Confirman la existencia de un campamento especializado de caza de ovejas en el Líbano prehistórico

Vistas de la cueva de Nachcharini y sus alrededores. Crédito: PLOS ONE.

Los antropólogos de la Universidad de Toronto han confirmado la existencia hace más de 10.000 años de un campamento de caza en lo que ahora es el noreste del Líbano, y que se extiende a horcajadas sobre el período que marca la transición de sociedades nómadas de cazadores-recolectores a asentamientos agrícolas en el inicio de la última Edad de Piedra.

El análisis de los datos recopilados durante décadas en la cueva Nachcharini, en lo alto de la cadena montañosa que forma la frontera moderna entre Líbano y Siria, muestra que el sitio era un campamento de caza temporal que servía como puesto de avanzada para pueblos emergentes de otras partes de la región, y que las ovejas eran la caza principal.

El hallazgo confirma la hipótesis del arqueólogo retirado la Universidad de Toronto, Bruce Schroeder, que excavó el sitio en varias ocasiones a partir de 1972, pero que tuvo que suspender su trabajo cuando comenzó la Guerra Civil Libanesa en 1975.

"El sitio representa la mejor evidencia de un campamento con un propósito especial, no una aldea o asentamiento en la región", dijo Stephen Rhodes (izquierda), un candidato a doctorado en el Departamento de Antropología de la Facultad de Artes y Ciencias de la Universidad de Toronto y autor principal de un estudio publicado hoy en PLOS ONE.
"La cueva era contemporánea de los asentamientos más grandes al sur del Valle del Jordán, y es el primer enclave de este tipo que muestra un predominio de las ovejas entre los animales cazados por parte de sus habitantes temporales".

La datación por radiocarbono de huesos de animales recuperados en el lugar muestra que se corresponde con un periodo conocido como Neolítico Pre-Cerámico A (PPNA), comprendido aproximadamente entre 10.000-8.000 a.C., y durante el cual los cultivos, la construcción de viviendas de adobe y otras prácticas de domesticación, comenzaron a surgir. Las herramientas de piedra halladas son en su mayoría pequeñas puntas de flecha utilizadas para la caza.

Puntas y variantes de las mismas halladas en la cueva de Nachcharini.

"Las dataciones anteriores establecidas en la década de 1970 feran problemáticas y demasiado recientes por razones desconocidas, posiblemente debido a la contaminación de los materiales analizados o a un procesamiento incorrecto", dijo Rhodes, coautor del estudio con los profesores Edward Banning y Michael Chazan, ambos miembros del Departamento de Antropología de la Universidad de Toronto. "Los resultados destacan el hecho de que las personas del Neolítico Pre-Cerámico A aprovecharon una amplia variedad de hábitats con un complejo sistema de prácticas de subsistencia".

Ya se sabía que la caza de ovejas se practicaba en esta región durante los períodos que precedieron al PPNA, y la evidencia encontrada en la cueva de Nachcharini refuerza esa comprensión. Según Rhodes, consolida nuestro conocimiento sobre rango natural de las ovejas, el cual supondrá un comienzo de domesticación de las mismas en los años posteriores.

"No estamos diciendo que los cazadores en Nachcharini estaban involucrados en las primeras etapas de esta domesticación", dijo. "Sino que la evidencia de una tradición local hace que esta área haya sido un posible centro de domesticación de ovejas más adelante".

Fuente: phys.org.com | 22 de enero de 2020

Descubren varios petroglifos circulares en las cumbres de Cervantes, lo que demuestra que estas fueron paso de pastores desde la Prehistoria

La huella del hombre en las montañas de Os Ancares (Lugo) es milenaria. A día de hoy podemos intuir parte del pasado secular gracias a algunas construcciones y yacimientos tanto castrexos como romanos, pero desde los últimos años se ha evidenciado que el asentamiento humano en las cumbres gallegas ya viene del Neolítico y, además, con unos usos y costumbres que aún hoy perviven, como es el de la trashumancia del ganado.

