Hallan grabados prehistóricos de animales por primera vez en Escocia

Tallas prehistóricas que muestran ciervos rojos adultos halladas en cementerio escocés. Crédito: Santiago Arribas Pena/HES.

Un arqueólogo ha encontrado un conjunto de tallas prehistóricas que representan a ciervos rojos adultos en una tumba de Escocia, y la opinión de los expertos de Historic Environment Scotland apunta a que son los más antiguas de su tipo en la región.

Además, constituyen los primeros ejemplos claros de tallas de ciervos rojos desde en el Neolítico hasta la Edad del Bronce temprana no solo en Escocia, sino en todo el Reino Unido.

Un hallazgo inesperado en el cementerio de Dunchraigaig Cairn

El hallazgo inesperado tuvo lugar en Kilmartin Glen, en Argyll, un área que aloja la concentración más importante de restos neolíticos y de la Edad del Bronce en Escocia continental.

El arqueólogo Hamish Fenton (izquierda), de Oxfordshire, fue quien descubrió las tallas de ciervos rojos prehistórica mientras se encontraba explorando el túmulo de Dunchraigaig, un sitio funerario que data de la Edad del Bronce.

Fenton decidió explorar una cisterna que se encontraba al costado del túmulo funerario, por lo que introdujo su cuerpo iluminando su camino con una antorcha, al vivo estilo de Indiana Jones. En su trayecto, se topó con las delicadas tallas en la tapa de la cámara en la que había ingresado y quedó fascinado por sus particularidades.

“Mientras iluminaba con la antorcha, noté un patrón en la parte inferior de la losa del techo que no parecían ser marcas naturales en la roca”, dijo. “Pude ver que estaba mirando un ciervo al revés, y mientras seguía mirando alrededor, aparecieron más animales en la roca”.

Las tallas se remontan al Neolítico o a la Edad del Bronce Temprano y representan dos ciervos rojos machos con astas completamente desarrolladas, mientras que otras tallas sugieren ciervos más jóvenes, según 'Historic Environment Scotland (HES)', que confirmó el descubrimiento.

Las tallas de ciervos rojos halladas en Escocia datan de entre Neolítico y la Edad de Bronce temprana

Las tallas muestran dos ciervos rojos machos con cuernos adultos, así como también otros ciervos que parecen más jóvenes. Las estimaciones sugieren que datan de hace 4.000 y 5.000 años, por lo que corresponderían a un período entre el Neolítico y la Edad de Bronce temprana. Además, apuntan a que son las primeras halladas junto a marcas prehistóricas de copa y anillo en Reino Unido.

La Dra. Tertia Barnett, Investigadora Principal del Proyecto de Arte Rupestre de Escocia, sostiene un gráfico que muestra tallas prehistóricas encontradas en Kilmartin Glen en Argyll, Escocia.

Otro aspecto que llamó su atención fue el nivel de detalle con la que se fueron plasmados los ciervos en la roca. Para la Dra. Tertia Barnett, investigadora principal del proyecto, "este estilo figurativo desafía la vieja suposición de que el arte rupestre británico de esta época exhibía mayoritariamente patrones geométricos".

“Si bien hay algunas tallas prehistóricas de ciervos en el Reino Unido, las otras creadas a principios de la Edad del Bronce son muy esquemáticas”, explicó la experta. “Es notable que estas tallas en el túmulo de Dunchraigaig muestren un detalle anatómico tan grande, y no hay duda sobre qué especies animales representan”.

“Las comunidades locales grababan animales además de los anillos concéntricos, lo que va en la línea de lo que sabemos de otras sociedades neolíticas o de la Edad de Bronce, particularmente en Escandinavia e Iberia", concluye Barnett.

Joana Valdez-Tullett, asistente de investigación del Proyecto de Arte Rupestre de Escocia, observa las tallas

El Historic Environment Scotland dijo que ya han realizado algunos escaneos en 3D; también han construido modelos digitales de las tallas de ciervos rojos del cementerio de Escocia. Con ello, esperan observar con mayor detalle el acabado de la obra y estudiarlas para comprender mejor tanto las técnicas empleadas como su función dentro del sitio.

