se ha propuesto recoger datos para reconstruir las actividades de subsistencia de la comunidad, y recuperar restos botánicos (carbones, polen y fitolitos) que revelen cómo era el entorno y cuáles eran las especies vegetales que utilizaban como combustible y como alimento. El de Nahal Efe es actualmente el único proyecto arqueológico español en el estado de Israel.

El Dr. Ferran Borrell (el primero por la derecha) con otros miembros del equipo durante una de las campañas de excavación – Nahal Efe Project.

Fuentes: lavanguardia.com | fundacionpalarq.com | 22 de mayo de 2019

El misterio de las milenarias "tinajas de los muertos", en Laos, que los arqueólogos no logran resolver

Posiblemente las tinajas hicieron parte de una ruta de comercio. Getty.

En Phonsavan, a unos 400 km de Vientián, la capital de Laos, en el sudeste asiático, yacen sin explotar unas 80 millones de bombas de racimo. Según cifras del gobierno de Laos, eso los convierte en el país más bombardeado del mundo per cápita.

Las bombas están ahí desde que los aviones estadounidenses las lanzaron durante la guerra de Vietnam, pero como no alcanzaron a detonar, hoy la zona es un peligroso campo minado para los visitantes que se alejen de las zonas marcadas por donde es seguro caminar.

Las tinajas quizás también se usaron para recolectar agua. Getty.

En medio de las bombas está la "llanura de las tinajas", un sitio arqueológico que, como su nombre indica, guarda cientos de tinajas de piedra esparcidas a lo largo de miles de kilómetros cuadrados. Miden entre 1 y 3 metros y las más antiguas datan de la Edad de Hierro, hace unos 2.500 años.
Las vasijas están hechas con piel de animal, estiércol, arcilla, azúcar y arena. A estas jarras megalíticas se les llama "las tinajas de los muertos" y son uno de los grandes misterios que la arqueología aún no logra resolver.

Los nuevos hallazgos pueden servir para aprender más sobre el origen y el uso de las tinajas. ANU.

Un misterio milenario

Entre los locales corre la leyenda de que los recipientes fueron creados para fermentar un poderoso vino de arroz, que bebían para celebrar la victoria de una banda de gigantes míticos sobre sus enemigos. Otros dicen que las jarras contenían una especie de whisky para un gigante sediento que vivía en las montañas de Phonsavan.

Los científicos, sin embargo, tienen una explicación más terrenal, pero no menos fascinante. Aunque se sabe muy poco sobre estas tinajas, un grupo de arqueólogos de la Universidad Nacional de Australia (ANU, por sus siglas en inglés), creen que se usaban para rituales funerarios.
Estos investigadores encontraron hace unos días 15 nuevas áreas donde están esparcidas más de 100 vasijas, lo cual podría servir para resolver el enigma de su uso y origen.

"Es evidente que las jarras, algunas de las cuales pesan varias toneladas, fueron talladas en canteras y de alguna manera transportadas, a menudo varios kilómetros, a sus ubicaciones actuales", dijo en un comunicado Dougald O'Reilly (izquierda), arqueólogo de la ANU y uno de los líderes del hallazgo.
"Pero por qué estos sitios fueron elegidos como el lugar de descanso final para los recipientes sigue siendo un misterio. Como si fuera poco, no tenemos evidencia de ocupación en esta región".

Pistas para el rompecabezas

Además de las vasijas, O'Reilly y su equipo encontraron artefactos propios de la Edad de Hierro, como discos tallados con figuras animales y humanas, cerámicas decoradas, esferas de vidrio, aros y husos. También encontraron unas jarras en miniatura hechas en cerámica, algo que les llamó la atención.

"Nos encantaría saber por qué estas personas representaron en miniatura los mismos recipientes en los que colocaron a sus muertos y enterrarlos juntos a ellos", dijo O'Reilly.

Algunas de las tinajas miden hasta 3 metros de altura. Getty.

Según informa el portal Atlas Obscura, en la década de los 30, la arqueóloga francesa Madeleine Colani exploró la llanura y encontró una cueva que albergaba restos humanos, como cenizas y huesos quemados.