Tenemos huellas del pasado visibles en poblados como Piornedo (Cervantes), con el conjunto de pallozas quizás mejor conservado de Europa; o de asentamientos castrexos como el de Santa María (recientemente declarado BIC); o la explotación aurífera que llevaron a cabo los romanos en los ríos de la comarca; y hasta el reciente descubrimiento de campamentos militares romanos o el tramo del trazado de la Vía XIX de Astorga a Lugo.

Pero en la última década se han producido varios hallazgos que muestran que esta parte oriental de Galicia y del noroeste de la península estuvo ocupada desde el Neolítico y la Edad del Bronce. Ha sido el trabajo del Colectivo Patrimonio dos Ancares el que ha permitido sacar a la luz restos megalíticos que explican mejor la historia de la comarca. Este colectivo acaba de comunicar a la Xunta la localización de un nuevo grupo de petroglifos en el municipio de Cervantes, en concreto en el paraje conocido como Río de Agua, situado a 1.310 metros de altitud, entre los montes de O Pico da Legua y O Teso de Acevedo, perteneciente a la parroquia de O Pando.

«No centro da parte superior dunha pena granítica lixeiramente inclinada, duns tres metros de longo por dous de ancho, foi gravada unha combinación de tres círculos concéntricos con coviña central cuxo círculo exterior ten unhas medidas aproximadas duns 30 centímetros de diámetro. En dúas esquinas da rocha tamén foron insculpidas dous grupos de dúas e catro cazoletas cunhas medidas que oscilan entre os 3 e 5 centímetros de diámetro», explica el historiador y miembro del colectivo patrimonial, Xabier Moure.

Tipo de figuras

Moure explica que las cazoletas que se hallan en la mayoría de los complejos rupestres gallegos no tendrían un único significado: «recipientes para ofrendas, lugares para recoller a auga que sería utilizada nalgún tipo de ritual, receptáculos para sacrificios, símbolos de carácter sexual feminino relacionados coa fertilidade, delimitadores de espazos sagrados ou relixiosos, etc. Como no caso das coviñas, os círculos concéntricos tamén son figuras enigmáticas, sendo obxecto de varias interpretacións: representacións do sol, escudos, ofrendas votivas, etc». En definitiva, señala, tendrían un significado simbólico-religioso de difícil interpretación «xa que ao tratarse dunha arte simbólica son para nós de natureza inintelixible e co único que xogamos son con hipóteses xa que este sistema de comunicación desapareceu xunto coas persoas que os xeraron, incluso cabe a posibilidade de que o seu significado só sería comprensible a determinados integrantes daquela sociedade da Idade do Bronce, hai uns 4.000 anos, período ao que corresponderían estes petroglifos».

Particularidades

Con el nuevo hallazgo de estos petroglifos, ya son veinte los grupos que el Colectivo Patrimonio dos Ancares llevan documentados en el concello de Cervantes, «case todos compostos por coviñas, excepto tres combinacións circulares, incluída esta, un semicírculo e a representación dun ungulado (pezuño de animal)». Pero Moure destaca como muy llamativo que en todos los municipios situados en la parte más oriental de la provincia de Lugo, limítrofes con Asturias y León, desde Ribadeo hasta Quiroga, excepto en Cervantes, la presencia de petroglifos es casi nula, documentándose solo un grupo por municipio en Ribadeo, A Fonsagrada, Folgoso do Courel y Quiroga. Además, como particularidad, los petroglifos de Cervantes se hallan en las zonas más elevadas; incluso uno, el de Mustallar, que fue grabado a 1.800 metros, se convirtió en noviembre del 2015, cuando fue descubierto, en el que más altitud de encuentra de Galicia, superando al petroglifo de As Arcas, en el concello ourensano de Manzaneda, a 1.770 metros de altitud.