Fuentes: tekcrispy.com | dailymal.com.uk | bbc.com | 31 de mayo de 2021

Descubren la gran piscina del frigidarium de la Legio VI Victrix (León)

Recreación de la piscina del 'frigidarium' de las termas de la Legio VI. Abajo, parte de un labrum de las termas. MORILLO CERDÁN

Se sabía que estaba, pero no cómo era ni su disposición. Los vestigios de la Legio VI se perdieron en gran parte por la ocupación de la Legio VII Gemina, pero los arqueólogos no han dejado de buscar los enclaves en los que aquellos primeros emisarios imperiales trazaron la efigie de lo que hoy es León.

Uno de ellos es el catedrático de arqueología de la Universidad Complutense de Madrid Ángel Morillo Cerdán (izquierda) que, junto a Victorino García Marcos y Rosalía Durán, ha perfilado las diferentes dependencias de las termas del primer campamento.

"Ya sabíamos que las termas de la Legio VII eran más grandes que la Catedral. Había salas calefactadas de 30 metros de longitud con un hipocausto de un metro de altura, pero no conocíamos la disposición de las termas anteriores. Los primeros restos surgieron tras las labores de restauración de la Catedral a mediados del siglo XIX. En 1996 las obras en el Sector de Puerta Obispo pusieron al descubierto, junto a la 'porta principalis sinistra' del campamento de la Legio VII Gemina, la esquina de la gran manzana ocupada por el edificio termal. Dichas evidencias se encontraban muy arrasadas debido a la subida de la cota de la topografía original del campamento en este sector, que presentaba un fuerte declive hacia el este, lo que impidió proseguir la excavación hasta delimitar las estancias".

La primera evidencia

Morillo Cerdán, catedrático de arqueología de la Complutense, ha hallado la primera evidencia de las termas de la Legio VI, en concreto la gran piscina del frigidarium (sala fría), primera etapa del circuito propio de los ‘spas’ romanos. El análisis arqueoarquitectónico ha permitido conocer la secuencia constructiva completa del mismo, sin duda vinculado a las termas legionarias que se extendían bajo la gran manzana que después ocuparía la Catedral. Este espacio estuvo ocupado en un primer momento por la gran piscina de un frigidarium, construida en opus caementicium y pavimentada en opus spicatum, inscrita en una gran estancia rectangular que se pierde bajo la Catedral. Algunos argumentos permiten proponer su antecedencia a la construcción de la gran puerta monumental, por lo que debería corresponder al campamento julioclaudio ocupado por la Legio VI Victrix entre 15 y 68 d. C.

Termas romanas que se esconden bajo la Catedral de León.

En una fase posterior, la piscina fue amortizada y reutilizada, conformando la infraestructura de unas letrinas cuadrangulares, pavimentadas con losas de piedra y dotadas de una antecámara con un posible labrum y un zócalo con placas marmóreas importadas de Estremoz (Portugal). Aunque se han perdido por completo los asientos, es posible determinar que presentaban bancos corridos en dos o tres de sus lados, posiblemente de madera. Esta transformación debió tener lugar en el momento en que se construye la porta principalis sinistra, obra monumental erigida durante el último tercio del s. I d. C.

La estancia destinada a las letrinas de las termas permaneció en uso hasta la segunda o tercera décadas del siglo III d. C. En ese momento el espacio sufre una nueva adaptación en la que se emplea abundante ladrillo reutilizado, que amortiza completamente las letrinas. De hecho, durante las catas aparecieron monedas depositadas en el fondo del canal de desagüe de las letrinas, que marcan la historia de este edificio desde época flavia hasta mediados del siglo III, época en la que desaparecen esta infraestructura sanitaria. El posicionamiento topográfico de los restos constructivos permite avanzar interesantes datos de cara a la reconstrucción del urbanismo y los cambios en la topografía de este sector del campamento romano de las legiones VI Victrix y VII Gemina.

Restos de la 'Porta Principalis Sinistra' del campamento romano de la ciudad de León, conservados en la Cripta Arqueológica de Puerta Obispo. Wikipedia.

La ciudad creció un metro

De hecho, Ángel Morillo destaca que hay zonas exteriores al campamento que se alzaron alrededor de seis metros en menos de un siglo, mientras en su interior el nivel de paso subió un metro, extremos que dan una idea de lo que supuso la transformación de León entre la época augustea y la llegada de la Legio VII en tiempos del el emperador Galba.

