Hallan restos humanos maniatados en un yacimiento arqueológico de Gáldar (Las Palmas de Gran Canaria)

En un reciente hallazgo arqueológico en un acantilado de Caleta de Arriba, Gáldar (Las Palmas de Gran Canaria), se encontraron los restos de humanos, en concreto, de seis hombres adultos y adultos-jóvenes enterrados de una manera peculiar: boca abajo y maniatados. La intervención arqueológica fue llevada a cabo por arqueólogos del servicio de Patrimonio del Cabildo grancanario, en colaboración con la empresa Tibicena Arqueología y Patrimonio del Cabildo.

El descubrimiento se produjo en un área en la que la erosión natural dejó al descubierto una antigua cueva de habitación prehispánica, que había quedado sepultada por un derrumbe masivo. Con el tiempo, ese mismo derrumbe sirvió como lugar de enterramiento, como se dedujo de la presencia de huesos humanos de, al menos, dos individuos adultos, que quedaron al descubierto por la acción de las lluvias.

La intervención arqueológica se realizó en ambos depósitos arqueológicos, aunque se priorizó la recuperación de los enterramientos, ya que ese material presenta una mayor fragilidad y riesgo de deterioro. Los cuerpos fueron cubiertos por grandes piedras del propio derrumbe, lo que ocasionó que se fracturasen varios huesos.

Inicialmente se pensó que los enterramientos podrían corresponder a un aprovechamiento funerario de este lugar por parte de los antiguos canarios. Sin embargo, la intervención arqueológica ha revelado rasgos singulares que indican que los restos de humanos son de un origen desconocido y de una posible época distinta a la prehispánica.

Los cuerpos estaban colocados unos sobre otros, sin ningún cuidado en su disposición. Además, algunos de ellos fueron enterrados boca abajo y maniatados, lo que ha dejado perplejos a los arqueólogos. El Servicio insular de Patrimonio Histórico especifica que los restos de humanos pertenecen a hombres adultos y adultos-jóvenes, que no están amortajados.

El Cabildo ha destacado también que, salvo esos restos de humanos, no se han identificado otros materiales que permitan realizar una asignación cronológica-cultural a los enterramientos. Sin embargo, no hay dudas acerca de la singularidad de estos depósitos y de que requieren una investigación de mayor profundidad.

Actualmente, los restos de humanos están en proceso de estudio y ya se han seleccionado las muestras para su datación por Carbono 14, por lo que se prevé que en unos meses se contará con nuevos indicios que permitirán explicar este hallazgo.

El descubrimiento de estos restos humanos maniatados y enterrados boca abajo es muy importante para la arqueología y la historia de las Islas Canarias. Se espera que la investigación en torno a este yacimiento continúe y proporcione más información sobre la época y el origen de estos cuerpos.

La importancia de este hallazgo radica en que arroja luz sobre la historia de las Islas Canarias, que cuenta con un rico patrimonio arqueológico que aún está en gran parte por descubrir. Los arqueólogos continúan trabajando en la región para descubrir nuevos yacimientos y comprender mejor la vida de las antiguas poblaciones que habitaron estas islas.

En particular, este hallazgo es también importante porque sugiere que los enterramientos podrían estar relacionados con prácticas funerarias que eran diferentes a las que se conocen de la época prehispánica en las Islas Canarias. Específicamente, la posición de los cuerpos boca abajo y maniatados sugiere que estos individuos fueron enterrados de una manera que no se había observado anteriormente en la región.

Este hallazgo también destaca la importancia de preservar el patrimonio arqueológico de las Islas Canarias. Los arqueólogos trabajan incansablemente para proteger y estudiar los restos de las antiguas poblaciones que habitaron estas islas, pero todavía hay mucho por descubrir.

Es necesario que se sigan destinando recursos para la investigación arqueológica en la región y que se promueva la conciencia sobre la importancia de proteger y preservar el patrimonio cultural de las Islas Canarias.

Este hallazgo también podría tener un impacto en la forma en que se estudia la historia de las Islas Canarias. Si se confirma que los restos de humanos pertenecen a una época diferente a la prehispánica, esto podría cambiar la forma en que los historiadores y arqueólogos entienden la historia de la región.

Fuente: diariodeavisos.elespanol.com | 20 de abril de 2023

Lujo, piscinas y un enorme salón para invitados: los últimos hallazgos en la villa romana de Noheda (Cuenca)

La villa romana de Noheda (Villar de Domingo García, Cuenca) no deja de asombrar a los arqueólogos. Levantada en el siglo IV d.C., su pars urbana ―la zona donde vivían los dueños― alcanzó los 30.000 metros cuadrados (edificios que ocupan una superficie semejante a la de tres campos de fútbol), de los que se han excavado poco más de 5.000. Las últimas investigaciones sobre el terreno han confirmado lo que las pantallas del georradar venían alertando desde 2018: una nueva edificación, de unos 900 metros cuadrados, se esconde a unos tres metros por debajo del terreno. Se podría tratar, según creen los expertos, de un enorme salón donde el dueño de la villa recibía a los invitados, en un estudiado ceremonial.