Fuente: lavozdegalicia.es | 6 de febrero de 2020

Encuentran evidencias de un enfrentamiento entre los primeros agricultores del Neolítico en la cueva de Els Trocs, en los Pirineos

Ubicación de la entrada de la cueva Els Trocs / foto H. Arcusa Magallón

En el yacimiento de la cueva Els Trocs, en los Pirineos (San Feliu de Veri, Bisaurri, Huesca), grupos rivales de agricultores primitivos migrantes o de agricultores y cazadores-recolectores indígenas chocaron violentamente alrededor del año 5300 a.C. Este choque resultó una masacre de los agricultores de Els Trocs. La violenta reacción fue posiblemente desencadenada por la xenofobia o las disputas masivas por los recursos o privilegios, según un estudio publicado en Nature.
El estudio se ha realizado bajo la dirección del profesor Manuel Rojo (izquierda), de la Universidad de Valladolid, y de José Ignacio Royo (derecha), arqueólogo del Gobierno de Aragón, y las investigaciones antropológicas son fruto de una cooperación con las universidades de Krems (Austria), Basilea (Suiza), UAM y el Incipit del CSIC.

La cueva de Els Trocs se halla en medio de un altiplano, donde se eleva una montaña con la entrada de la cueva en su ladera. Además de los restos materiales de sus antiguos ocupantes, como herramientas de cerámica y piedra, contiene huesos de animales domésticos y salvajes masacrados, así como restos óseos humanos de niños y adultos. Los 13 individuos identificados hasta ahora pueden asignarse a tres fases diferentes de ocupación del Neolítico que están muy separadas en el tiempo. Por lo tanto, estos “entierros” no son un grupo que compartió un único destino común.

Situación de Els Trocs / foto H. Arcusa Magallón

Los investigadores centraron el análisis en nueve individuos (cinco adultos y cuatro niños) de la ocupación más temprana de la cueva hacia 5.326–5.067 a.C., cuyas fechas de radiocarbono se agrupan estrechamente y todos ellos muestran rastros de violencia peri y post mortem. El estudio del genoma de las víctimas de la matanza indica que dos de ellos (un varón de unos 30 años y un niño de unos 6) son padre e hijo. Los otros tres niños tienen madres diferentes, cuyos genomas no se han detectado en el resto de huesos.

Así pues, los individuos de esta fase I se distinguen por estar separados cronológicamente por más de 1.000 años de los de la fase II y por presentar un conjunto específico y único de lesiones que sugieren un episodio singular de conflicto del que fueron víctimas estos individuos.
Los adultos presentan lesiones consistentes por disparos de flecha en el cráneo. Los niños y los adultos muestran además rastros de una violencia contundente similar en el cráneo y en todo el esqueleto. El uso de armas de proyectiles como arcos y flechas en situaciones de conflicto se evidencia no sólo por los arcos del cercano asentamiento contemporáneo de La Draga, sino también por las pinturas rupestres de este período que representan varios tipos de actos violentos. Además de los rastros directos e inequívocos de violencia, esta evidencia indirecta apoya la suposición de que los individuos de Els Trocs fueron víctimas de una masacre.

Para José Ignacio Royo (él y Héctor Arcusa son los especialistas aragoneses que participan en la investigación), la reconstrucción de los hechos permite varias hipótesis. "No nos atrevemos a decir que se trató de una matanza ritual. Parece que fueron heridos con flechas en las inmediaciones de la cueva, y que posteriormente fueron introducidos en ella, donde continuaron los golpes y las heridas incluso después de muertos", señala. La violencia de estas agresiones lleva a Manuel Rojo a calificarlas como una "segunda ejecución". "Un frenesí asesino. Es como si, además de quitarles la vida, hubieran querido eliminar hasta su recuerdo", añade Royo. Señales encontradas en los huesos de las víctimas llevaron a los investigadores hace años a pensar incluso en posibles actos de canibalismo, algo que ahora descartan.