Fuente: diariodeleon.es | 24 de mayo de 2021

Nerón: ¿gobernante inexperto, pirómano matricida o víctima de la propaganda?

El British Museum acoge una exposición que analiza, más allá del mito, el ascenso y caída del poder del emperador romano, tiránico para algunos y admirado por otros, Nerón.

Si hay algo casi tan antiguo como el Imperio Romano es el uso de la propaganda. Lo que ahora llamamos fake news, entendiéndolas como información falsa que algunos poderosos lanzan para exaltar su figura y damnificar a otros, ya lo inventó Augusto: entre los años 12 y 14 d.C., este emperador redactó una obra (Res Gestae Divi Augusti) para ensalzarse a sí mismo. En ella relata todos los hechos significativos que acontecieron durante su reinado, pero ignoraba los negativos. Una información por tanto, y aunque admirable, incompleta.

Una empleada del Museo Británico posa junto a una cabeza de bronce del emperador romano Nerón que data del año 54-61 y que fue hallada en el río Alde en Rendham en Suffolk, en el este de Inglaterra, durante una presentación a la prensa de la exposición "Nerón: el hombre detrás del mito" el lunes 24 de mayo de 2021 en Londres. (Matt Dunham/AP)

Y si en época romana esta propaganda también se difundía a través de grandes construcciones o esculturas, ahora se trata de exponer lo valioso de un gobierno mediante medios de comunicación o redes sociales. Las vías son diferentes, pero la esencia es la misma.

Durante la época del imperio Romano cada emperador hacía alarde de sus conquistas para conseguir la admiración del pueblo. No obstante, al igual que utilizaban la propaganda de manera positiva para sí mismos, también ésta, cuando era emitida por sus enemigos, les afectaba.

Lo que sabemos de los romanos se limita a los históricos y numerosos documentos que se escribieron en aquella época. Evidentemente, no había ni cámaras ni micrófonos que guardaran una perspectiva de los hechos de primera mano. Tan solo conocemos lo que ocurrió fiándonos de las palabras que lo narran. Por tanto, y según expresa Francesca Bologna comisaria de la exposición “Nerón: el hombre detrás del mito” que recoge el British Museum hasta el 24 de octubre.

“Nerón fue descrito como un tirano loco por los historiadores antiguos pertenecientes a la élite senatorial, pero debemos tener en cuenta que estaban lejos de ser imparciales. No es sorprendente que los miembros de este grupo, al escribir sobre Nerón, estuvieran interesados en representarlo de la peor manera posible”, dice Bologna.

"Nuestro objetivo aquí es mostrar, pues, que esta imagen, por muy popular que sea, en realidad se basa en relatos muy, muy sesgados y, por lo tanto, debemos desafiarla”, agrega.

“En este sentido, la historia de Nerón trata de cómo debemos abordar la información, de cómo debemos abordar siempre nuestras fuentes de manera crítica. Esto es relevante para Nerón, es relevante para los historiadores y los arqueólogos, y es relevante para la gente común que vive su vida cotidiana”.

Una empleada del Museo Británico posa junto a un busto de mármol del emperador romano Nerón aproximadamente del año 54-59 d.C. de Olbia, en la isla de Cerdeña en Italia. AP Foto/Matt Dunham.

Nerón, como otros emperadores anteriores y posteriores a él, a menudo chocaba con el Senado, grupo que, no obstante, apoyó junto al ejército su ascenso al poder cuando tan solo tenía 16 años. De la misma manera que Calígula fue descrito como un déspota que se consideraba a sí mismo un dios, Caracalla hizo asesinar a su hermano para poder gobernar solo y Cómodo luchó como gladiador en la arena imaginándose a sí mismo como un nuevo Hércules.

Por su parte, Nerón, según dice la tradición, se entretenía tocando la lira mientras Roma se sumía en un gran incendio que duró 9 días. Cada emperador romano tiene su historia, su mito, sus conquistas y su punto de crueldad. No obstante, Bologna defiende que todo pudo ser una cuestión de propaganda: “La desaparición de Nerón -se suicidó a los 30 años- trajo adelante un período de caos y guerra civil, que terminó solo cuando una nueva dinastía tomó el poder, los Flavios. Todos los autores que escribieron bajo ellos tenían interés en legitimar a la nueva familia gobernante, retratando al último de la anterior dinastía de la peor manera posible, convirtiendo la historia en propaganda”.

