Una profesora de la UC obtiene la más alta distinción investigadora de la UE

Manuel Frochoso, Ángel Pazos, Ana Belén Marín-Arroyo y Juan José San Miguel, en el Paraninfo de la UC. /ROBERTO RUIZ

Ana Belén Marín-Arroyo recibirá dos millones de euros para desarrollar el proyecto Subsilience, que analizará las estrategias de subsistencia de los neandertales y los primeros Homo sapiens

¿En qué medida la desaparición de los neandertales fue provocada por el cambio climático y/o por la expansión de una nueva especie –los Homo sapiens– en Europa? Esta es la pregunta que persigue responder la profesora e investigadora de la Universidad de Cantabria Ana Belén Marín-Arroyo en el proyecto Subsilience, para cuyo desarrollo ha obtenido una de las prestigiosas ayudas que concede el Consejo Europeo de Investigación (ERC), dotada con dos millones de euros.

Se trata de «la distinción más alta» que otorga la Unión Europea a un proyecto de investigación y sólo encuentra un precedente en la UC: en 2014 fue Ignacio Varela, científico del Instituto de Biomedicina y Biotecnología (Ibbtec), el que la recibió, aunque en este caso fue en la categoría para investigadores más jóvenes ,y Marín-Arroyo la ha obtenido en la modalidad de consolidación, destinada a grupos en los que el investigador principal tenga título de doctor con una antigüedad de entre 7 y 12 años. «Hay muy pocas universidades españolas del tamaño de la nuestra que cuente con algún proyecto ERC y menos aún con dos, como es el caso de la UC», destacó ayer el rector Ángel Pazos. «Un reconocimiento así, entre tantos proyectos extraordinariamente competitivos, marcan un antes y un después para la investigadora y para el centro. El sello ERC marca un nivel de excelencia fundamental», añadió.

Gracias a esta ayuda europea, la integrante del Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas de Cantabria (IIIPC) podrá, junto a su grupo de investigación, analizar «el impacto de las oscilaciones climáticas en las poblaciones humanas en un periodo clave para la evolución humana: la transición entre las últimas poblaciones de neandertales y las primeras de nuestra propia especie humana. No sólo es importante conocer por qué se extinguieron los neandertales sino cuál fue el motivo que nos hizo a los homo sapiens sobrevivir».

Yacimientos del sur de Europa

Para ello, Marín-Arroyo explica que implementará «nuevas metodologías de carácter multidisciplinar» aplicadas a los materiales arqueológicos acumulados por ambas especies humanas en una veintena de yacimientos de Serbia, Croacia, Italia y España, datados entre hace 57.000 y 27.000 años. «Es la primera vez que se va abordar un marco temporal y espacial tan amplio», subraya.

La profesora indica que, hasta ahora, todas las hipótesis sobre esta cuestión «se han tratado de una forma muy generalista, pero nosotros lo abordaremos desde un punto de vista más regional, más local, en diferentes entornos».

Así, Subsilience estudiará las estrategias de subsistencia llevadas a cabo por neandertales y los primeros Homo sapiens a partir de los restos de animales consumidos y encontrados en diferentes cuevas y abrigos del sur de Europa, y se analizará su capacidad de resiliencia, no sólo ante las «continuas y rápidas oscilaciones climáticas» que caracterizan aquel periodo, sino también por la presencia de una nueva especie humana compitiendo por unos mismos recursos. Esas estrategias «indicarán qué tipo de explotación se estaba llevando a cabo del medio ambiente y sus recursos», indica la especialista.

Además de la repercusión científica del proyecto, la ayuda también tiene un importante «impacto económico»: dos millones durante los próximos cinco años con los que Marín-Arroyo prevé que se puedan contratar a cinco o seis investigadores que se sumarán a su grupo de trabajo, ahora formado por siete personas.

16 proyectos en España

Subsilience ha sido uno de los 291 proyectos seleccionados por el ERC entre un total de 2.389 solicitudes, de los cuales sólo el 32% están liderados por mujeres. La convocatoria de 2018 ha tenido una tasa de éxito del 12,2% y las ayudas se han distribuido en 21 países de la UE. En España se han elegido 16 iniciativas. «Es una noticia de gran relevancia, por la valía de la investigadora y también como refuerzo del trabajo que realiza la Universidad de Cantabria, el área de Ciencias Sociales y el IIIPC», destacó el rector.