Imagen de distintos restos humanos entre el pavimento de cerámicas de la primera ocupación de la cueva. Heraldo.es.

La importancia del conflicto violento que se presenta aquí radica en la temprana evidencia de violencia intencional en el período Neolítico. Las fuentes existentes datan los primeros eventos de violencia colectiva, de los que fueron víctimas comunidades enteras de asentamientos, en Europa Central a finales del VI y principios del V milenio a.C. Los violentos acontecimientos en Els Trocs no tienen paralelo ni en España ni en el resto de Europa en esa época. Otro rasgo inusual es la remota ubicación geográfica del sitio, lejos de las primeras rutas migratorias neolíticas de la península ibérica, que se encuentran en la costa o a lo largo del valle del Ebro, respectivamente.
Los análisis genéticos poblacionales caracterizan a las víctimas de Els Trocs como los primeros migrantes del Neolítico, miembros de las comunidades que establecieron la agricultura y la ganadería en la Península Ibérica. Podrían representar a los miembros mayores y a los hijos de una comunidad neolítica más amplia que, separados del grupo principal, pasaban los meses de verano en los Pirineos en el curso de la trashumancia estacional, es decir, la migración de ganado.

Evidencias de lesiones por arma en los huesos analizados / foto T. Schuerch

Los autores de la masacre podrían haber sido cazadores-recolectores indígenas que vieron cómo el grupo neolítico invadía sus territorios de forrajeo. Alternativamente, puede haber sido un altercado entre dos grupos neolíticos en el que se intensificaron las disputas sobre los derechos territoriales. Este razonamiento considera como motivo que el terreno en el que tuvo lugar el evento violento es una meseta que ofrece múltiples recursos.

Es posible que se tratara de un grupo local que todavía vivía tradicionalmente como forajidos, y que decidiera oponerse a los migrantes de manera decisiva y con toda su fuerza. O puede haber sido otro grupo neolítico, ya sea extranjero o local, que le disputaba a las víctimas de Els Trocs sus pastos de verano.
Escena de batalla en el abrigo de Les Dogues, Castellón / foto E. López Montalvo.

Els Trocs probablemente documenta una temprana escalada de violencia intergrupal entre personas de orígenes y visiones del mundo posiblemente diferentes, entre nativos y migrantes o entre rivales económicos o sociales. El conflicto transmite la impresión de una acción xenófoba; el tipo de agresión sugiere un choque entre grupos enemigos.

Según asegura José Ignacio Royo, el equipo de investigación ha decidido suspender de momento las excavaciones arqueológicas. "El volumen de información que nos está dando el yacimiento es enorme, y creeomos que ha llegado el momento de hacer balance y estudiar lo que hemos ido encontrando. Hay que tener en cuenta que en cada campaña de excavación sacamos entre 5.000 y 7.000 fragmentos de cerámica, que tenemos ya la mayor colección de huesos de animales del Holoceno de toda Europa... Excavar por excavar no nos lleva a nada. La cueva está bien protegida y creemos que ha llegado el momento de parar un poco y analizar lo que hemos encontrado", concluye.

Fuentes: labrujulaverde.com | elheraldo.es | 10 de febrero de 2020

Hallan un templo en Tel Motza, Israel, que demuestra que rivalizaba con el Templo de Salomón

Una vista panorámica del templo, tomada al final de la temporada de excavaciones 2013.
(Imagen: © P. Partouche / SkyView)

El descubrimiento de un templo de la Edad del Hierro cerca de Jerusalén ha trastocado la idea de que el antiguo Reino de Judá, ubicado en lo que ahora es el sur de Israel, tenía solo un templo: el Primer Templo, también conocido como Templo de Salomón, un lugar sagrado de culto en Jerusalén que se mantuvo desde el siglo X a.C. hasta su destrucción, en 586 a.C.