Empleadas del Museo Británico posan en un área dedicada a la historia del gran palacio del emperador romano Nerón, llamado 'Domus Aurea' (Casa Dorada). AP Foto/Matt Dunham.

Artículos de vajilla se exhiben en un área dedicada a la historia del gran palacio del emperador romano Nerón, llamado Domus Aurea (Casa Dorada). AP Foto/Matt Dunham.

Emperador romano entre el 54 d.C. y el 68 d.C., Nerón Claudio César Augusto Germánico fue el último gobernante de la dinastía Julio-Claudia. Hijo de Cneo Domicio Ahenobarbo y Agripina la Joven, ambos nietos de Augusto, su padre murió cuando él tan solo tenía 3 años, y su madre se casó con el emperador Claudio. Hasta hoy, su figura se ha visto descrita como un asesino y un tirano: mató a su madre, a su hermano adoptivo y a su esposa, ordenó castrar a su liberto para convertirlo en su difunta mujer y participó en infinidad de sádicos y extraños juegos sexuales, así como vio arder Roma desde su castillo. No obstante, lo cierto es que, según aseguran estudiosos más modernos, Nerón participó en los trabajos de extinción de las llamas, implantando regulaciones para evitar nuevos incendios y proporcionando refugio a las personas que se quedaron sin hogar.

Estatuas de miembros de la dinastía julio-claudia, desde el primer emperador romano Augusto hasta a Nerón, el último en la línea. AP Foto/Matt Dunham.

Asimismo, explica Bologna que "bajó los impuestos, construyó magníficos baños públicos y, mediante la construcción de un gran mercado cubierto y la mejora de las conexiones entre Roma y su puerto, se aseguró de que su gente tuviera acceso a alimentos”.

El emperador, terrorífico o talentoso, "proporcionó a su gente lugares de entretenimiento, como un anfiteatro de madera ahora perdido”. Con esto, "Nerón tan solo fue uno más de los muchos emperadores que se describieron como tiránicos, despiadados y aspirantes a ser considerados dioses, acusaciones que fueron hechas por senadores insatisfechos para difamar a sus enemigos políticos”. Y añade la experta la pregunta clave: “¿Cómo juzgamos entonces? ¿Cómo podemos distinguir los hechos de la ficción, ya que lo que sabemos de estos emperadores proviene de fuentes que son todo menos imparciales?

Fuentes: larazón.es | chicagotribune. com | 27 de mayo de 2021

Secuencian el genoma completo del cráneo de una mujer de hace 35.000 hallado en el sur de Rumanía

El cráneo de Pestera Muierii 1, cuyo genoma completo ahora se ha secuenciado con éxito. Crédito: Mattias Jakobsson.

Por primera vez, un equipo de investigadores de la Universidad de Uppsala (Suecia) ha secuenciado con éxito todo el genoma del cráneo de , una mujer que vivió en la Rumanía actual hace 35.000 años. Su alta diversidad genética muestra que la migración fuera de África no significó un gran cuello de botella genético en el desarrollo humano, sino que la pérdida de diversidad genética ocurrió durante y después del Último Máximo Glacial (hace unos 25.000 años). Tébgase en cuenta que las personas que viven fuera de África tienen hoy en día menos variación genética que las que viven en África.

Este es el hallazgo del nuevo estudio dirigido por Mattias Jakobsson (izquierda) publicado en Current Biology .

"Se parece un poco más a los europeos de hoy en día que a los individuos de Europa 5.000 años antes, pero la diferencia es mucho menor de lo que pensábamos. Podemos ver que no es un antepasado directo de los europeos modernos, pero sí es un antecesor de los cazadores-recolectores que vivieron en Europa hasta el final de la última Edad de Hielo", dice Mattias Jakobsson, profesor del Departamento de Biología Organismal y director del estudio.

Se han secuenciado muy pocos genomas completos de más de 30.000 años, lo que generalmente limita las posibles inferencias de estos datos. Hasta la fecha, se han recuperado genomas de cobertur de seres humanos anatómicamente moderno (AMH), con una antigüedad unos 35.000 a años en cuatro sitios y ocho individuos. Ahora que el equipo de investigación puede leer el genoma completo de Peştera Muierii 1, y se pueden ver similitudes con los humanos modernos en Europa y al mismo tiempo comprobar que ella no es un ancestro directo. En estudios anteriores, otros investigadores observaron que la forma de su cráneo tiene similitudes tanto con los humanos modernos como con los neandertales.