Luego, solo aquellos invitados más selectos tendrían acceso al triclinium, el comedor decorado con uno de los mosaicos figurativos más grandes del mundo romano en una sala triabsidada (muchas de sus imágenes superan los dos metros de altura), así como una fontana revestida de placas marmóreas de distintos tipos y tonos, lo que, unido al efecto del agua, otorgaría un destacado resultado cromático. Los trabajos arqueológicos han desvelado también la existencia de un balneum ―con una piscina cubierta y otra descubierta, sala de masajes, calefacción y bañeras de casi 1.000 metros cuadrados―, con unas dimensiones superiores a muchas de las de las termas públicas de las ciudades romanas. Todo ello recorrido subterráneamente por una red de alcantarillado que está siendo investigada.

Vista cenital de los mosaicos de la Sala Tríabsidada y Octogonal. Los mosaicos más espectaculares se han encontrado dentro del comedor de la villa. En sentido horario desde arriba: actuación de un grupo de mimos, procesión báquica (derecha), juicio de Paris y rapto de Helena (izquierda), otro grupo de actores y finalmente Pélope e Hipodamía. Foto: José Latova

Nadie sabe cómo se llamaba el dominus (terrateniente) que ordenó levantar este enorme complejo residencial y agroalimentario ―las villas conjugaban los conceptos de ocio y negocio― dentro de una gran extensión de tierras a unos 18 kilómetros de Cuenca y sobre una suave y verde ladera, junto al arroyo del Tejar. Pero los arqueólogos siguen buscando todo tipo de pistas como epígrafes ―ya han localizado dos, uno de ellos referido a una esclava liberada (liberta) llamada Democratia― con la esperanza de localizar algún letrero conmemorativo que hable de quién es el dueño o, incluso, grafitis realizados por algún esclavo que mencionase su nombre en sus justificadas quejas.

Salón de recepciones del complejo arqueológico de Noheda, que alberga los diferentes mosaicos. -Foto: Reyes MartÁ­nez.

El territorio del complejo (fundus) se extendía por unos 80 kilómetros cuadrados. La villa propiamente dicha estaba compuesta por la citada parte urbana o de residencia, la rústica (para esclavos y trabajadores) y la fructuaria (almacenamiento y transformación agropecuaria). En el caso de Noheda, estas características se cumplen sobradamente, más en el área residencial, donde todo supera las medidas y las riquezas imaginables. El dueño se hacía traer los vinos de Siria; los 30 tipos de mármoles empleados, de Goethepe (Turquía) o Carrara (Italia); las piedras, de Egipto… Una opulencia digna de un emperador, lo que hace suponer a los expertos que se trataba de alguien que formó parte de la alta aristocracia o, al menos, que estaba en su más cercano círculo de poder.

Mosaico en el que se representa el Juicio de Paris y el rapto de Helena de Troya en el 'triclinium' de la villa.

La villa fue descubierta casualmente en los años ochenta, pero su excavación no comenzó hasta 2005. Los trabajos se han centrado durante estas décadas en la espectacular sala triabsidada, actualmente bajo un edificio que protege y exhibe los espectaculares mosaicos, y donde se observan las imágenes de Atenea, Pélope, Hipodamia, Helena o Thiasos, entre otros personajes mitológicos. Pero en la actualidad se vuelcan en su exterior, donde se han producido ahora los sorprendentes hallazgos. El más destacado es la enorme sala cruciforme.

Miguel Ángel Valero, director de excavación y diputado provincial. - Foto: Reyes Martínez

Miguel Ángel Valero, director científico del yacimiento y profesor de Historia Antigua de la Universidad de Castilla-La Mancha, explica: “Se trata de un gran edificio cruciforme del que, por el momento, desconocemos su altura. En dos zonas puntuales hemos profundizado casi tres metros y aún no hemos alcanzado el suelo. Lo que sí hemos podido realizar es la delimitación completa de la estancia, y debido a sus holgadas dimensiones y sus gruesos muros (1,20 m de anchura realizados con un doble forro de sillarejo) quizás podría tratarse de un salón áulico, donde el señor recibía a sus invitados y les manifestaba su poder mediante un estudiado ceremonial. No obstante, la investigación está aún en ciernes y el avance de las excavaciones arqueológicas nos dará los datos necesarios para poder dar funcionalidad concreta al imponente edificio”. Esta gran sala, de la cual se ha realizado un modelo digital, va a ser cubierta en breve y ya se han colocado las zapatas de sujeción.

Trabajos de cubrimiento y protección del conjunto termal de Noheda. Miguel Ángel Valero.

A unos 50 metros del salón se ha hallado también el balneum, un conjunto termal que incluía un sistema de calefacción embutido en dobles paredes o bajo el suelo y que disponía de todas las comodidades de la época: bañeras, piscinas, salas de masajes, pediluvios o baños para pies… Todo el conjunto termal estaba recorrido por un sistema de desagüe que también está siendo excavado y que puede ofrecer muchas pistas sobre la vida cotidiana. El recinto termal se está protegiendo y musealizando con un edificio que, además, recreará la volumetría original de diversas estancias ―entre ellas la gran entrada porticada― mediante una estructura metálica y un juego de luces. “Queremos hacer lo mismo que se hace en algunos monumentos tardorromanos y medievales, en los que mediante estructuras reversibles se ayuda al visitante a comprender cómo era la morfología de estos edificios y a imbuirse en los volúmenes reales”, señala el profesor.