El nuevo templo descubierto, cuyos aproximadamente 150 fieles adoraban a Yahvé, pero también usaban ídolos para comunicarse con lo divino, estuvo en uso durante el mismo período que el Primer Templo. Su hallazgo muestra que, a pesar de lo que dice la Biblia judía, había otros templos contemporáneos además del Primer Templo en el reino.


"Si un grupo de personas que vivía tan cerca de Jerusalén tenía su propio templo, quiere decir que ¿tal vez el gobierno de la élite de Jerusalén no era tan fuerte y el reino no estaba tan bien establecido como se describe en la Biblia?", dijo a Live Science la co-investigadora Shua Kisilevitz (izquierda), una estudiante de doctorado en Arqueología en la Universidad de Tel Aviv y arqueóloga de la Autoridad de Antigüedades de Israel.

Los arqueólogos han sabido sobre este yacimiento de la Edad del Hierro en Tel Motza, ubicado a unos 6,4 kilómetros de Jerusalén, desde principios de la década de 1990. Sin embargo, no fue sino hasta 2012 que los investigadores descubrieron los restos de un templo, y no fue sino hasta el año pasado que lo excavaron aún más, antes de llevarse a cabo un proyecto de carretera.


Este templo probablemente se construyó alrededor del 900 a.C., y funcionó durante unos cientos de años hasta su desaparición a principios del siglo VI a.C., según Kisilevitz y su co-investigador, Oded Lipschits (derecha), quienes escribieron sobre el mismo en la revista Biblical Archaeology Review.
Este momento de la existencia del templo dejó atónitos a los arqueólogos. "La Biblia detalla las reformas religiosas del rey Ezequías y el rey Josías, quienes consolidaron las prácticas de adoración en el Templo de Salomón en Jerusalén y eliminaron toda actividad de culto más allá de sus límites", escriben los autores en la revista.

Estas reformas probablemente ocurrieron entre finales del siglo VIII y finales del siglo VII a.C. En otras palabras, ocurrieron al mismo tiempo que la sinagoga de Tel Motza estaba funcionando, dijeron los investigadores.

¿Era atrevido que un templo así desafiara aparentemente las órdenes de los reyes y operara tan cerca de Jerusalén? "El único otro templo conocido de este período en el reino, además del Primer Templo de Salomón, es un pequeño templo en el fuerte de la frontera sur de Arad, que sirvió a la guarnición local", dijo Kisilevitz.

Sin embargo, parece que hubo otros templos en el reino cuya existencia continua fue permitida, a pesar de las reformas de Ezequías y Josías, dijeron Kisilevitz y Lipschits. Así es como pudo haber sucedido.

Granero antiguo

El enclave de Tel Motza albergaba no solo el templo, sino también docenas de silos para el almacenamiento y la redistribución de granos. De hecho, el granero parece que prosperó con el paso del tiempo, e incluso había edificios que probablemente tenían fines administrativos y religiosos.
Parece que Tel Motza se convirtió en un granero tan exitoso que abasteció a Jerusalén y se convirtió en una potencia económica. "Se diría que la construcción del templo, y el culto realizado en él, estaban relacionados con la importancia económica del granero", escribieron los investigadores.
Por ello, tal vez se permitió que el templo existiera, dado que estaba unido al granero y no parecía amenazar al reino de ninguna formma, dijeron los investigadores.

Ídolos rotos

"El templo en sí era un edificio rectangular con un patio abierto al frente. Dicho patio servía como punto focal para la actividad del culto, ya que a la población en general no se le permitía ingresar al templo mismo", comenta Kisilevitz a Live Science.


"Los hallazgos culturales en el patio incluyen un altar de piedra en el que se sacrificaban animales se sacrificaron animales y sus restos se tiraron en un pozo excavado cerca", precisa Kisilevitz. Además, cuatro figuras de arcilla, dos de aspecto humano y dos en forma caballo, se habían roto y enterrado en el patio, probablemente como parte de un ritual de culto.
Las figurillas en forma de caballo pueden ser las representaciones más antiguas conocidas de equinos de la Edad del Hierro en Judá, agregaron los investigadores.

