Encuentran una red de canales fluviales que servían para fines rituales cerca de Machu Picchu

Vista de un área de Machu Picchu.

Machu Picchu no deja de sorprender. Es una de las 7 Maravillas del Mundo Moderno y una de las razones principales por las que miles de turistas acuden cada año a Perú a ser testigos de su grandeza. Cuando parecía que la historia lo sabía todo acerca de este complejo arqueológico, nuevos secretos salen a la luz. El último de ellos es el descubrimiento de una red de canales fluviales oculta bajo el manto de la espesa selva que rodea el enclave de Machu Picchu en el sitio arqueológico de Chachabamba, el cual forma parte del parque arqueológico nacional de Machu Picchu, según un estudio publicado en la revista académica Journal of Archaeological Science.

Chachabamba, ubicado en la margen izquierda del río Vilcanota (km 104 de la vía férrea Cusco-Hidroeléctrica), está cubierto en gran parte por una espesa vegetación y los arqueólogos debieron utilizar drones equipados con láseres especiales para estudiar el follaje. Tras los estudios, determinaron que las estructuras tenían una función estrictamente ceremonial y que los incas construyeron sistemas de agua para legitimar su dominación.

Las flechas indican las direcciones de los canales descubiertos y el muro semicircular en el sitio arqueológico de Chachabamba, región Cusco. Foto: B. Cmielewski, análisis de D. Sieczkowska.

La investigación fue dirigida por la subdirectora de la 'Organización y Desarrollo del Centro de Estudios Andinos de la Universidad de Varsovia', Dominika Sieczkowska (izquierda), y participaron científicos de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Wroclaw, en Polonia, y especialistas de la 'Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC) del Cusco'.

El estudio da cuenta que los restos arqueológicos ubicados a menos de ocho kilómetros de los principales restos de la ciudad inca del siglo XV, en las afueras de Chachabamba son un altar principal de piedra rodeado por catorce baños que probablemente eran usados para abluciones rituales.

Los científicos utilizaron un tipo de tecnología de detección remota conocida como detección y rango de luz o LiDAR, que hace rebotar pulsos de láser en las superficies para detectar características y mapear sus contornos. El escaneo LiDAR, una herramienta relativamente nueva en arqueología, se está convirtiendo en una forma esencial para que los científicos estudien áreas que alguna vez fueron inaccesibles.

Arqueólogo en el momento de lanzar el dron para escanear mediante el LiDAR la zona de Chachabamba.

Los descubrimientos en el parque arqueológico nacional de Machu Picchu, que incluyen partes de un sistema de agua que atravesaba el área, están brindando nuevos conocimientos sobre la civilización inca y el papel de los complejos ceremoniales.

“Solo personas muy privilegiadas podían llegar a Machu Picchu, porque era un lugar muy especial”, sostuvo Sieczkowska y afirmó: “Cuando ibas allí, tenías que parar en Chachabamba para tomar un baño espiritual, estar limpio y puro antes de llegar a Machu Picchu. Por lo tanto, esta red de canales servía precisamente para este fin".

Uno de los canales hallados en el sitio arqueológico de Chachabamba. Foto: Fundacja PAP.

El culto al agua entre los incas

La relación entre Machu Picchu y el agua no es nueva. Una de las maravillas arquitectónicas de la ciudad son las fuentes litúrgicas que abastecían de agua a toda la ciudad, además de una red subterránea de canales de irrigación construida para alimentar las terrazas agrícolas.

En diversos puntos de la ciudadela se han encontrado, con el correr de los años, una serie de recintos rectangulares y circulares, andenes, muros de contención, canales de agua, y 'contextos funerarios' que evidencian que en Machu Picchu el agua no era solo una necesidad de la vida diaria, sino que se rendía culto al agua.

En su artículo “Las ‘phaqchas’ de Chachabamba (parque arqueológico nacional de Machu Picchu, Perú)”, Sieczkowska refiere que las intervenciones en parte del sistema hidráulico han evidenciado que las doce estructuras para el manejo del agua habrían tenido como función exclusiva los baños rituales de purificación relacionados con el papel ceremonial del lugar.

Foto: Un aspecto de la zona de baños rituales en Chachabamba.