Galería subterránea de la villa de Noheda. Miguel Ángel Valero.

La villa fue abandonada en el siglo V, posiblemente por la inestabilidad política, y ocupada por sus trabajadores y esclavos ―ya sin amo―, que la transformaron según sus necesidades. Las termas, por ejemplo, se convirtieron en zona de almacenamiento y elaboración de productos y herramientas vinculados a la agricultura e, incluso, como infravivienda habitual, en un sistema autárquico, como demuestra el hallazgo de los restos óseos de un niño que fue enterrado en una habitación contigua, tabicando la puerta y continuando la vida en la estancia.

El triclinium también fue sistemáticamente expoliado. Las fogatas encendidas sobre el gran mosaico para calentar la sala hundieron algunos centímetros las teselas, mientras que los mármoles que lo decoraban fueron arrancados con picos, afirma Valero. Los golpes de las herramientas para extraerlos son aún visibles, al igual que las huellas de las sandalias tachonadas de los constructores que han quedado al descubierto.

Estatua de Dioscuro encontrada en la villa romana.

La mansión estaba decorada, además, con cientos de bellas y delicadas esculturas. Pero su abandono provocó que los nuevos moradores las acumulasen en un vertedero cercano al peristilo (zona porticada con una cascada artificial) a la espera de ser molidas y convertidas en polvo de mármol para sus labores de adaptación de la villa o para ser vendido.

De momento, se han encontrado 550 fragmentos que conforman al menos 30 figuras ―la mayor parte rotas intencionadamente y después arrojadas a un vertedero temporal―, pero los expertos han conseguido encajar los trozos de algunas encontradas tanto en el basurero como en la zona donde iban a ser molidas y calentadas al fuego para obtener el polvo de mármol. Las figuras halladas recorren toda la imaginería romana posible: dionisios, sioscuros, venus, leones, ciervos, joven con gorro frigio, tritones... “Hemos encontrado algunas repetidas, lo que significa que las compraba a su total antojo. Parece que el dinero no le resultaba un problema”, explica el arqueólogo.

El vertedero, hoy en día, sigue ofreciendo sorpresas, ya que no está totalmente excavado y una simple pasada con la mano sobre su superficie deja entrever nuevos elementos por extraer. Algunas de estas esculturas pueden admirarse ya en el Museo Arqueológico de Cuenca.

Figura en mármol hallada en la villa romana.

El yacimiento es visitable de jueves a domingo, pero es imprescindible la reserva. “Estamos desbordados. Tenemos lista de espera”, admite Valero, que, no obstante, muestra su ilusión por la próxima recreación visual del balneum, un atractivo más del conjunto arqueológico. Javier Parrilla, alcalde de Villar de Domingo García, no es tan optimista. “En estos años, el pueblo [200 habitantes] ya ha invertido 300.000 euros y no le vemos rentabilidad. Viene muchísima gente, eso es cierto, pero todos se van a comer a Cuenca. ¡Si Villar está a solo ocho kilómetros y es muy bonito! Tenemos hasta la capilla del capellán de Carlos V. Somos la España vacía”.

Y concluye con una sonrisa: “Estamos mal colocados”. Una situación hasta cierto punto real y que es consecuencia de que las villas se ubicaban, siguiendo los consejos del escritor agronómico Lucius Junius Moderatus Columella (4-70 d. C.), lejos de las vías de tránsito para evitar ser detectadas por los bandidos o por cualquier grupo de soldados que no hubiera recibido su paga.

Fuente: columnadigital.com | 18 de abril de 2023

Un estudio establece que la Cueva de Nerja (Málaga) estuvo ocupada hace 41.000 años, 10.000 antes de lo que se creía

La investigación ha sido posible gracias al manejo de las últimas técnicas de datación de los carbones y restos de humo fosilizado en las estalagmitas de la cueva de Nerja. / Pixabay

Un equipo internacional de expertos, entre los que se encuentran las investigadoras de la Universidad de Córdoba (UCO), Maria Ángeles Medina Alcaide, actualmente en la Universidad de Burdeos (Francia), y Eva Rodríguez Castro, junto con el profesor titular de Prehistoria y director científico de la Cueva de Nerja (Málaga), José Luis Sachidrián, ha establecido que "la Humanidad lleva paseándose por Nerja desde hace 41.000 años, es decir, 10.000 años antes de lo que se creía".

Según ha informado la UCO en una nota, así lo determina el estudio publicado en Scientific Reports por el citado equipo internacional y cuya autora principal es Maria Ángeles Medina Alcaide, que ha logrado demostrar, además, que la de Nerja es la cueva con arte paleolítico de Europa con mayor número de visitas constatadas y recurrentes a su interior durante la Prehistoria.

La investigadora María Medina recogiendo muestras para su análisis.

Concretamente, este nuevo trabajo ha logrado documentar 35.000 años de visitas en 73 fases diferentes, lo que significa, según han calculado los científicos, que algunos grupos humanos entraron en la cueva cada 35 años, aproximadamente.

Semejante nivel de detalle de conocimiento es posible gracias al manejo de las últimas técnicas de datación de los carbones y restos de humo fosilizado en las estalagmitas de la cueva de Nerja. Es lo que se llama "arqueología del humo" y es una nueva técnica que ha desarrollado la autora principal del trabajo, Maria Ángeles Medina, una cordobesa, investigadora honoraria de la UCO, que lleva más de una década reconstruyendo la prehistoria europea, "husmeando" en los restos de las antorchas, fogatas y humo de las cuevas españolas y francesas.