Figura de caballo descubierta en el complejo del templo de Motza. (Clara Amit / IAA)

"Ahora bien, los antiguos judíos probablemente no adoraban a los ídolos de arcilla", señaló Kisilevitz. "Más bien, estos ídolos eran un medio a través del cual la gente podía comunicarse con Dios [o los dioses], y probablemente pedirían buenas lluvias, fertilidad y cosecha", advierte Kisilevitz.

De hecho, no es sorprendente que las personas en el antiguo Reino de Judá usaran ídolos, señalaron los arqueólogos.

"Existen evidencias de actividad de culto a los ídolos en todo el Reino de Judá tanto en los textos bíblicos (representados como admitidos por la realeza, con la notable excepción de Ezequías y Josías, los cuales llevaron a cabo una reforma del culto a los mismos) como en los hallazgos arqueológicos", afirma Kisilevitz.

Base de soporte ritual con restos de decoración en forma de un par de leones o esfinges en el templo de Moẓa / K. Amit.

Además, durante aquel tiempo, nuevos grupos políticos estaban surgiendo en Levante, la región que incluye a Israel y sus países vecinos hoy en día. Dados estos cambios tumultuosos, las personas tendieron a seguir con sus antiguas prácticas religiosas, e incluso la arquitectura del templo Tel Motza y sus artefactos recuerdan las tradiciones religiosas del antiguo Cercano Oriente que se habían practicado desde el III milenio a.C., dijeron los investigadores.

En defiitiva, el descubrimiento de este templo arroja luz sobre la formación del Estado durante este período. Cuando el Reino de Judá surgió por primera vez, no era tan fuerte y centralizado como sucedió más tarde, pero sí estableció relaciones con los gobernantes locales cercanos, incluyendo Tel Motza, dijeron los investigadores.

Fuentes: livescience.com | radio.cz | 11 de febrero de 2020

Revelan la enigmática evolución del 'juego de la muerte' del antiguo Egipto

La reina egipcia Nefertari jugando al senet. Pintura en su tumba (siglo XIII a. C.).

Un antiguo 'juego de mesa de la muerte' egipcio que se jugaba de manera similar al Ludo moderno (similar al parchís) se usaba para comunicarse con los difuntos hace unos 3.500 años.
El juego, llamado 'senet', se jugaba en todos los niveles de la sociedad egipcia desde su aparición hace 5.000 años hasta que perdió popularidad unos 2.500 años después.

Sin embargo, unos 700 años más tarde de que se jugara por primera vez, el juego adquirió un carácter espiritual, con textos antiguos en los que se insinúa la creencia de que el mismo ofrecía un vínculo con la vida en el más allá.
Ahora, un experto cree que haber encontrado un tablero de 'senet' que responde a este cambio, y es posiblemente una de las primeras veces en el que dicho juego describe el viaje del alma hacia el paraíso.

Toamando como base fragmentos de textos antiguos, los arqueólogos piensan que el 'senet' probablemente era un juego para dos partícipes, disponienddo cada uno de cinco peones que se movían alrededor del tablero, el cual presentaba una cuadrícula de 30 cuadrados dispuestos en tres filas de 10.

Foto: Tablero de juego 'senet' de la tumba de Tutankamón, alrededor del siglo XIV a.C. Hecho de madera chapada con ébano e incrustaciones de marfil.