Desde los primeros trabajos científicos, en 1941, el monumento arqueológico ha sido descrito como un lugar relacionado con aspectos ceremoniales, señala. “Actualmente, el respaldo científico para considerar este monumento como un lugar de culto es mayor, por el motivo, entre otros, del uso del agua, posiblemente relacionado con ceremonias de purificación o abluciones”.

“Por el momento, sabemos que el sitio parece haber cumplido solamente con el papel ceremonial, donde la huaca y los baños desempeñaban una función clave en el paisaje religioso de la región en consagración del 'apu Salkantay' y/o de la 'llaqta' [ciudadela] de Machu Picchu”, explica Sieczkowska.

Una de las estructura de piedra descubiertas en el sitio arqueológico de Chachabamba, en Perú. Fundacja PAP.

La arqueóloga sostiene que, hasta ahora, las investigaciones han permitido establecer que Chachabamba era el sitio de mayor importancia entre los satélites de la llaqta de Machu Picchu.

Los estudios fueron hechos por el Programa de Investigaciones Arqueológicas e Interdisciplinarias en el santuario histórico de Machu Picchu con la colaboración del Centro de Estudios Andinos de la Universidad de Varsovia (CEAC) como parte del memorándum de entendimiento entre la DDC del Cusco y el CEAC.

Fuentes: andina.pe | negenespanol.com | actualidadrt.com | 21 de enero de 2022

Jordi Agustí: «Nosotros tuvimos que ver en la extinción de los neandertales»

El investigador ICREA en el Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES), Jordi Agustí Ballester, publica "Genes, cerebros y símbolos", un relato esclarecedor sobre la historia de la evolución.

"Genes, cerebros y símbolos. Las raíces de la naturaleza humana" (Tusquets Editores) cuenta la historia de los hitos que han jalonado la historia de la evolución humana en la Tierra. Un recorrido fascinante en el que el lector se adentrará de la mano del paleontólogo Jordi Agustí Ballester, investigador ICREA en el Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES), sito en Tarragona. En Georgia, Agustí forma parte del equipo internacional del yacimiento de Dmanisi, donde se han descubierto los homínidos más antiguos de Eurasia, datados en 1,7 millones de años.

¿Qué nuevos datos aporta sobre la evolución?

Como dice el subtítulo, es una reflexión sobre las raíces de la naturaleza humana. Muchos de los caracteres de nuestra naturaleza normalmente no dejan registro fósil. Pero escarbando, sí que se puede ir adivinando cómo han aparecido los caracteres que nos definen en los últimos siete millones de años.

¿Habla de carácter psíquico?

Sí, básicamente. La ciencia y la psicología evolutiva, así como la paleoantropología han encontrado herramientas para acercarse a estas problemáticas, en las que en principio hay un vacío. Entonces, lo que he hecho es sistematizar estos aspectos y clarificar el panorama. Para ello he dividido las diferentes humanidades que ha habido en tres, más los neandertales. He separado grandes etapas de la evolución, que nos definen como humanos.

Cuando habla de humanidad cita el tamaño del cerebro, la ausencia de pelo y la cultura. ¿Cuál diría que es el rasgo más definitorio?

La cuestión más preguntada es cuándo apareció el ser humano. Pero la respuesta depende de lo que entendemos por ser humano. Es decir, se puede fijar el origen hace 2,5 millones de años, 1.800.000 años o 300.000 años. Esto depende cómo cada uno entienda qué quiere decir humanidad. Pero, ciertamente, la tercera, la nuestra, es la más completa, caracterizada por el pensamiento simbólico complejo.

¿El pensamiento simbólico es la posibilidad de elaborar herramientas?

No. Esto es la cultura. El pensamiento simbólico es la utilización de símbolos, es decir, categorías mentales que no tienen existencia física.

¿Por ejemplo?

Pensar que sobrevivimos a la muerte o construir frases que reflejen pensamientos complejos.

¿En qué momento aparece?

Hay casos de pensamiento simbólico ya en la segunda humanidad, que es el Homo heidelbergensis. Hay todavía más evidencia en el neandertal, pero evidentemente, somos nosotros, el Homo sapiens, los que tenemos más desarrollada esta faceta.

También habla de los neandertales, de su extinción y de lo que comparten con nosotros. Un debate que todavía continúa.