Diversos lugares donde se recogieron muestras: (A) Marca negra (fecha número 33). (B) Micro-carbón dentro de lámpara fija (fecha número 43). (C) Carbones esparcidos (fecha número 54). (D) Sección de estalagmitas GN16-08. Las flechas rojas apuntan a una de las muestras, analizada tanto por TEM-EDX como por microespectroscopía Raman.

Medina ha explicado que "la información que la microscopia electrónica de transmisión y las técnicas de datación del carbono 14 pueden arrojar sobre los rituales y modos de vida del ser humano es impresionante". Para empezar, en este último trabajo se han presentado 68 dataciones, 48 inéditas, de las zonas profundas de la cueva y con arte paleolítico, y se han localizado evidencias de cronoculturas no registradas hasta el momento en la cavidad.

Además, estas arqueólogas del fuego saben leer en la información que sale del microscopio la manera en la que se movieron las antorchas, infiriendo de ello el uso simbólico y escenográfico que los humanos de hace 40.000 años daban al fuego.

Planimetría de la cueva de Nerja con la localización de las muestras analizadas. Los círculos indican las muestras de carbón con fecha de C-14, y la bandera roja marca el lugar de la estalagmita GN16-08 con los microniveles de hollín. El color de los círculos corresponde a las fases bayesianas de la datación con carbón. En la parte inferior derecha de la imagen se representa mediante gráficos circulares el número de fases para cada estancia de la cueva. La información específica sobre cada muestra se puede encontrar en "Materiales complementarios". Los números en los círculos corresponden al número de muestras.

A este respecto, Medina ha señalado que "las pinturas prehistóricas eran vistas con la luz parpadeante de las llamas, lo que les podía dar cierta sensación de movimiento y calidez a las figuras", a lo que hay que sumar también el uso funerario de la Cueva de Nerja en la última parte de la Prehistoria, durante miles de años, y que, según ha avisado, "aún queda mucho por revelarnos sobre cómo fuimos".

Fuente: cadenaser.com | 25 de abril de 2023

Confirman por primera vez el origen fenicio de cinco individuos hallados en excavaciones de Cádiz

Individuo encontrado en el solar del antiguo Teatro Cómico. / JM PAJUELO Y JM GENER BASALLOTE.

Un grupo de investigación liderado por la Universidad Complutense de Madrid (UCM) ha confirmado que restos hallados en excavaciones en Cádiz pertenecieron a individuos procedentes o descendientes de individuos de Fenicia, uno de los pueblos más influyentes de la Antigüedad que se extendía por lo que hoy es Siria, Líbano y el norte de Israel.

"Existía la duda de si los individuos eran 'fenicios de verdad' o si se 'identificaban con esa cultura' y se enterraron de esa forma. Con nuestro estudio, hemos demostrado que esa población era de Fenicia o, por lo menos, eran descendientes de 'fenicios de Fenicia'", señala Cláudia Lopes Gomes (izquierda), investigadora del Departamento de Medicina Legal, Psiquiatría y Patología de la UCM.

Los fenicios establecieron conexiones a distancia con Occidente desde Oriente Próximo a lo largo de la Edad de Bronce. Gades (más tarde, Gadir, actual Cádiz) fue una de las ciudades fenicias más importantes fuera de allí, pero hasta ahora no se habían podido obtener resultados biológicos de individuos datados de aquella época en esta ciudad.

“Son muchos los estudios arqueológicos, antropológicos y médicos llevados a cabo, pero nunca se había obtenido un resultado genético de tantos individuos fenicios. Para que se entienda la importancia y el impacto de nuestro trabajo, en el año 2016 se publicó en 'PLoS ONE' el análisis genético de un solo individuo fenicio del norte de África. En nuestro caso, obtuvimos resultados de ocho individuos”, destaca Gomes.

Además de la UCM, en el trabajo publicado en Genealogy, participan el Ayuntamiento de Cádiz, el Instituto de Investigación Sanitaria Hospital Clínico San Carlos, el Hospital Universitario de Puerto Real y la empresa Tripmilenaria, entre otras.

Tumba fenicia en el solar del teatro del cómico, en Cádiz. A. V.

Diferentes localizaciones en Cádiz y San Fernando

Los restos estudiados fueron hallados en diferentes localizaciones de Cádiz, entre ellas los yacimientos arqueológicos de Campo de Hockey en San Fernando, y en Cádiz la Plaza de Asdrúbal, Cuarteles de Varela, Teatro Cómico y Hospital de la Misericordia de San Juan de Dios.

El trabajo confirma que cinco de los dieciséis individuos analizados tienen origen fenicio. En otros tres individuos no se pudo confirmar ni descartar su origen fenicio, porque presentaban un linaje –ancestros– típico europeo y en uno de ellos se identificó linaje africano. Los restantes ocho individuos no han permitido la obtención de resultados, debido a su extrema degradación.

“También concluimos que, en estos casos donde los individuos no tenían un linaje biológico típico fenicio, han abrazado esa cultura como suya, asumiendo las tradiciones y rituales de enterramiento de tal forma que no se podían distinguir unos de otros”, concluye Gomes.