Trayectoria

Ana B. Marín-Arroyo (Burgos, 1977) es profesora titular de Prehistoria de la Universidad de Cantabria, e investigadora del Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas de Cantabria (IIIPC), tras haber sido investigadora Ramón y Cajal y profesora contratada doctor I3. Entre 2016 y 2018 fue Fellow de Leverhulme Centre for Human Evolutionary Studies, Universidad de Cambridge.
Es especialista en el estudio de la estrategia de subsistencia y la reconstrucción de las condiciones climáticas y ambientales en las que vivieron los grupos de cazadores-recolectores durante el Pleistoceno.

Su ámbito de investigación se centra en reconstruir las estrategias de subsistencia de los grupos humanos en Eurasia a través del estudio de restos de macromamíferos desde hace 200.000 a hace 3.000 años. En la actualidad, está centrada en la transición Paleolítico medio a superior, uniendo la subsistencia humana con la reconstrucción paleoclimática y paleomedioambiental a través de estudios de isótopos estables en ungulados consumidos, con el fin último de entender las causas que derivaron en la extinción de los Neandertales.

Ha realizado números estudios de faunas arqueológicas, acumulados por diferentes especies humanas, en yacimientos de Israel, Serbia y España, además de haber pasado varios años en centros como la Universidad de Cambridge, Belgrado, el Museo de Historia Natural de Londres, el MNHN de Paris y recibido también varios premios por su investigación (Premio Jóvenes Excelentes; Premio del Consejo Social a la mejor tesis doctoral en Humanidades; Marie Curie Career Integration Grant (CIG)con la 2ª mejor puntación europea en todas las áreas cientifícas), entre otros.

En el IIIPC ha sido responsable de la puesta en marcha del Laboratorio de Bioarqueología, lo que ayudó a iniciar una nueva línea de investigación dentro del instituto dedicada a la Paleoclimatología y Bioarqueología. Este laboratorio viene a llenar el vacío existente en la Cornisa Cantábrica de colecciones de referencia de carácter bioarqueológico y atrae a estudiantes de Máster y Doctorado interesados en temas arqueofaunísticos, malacológicos, antropológicos y de isótopos estables. Además, Marín-Arroyo ha sido la responsable del establecimiento de los protocolos para el pre-tratamiento de las muestras orgánicas, la extracción del colágeno y su posterior análisis isotópico, tanto en restos humanos como animales, en la UC.

Fuente: eldiariomontanes.es| 25 de enero de 2019

Descubren restos romanos cerca de un famoso restaurante de Lisboa

Esqueleto hallado en un antiguo cementerio romano bajo un restaurante en Lisboa, REUTERS/Pedro Nunes.

Arqueólogos portugueses que realizan una excavación cerca de uno de los restaurantes más icónicos de Lisboa, el Solar dos Presuntos, han descubierto una enorme cementerio romano con esqueletos de 2.000 años de antigüedad y varias piezas.

La necrópolis fue hallada después de que los dueños del restaurante decidieron ampliar el establecimiento, fundado en 1974 en el centro histórico de Lisboa. Para lograr que el proyecto de expansión fuera aprobado, las autoridades de la ciudad requirieron que un equipo de arqueólogos primero revisara el terreno.


“Lo que hallamos fue una sorpresa enorme”, dijo Nuno Neto (izquierda), un arqueólogo de Neoepica, la compañía que llevó adelante la excavación a una profundidad de unos seis metros. “El nivel de conservación es excelente y el grupo de piezas es fabuloso”.

En el cementerio, los arqueólogos hallaron 25 esqueletos, 35 grupos de restos cremados, cerámica y monedas usadas en antiguos rituales de entierro. Todo ha sido trasladado al laboratorio de investigación de Neoepica, que lo transferirá al Municipio de la ciudad.
Los hallazgos se dieron a conocer al público el mes pasado, pero los arqueólogos han estado trabajando en el sitio desde el 2016.