Sí. Los neandertales comparten muchas cosas con nosotros, pero aunque compartiéramos una pequeña proporción de genes, era una especie diferente con sus propias tendencias. De lo que no hay duda es de que los últimos neandertales desarrollaron caracteres muy parecidos a los nuestros en términos de cultura e industria lítica y algunas señales de pensamiento trascendental, como es inhumar a los muertos. Sin embargo, se trataba de una especie diferente, con sus propias tendencias evolutivas, adaptada a un medio muy duro, el de la Europa del Pleistoceno Superior. Todo indica que nosotros, aunque indirectamente, tuvimos que ver con su extinción, como la de muchas otras especies.

Como siempre...

Evidentemente, no fue una extinción provocada activa o voluntaria. Simplemente, competían por los mismos recursos. En este sentido, lo que explico en referencia a su extinción es que nosotros hicimos un ensayo con el computador Mare Nostrum, de Barcelona, y vimos que probablemente el comportamiento caníbal de los neandertales se les volvió en contra. Son los resultados de la modelización de un ordenador.

También hace un recorrido por los yacimientos más importantes. ¿En cuáles ha estado?

He trabajado directamente en Dmanisi, en Georgia, y también en los yacimientos de Orce, en Granada, así como en otros menores. Pero estos dos son la fuente más directa de mi experiencia.

Jordi Agustí (izquierda) junto al director del equipo de arqueólogos en Dmanisi (georgia), David Lordkipanidze, en una imagen de archivo. Foto: IPHES

¿Cuál ha sido su momento más importante como profesional?

Es difícil de decir, pero, evidentemente, el hito más importante ha sido mi colaboración con el equipo georgiano que excava en Dmanisi y otros de Georgia.

¿Por qué?

En Georgia se han encontrado los restos más antiguos del homínido de Eurasia, datados prácticamente de dos millones de años atrás. Fueron los primeros que salieron de África.

También explica la importancia de la carne para esta salida…

Más que en este movimiento migratorio, el tema de la carne ya fue importante antes en África, en la primera humanidad. Este cambio de dieta permitió expandir el cerebro, porque con una dieta básicamente vegetariana la energía que consume el tracto digestivo es muy grande. Con una dieta basada en carne, el tracto digestivo es mucho más corto, que es lo que pasa con los carnívoros, y por lo tanto, queda una energía extra que puede permitir mantener cerebros relativamente grandes.

¿Qué va a descubrir el lector en este libro?

Dado que hay tantos libros sobre la evolución humana y el tema es complejo, creo que "Genes, cerebros y símbolos" clarifica las cosas, las etapas, es una exposición ordenada de todo este tema tan complejo que es la evolución humana. En él he tratado de no perderme en los detalles, que obviamente tengo que incluir, para dejar muy claras las fases claves de la evolución humana.

Fuente: diaridetarragona.com | 23 de enero de 2022

Redescubren el filón arqueológico de Irak tras décadas sin poder entrar en el país por los conflictos de guerra

Miembros de una expedición arqueológica franco-iraquí en la ciudad de Larsa, sur de Iraq, trabajan en una excavación el 23 de noviembre de 2021. Asaad NIAZI AFP.

Después de que la guerra y la insurgencia los mantuvieran alejados de Irak durante décadas, los arqueólogos europeos están regresando con entusiasmo en busca de tesoros culturales milenarios. A fines de 2021 había 10 misiones extranjeras en la provincia de Dhi Qar, en el sur del país.

"¡Venid a ver!" Los arqueólogos franceses están contentos. Acaban de desenterrar en el desierto iraquí una inscripción cuneiforme de 4.000 años de antigüedad. “Cuando encontramos inscripciones como esta, in situ, es conmovedor”, dice entusiasmado Dominique Charpin (izquierda), titular de la cátedra de Civilización Mesopotámica en el Collège de France, y que forma parte de la campaña de excavación realizada a finales de 2021 enLarsa, en el sur de Irak.

La inscripción en idioma sumerio fue tallada en un ladrillo cocido en el siglo XIX a. C. "Al dios Shamash, su rey Sîn-iddinam, rey de Larsa, rey de Sumer y Akkad", traduce Charpin con una facilidad desconcertante.

Excavaciones en la antigua ciudad de Larsa, a unos 24 km al sudeste de las ruinas de la ciudad de Uruk, y 250 km al sur de Bagdad.

Detrás de él hay una docena de arqueólogos franceses, europeos e iraquíes trabajando en un cuadrado de excavaciones delimitado por cuerdas. Unos están cepillando ladrillos, otros quitando tierra, todos están despejando lo que parece ser la pila de un puente que cruzaba el canal urbano de Larsa, la capital de Mesopotamia, justo antes de Babilonia, a principios del II milenio a. C.