Los jugadores, muy posiblemente, lanzarían una forma de dados de juego para ver hasta dónde podían mover un peón en cada turno, siendo el ganador aquel que consiguiera mover primero los cinco peones hasta el final. Cada uno de los peones se movería hacia la derecha a lo largo de la fila superior, continuando por la izquierda en la fila central, y luego hacia la derecha por la fila inferior, terminando en el último cuadrado (el número 30) de la esquina inferior derecha de la cuadrícula.
Los penúltimos cuatro cuadrados estaban decorados con símbolos, los cuales probablemente tenían un significado especial: se cree que estos eran quizás el equivalente a 'perder un turno' o 'ir a la cárcel' de los juegos de mesa modernos.
Cuando el juego aparece por primera vez en el registro arqueológico -hace unos cinco milenios- no hay nada que sugiera que servía para algo más que ser una forma de entretenimiento. Pero hace unos 4.300 años, el arte de las tumbas egipcias comenzó a mostrar imágenes que representaban al difunto jugando el 'senet' contra oponentes vivos.

Los expertos piensan que el 'senet' progresó de ser esencialmente una versión antigua del Ludo a algo más cercano a un juego de la güija, es decir, un medio a través del cual los vivos podían comunicarse con los muertos.

De hecho, los textos de los siguientes mil años describen el juego como un reflejo del paso del alma a través de Duat, el reino de los muertos. En la mitología egipcia, el Duat era ámbito donde se juzgaban las almas, donde se 'pesaba el corazón' (y los que superaban esta prueba podían avanzar hacia el paraíso celestial de Aaru, también conocido como el 'Campo de Cañas'.

Ritual del Pesado del Corazón por parte de Anubis, Sortilegio 125 del Papiro de Ani Libro de los Muertos.

Junto con la importancia cambiante del juego, los tableros del 'senet' también experimentaron cambios de diseño que comenzaron hace unos 3.300 años. Por ejemplo, las tres líneas verticales simples que se encuentran en el cuadrado 28 de los primeros tableros del 'senet' comenzaron a ser reemplazadas por jeroglíficos de tres pájaros, una representación del alma, y esta característica persistiría hasta el declive del juego hace unos 2.500 años.

El arqueólogo Walter Crist (izquierda), de la Universidad de Maastricht, en los Países Bajos, cree que un tablero del 'senet', que se halla en las colecciones del Museo Egipcio Rosacruz, en San José, California, posiblemente refleja las primeras etapas del nuevo diseño del juego.

Aunque este tablero de madera no contiene el jeroglífico del alma en el cuadrado 28, el cuadrado 27 ha visto su tradicional marca 'X' reemplazada por el jeroglífico correspondiente al agua. Esto puede representar un lago o un río, en los que se creía que las almas se encontraban en su peligroso viaje a través del Duat.

"Esta reliquia del Museo Egipcio Rosacruz puede ser una de las primeras veces en que este aspecto del viaje hacia el más allá se visualiza en el tablero", dijo el Dr. Crist a Science.

El tablero inusual del juego del Senet en las colecciones del Museo Egipcio Rosacruz, en San José, California.

Él cree que dicho tablero se remonta a alrededor de 3.500 años atrás, y señala que la cuadrícula del mismo tiene un diseño atípico e inverso, en el cual la casilla de inicio está coloca ahora donde anteriormente era el final, y viceversa. Su estilo es exclusivo del período del Imperio Medio, el cual se extiende entre hace unos 4.000 a 3.700 años.

El tablero también ostenta símbolos en los cuadrados 26 y 29, los cuales no son completamente religiosos ni completamente seculares, según afirma el Dr. Crist.

Diferentes diseños del tablero del Senet sus 5.000 años de historia.

La procedencia del tablero del Museo Rosacruz no está clara. Sin embargo, se estima que el artefacto probablemente se comercializó en el mercado de antigüedades en el siglo XIX.
"El cambio de un tablero secular a uno de tipo religioso está en consonancia con la evolución típica de los juegos, con largos períodos de estancamiento y alteraciones repentinas", declaró a Science el arqueólogo Jelmer Eerkens (derecha), de la Universidad de California, en Davis.