"Estuvimos un mes y medio para hacer los sondeos, y luego en los primeros metros fuimos percibiendo que teníamos en las manos un descubrimiento importante", añade el arqueólogo, que no esconde su satisfacción. "Estamos desenterrando elementos escondidos durante cientos de años - somos unos privilegiados por poder dar voz a estos vestigios", añade Nuno Neto.
El trabajo para expandir el restaurante ya ha comenzado y, pese a las demoras, los dueños ven el descubriendo del cementerio romano como algo positivo y esperan tener parte de los ítem en exhibición en el futuro.


Los ejércitos romanos ocuparon Olissipo, como solía llamarse a Lisboa, alrededor de 200 años antes de Cristo y permaneció bajo control romano durante varios siglos.

Fuentes: cmjornal.pt | lta.reuters.com | reuters.com | 24 de enero de 2019

Se demuestra, por primera vez, que los neandertales cazaban a distancia con pesadas jabalinas

Hace unos años, los hallazgos arqueológicos llevaban a pensar que los neandertales eran menos habilidosos y menos inteligentes que los otros humanos. A fin de cuentas, esta especie, que existió en Eurasia hace 450.000 años, desapareció hace 45.000 años, por motivos que se desconocen. ¿No será que desaparecieron por ser menos capaces que los humanos modernos? Detrás de ellos dejaron un rastro en multitud de herramientas y de yacimientos, pero también muchas huellas en forma de genes: alrededor del 2% del genoma de los humanos modernos proviene de neandertales.

Lanza neandertal hallada en Schöningen (Alemania). Wikipedia.

Un estudio que se acaba de publicar en la revista Scientific Reports, y elaborado por científicos del University College de Londres (Reino Unido), se ha sumado a la lista de artículos que desmienten que los neandertales fueran «primos» inferiores de los humanos modernos. Los investigadores examinaron el rendimiento de réplicas de lanzas hechas por neandertales y encontradas en el yacimiento de Schöningen, Alemania, y que tienen 300.000 años de antigüedad. Gracias al trabajo de lanzadores profesionales, los investigadores han comprobado que, estas lanzas eran jabalinas capaces de dar a un blanco a 20 metros de distancia. Y de producir un impacto letal.

«Este estudio es importante porque se suma a las evidencias que indican que los neandertales eran tecnológicamente versados y que tenían la habilidad de cazar grandes presas por medio de una variedad de estrategias de caza, no solo arriesgados encuentros cuerpo a cuerpo», ha dicho en un comunicado Annemieke Milks (izquierda), investigadora en el University College y directora de la investigación. «Esto contribuye a nuestra nueva visión de los neandertales como nuestros parientes capaces e inteligentes».

El origen de los lanceros

Se sabe que los neandertales dependían en gran medida de la ingesta de animales, pero no está claro cómo la conseguían. Normalmente, se ha considerado que eran meros carroñeros oportunistas, pero cada vez más pruebas han ido mostrando que, al menos hace 120.000 años, eran sofisticados cazadores que solían participar en partidas de caza con lanzas.
Se conoce un pedazo de lanza, con casi 400.000 años de antigüedad, que se halló en Clacton-on-Sea, Inglaterra, (derecha), en 1911. Pero el fragmento está tan deteriorado que no sirvió para deducir cómo fue usado. Sin embargo, a finales de los noventa se descubrieron varias lanzas de madera, junto a miles de huesos de animales, en el yacimiento de Schöningen (Alemania). Sus 300.000 años las convierten en utensilios de neandertales y en las armas más antiguas completamente preservadas.
Estas lanzas tienen un tamaño que va de los 1,82 hasta los 2,25 metros. Su diámetro oscila entre los 2,9 y los 4,7 centímetros y su peso, entre los 760 y los 800 gramos.