“Larsa es uno de los sitios más grandes de Irak, cubre más de 200 hectáreas”, comenta Régis Vallet, investigador del Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNRS), que lidera la misión franco-iraquí, con una veintena de personas.

El arqueólogo francés Regis Vallet en el sitio de la ciudad antigua de Larsa, Irak, el 22 de noviembre de 2021 Asaad NIAZI AFP.

La campaña esta haciendo "importantes descubrimientos", incluido el de la residencia de un jefe de gobierno en ese momento, identificado gracias a unas sesenta tablillas cuneiformes que han sido trasladadas al Museo Nacional en Bagdad.

Vallet comenta que "Larsa es como un patio de recreo arqueológico, un 'paraíso' para explorar la antigua Mesopotamia", la cual acogió durante siglos al Imperio Acadio, los babilonios, Alejandro Magno, los cristianos, los persas y los gobernantes islámicos. Sin embargo, la historia moderna de Irak, con su sucesión de conflictos, especialmente desde la invasión liderada por Estados Unidos en 2003 y sus sangrientas secuelas, ha mantenido a los investigadores extranjeros fuera del país.

Primero fue la Primera Guerra del Golfo en 1990-1991, luego el embargo, seguido de la invasión liderada por Estados Unidos en 2003, el conflicto interreligioso de 2006-2009, y finalmente la ofensiva de los yihadistas del Estado Islámico (IS) que ocupó hasta un tercio del territorio iraquí en 2014.

Solo desde que Bagdad declaró la victoria en las batallas territoriales contra el Estado Islámico en 2017, "Irak" se ha estabilizado en gran medida y ha vuelto a ser posible visitarlo", explica Vallet. “Los franceses regresaron en 2019 y los británicos un poco antes”, añade. "Los italianos regresaron ya en 2011".

El director del Consejo de Antigüedades y Patrimonio de Irak, Laith Majid Hussein (izquierda), dijo que está encantado de ser el anfitrión y feliz de que su país vuelva a estar en el mapa de las expediciones al extranjero.

"Esto nos beneficia científicamente", dijo a la AFP en Bagdad, y agregó que "agradezco la oportunidad de capacitar a nuestro personal después de una interrupción tan larga".



Cerca de Najaf, en el centro de Irak, Ibrahim Salmán, del Instituto Alemán de Arqueología, se concentra en el sitio de la ciudad de Al-Hira. Alemania había llevado a cabo previamente excavaciones aquí, pero se detuvieron tras la invasión liderada por Estados Unidos en 2003 que derrocó a Saddam Hussein.

Equipado con un dispositivo de medición geomagnético, el equipo de Salmán ha estado trabajando en la antigua ciudad cristiana que tuvo su apogeo bajo los Lájmidas, una dinastía tribal preislámica de los siglos V y VI.

El arqueólogo Ibrahim Salmán señala el lugar donde puede haber los restos de una iglesia en el lugar de Al-Hira.

"Algunas pistas nos llevan a creer que una iglesia pudo haber estado ubicada aquí", apunta, mientras señala a unos trazos de humedad en el suelo, retenida por estructuras enterradas. "La tierra húmeda en un trecho de varios metros nos lleva a decir que bajo nuestros pies probablemente están los muros de una iglesia antigua".

Al-Hira es mucho menos antigua que otros sitios, pero es parte de la diversa historia del país que sirve como recordatorio, según Salmán, de que "Irak, o Mesopotamia, es la cuna de civilizaciones. ¡Es tan simple como eso!".

Fuentes: timesofisrael.com | france24.com | lasprovincias.es | 12 de enero de 2022

Un estudio cuestiona la narrativa evolutiva de que 'la carne nos hizo humanos'

'Homo erectus' en África oriental rodeado de fauna contemporánea. / ©Mauricio Antón

La dieta desempeña un papel importante en la vida cotidiana de cada animal, no solo para su supervivencia y reproducción, sino que también puede condicionar las preferencias de hábitat, los patrones de movimiento, la energía destinada a la actividad, la competencia, el riesgo de depredación, las interacciones sociales y la comunicación, entre otros.