"Esto es algo diferente a lo que podemos esperar en otros tipos de tecnologías", agregó, y señaló que los objetos como las cerámicas tienden a evolucionar en sus diseños de forma gradual y constante con el tiempo.
Esto hace que el tablero del Museo Egipcio Rosacruz sea una instantánea en medio de la evolución del juego, lo que es un particularidad especialmente rara.

Los hallazgos completos del estudio fueron publicados en The Journal of Egyptian Archaeology.
Fuente: dailymail.co.uk| 7 de febrero de 2020

Reconstruyen en Cracovia (Polonia) la tumba de un importante miembro de una tribu de la Edad del Hierro

Crédito: M. Podsiadlo.

Una nueva representación en 3D de la tumba de un aristócrata de 2.000 años de antigüedad muestra cómo las tribus que habitaban en la región de Małopolska, Cracovia, en la actual Polonia, enterraban a sus élites.

El kurgán, ricamente equipado, es uno de los doce que hay en Polonia y es conocido como la tumba del príncipe, debido a la evidente alta posición del hombre que descansa en la misma y a la forma monumental del sitio.
El cementerio de Szarbia, cerca de Cracovia, fue descubierto en 1997 por investigadores del Museo Arqueológico de Cracovia, dirigido por Ryszard Naglik, el cual llevó a cabo excavaciones hasta 2001 que dieron como resultado el descubrimiento de dos tumbas, una de hace 2.000 años y otra de hace 5.000 años.

La tumba monumental tenía un diámetro de 17 metros y estaba rodeada por una trinchera que la
separaba del resto de la necrópolis. Crédito: M. Podsiadlo.

El rico suelo de la región en el que se hallaba el Kurgán se cultivaba ya desde tiempos del Neolítico y hasta la Edad del Bronce.

Naglik, quien recientemente publicó los resultados de la investigación en la publicación del Museo de Cracovia, Szarbia, dijo a PAP: “Nos llamó especialmente la atención el extenso kurgán ubicado dentro de la necrópolis más reciente. Un representante de la élite local fue enterrado en él".
La tumba monumental tenía un diámetro de 17 metros y estaba rodeada por una trinchera que la separaba del resto de la necrópolis. Según Naglik, estructuras similares aparecieron en el centro de Europa a principios del período romano (hace más de 2.000 años). Sin embargo, no había muchos de ellos.

El kurgán fue robado y destruido posiblemente solo décadas después de su construcción. Crédito: Ryszard Naglik.

El misterioso príncipe, aunque en realidad no era miembro de la realeza, sino de una élite local, tenía entre 20 y 30 años y ostentaba una gran constitución corporal, según los huesos conservados. A diferencia de otros entierros a su alrededor el cuerpo no fue incinerado.
Desafortunadamente, el kurgán fue robado y destruido posiblemente solo décadas después de su construcción. Solo algunas de sus riquezas han sobrevivido. Entre ellas había unas tijeras, una aguja, un cuchillo, elementos de la ropa del príncipe, como fragmentos de un cinturón con una hebilla de estilo romano (posiblemente podrían haber venido de allí).

Tijeras, cuchillo y aguja de bronce


Componentes del cinturón que portaba el personaje.

Naglik señaló que las tijeras no eran de hierro, como suele ser el caso en tumbas de ese período, sino de bronce.

"El bronce no era mejor que el hierro. No aumentaba su efectividad. Solo indica que el fallecido podía permitirse una herramienta de una aleación más rara y valiosa", explicó. El metal podría indicar que las tijeras se usaban para fines rituales.

Otro hallazgo curioso consistió en una garra de oso posiblemente dejada sobre la piel del mismo y sobre la cual estaba colocado el príncipe.
"Tal hallazgo contribuyó a definir la tumba descubierta: 'el difunto yace sobre la piel del oso'", agregó Naglik.

Fuentes: thefirstnews.com | dziennikpolski24.pl | 17 de enero de 2020