Réplicas de armas neandertales

Hasta ahora, se pensaba que eran demasiado pesadas como para poder ser lanzadas a una distancia suficiente como para ser armas a distancia eficaces. Pero los investigadores Annemieke Milks y Matt Pope (izquierda) quisieron comprobarlo, en gran medida porque las jabalinas modernas tienen un peso similar: de 600 a 800 gramos. Y también porque las lanzas de Schöningen tienen un diámetro superior en un extremo, lo que desplaza el centro de gravedad hacia la parte frontal del arma, al igual que ocurre con las jabalinas modernas.
Para comprobar si eran eficaces o no, Milks y Pope reclutaron a Owen O´Donell, estudiante en el University College y arqueólogo experto en fabricar réplicas de utensilios paleolíticos con herramientas de la época. O´Donell fabricó varias de ellas, con madera de pícea noruega, con un peso que fue de los 760 a los 800 gramos.

Réplica de una lanza producida por Owen O'Donnell, ex alumno del Instituto de Arqueología de la UCL.

A continuación, los investigadores reclutaron a seis lanzadores de jabalina, capaces de arrojar las armas a gran velocidad, al igual que habrían hecho los cazadores neandertales, y les pidieron usar las herramientas fabricadas por el arqueólogo.

Eficaces a 20 metros

Los lanzadores pudieron acertar en los objetivos a una distancia de hasta 20 metros con una fuerza considerable, capaz de matar a una presa. Esto duplica el alcance efectivo que se le achacaba estar armas antes de este estudio, lo que demuestra, según los investigadores, que los neandertales eran capaces de cazar a distancia de forma efectiva.

Un investigador lanza una jabalina neandertal contra un fardo de paja. FOTO: ANNEMIEKE MILKS / SCIENTIFIC REPORTS | VÍDEO: EPV

«Nuestro estudio muestra que la caza a distancia formaba parte, probablemente, del repertorio de estrategias de caza de los neandertales, y que esa flexibilidad en su comportamiento refleja fielmente la de nuestra propia especie», comenta Milks. «Esta es otra evidencia que estrecha más la separación entre neandertales y humanos modernos».

Según Matt Pope, estos resultados ayudarán a comprender mejor nuestro propio pasado: «La aparición del armamento –de la tecnología diseñada para matar– es un umbral crítico, pero pobremente conocido, en la evolución humana».
«Siempre hemos dependido de las herramientas y hemos extendido nuestras capacidades a través de la innovación tecnológica, y comprender cómo desarrollamos, por primera vez, la capacidad de matar a distancia es un importante momento en nuestra historia», concluye.

Fuentes: abc.es | eurekalert.org | elpais.com | ucel.ac.uk | 25 de enero de 2019

Una enorme torre encontrada bajo un túmulo en Bulgaria podría ser la tumba del emperador Filipo el Árabe

La tumba de la torre que surgió de debajo del túmulo funerario de estilo tracio antiguo, cerca de Plovdiv, en Bulgaria, tiene al menos 20 metros de altura, y en realidad podría ser incluso más alta, ya que no se ha expuesto enteramente. Fotos: Plovdiv Time.

En julio de 2018 los arqueólogos que trabajan en el túmulo de Maltepe, a las afueras de la ciudad de Plovdiv, encontraron que bajo la tierra del montículo se alzaba una torre cuadrangular cuyas dimensiones calcularon en unos 8 metros de altura, con 7 metros de ancho por lado.
Resultó ser un edificio funerario romano del siglo III d.C. con forma parecida a un zigurat que, en un primer momento, pensaron pudo pertenecer a algún personaje tracio destacado, ya que la región estaba bajo dominio romano desde un par de siglos antes.

El túmulo funerario de Maltepe, de 23 metros de altura, antes de su excavación. Su forma es similar a los miles de otros túmulos funerarios de la antigua Tracia que salpican el paisaje de gran parte del sur y noreste de Bulgaria. Foto Archaeology in Bulgaria.

En las cercanías de la tumba se ha construido el Museo al aire libre de Maltepe con fondos de Noruega y de la EEA, incluso antes de que comenzaran las excavaciones principales. Fotos: Maltepe Open Air Museum

Aunque la tumba todavía no ha sido abierta, con el fin de documentar y estudiar a fondo el edificio y el resto del túmulo, ya han podido constatar que las dimensiones son mucho mayores, con unos 20 metros de anchura por lado por otros tantos de altura. Además, la forma del edificio parece imitar el estilo de las tumbas de Petra y Palmira, algo completamente fuera de lugar en Europa. Esa magnitud les hace pensar que en realidad podemos estar ante la tumba del emperador Filipo el Árabe.