En el caso de los seres humanos, si nos remontamos a nuestros antepasados, la alimentación constituyó una función esencial en cuanto al hábitat, las migraciones y las interacciones con el medio ambiente y sus organismos.

“Una vez que los primeros humanos empezaron a comer carne, es probable que se aventuraran en entornos donde los animales habrían muerto de forma natural para recogerlos y se habrían encontrado con otros depredadores más a menudo, lo que provocaría una mayor competencia y riesgo de depredación”, ejemplifica a SINC Briana L. Pobiner, investigadora en el departamento de Antropología de la Smithsonian Institution en EE UU.

Briana L. Pobiner de pie junto a una réplica del esqueleto de 'Lucy' en el Salón de los Orígenes Humanos de la 'Smithsonian Institution', en EE UU.

Así, la dieta carnívora también pudo tener un gran impacto en la evolución del comportamiento humano y los rasgos anatómicos. Al no poseer dientes afilados como los depredadores para desgarrar la carne y acceder al tuétano de las presas, los humanos empezaron a servirse de la industria lítica a través de herramientas de piedra.

De hecho, la aparición del Homo erectus, hace unos dos millones de años, parecía haber sido el punto de inflexión en la evolución de la dieta humana: el aumento del consumo de animales pudo haber impulsado un mayor tamaño de cerebro y cuerpo y una reorganización del intestino. Estos rasgos se mantuvieron en el Homo sapiens.

Sin embargo, un nuevo estudio internacional, publicado en la revista PNAS, refuta ahora esta hipótesis de que "la carne nos hizo humanos" y pone en duda la primacía de la ingesta de carne en la evolución humana temprana. Hasta ahora, los estudios que sostenían la importancia del consumo animal se basaban en el incremento de las evidencias paleoantropológicas con la aparición del Homo erectus.

Huesos fósiles de 1,5 millones de años de antigüedad con marcas de corte procedentes de Koobi Fora, Kenia. / Briana Pobiner.

Análisis sesgado de los fósiles

Pero para que un cambio dietético generalizado conduzca a la adquisición de características claves en esta especie de hominino debería ser persistente en el registro zooarqueológico a lo largo del tiempo. Y esto solo puede demostrarse de forma convincente mediante un análisis a gran escala, más allá de un único yacimiento o localidad.

“La mayoría de los estudios sobre huesos fósiles con marcas de carnicería se limitan a examinar las pruebas de un solo yacimiento, o incluso de una sola capa de un yacimiento”, dice a SINC la investigadora Pobiner.

Para tener una mirada más amplia sobre las primeras evidencias de nuestro consumo de carne, el equipo sintetizó todas las pruebas publicadas hasta el momento sobre este tipo de restos en nueve áreas principales de investigación en África oriental, incluyendo 59 niveles de yacimientos, desde hace 2,6 millones de años hasta 1,2 millones de años.

“Comparamos los patrones de los huesos fósiles con marcas de carnicería con la cantidad de evidencia fósil en general, para ver si esto era realmente una señal de aumento de la ingesta de carne, o si era solo que la excavación de más fósiles hace que sea más probable encontrarlos con marcas de carnicería. Resulta que fue esto último”, confirma la experta.

Los investigadores descubrieron que, cuando se tiene en cuenta la variación en el esfuerzo de muestreo a lo largo del tiempo, no hay un aumento sostenido en la cantidad relativa de pruebas de consumo de carne después de la aparición de Homo erectus.

Los resultados sugieren, por tanto, que los hallazgos sobre la dieta carnívora serían el reflejo de un muestreo intensivo, más que de los cambios como tal en el comportamiento humano. El estudio "socava así la idea de que comer grandes cantidades de carne impulsó los cambios evolutivos de nuestros primeros ancestros”, recalca W. Andrew Barr (izquierda), profesor adjunto de Antropología en la Universidad George Washington, EE UU, y autor principal del estudio.

“Generaciones de paleoantropólogos han ido a sitios famosos bien conservados como la Garganta de Olduvai (Tanzania) en busca de evidencias directas de consumo de carne por los humanos primitivos y encontrado un impresionante número de ellas, promoviendo el punto de vista de que hubo una explosión del consumo de carne después de hace 2 millones de años", agrega Andrew Barr. "Sin embargo, cuando sintetizas cuantitativamente los datos de gran número de sitios en África oriental para probar esta hipótesis, como hicimos en el estudio, la narrativa evolutiva de 'la carne nos hizo humanos' comienza a desmoronarse".