Por esta razón, asumieron que la mujer tenía una fracción mayor de ascendencia neandertal que otros fósiles más o menos del mismo periodo temporal, lo que la hacía destacar por encima de otros ejemplares. Sin embargo, el análisis genético llevado a cabo muestra que tiene el mismo nivel bajo de ADN neandertal (∼3,1%) que la mayoría de las personas que vivieron en su misma época. En comparación con los restos de algunas personas que vivieron 5.000 años antes, esto es, hace unos 40.000 años, tal como Peştera cu Oase 1, tenía solo la mitad de ascendencia neandertal.

El análisis también reveló que la mujer de Peştera Muierii tenía predisposición tanto a la piel y el cabello oscuros como a los ojos oscuros. Sus genes revelaron, además, que no parece que padecíera ninguna enfermedad hereditaria.

Mapa de individuos seleccionados en el estudio.

La propagación de los humanos modernos fuera de África hace unos 80.000 años es un período importante en la historia de la humanidad, y a menudo se describe como habiendo experimentado un cuello de botella genético. Poblaciones humanas se trasladaron de África a Asia y Europa, y los efectos de estas migraciones se pueden ver incluso hoy en día, pues la diversidad genética era menor entre las gentes que salieron de África que los se quedaron en el continente africano. Ahora bien, el hecho de que Peştera Muierii 1 tenga una alta diversidad genética implica que la mayor pérdida de diversidad genética ocurrió durante la última Edad de Hielo (la cual terminó hace unos 10.000 años) en lugar de haber ocurrido durante la migración realiza fuera de África.

"Esto es importante, ya que nos enseña más sobre la historia de las poblaciones tempranas de Europa. Peştera Muierii 1 tiene mucha más diversidad genética de la esperada para Europa en el momento en que vivió, lo que demuestra que la pérdida variación genética que aconteció fuera de África fue considerable hasta la última fase de la Edad de Hielo".

Una de las investigadoras del estudio, Emma Svensson, toma muestras del cráneo de Peştera Muierii 1. Foto: Mattias Jakobsson.

Los investigadores pudieron rastear dicha variación genética en Europa durante los últimos 35.000 años y observar que se experimentó una clara disminución de la misma durante la última Edad de Hielo. Esta reducción de la diversidad genética se ha relacionado anteriormente con variantes patógenas en los genomas que son más comunes entre las poblaciones fuera de África, pero tal hipótesis está todavía en disputa.

"El acceso a la genómica médica avanzada nos ha permitido estudiar estos restos antiguos e incluso poder buscar enfermedades genéticas. Para nuestra sorpresa, no hemos encontrado ninguna diferencia durante los últimos 35.000 años, a pesar de que algunos individuos vivos durante la Edad del Hielo ostentaban una baja diversidad genética".

Hemos podido acceder a todo lo que este fósil no puede ofrecer. Peştera Muierii 1 es un especímen clave desde la perspectiva de la historia cultural, y, ciertamente, seguirá siendo interesante para muchos investigadores de otras áreas, di bien, desde una perspectiva genética, todos los datos ya están ahora disponibles".

Fuentes: Universidad de Uppsala | archaeologynewsnetwork.blogspot.com | sputniknews.com | 20 de mayo de 2021

La verdad sobre la primera gran masacre prehistórica en Jebel Sahaba, en el valle del Nilo

Fosa con dos individuos en el cementerio de Jebel Sahaba. Los lápices indican la posición de los artefactos líticos asociados - Archivo Wendorf del Museo Británico

La necrópolis de Jebel Sahaba, al norte de Sudán, donde hace unos 13.400 años se inhumó a más de medio centenar de personas, fue descubierta a mediados de la década de 1960. El sitio sorprendió a los arqueólogos por dos hitos principales: se trataba de uno de los primeros cementerios documentados en el mundo, datado a finales del Pleistoceno superior; y por las marcas de impactos que presentaba la mayoría de los huesos de aquellos hombres, mujeres y niños. El yacimiento está considerado como uno de los primeros testimonios de violencia interpersonal de la historia.