Vista aérea del “Campo de Hockey” de varios enterramientos en una fosa simple. Fuente: Vijande et al. (2007).

El análisis molecular se realizó solo a través de marcadores de ADN mitocondrial, para poder evaluar el linaje materno de los individuos. La razón, explican los investigadores, es que la información del linaje paterno, el cromosoma Y, se encuentra en el núcleo celular, y debido al elevado estado de degradación de los individuos no se pudieron obtener esos datos.

Además de la relevancia histórica de los hallazgos, este estudio tiene aplicaciones forenses. “Trabajar con muestras antiguas extremadamente degradadas sirve para mejorar y probar nuevas formas de análisis para su posterior aplicación a casos forenses actuales".

El origen: los fenicios del Cómico

"El objetivo de este trabajo denominado ADN Gadir era sacar el máximo de individuos y de todas las épocas para obtener una secuenciación de ADN de Gadir, tanto de Cadiz y como de la provincia". El origen fue el estudio anterior de dos de los cadáveres localizados en el solar del Cómico, lo que hoy es el yacimiento Gadir, que luego desembocó en este proyecto más ambicioso gracias a la financiación del Instituto de Investigación Sanitaria Hospital Clínico San Carlos, y en el que han participado también el Ayuntamiento de Cádiz, el Hospital Universitario de Puerto Real y la empresa Tripmilenaria, entre otras.

"Se estudiaron los cadáveres del Cómico -que recordemos que fallecieron por accidente en distinta época- porque es difícil encontrar restos fenicios óseos, pues hasta época púnica se solían incinerar". Una vez realizado este primer estudio que se presentó en 2012, se planteó tomar más restos a través de este nuevo proyecto, pues "Cádiz tiene una gran necrópolis", cuenta Juan Miguel Pajuelo (izquierda), arqueólogo de Tripmilenaria.

Los restos estudiados fueron hallados tanto en la excavación del Campo de Hockey, en San Fernando, como en la Plaza de Asdrúbal, en los Cuarteles de Varela, el Teatro Cómico y el Hospital de la Misericordia de San Juan de Dios, todas excavaciones antiguas. "Y ahora se presenta este estudio que se quedó en el tintero por la crisis, pero que parece que ahora se ha completado".

Así el estudio originario constató la presencia fenicia oriental en uno de los sujetos y el mestizaje de las poblaciones indígenas con las fenicias en el segundo, conocido como Mattan (expuesto en Gadir y fallecido en un incendio en el siglo VI). En concreto se detectaron marcadores genéticos vinculados a poblaciones geográficamente coincidentes con la antigua Fenicia, así como el grupo de mayor presencia en Europa Occidental, por lo que se planteó en uno de los individuos la posibilidad de un origen materno europeo, como consecuencia del establecimiento de lazos familiares entre los colonos de origen fenicio y las mujeres de la península ibérica. Mientras que del otro sujeto analizado, (fallecido de forma accidental bajos escombros de una vivienda en el VIII a.C.), se detectaron varias líneas genéticas que se encuentran prioritariamente en poblaciones de Oriente Próximo, siendo a su vez hijo de padre y madre fenicios asentados en Gadir.

Reconstrucción del hombre fenicio al que se le ha puesto el nombre Mattán.

Presentaron entonces esta investigación anterior el concejal de Cultura, Antonio Castillo; Juan Miguel Pajuelo; el arqueólogo municipal, José María Gener y el paleopatólogo Manuel Calero, recientemente fallecido, que fue todo un pionero en el campo de la paleopatología y colaborador en numerosas excavaciones en Cádiz. El informe fue realizado por Sara Palomo Díez, del Laboratorio de Genética Forense y Genética de Poblaciones del Departamento de Toxicología y Legislación Sanitaria de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid.

Fuentes: diariodecadiz.es | diariodecadiz.es | 25 de abril de 2023

Una investigación desvela la conexión genética entre los neandertales tardíos de Gibraltar con otros que vivieron en Francia

Reacreación del neandertal 'Nana', hallado en Gilbratar, sobre un mapa de Europa donde se ubica la cueva de Mandrin (Francia).

Francia no solo acogió a los Homo sapiens más antiguos de Europa, sino también a los primeros neandertales. Un adulto llamado Thorin vivió allí hace 50.000 años y pertenecía a una población previamente desconocida cuyo linaje se separó de otros neandertales tardíos hace unos 100.000 años. Estaba, además, emparentado con los neandertales de Gibraltar.

Un equipo de científicos ha llevado a cabo una investigación sobre el mayor hallazgo de restos neandertales desde 1979 en el sur de Francia: los huesos y los dientes pertenecientes a un hombre adulto, apodado Thorin, en honor a uno de los personajes principales de El Hobbit, la novela de J. R. R. Tolkien.

Una preimpresión de este trabajo se ha publicado ahora en bioRxiv.org y complementa dos artículos anteriores sobre el mismo yacimiento publicados, uno en 2022 y otro a principios de este año.

Arqueólogos de la Universidad de Burdeos trabajando en la gruta de Mandrin. Ludovic Slimak, CNRS.