La tumba de la torre que surgió de debajo del túmulo funerario de estilo tracio antiguo, cerca de Plovdiv, Bulgaria. Foto: Plovdiv Time

Kostadin Kisyov, director del Museo de Arqueología de Plovdiv, que lidera los trabajos, asegura que "He trabajado en sitios arqueológicos en Bulgaria y otros países, y mi especialidad son las prácticas de entierro de los tracios y las prácticas de entierro de la Antigüedad en general. El túmulo y la propia tumba son tan grandiosos que no tienen analogías en Europa".

El arqueólogo principal Kostadin Kisyov (centro-izquierda) muestra al primer ministro búlgaro, Boyko Borisov (a su izquierda), la tumba de la torre recién expuesta bajo lo que era el túmulo de Maltepe, así como un foso excavado por cazadores de tesoros que intentaron llegar a la cámara desde el costado.

El túmulo ya fue identificado a finales del siglo XIX por Karel Skorpil, uno de los padres de la arqueología búlgara, quien reparó en sus grandes dimensiones, 140 metros de diámetros por 23 de altura. También hay evidencias de que pudo ser saqueado por cazadores de tesoros, ya que en su cima se encontró una fosa de 20 metros de diámetro por 7 de profundidad. Y en la cercana localidad de Manole se contaban leyendas de que bajo él había una antigua tumba derrumbada, lo que ha resultado ser cierto.
En la periferia del túmulo se encontraron asimismo 15 tumbas medievales de entre los siglos XI y XII, lo que indica que durante la Edad Media los habitantes locales usaron los bordes del túmulo para sus propios entierros.

Se han descubierto grandes bloques de piedra dispersos en el techo de la tumba, lo que lleva a la conclusión de que probablemente contaba con un monumento, posiblemente una estatua de la persona enterrada en el interior. Foto: TV grab from bTV.

El equipo de Kisyov comenzó las excavaciones de arriba a abajo, alentados por estudios geofísicos que indicaban que había una estructura de piedra en el interior. El edificio tiene tres niveles en forma de torre piramidal o zigurat, y en su parte superior había una escultura hoy perdida. Precisamente por esa parte pudieron acceder al interior los saqueadores, aunque se cree que no pudieron alcanzar el nivel más bajo de la cámara funeraria. En los primeros niveles los arqueólogos encontraron 32 fosas rituales con diferentes objetos, como vasijas fragmentadas y abundantes monedas.



Restos de vasijas y monedas romanas descubiertas en los pozos rituales del túmulo funerario de Maltepe. Fotos: 24 chasa

El edificio está formado por 4 cubos con diferentes anchuras de cimentación. El superior tiene 6,6 metros de ancho por lado, mientras que el más bajo alcanza lo 9,6 metros. Buscando similitudes en otras partes del imperio romano, Kisyov encontró torres funerarias parecidas a lo largo de la Vía Latina y la Vía Apia, en Roma, solo que éstas son rectas y solo tienen 4 metros de altura. En ellas se enterraban patricios y senadores romanos. Pero la forma de zigurat de la tumba de Plovdiv es completamente extraña a cualquier otra conocida en la parte europea del Imperio Romano, siendo sus referentes más cercanos las tumbas de Petra y Palmira (todas ellas destruidas recientemente por el EI).

La torre de Elahbel (arriba) y otras tumbas-torre (abajo) en la antigua ciudad semítica de Palmira, Siria, antes de ser voladas por ISIS en 2015. Las tumbas-torre de Palmira se mantenían al aire libre, a diferencia de la recién encontrada en Bulgaria. Fotos: Wikipedia , Wikipedia



Por ello los investigadores opinan que la tumba debe pertenecer al emperador Filipo el Árabe (derecha), o al menos a una persona cercana a él, pero que debía proceder del Medio Oriente, de ahí su singular forma. Filipo gobernó entre los años 244 y 249, y su apodo se debe a que parte de su familia procedía de la península arábiga, habiendo obtenido la ciudadanía romana gracias a su ascendencia paterna.