Hasta ahora se creía que Jebel Sahaba reflejaba el trágico resultado de un simple enfrentamiento bélico, una sola batalla prehistórica —o masacre— entre dos grupos de cazadores-recolectores que habitaban la zona del valle del Nilo con un único enterramiento masivo. Sin embargo, un nuevo estudio científico, valiéndose de los últimos métodos antropológicos y forenses, pone en duda esta interpretación. La guerra entre estas comunidades, seguramente por controlar los recursos de la zona en un periodo de cambio climático, consistió en realidad en pequeñas y esporádicas escaramuzas, razias o emboscadas.

Ubicación del cementerio Jebel Sahaba, Sitio 117, en el Valle del Nilo y mapa del área excavada y los entierros. Puntos rojos: individuos que presentan signos de violencia y / o lesiones traumáticas; puntos naranjas: lesiones recientemente identificadas en estos últimos individuos; puntos verdes: individuos recientemente identificados con signos de violencia y / o lesiones traumáticas; puntos grandes: individuos discutidos. Imagen cortesía del Archivo Wendorf del Museo Británico, modificado con Adobe Illustrator CS6

Los especialistas del Centro Nacional para la Investigación Científica de Francia y las universidades de Burdeos y Toulouse han reanalizado los restos de 61 individuos hallados en la necrópolis y que se conservan en el British Museum. Los resultados se acaban de publicar en la revista Scientific Reports. Las nuevas técnicas microscópicas han revelado 106 lesiones previamente no identificadas, entre las que se distinguen heridas por proyectiles de flechas o lanzas de piedra —las más numerosas, con 52—, traumatismos o huellas relacionadas con la decadencia natural.

De todos los esqueletos examinados, 41 registraban al menos una evidencia de herida cicatrizada o sin cerrar; y de este grupo, el 92% había sido lastimado con objetos arrojadizos o mediante golpes. "La presencia de lesiones previas al momento de la muerte de los individuos y otras que pudieron ser causa de la misma, según apuntan los investigadores, apoya firmemente la hipótesis de esporádicos y periódicos episodios de violencia interpersonal entre estas comunidades del Valle del Nilo. Además, la frecuencia de los cortes curados "confirma que esos sucesos no fueron siempre letales y pudieron ocurrir varias veces durante la vida de un individuo".

Ubicación e imágenes de las lesiones óseas observadas en el esqueleto denominado JS 14.

Otra de las conclusiones más relevantes de los científicos es la ausencia de un patrón de violencia: hombres, mujeres y niños fueron atacados de forma indiscriminada. La guerra hace 13.400 años era, en esencia, la misma que se refinaría a lo largo de la historia, sin capacidad para distinguir entre edades o sexos. Uno de los casos que mejor ilustra la complejidad de Jebel Sahaba es un doble enterramiento de dos infantes de cuatro y cinco años, ambos con perforaciones en el cráneo y en los huesos de la cadera o el fémur provocadas por artefactos líticos.

El cambio climático

Mediante el reanálisis de todo el material arqueológico conservado, los investigadores han podido confirmar el uso de estos objetos, compuestos por varias láminas afiladas de piedra, como armas arrojadizas. Algunos, de hecho, presentan variaciones en la orientación del filo, lo que sugiere que estaban moldeados para causar el mayor daño y pérdida de sangre del enemigo.

¿Se puede entonces hablar de guerra prehistórica? "Teniendo en cuenta las heridas, la dirección de los proyectiles también revela un número similar de impactos en el cuerpo anteriores y posteriores que no respalda la hipótesis de batallas cuerpo a cuerpo", valoran los científicos. Se decantan, por lo tanto, en calificar esta historia como "pequeños episodios de violencia periódica en forma de asaltos o emboscadas contra dicha comunidad, unos lances que tuvieron que registrarse en un corto periodo de tiempo dada la homogeneidad del lugar y las prácticas de entierro".

Marcas de impacto de proyectil en uno de los individuos de la necrópolis. Isabelle Crevecoeur and colleagues.

La investigación descarta, en cualquier caso, que lo que sucedió en Jebel Sahaba se pueda encuadrar en un incidente de violencia doméstica; y también que se trate de una fosa común de una única batalla al comprobar la variación en las dataciones de algunos de los cuerpos. "Este análisis, que modifica la historia de la violencia en la Prehistoria, invita a reconsiderar otros yacimientos arqueológicos de la misma época", añaden.