Cueva del Paleolítico

No muy lejos de la ciudad francesa de Malatavern, a orillas del río Ródano, se encuentra la Cueva Mandrin. Las excavaciones de este sitio, que han estado en curso desde 1990, han revelado 12 capas arqueológicas que datan de las eras del Paleolítico Medio y Superior.

En total, los investigadores lograron encontrar aquí cerca de 60.000 artefactos de piedra, así como más de 70.000 restos de animales, entre los que predominan los caballos, bisontes y venados.

La cueva Mandrin alcanzó gran popularidad el año pasado: arqueólogos y antropólogos descubrieron un diente que pertenecía a un individuos anatómicamente moderno: probablemente un niño de entre 2 y 6 años de edad. La antigüedad de este hallazgo oscila entre 56.800 51.700 años.

Además, entre los artefactos de esta capa, cuyo número total supera las dos mil copias, los científicos descubrieron también puntas de flecha y dardos en miniatura, los artefactos más antiguos encontrados en Europa. Una de las características de este descubrimiento es el hecho de que la capa donde se encontró el diente de Homo sapiens más antiguo de Europa está cubierta, por abajo y por arriba, de restos culturales dejados por los neandertales.

Al mismo tiempo, el diente de Homo sapiens está lejos de ser el único hallazgo antropológico realizado en los depósitos de esta gruta: los científicos ya habían informado con anterioridad sobre ocho dientes más encontrados en diferentes capas.

Foto: Este diente de leche roto puede ser el fósil humano moderno más antiguo conocido en Europa.

Nuevos descubrimientos

Ludovic Slimak (izquierda), de la Universidad de Toulouse y Martin Sikora (derecha), de la Universidad de Copenhague, junto con arqueólogos, antropólogos y genetistas de Australia, Austria, Gran Bretaña, Alemania, Dinamarca, Nueva Zelanda, Estados Unidos, Francia y Suiza, han informado ahora sobre nuevos hallazgos antropológicos ocurridos en 2015 en la Cueva de Mandrin.

En la capa B2, rica en artefactos y huesos de animales, los arqueólogos descubrieron los restos de un hombre de neandertal, apodado Thorin. Según los investigadores, se trata de los restos neandertales más representativos encontrados en Francia desde 1979, cuando se descubrió el esqueleto de un hombre arcaico en el yacimiento arqueológico de Saint-Cézaire.

Restos del neandertal llamado Thorin tal como fueron encontrados en la Cueva Mandrin. LUDOVIC SLIMAK ET AL. /BIORXIV, 2023.

Huesos de la cara

A disposición de los investigadores quedaron parte del hueso palatino, un maxilar inferior fragmentario y 31 dientes con morfología típica neandertal.

Además, el premolar superior y el canino izquierdo no han sobrevivido hasta el día de hoy, pero este individuo tenía molares inferiores supernumerarios (cuartos molares): esta anomalía no se había encontrado previamente en representantes del género Homo de la era del Pleistoceno.

Los cuartos molares de Thorin tenían una forma irregular y también una sola raíz. A juzgar por el desarrollo de los molares, este neandertal era un adulto. Junto a estos restos también se encontraban cinco falanges de la mano izquierda de un adulto, que bien podrían pertenecer también a Thorin.

Huesos de ciervo rojo y garra de águila encontrados en el yacimiento. Algunos fueron retocados con sílex para darles una forma determinada. Foto: LUDOVIC SLIMAK et al. Science Advances

Otros huesos de Thorin

Además de los huesos faciales y dientes mencionados, los arqueólogos han encontrado otros 80 fragmentos óseos poco informativos que presumiblemente podrían pertenecer, asimismo, a Thorin.

Los científicos recurrieron a la toma de huellas dactilares de péptidos por espectrometría de masas (ZooMS) para determinar cuál de ellos realmente pertenecía a una persona, y luego los enviaron para realizar una datación por radiocarbono (los resultados de este análisis no se informaron en la preimpresión del trabajo de investigación).

Además, para determinar la antigüedad edad del hallazgo, los científicos recurrieron al análisis de uno de los dientes de Thorin, mediante la utilización de un método combinado de series de uranio y resonancia de espín de electrones.

Resumiendo los datos de que disponían, los investigadores concluyeron que este neandertal vivió hace entre 52.900 y 48.050 años (con una probabilidad del 95,4 por ciento) o entre 51.300 y 48.900 años (con una probabilidad del 68,2 por ciento). El análisis de la composición isotópica de carbono, nitrógeno, oxígeno y estroncio atestigua que esta persona vivía en un paisaje abierto y en condiciones climáticas frías.

Cráneo original de Gibraltar 1 expuesto en el Museo de Historia Natural de Londres

Registro genético

Luego, se extrajo ADN antiguo de la raíz del primer molar. El genoma nuclear se leyó con una cobertura media de 1,3 veces y el genoma mitocondrial con una cobertura media de 561 veces.

De este modo, los científicos han descubierto que Thorin era un hombre que, según su ADN mitocondrial, es el más cercano al neandertal 'Nana', el apodo que se dio al cráneo 'Gibraltar 1' hallado en la cantera de Forbes en 1848, que a cualquier otro neandertal del que se tenga constancia. Esta revelación representó una sorpresa total para todos: Thorin estaba más cerca de Nana que incluso de los neandertales de Europa occidental que se encontraban a menor distancia geográfica de él. La relación genética observada entre Thorin y Nana indica que los neandertales de Gibraltar eran miembros de una población extendida del suroeste de Europa, aislada de los neandertales clásicos y que resistió en diversos núcleos hasta su desaparición final.