Huesos fósiles de 1,5 millones de años con marcas de corte de Koobi Fora, Kenia. Crédito: Briana Pobiner.

El consumo de carne antes y ahora

A pesar de ello, el consumo de carne ha desempeñado un papel importante en nuestra historia evolutiva. “Tenemos pruebas de que algunas especies humanas primitivas, como los neandertales, comían cantidades significativas de carne”, comenta Pobiner.

En la actualidad, la investigadora –que lleva 20 años excavando y estudiando fósiles marcados por cortes– subraya que “la cultura (y la economía) son el gran motor de la variedad en la cantidad de carne que consumen las personas en las distintas sociedades”.

“Creo que este estudio y sus conclusiones son de interés no solo para la comunidad paleoantropológica, sino para todas las personas que actualmente basan sus decisiones dietéticas en alguna versión de esta narrativa del consumo de carne”, apunta Barr.

Según los investigadores, son necesarios grandes conjuntos de datos para comprender los grandes patrones de nuestra historia evolutiva. “Este estudio cambia nuestra comprensión de lo que nos dice el registro zooarqueológico sobre el consumo de carne prehistórico más antiguo, pero también muestra cuán importante es que sigamos haciéndonos grandes preguntas sobre nuestra evolución, mientras continuamos descubriendo y analizando nuevas evidencias sobre nuestro pasado. Necesitamos más muestras fósiles de periodos de tiempo no muestreados, como antes de hace 2 millones de años, a fin de poder comprobar la importancia de comer carne durante esos periodos de tiempo anteriores”, concluye Pobiner.

En el futuro, los investigadores enfatizaron también la necesidad de explicaciones alternativas de por qué surgieron ciertos rasgos anatómicos y de comportamiento asociados con los humanos modernos. Las posibles teorías alternativas incluyen el suministro de alimentos vegetales por parte de las abuelas y el desarrollo de fuego controlado para aumentar la disponibilidad de nutrientes a través de la cocción. Los investigadores advierten que ninguna de estas posibles explicaciones tiene actualmente una base sólida en el registro arqueológico, por lo que queda mucho trabajo por hacer.

Fuentes: agenciasinc.es | scitechdaily.com | 24 de enero de 2022

Sacan a la luz un gran asentamiento comercial de época romana en Inglaterra

Vista aérea de la excavación arqueológica del rico asentamiento comercial romano conocido como Blackgrounds, en el sur del condado de Northampton.

Un equipo de arqueólogos de la empresa MOLA Headland Infraestructure ha descubierto un importante yacimiento arqueológico cerca de un pequeño pueblo situado al sur del condado de Northampton, en Inglaterra. Durante los últimos doce meses, ochenta arqueólogos de MOLA, que trabajaban para HS2 Ltd. (High Speed 2), un proyecto a gran escala cuyo objetivo es crear conexiones ferroviarias de alta velocidad entre Londres y las principales ciudades del centro y norte de Inglaterra, ha estado excavando un poblado de la Edad del Hierro que con el tiempo se convirtió en una próspera ciudad comercial romana.

Muros de un edificio doméstico descubiertos durante la excavación arqueológica de Blackgrounds

DE PEQUEÑA ALDEA A CIUDAD ROMANA

Desde el siglo XVIII se tienen noticias de la presencia de yacimientos arqueológicos en la región, y el estudio y análisis inicial llevado a cabo por la empresa HS2 Ltd. ha proporcionado a los investigadores valiosas indicaciones de lo que allí podría hallarse. Sin embargo, la escala y la calidad de los descubrimientos han superado todas las expectativas.

El uso original del yacimiento localizado, que los arqueólogos han bautizado como Blackgrounds por el suelo negro de la zona, comenzó en la Edad del Hierro cuando era un asentamiento formado por unas 30 casas circulares. La excavación ha demostrado que ese poblado se expandió con el tiempo y se volvió más próspero durante el período romano, cuando se construyeron allí nuevos edificios de piedra y caminos. El equipo arqueológico cree que es muy probable que el sitio tuviera una ocupación continuada hasta la época romana y que sus habitantes se adaptaran a esa nueva forma de vida. Esta 'romanización' habría incluido la adopción de costumbres, productos y técnicas de construcción típicamente romanos.