Los autores del estudio, encabezado por la paleoantropóloga Isabelle Crevecoeur (izquierda), apuntan que esta escalada de tensión en el Valle del Nilo a finales del Pleistoceno superior (entre hace 126.000 y 11.700 años) puedo haber sido causada por el cambio climático y las peleas por los recursos para sobrevivir: "La intensa rivalidad territorial entre los grupos de cazadores-recolectores de la región es probable que tuviese lugar cuando se vieron forzados a adaptarse a los drásticos cambios medioambientales registrados al final del Último Máximo Glacial o a comienzos del Periodo húmedo africano".

Fuente: elespañol.com | 28 de mayo de 2021

Hallan cometas del desierto de la Edad de Piedra en el sur de África

Fotografías ortográficas aéreas de los emplazamientos de cometas en Keimoes con las estructuras individuales resaltadas en negro.

Un equipo de investigadores del Instituto de Paleo-Investigación de la Universidad de Johannesburgo ha encontrado múltiples casos de cometas del desierto en una parte de Sudáfrica. En su artículo publicado en la revista Archaeological and Anthropological Sciences, el grupo describe su estudio de antiguas "pistas" de caza construidas para acorralar animales salvajes.

Investigaciones anteriores han demostrado que los antiguos cazadores-recolectores que vivieron durante el Neolítico y la Edad del Bronce construyeron lo que se ha llegado a describir como cometas del desierto, esto es, corrales destinados a facilitar la captura de animales salvajes. Las cometas se hicieron apilando piedras para formar dos pares de muros uno frente al otro, y que se unen entre sí en un punto o vértice formando una trampa. Las paredes, pues, al converger confinan en una especie de corral a los animales que se desea capturar.

Representación esquemática de un embudo de cometa y las unidades morfométricas medidas en el
estudio publicado.

Un estudio previo de cometas en el Medio Oriente, en lugares como Israel, Jordania y Siria, ha demostrado que los muros suelen tener casi un metro de ancho y hasta un metro y medio de alto. La función de las cometas implica perseguir a los animales dentro de las mismas hasta que llegan al corral de confinamiento en el vértice. Luego, a los animales pueden se les puede dar muerte con armas básicas. Las cometas se usaban paracapturar cerdos, ciervos y bueyes, etc. En este nuevo esfuerzo, los investigadores han encontrado varias de estas cometas cerca del pueblo de Keimoes, en Sudáfrica.

Estos dispositivos de caza se han encontrado en múltiples ubicaciones al estudiar el paisaje sudafricano mediante la utilización de un equipo LiDAR desde un avión durante los años 2016 a 2019. Los investigadores también encontraron que sus antiguos constructores a veces habían realizado varias cometas cerca unas de otras, cada una con el objetivo de capturar diferentes animales.

1a: Mapa del bioma del sur de África con regímenes de lluvia (debajo de la línea punteada = lluvia de invierno, entre las líneas punteadas y punteadas = lluvia durante todo el año, encima de la línea punteada = lluvia de verano), localidades de muros de piedra de la Edad de Piedra (puntos negros) y la ubicación de Keimoes, el valle del río Seekoei y Gi Pan. 1b: El sitio y el paisaje de Keimoes 3 desde el nivel de los ojos mirando hacia el noreste. 1c: Ubicación de los sitios de las cometas de Keimoes en relación con el Gariep (río Orange). Crédito: Ciencias Arqueológicas y Antropológicas (2021). DOI: 10.1007 / s12520-021-01328-x

Su descubrimiento marca el uso más meridional de cometas en el África subsahariana. Una inspección minuciosa de las mismas muestra que habían sido construidas mucho más recientemente que las cometas encontradas en el Medio Oriente, quizás tan recientemente como hace 2000 años. Los investigadores también sugieren que la estructura de tales cometas y las formas en que fueron utilizadas por los pueblos antiguos demuestran una comprensión clara del comportamiento animal, incluidos los patrones migratorios. También estaban convenientemente situadas: todas las cometas se construyeron a 2 kilómetros de los recipientes de agua y permitían correr cuesta abajo dada la leve inclinación de las pendientes.

Fuente: phys.org | 25 de mayo de 2021