Otras teorías afirman que la vasta zona en la que están esparcidas las tinajas pueden ser señal de que estos recipientes pudieron ser parte de una extensa ruta de comercio. Algunos investigadores creen que las tinajas recogían agua lluvia para que la bebieran los viajeros de las caravanas y estos, a su vez, dejaban objetos en ellas.


Las tinajas de los muertos están esparcidas a lo largo de varios kilómetros. ANU.

Recipientes similares se han encontrado en zonas como Assam, en India, y Sulawesi, en Indonesia.
Así, aunque los investigadores tienen varias pistas desperdigadas, aún falta la pieza clave que permita descifrar el milenario misterio de las tinajas de los muertos que sobresalen en medio de un campo minado.

Fuente: bbc.com | 21 de mayo de 2019

La teoría económica moderna explica las sociedades prehistóricas mediterráneas

Colgante de oro del tesoro de Aegina que muestra a un dios de la naturaleza minoica: el 'Maestro de los animales'. Crédito: British Museum.

La investigación de un profesor de la Florida State University (FSU) sugiere que una teoría del famoso economista Thomas Piketty sobre la desigualdad de la riqueza actual explica mucho sobre cómo se desarrollaron las sociedades de menor escala en el Mediterráneo prehistórico.

La teoría de Piketty dice que las condiciones económicas de alto crecimiento pueden disminuir la tasa de desigualdad de la riqueza mientras que el bajo crecimiento puede acelerarla. En un nuevo estudio, el profesor asistente de Antropología de la FSU, Thomas Leppard (izquierda), sostiene que ciertas sociedades jerárquicas mediterráneas, desde alrededor de 3.500 a.C. a 1.000 a.C., caen en este contexto de bajo crecimiento descrito por Piketty.

La investigación de Leppard se ha publicado en la revista Current Anthropology.

"Aunque estas sociedades nunca alcanzaron el tamaño y la escala de las sociedades de entornos más ricos del Viejo Mundo (Mesopotamia, 5500–3500 a.C)), el hecho de que se desarrollaran en zonas (Mediterráneo) que no eran primordialmente agrícolas proporcionó oportunidades para que algunas personas acumulasen una gran riqueza y estatus social en comparación con otros individuos", dice Leppard.

Debido a que muchas de estas sociedades eran pre-monetarias, la riqueza y las tasas de crecimiento pueden ser aproximadas debido a la producción agrícola, particularmente de la agricultura extensiva a gran escala de diferentes tipos de cereales.

"Sabemos que la agricultura fue, en cierta medida, vital para el surgimiento de sociedades urbanas y 'estatales'", dice Leppard.

Leppard sostiene que en las sociedades urbanas más grandes ubicadas en Mesopotamia, o cerca de los ríos Nilo y Amarillo, la desigualdad de ingresos exagerada tardó más en ocurrir porque eran entornos de alto crecimiento. Este crecimiento detuvo la desigualdad de la riqueza rápidamente emergente y las jerarquías institucionales asociadas durante más tiempo, lo que permitió que estas sociedades se unieran en escalas más grandes antes de que aparecieran las jerarquías duraderas y las instituciones de tipo estatal.

La teoría de Piketty, dijo Leppard, ilustra que condiciones muy diferentes pueden conducir a resultados sociales similares, y esto desafía algunos modelos actuales en arqueología antropológica sobre cómo se desarrollaron las jerarquías sociales.

"En última instancia, si procesos muy diferentes pueden impulsar la aparición de sociedades que parecen estructuralmente similares, tendremos que empezar a pensar en múltiples vías para aquellas sociedades en las que nos gusta pensar bajo una sola categoría", afirma Leppard.

Fuente: Florida State University | 9 de mayo de 2019

Altamira reabre la exposición sobre la forma de reproducir el arte rupestre

El Museo Nacional y Centro de Investigación de Altamira reabre este martes, día 21, la exposición 'El arte de reproducir el arte. Pared, pigmento, pixel', sobre las diferentes técnicas y resultados de reproducir el arte rupestre, así como su evolución desde los primeros dibujos del siglo XIX hasta los actuales modelos 3D.