Detalle de la calzada romana descubierta junto al asentamiento de Blackgrounds. Foto: HS2

Una calzada romana de diez metros de ancho (excepcional por su enorme tamaño) atraviesa el yacimiento. Su presencia sugiere que el asentamiento habría sido un lugar muy concurrido, con carretas que iban y venían para cargar y descargar mercancías. Es probable que la riqueza de la ciudad estuviera en gran parte basada en el comercio, que utilizaba como vías de transporte tanto el cercano río Cherwell como la calzada romana. En el yacimiento se han recuperado más de trescientas monedas romanas, lo que demuestra sin lugar a dudas que la zona era un importante núcleo de comercio.

Conjunto de monedas romanas localizadas durante las excavaciones. Foto: HS2

ACTIVIDADES VARIADAS

El asentamiento de Blackgrounds estaba dividido en diferentes áreas. Se han localizado los cimientos de edificios que fueron utilizados para fines domésticos, así como de otros destinados a prácticas más industriales. En su apogeo, Blackgrounds habría sido un área bulliciosa y concurrida, como demuestra la presencia de talleres, hornos y varios pozos perfectamente conservados. En un área del yacimiento, la tierra conserva un color rojizo, lo que indicaría que aquí se habrían llevado a cabo actividades que implicaban el empleo del fuego, como la elaboración de pan, la fundición de metales o el uso de un horno de cerámica.

Foto: de izquierda a derecha: figuras de cerámica; fichas de hueso y dado de plomo de época romana; peine y punzón; plato de hierro; parte de un grillete; objetos decorativos romanos.

Además de las monedas encontradas por los arqueólogos, la riqueza de los habitantes de este antiguo asentamiento queda reflejada en otros hallazgos como vasijas de vidrio, cerámica bellamente decorada, joyas e incluso algunas evidencias de maquillaje (rastros de galena, sulfuro de plomo, una sustancia que se trituró y se mezcló con aceite para producir un producto cosmético). Otro descubrimiento particularmente interesante ha sido el hallazgo de la mitad de un conjunto de grilletes, similares a los hallados recientemente en una excavación llevada a cabo en Rutland. Pero a diferencia de los descubiertos en Rutland, estos grilletes de Blackgrounds no están asociados a un entierro, aunque pueden sugerir la presencia de actividad criminal o de trabajo esclavo.

Arqueólogos excavando un rico asentamiento comercial romano de Blackgrounds.

COMPRENSIÓN DEL PASADO

Todos los objetos exhumados durante las excavaciones han sido trasladados y están siendo limpiados y analizados por especialistas de MOLA Headland Infrastructure. Asimismo, los detalles de los edificios y el diseño del asentamiento se están mapeando minuciosamente. Blackgrounds es uno de los más de cien yacimientos arqueológicos que HS2 Ltd. ha examinado desde 2018 entre Londres y Birmingham.

James West, director de MOLA, ha afirmado con enorme entusiasmo sobre el descubrimiento: "Este es sin duda uno de los yacimientos más impresionantes que 'MOLA Headland Infrastructure' ha descubierto mientras trabajaba en el proyecto de HS2 Ltd. Un elemento muy destacable ha sido la oportunidad que su excavación nos ha dado de poder comprender la historia de Blackgrounds, que ahora sabemos que abarca varios períodos de tiempo. Descubrir una vía romana grande y bien conservada, así como tantos hallazgos de calidad, ha sido extraordinario y dice mucho sobre las personas que vivieron aquí. El sitio realmente tiene el potencial de transformar nuestra comprensión del paisaje romano en la región y más allá".

James West, administrador de la excavación del MOLA, junto a uno de los cuatro pozos descubiertos en el rico asentamiento comercial romano conocido como Blackgrounds

Según The Guardian, en los últimos tres años, más de 1000 arqueólogos han estado trabajando en sitios cerca de la ruta ferroviaria entre Londres y West Midlands. En octubre, los investigadores encontraron estatuas romanas en una iglesia medieval en Buckinghamshire y, en 2019, el equipo exhumó más de 50 000 esqueletos en un lugar de entierro cerca de la estación de Euston en Londres.

HS2 Ltd. afirma que las excavaciones arqueológicas no han impedido que se construya el proyecto ferroviario de alta velocidad. Los funcionarios dicen que la planificación y la topografía anticipadas han ayudado a mantener el trabajo en movimiento y evitar interrupciones en los sitios históricos.