Ambos individuos pertenecen a un clado que incluye otros genomas neandertales recientemente descubiertos en la cueva polaca de Stajnia, en el yacimiento de Atapuerca (España) llamado Galería de las Estatuas, de la cueva caucásica de Mezmaiskaya (individuo Mezmaiskaya-1). Al mismo tiempo, difieren notablemente de otros neandertales tardíos de Eurasia occidental.

Ubicación y antigüedad de cinco especímenes de neandertales tardíos y otros sitios para los que se han publicado previamente datos de todo el genoma de muestras de neandertales. Crédito de laimagen: Hajdinjak et al, doi: 10.1038/nature26151.

Ejemplar único

El estudio del genoma nuclear mostró que Thorin pertenecía a una población que era marcadamente diferente de los neandertales tardíos europeos conocidos, a los que también pertenecía el individuo Vindija 33.19, Croacia (este es el genoma del neandertal tardío europeo más leído secuencialmente, por lo que se utiliza para la comparación).

Además, en el genoma de Thorin, los científicos no encontraron evidencia de que los ancestros de este neandertal se mezclaran con individuos del tipo anatómico moderno, es decir, Homo sapiens.

Según los cálculos de los investigadores, las líneas de Thorin y Vindija 33.19 divergieron hace unos 103.000 años (con una probabilidad del 95 por ciento). A modo de comparación: la línea del neandertal caucásico Mezmaiskaya-1 se separó hace unos 83.000 años, y el neandertal de Altai Chagyrskaya-8, hace unos 80.000 años.

El estudio genético indica también que el grupo al que pertenecía Thorin no era muy numeroso y que además estaba aislado de otras poblaciones de neandertales tardíos de las que se han obtenido datos genómicos.

Reconstrucción de un neandertal. Crédito de la imagen: Museo Neandertal de Mettmann (Alemania).

Población fantasma

Además del genoma de Thorin, los investigadores dirigieron su atención a la secuencia de ADN previamente publicada de un hombre de neandertal de Les Côttes. Descubrieron que hay una mezcla en su genoma dejada por una "población fantasma" previamente desconocida de estos humanos arcaicos que se separaron del linaje que condujo al neandertal de Vindija 33.19 hace aproximadamente 89.000 años.

Esto atestigua a favor del hecho de que en Europa hubo al menos dos líneas genéticas que se separaron del tronco común con los neandertales tardíos previamente conocidos.

Fuentes: levante-emv.com | radiobahiagibraltar.es | 18 de abril de 2023

Hallan en Sudáfrica que los humanos de hace 170.000 años cazaban y asaban caracoles terrestres gigantes

Metachatina kraussi, Achatinidae, Concha de molusco. Crédito: Centro de Biodiversidad Naturalis/Wikimedia Commons, CC BY.

Los humanos son los máximos depredadores del planeta Tierra. No importa cuán grande, con dientes afilados, con garras afiladas, con cuernos puntiagudos o venenosa sea una criatura animal, los humanos la han cazado para poder comer. Además, según un estudio dirigido por la Universidad de Witwatersrand, también lo han hecho por muy lentos, pequeños y viscosos que sean.

Los caracoles terrestres africanos gigantes (Achatinidae) fueron llevados sistemáticamente a la Cueva Fronteriza (Border Cave) en el este de Sudáfrica, para ser asados y consumidos desde hace 170.000 años, en una práctica que, posteriormente, continuó durante 100.000 años.

El emplazamiento de la Cueva Fronteriza (Border Cave) está ubicado en un acantilado con una vista increíble y alberga algunos de los fósiles más antiguos encontrados de humanos anatómicamente modernos. La habitación humana intermitente de la cueva desde hace 227.000 años hasta hace 600 años proporciona una ventana única al pasado a través de los distintos periodos de tiempo. Los arqueólogos han encontrado aquí algunas de las primeras evidencias de simbolismo, así como cuentas, herramientas, entierros y la construcción de lechos de hierba.

El estudio actual, publicado en Quaternary Science Reviews y titulado "Evidencia de la cocina y el consumo de caracoles terrestres grandes en Border Cave hace c. 170–70 ka. Implicaciones para la evolución de la dieta humana y el comportamiento social", ofrece un examen detallado de la dieta de fragmentos de caracoles terrestres encontrados a lo largo de la mayor parte de la historia de la cueva.

Fotografía detallada de un caracol terrestre gigante (Achatinidae)

Los caracoles son una excelente fuente de nutrientes, se mueven lentamente, son fáciles de cazar y podrían haber sido almacenados vivos en la cueva durante algún tiempo antes de ser consumidos, pero es más seguro comerlos cuando están cocidos.

Trabajos previos en la cueva han revelado la quema de madera para cocinar, calentarse y protegerse contra los depredadores. El registro del carbón vegetal también sugiere que las especies de plantas pueden haber sido seleccionadas por su látex, valor nutricional y propiedades insecticidas, medicinales y cosméticas.