Organizada por el Ministerio de Cultura, en colaboración con el Pôle International de la Préhistoire (Les Eyzies de Tayac-Sirueil, Dordoña), la muestra propone hasta el 13 de octubre una inmersión en el universo de los facsímiles -físicos o virtuales- de las cuevas con arte rupestre y de tres de sus principales ejemplos: la Neocueva de Altamira, en Cantabria; y el Lascaux Centre International de l'Art parietal y la Caverne du Pont d'Arc, en Francia.


La exposición materializa así un largo trabajo de cooperación entre el Museo de Altamira y algunas de las más importantes instituciones de gestión del patrimonio de la Dordoña francesa, que permite subrayar el enorme valor de estas réplicas en el desarrollo cultural, científico y turístico y, en definitiva, en la puesta en valor de los territorios donde se ubican, ha informado el Museo Altamira en nota de prensa.

Los facsímiles de estas joyas del arte parietal paleolítico son fruto de una reflexión científica y multidisciplinar a partir de los originales, que cuenta con la participación de geólogos, arqueólogos, topógrafos, dibujantes o fresadores.


En el caso de la cueva de Altamira, esta labor permitió recuperar la caverna tal y como la conocieron los artistas paleolíticos, recreando para ello las pinturas sobre el soporte con las mismas materias primas utilizadas en la Prehistoria: óxidos de hierro para el rojo Altamira, carbón vegetal para el negro y el agua como aglutinante, así como las técnicas de la época: aerógrafos o trazos con los dedos.

Instrumentos, fotografías y audiovisuales para conocer las cuevas La exposición se apoya en una variada y completa colección de fotografías y audiovisuales procedentes del propio Museo de Altamira y de las cuevas francesas.


Se exhiben también diversos instrumentos tecnológicos utilizados en su construcción, como los cedidos por el Instituto Geográfico Nacional de Cantabria, organismo encargado de realizar los trabajos topográficos y fotogramétricos para la realización de la Neocueva, y que permitieron emprender una obra de proporciones ingentes para la época.

La fotogrametría llegó a definir de forma exhaustiva la topografía del techo de la Sala de Polícromos, midiéndose 40.000 puntos por metro cuadrado, hasta un total de 5.800.000 puntos.


ORTOIMAGEN DEL TECHO DE POLÍCROMOS

Una de las piezas más destacadas de la muestra, procedente del Museo de San Isidro de Madrid, es la ortoimagen del Techo de Polícromos de Altamira, por ser la primera representación de arte rupestre bajo este técnica y que fue utilizada para la construcción en el Deutsche Museum del primer fascímil de las famosas pinturas de Altamira y posteriormente el de la réplica de la cueva del Museo Arqueológico Nacional, en Madrid.

El visitante puede contemplar también paneles y maquetas sobre los diferentes yacimientos, las cámaras fotográficas de uno de los pintores de la Neocueva, Pedro Saura, y otras piezas cedidas por diferentes museos, como el Diadumeno Farnesio, reproducción de la copia romana de Policleto, vaciado en yeso perteneciente a la colección del Museo Nacional de Escultura de Valladolid.


La muestra reúne, además, uno de los fragmentos de la réplica de la cueva de Lascaux, procedente del Atelier des Fascimiles de Périgord.

El recorrido se cierra con un audiovisual que sumerge virtualmente al espectador en la cueva de Altamira para compartir la vida de las mujeres y hombres paleolíticos en su interior.
La exposición ha sido comisariada, por parte española, por Carmen de las Heras y por Pilar Fatás, subdirectora y directora del Museo de Altamira respectivamente; y, por la parte gala, por Gilles Muhlach-Chen, Noël Coye, conservador del Patrimonio, jefe del Proyecto de Mediación Científica y Desarrollo Internacional del Pôle international de la Préhistoire y por Catherine Roudet, coordinadora de proyectos, del Pôle international de la Préhistoire.

Fuente: lne.es | 20 de mayo de 2019

Estudios genéticos arrojan luz sobre la estructura social de los habitantes de Çatalhöyük

Excavaciones en el yacimiento de Çatalhöyük.