Mike Court, arqueólogo de HS2 Ltd, dijo: “A medida que nos acercamos al final de nuestro trabajo de campo arqueológico entre Londres y Birmingham, hemos realizado algunos descubrimientos sin precedentes, que continuaremos compartiendo con las comunidades cercanas a nuestras obras. La oportunidad de examinar cuidadosamente un sitio como Blackgrounds y trazar un mapa de una larga historia del sitio, que cobró vida a través de artefactos, restos de edificios y caminos, nos ha permitido proporcionar una comprensión más profunda de cómo era la vida en las zonas rurales. El sur de Northamptonshire en la Edad del Hierro y la Edad Romana”.

Fuentes: nationalgeographic.com.es | theguardian.com | 19 de enero de 2022

El 'Hombre Xujiayao' (China) tenía el cráneo más grande durante el Pleistoceno Medio tardío (1.700 cm³)

Una vista del lugar donde se localizó el cráneo del 'Hombre Xujiayao' (derecha)

Un estudio mostró que los antiguos parientes de los humanos modernos en el norte de China pudieron haber tenido un "cerebro Einstein" en el momento en que vivieron hace 200.000 o 160.000 años.

Un equipo internacional dirigido por arqueólogos chinos descubrió que la capacidad craneal de este homínido alcanzaba los 1.700 centímetros cúbicos (en el rango superior de neandertales y Homo sapiens moderno), una estimación realizada sobre la base de fósiles de cráneo XJY-6 excavados en la década de 1970 en el sitio de Xujiayao.

Los fósiles de Xujiayao se caracterizan por una mezcla de características de Homo erectus y Homo sapiens. En última instancia, los restos fósiles de Xujiayao son difíciles de clasificar y son de un linaje taxonómico incierto, posiblemente representando un linaje de homínido distinto.

"Es el homínido de cabeza más grande del Pleistoceno Medio", dijo Wu Xiujie (izquierda), investigadora del Instituto de Paleontología y Paleoantropología de Vertebrados adscrito a la Academia de Ciencias de China.

El equipo de Wu reconstruyó un cráneo posterior bastante completo con tres huesos fragmentados del mismo adulto joven.

El cerebro del homínido de Xujiayao era ligeramente más pequeño que el de su pariente cercano el "Hombre de Xuchang", calculado en unos 1.800 centímetros cúbicos. Pero el primero vivió aproximadamente 60.000 años antes que el segundo, según el estudio publicado en el último volumen de Journal of Human Evolution.

Fragmentos fósiles del cráneo humano de Xujiayao y su reconstrucción (fotografía cortesía de Wu Xiujie)

Los hallazgos ofrecieron "la evidencia más temprana de un tamaño del cerebro que entra en el rango superior de los neandertales y del 'Homo sapiens' moderno", dijo Wu Xiujie, primer autor del artículo.

Este humano prehistórico, fue contemporáneo junto con los neandertales y los denisovanos, pero es especial en el sentido de que fue encontrado junto con otros fósiles denominados como 'el joven de Xujiayao', el cual muestra que tenía dientes como los de los humanos modernos.

Restos del 'Hombre de Xujiayao', Shanxi, China. Hong Ao, Chun-Ru Liu, Andrew P. Roberts, Peng Zhang y Xinwen Xu -https://doi.org/10.1016/j.jhevol.2017.01.014

Los científicos alguna vez supusieron que el tamaño del cerebro de los humanos antiguos en la Edad de Piedra, desde el australopiteco hasta el Homo habilis y el Homo erectus, creció gradualmente con el tiempo.

Pero estudios recientes han puesto fin a esta hipótesis desde que se descubrió que el Homo floresiensis, hallado en Indonesia y que vivió hace entre 100.000 o 50.000 años, tenía un cerebro de sólo unos 400 centímetros cúbicos, mientras que la cabeza del Hombre de Xuchang era cuatro veces más grande. La importancia del cráneo de Xujiayao es que nos muestra que los cerebros de los homínidos se expandieron y contrajeron a diferentes ritmos y tiempos.

Los hallazgos pueden ayudar a explicar qué condujo al gran cambio en el tamaño del cerebro de nuestros antepasados ​​y ofrecer una nueva pieza perdida en el rompecabezas de la evolución humana.

Fuentes: spanish.peopledaily.com.cn | ivpp.ac.cn | anthropology.net | 17 de enero de 2022