Los fragmentos de conchas de caracol se encontraron en una variedad de colores, desde beige brillante hasta marrón y gris mate. Sospechando que las variaciones de color podrían deberse a la exposición al calor, los investigadores probaron fragmentos de conchas de caracoles terrestres gigantes modernos con varias exposiciones de tiempo y temperatura. Se pudo registrar el cambio de color, la pérdida de peso y la fragmentación de las muestras.

Las conchas de caracol, que comprenden capas de aragonito, experimentan una transición de fase mineralógica a calcita si se someten a un calentamiento considerable. La transformación de aragonito en calcita en el calentamiento de la cubierta experimental se rastreó con espectroscopia infrarroja y Raman. También se utilizó la microscopía electrónica de barrido para identificar mejor las transformaciones inducidas por el calor en lugar de los procesos de descomposición.

Los resultados del experimento llevaron a los investigadores a la conclusión de que los humanos trajeron caracoles terrestres africanos gigantes al sitio y los asaron antes de consumirlos.

Como señalan los autores, el consumo de caracoles terrestres continúa hoy en día en España, Francia, Italia, Portugal, Argelia, Marruecos, Túnez, Nepal, el sudeste de Asia y el noreste de la India, aunque es probable que se trate de prácticas reemergentes en lugar de un rastro ininterrumpido de consumo de caracoles como refrigerio de los primeros cazadores.

Fuente: phys.org | 6 de abril de 2023

Descubren en Alemania restos de un templo romano dedicado al dios Mitra

La estatua de Cautes, portador de la antorcha de Mitra, hallada en la excavación. Foto: GDKE-Rheinisches Landesmuseum/Landesarchäologie Trier

Las luces de las antorchas parpadean en el espacio subterráneo, iluminando las estatuas de piedra y proyectando sombras sobre los congregados. Los legionarios se sientan en bancos de ladrillo y observan las tallas de piedra. A través de la luz de las linternas, les devuelve la mirada su dios, una figura conocida y misteriosa a la vez.

La escena de culto parece en parte ominosa y en parte reverente, y, en su totalidad, parte de un documental de Netflix. En realidad, estas tenebrosas reuniones se celebraban en todo el antiguo mundo romano.

Arqueólogos de Tréveris, Alemania, descubrieron recientemente un templo donde se reunía este culto romano, según un comunicado de prensa de la Dirección General de Patrimonio Cultural (DGPC) de Renania-Palatinado. El lugar fue abandonado y destruido a finales del siglo IV d.C.

La estatua de Cautes, tal como ha sido hallada.

Los arqueólogos desenterraron una estatua en relieve de piedra caliza de 1,20 metros de altura de una figura conocida como Cautes, dijeron los expertos. Cautes, que acompaña al dios romano Mitra, aparece portando una antorcha hacia arriba (mientras que el segundo acompañante, Cautópates, porta una antorcha hacia abajo). Ambos simbolizaban, respectivamente, los amaneceres y los atardeceres, o la vida y la muerte.

La estatua muestra a Cautes erguido y mirando hacia la izquierda, según se observa en la foto de la administración municipal de Tréveris. Su mano derecha, ahora rota, está en posición vertical, tal vez en medio de un gesto o sosteniendo una posible antorcha desaparecida hace mucho tiempo.

Arqueólogos excavando el sitio del templo.

El ministro del Interior, Michael Ebling (SPD), responsable del Patrimonio Cultural, dijo que se trataba de descubrimiento espectacular cuando se presentó el hallazgo. Según explicó: "Una vez más la fascinante herencia romana de nuestro país es particularmente visible aquí en Tréveris. Es además la segunda evidencia del culto a Mitra hallada en la ciudad".

Basándose en esta estatua y en monedas romanas encontradas en las inmediaciones, los arqueólogos identificaron el lugar como un templo subterráneo o espacio de culto en donde se le rendía culto a Mitra, dice el comunicado.

Mitra, deidad originaria del antiguo Irán, era conocido por los romanos como dios de la luz y se asociaba normalmente con la lealtad al emperador, según la Enciclopedia Britannica. No está claro por qué ni cómo, pero Mitra se hizo popular en el imperio romano en el siglo II, agrega la enciclopedia. El culto a Mitra era muy popular entre el personal militar romano, según la publicación.

Monedas y otras reliquias fragmentadas desenterradas en Alemania. Captura de pantalla de un video del medio Südwestrundfunk (SWR).

Los espacios de culto solían construirse en cuevas o bajo tierra, de acuerdo con el medio alemán Südwestrundfunk. Estos santuarios solían incluir una representación de Mitra matando a un toro. El culto funcionaba en secreto, y, a pesar de que se han encontrado templos de Mitra en todo el Imperio Romano, las creencias y prácticas exactas de este culto siguen siendo un misterio.

Los arqueólogos de Tréveris trasladaron la estatua a un museo para restaurarla y conservarla, añade el comunicado. Las excavaciones en el templo comenzaron en febrero y continúan, dado que la ciudad planea construir un nuevo parque de bomberos en el lugar.

Tréveris está en el oeste de Alemania, unos 467 kilómetros al noroeste de Munich y cerca de la frontera con Luxemburgo. Afirma ser la ciudad más antigua de Alemania y una vez fue la metrópolis romana más grande al norte de los Alpes.

Fuentes: lajiribilla.com.mx | swr.de | 20 de abril de 2023