No obstante, se desconoce si Filipo murió cerca de Verona, en la batalla contra las fuerzas de Decio (izquierda) en el año 249, o en algún momento después ese mismo año asesinado por sus propios soldados en algún otro lugar. Si finalmente resulta que la tumba encontrada es la suya, se podría poner fin a esa incógnita.

De lo que sí están seguros los arqueólogos es que tanto el edificio funerario como el túmulo se construyeron al mismo tiempo. Al contrario de las tumbas-torre de Palmira, que se dejaban a la vista, aquí los constructores se molestaron en ocultarla bajo un enorme montículo, siguiendo la tradición tracia.

Fuentes: labrujulaverde.com | archaeologyinbulgaria.com | 25 de enero de 2019

Encuentran tres nuevas manos grabadas en la cueva de Altamira

Carmen de las Heras en la conferencia sobre la presentación de las manos halladas en Altamira dentro del proyecto 'Handpas'. (EP)

Miembros del equipo de investigación del Museo Altamira y los responsables del proyecto Handpas (manos del pasado) han encontrado tres nuevas manos grabadas en las paredes de la cueva cántabra, que "casi con toda seguridad" se grabaron hace más de 20.000 años.
Estas tres manos, que se suman a las seis que ya se conocían, se encuentran en un estado de conservación que dificulta su visibilidad y fueron identificas durante el transcurso de unas labores de documentación e inventario de las figuras de la cavidad y, más tarde, sometidas a tratamiento digital en el marco de Handpas, un "catálogo 3D de las manos paleolíticas de Europa".
Los resultados de esta colaboración los han dado a conocer la subdirectora del Museo Altamira, Carmen de las Heras, y el responsable del proyecto Handpas, Hipólito Collado, jefe de la sección de Arqueología de la Junta de Extremadura, ambos acompañados de la directora del Museo, Pilar Fatás.

Ocho de las manos pintadas se encuentran en el techo de la Sala de Polícromos, entre las representaciones de caballos, y la otra está en la Galería Final, a más de 200 metros de la entrada, con la particularidad de que, además de ser la única grabada en negativo (el resto siguen la técnica en positivo), parece ser de un niño. El hecho de que una de estas manos correspondiera a un niño es, según De las Heras, algo "bastante excepcional" porque hay muy pocas de este tamaño. Además, es en positivo y se hizo en un color negro intenso.

La directora del Museo Nacional y Centro de Investigación de Altamira, Pilar Fatás (d) junto a la subdirectora, Carmen de la Heras (c) y el responsable del proyecto Handpas, Hipólito Collado Giraldo (i).EFE

Solo una de las manos se hizo mediante la técnica en negativo, que es en la que la mano se apoya en el techo y el pigmento se sopla a su alrededor con un aerógrafo o con el soplido del artista; mientras que con la técnica en positivo se impregna la mano de pigmento y se aprieta contra la roca para dejar la huella nítida. Las manos en negativo de la Sala de Polícromos son de un color indefinido hoy en día, dado su estado de conservación, aunque algunas son de un tono violáceo oscuro negruzco y otras de un rojo más o menos intenso. Aunque no se sabe con certeza, De las Heras cree que las manos están superpuestas a los caballos.

En su opinión, la importancia de este hallazgo no es tanto el número de figuras encontradas, sino que, al tener una antigüedad mínima de hace 20.000 años, muestran cómo era el techo de Polícromos antes de las famosas pinturas de los bisontes. "Treinta y dos años después de la última publicación sobre el Arte de Altamira, la cueva sigue deparando hallazgos relevantes que no dejan de sorprendernos y de mostrar su grandeza", ha agregado De las Heras.

Las manos pintadas ya conocidas en la cueva de Altamira, donde se han encontrado tres más. GETTY IMAGES.

Por su parte, Collado ha repasado algunos de los datos obtenidos en el estudio, como que cerca del 70% de la población prehistórica era diestra, según permite adivinar la lateralidad de sus improntas. En la segunda parte del acto, celebrado en el Museo Altamira, se ha proyectado el documental Handpas, Manos del Pasado, un vídeo que ya ha sido premiado en varios festivales internacionales de cine científico y con el que se trata de dar respuesta, a través de entrevistas y de una forma didáctica, a muchos de los interrogantes de las manos en el arte rupestre.
Además, preguntado por la polémica que suscita el hecho de que unas huellas de la cueva de Maltravieso (Cáceres), datadas hace cerca de 67.000 años y consideradas las más antiguas del mundo, puedan estar hechas por neandertales, Collado ha respondido que el que esté en contra que lo demuestre con datos.