La estructura social de los habitantes de una de las ciudades más antiguas del mundo, Çatalhöyük, en Turquía, era más compleja de lo que los científicos suponían. El parentesco podría tener un papel secundario en él, según determinaron los científicos sobre la base de las pruebas de ADN de los restos óseos encontrados.

Çatalhöyük, un enclave arqueológico en el centro de Turquía, fue habitado durante casi 1200 años, entre 7.100 y 5.950 a.C. Se estima que en el período de mayor prosperidad, el asentamiento, densamente construido, con un área de varias docenas de hectáreas, tenía aproximadamente 6.000 residentes. Un hecho interesante es que los muertos eran enterrados bajo los pisos de las casas.

Un equipo internacional de genetistas (que incluye a investigadores de Ankara y Estocolmo) coordinado por Maciej Chylenski (izquierda), del Laboratorio de ADN de fósiles de la Universidad Adam Mickiewicz, en Poznan, decidió estudiar el ADN de algunos de los restos humanos descubiertos en el asentamiento prehistórico.

Los investigadores se centraron en los restos de casi 40 personas que se hallaban debajo de los pisos de 4 casas habitadas hace aproximadamente 8.500 años. En una entrevista con el medio de comunicación PAP, Chylenski enfatizó que el material genético estaba mal conservado, por lo que su examen no ha resultado una tarea fácil.

"Por ahora, sabemos que los individuos enterrados bajo la misma casa no estaban emparentados en línea materna. Por ejemplo, en el caso de los niños, las mujeres que yacían a su lado no eran sus madres. No sabemos si estaban relacionados de alguna otra manera", dice Chylenski.
En este sentido, añadió que es necesario llevar a cabo un análisis de los datos de los genomas nucleares para descartar por completo el parentesco, si bien, como se ha dicho, el ADN no está muy bien conservado. No obstante, el genetista hará nuevos intentos para obtener genomas nucleares en un futuro próximo.

La plataforma noroeste del Edificio 3 muestra múltiples enterramientos debajo de sus pisos. Crédito: Proyecto Catalhöyük.

“Con todo, se puede decir que los genomas mitocondriales, en combinación con los resultados obtenidos por los aarqueólogos que trabajan en el yacimiento, sugieren que la estructura social de Çatalhöyük era más compleja de lo que cabía esperar y el parentesco biológico podría tener un papel secundario", dice el científico.

De este modo, como resultado del análisis del genoma mitocondrial, numerosas especulaciones arqueológicas anteriores han sido refutadas: los habitantes de una casa probablemente no pertenecían a una misma familia.

Los investigadores también encontraron que, en términos genéticos, los habitantes de esta ciudad prehistórica estaban relacionados con los pueblos del Mar de Mármara. Esta área desempeñó un papel importante en la propagación de la agricultura y la cría de animales en Europa, la llamada Revolución Neolítica.

"El momento del inicio del Neolítico en ambas regiones, y las similitudes en la cultura material, pueden indicar que las poblaciones de Anatolia Central, o grupos estrechamente relacionados con ellas, participaron en la Revolución Neolítica en la región del Mar de Mármara", afirma Chylenski.

A) La ubicación de Catalhoyuk y otros sitios con genomas mitocondriales completos utilizados como referencia para el estudio. B) Esquema del montículo Catalhoyuk Este con áreas de excavación visibles. C) Primer plano del área de excavación y los edificios seleccionados para el estudio con las ubicaciones y los haplogrupos mitocondriales obtenidos de los individuos reseñados en el documento de investigación. Crédito: Chylenski et al. 2019.


Catalhoyuk es uno de los enclaves arqueológicos más famosos del mundo. Se hizo muy conocido debido a sus característicos edificios, los cuales consistían en casas construidas con ladrillos de adobe, y las paredes de las mismas estaban adheridas directamente a otras casas, mientras que las entradas se situaban en el nivel del techo. Los interiores de algunas de ellas estaban ricamente decorados con pinturas y objetos ornamentales, entre otras cosas. En 2012, el yacimiento fue inscrito como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Reconstrucción de una zona de Ҫatalhöyük. Ilustración de John Swogger.

Los resultados del estudio han sido publicados en la revista Genes.

Fuente: scienceinpoland.pap | 15 de mayo de 2019