Fuentes: el pais.com | m.noticiasdenavarra.com | efe.com | 26 de enero de 2019

Klasies River Mouth: en los confines de África

Entrada a las cuevas de Klasies River. Fuente: Google

Sudáfrica atesora un conjunto extraordinario de yacimientos arqueológicos y paleontológicos, en los que puede estudiarse una gran parte de la genealogía humana. La gran cantidad de cuevas existentes en Sudáfrica ha preservado las evidencias de diferentes épocas. Este país presume de ser cuna de la humanidad. Sin duda, Sudáfrica es un paraíso para quienes se interesan por el estudio evolución humana.

En la costa más septentrional de África pueden encontrarse enormes bocas de cuevas esculpidas por el mar, en cuyo interior se conservan sedimentos del Pleistoceno. Una de esas cavidades, Klasies River Mouth (provincia de Cape), contiene evidencias arqueológicas y paleontológicas, que cubren un rango temporal de entre 120.000 y 75.000 años. Los ascensos y descensos del nivel del mar han alterado los yacimientos y una buena parte de los testimonios de la vida de nuestros ancestros se la llevaron las corrientes marinas. Klasies River Mouth está formado en realidad por siete yacimientos, cinco de los cuales son contiguos (1, 1A, 1B, 1C y 2), mientras que otros dos yacimientos (1D y 5) están separados del conjunto principal por 200 metros y dos kilómetros, respectivamente. Las piezas recuperadas sin rigor científico por Paul Haslem y Ludwig Abel alertaron a los especialistas de la posible riqueza arqueológica de Klasies River Mouth. Las excavaciones sistemáticas comenzaron en 1960 y se han llevado a cabo de manera intermitente desde entonces bajo la dirección de diferentes especialistas.

Las herramientas de piedra más antiguas de estos yacimientos corresponden a la tecnología que los expertos han denominado de manera genérica “Middle Stone Age”. A grandes rasgos, esta tecnología se correspondería con el musteriense en Europa. El Middle Stone Age parece tener raíces profundas en África y se considera un paso adelante con respecto a la tradición Achelense de picos, bifaces y hendedores. Las herramientas de la Middle Stone Age se encuentran asociadas a fósiles que los especialistas identifican con el origen de nuestra especie, así como con restos más recientes, indudablemente pertenecientes a Homo sapiens. Es el caso de Klasies River Mouth.

Algunos de los restos humanos hallados en el yacimiento de las cuevas de Klasies River. Fuente: Google

Estos yacimientos testimonian un comportamiento moderno de quienes habitaron las cuevas, al parecer de manera estacional. Hay evidencias del consumo de peces y mariscos, recolección de plantas y de caza de animales de mediano tamaño (focas, pingüinos, ciertas aves y antílopes). Por supuesto, aquellos humanos no solo conocían el fuego, sino que lo dominaban perfectamente. También hay evidencia de canibalismo, a juzgar por algunos restos humanos quemados y mezclados con los otros animales.

La morfología de los restos humanos es claramente moderna y no hay dudas de su pertenencia a nuestra especie. Hace 120.000 años ya nos estábamos marchando de África por el estrecho de Bab el-Mandeb. Pero al mismo tiempo nuestra especie evolucionaba en distintas regiones de África. Hoy en día, los africanos son descendientes de aquellas poblaciones del Pleistoceno, que no se mezclaron con los pobladores de Eurasia: Neandertales, Denisovanos y tal vez otros grupos humanos, como expliqué en el post anterior. Si buscamos la mayor pureza genética de nuestra especie, la encontraremos en las poblaciones africanas actuales. Los antiguos habitantes de las cuevas de Klasies River Mouth probablemente dieron origen a los grupos humanos que todavía sobreviven con un estilo de vida ligado a la naturaleza, como los bosquimanos.

Fuente: quo.es | 24 de enero de 2019