Aparece un 'pito musical' turdetano usado hace más de 2000 años en una laguna reseca de Doñana (Huelva)

Silbato tallado con detalles femeninos aparecido en una laguna de Doñana (Huelva).

Investigadores de la Estación Biológica de Doñana encuentran fortuitamente un instrumento 'musical' turdetano (500 a. C. - 206 a. C.) usado por última vez hace más de 2000 años. El hallazgo se ha producido en la reseca laguna Dulce (Huelva), en pleno corazón del Parque de Doñana. De momento, ha sido depositado en instalaciones museísticas de Sevi...

Según narra el investigador de la EBD, (@OxyuranusHXC) el pasado septiembre, con la laguna ya seca, entraron los jabalíes a hozar en busca de comida, desenterrando lo que ha resultado ser un silbato con forma femenina de la época turdetana.

"Os podéis imaginar la emoción al darse cuenta de que la piedra que uno ha recogido del suelo: 1) tiene rostro. 2) tiene más de 2000 años de antigüedad. 3) es un silbato", relata en un hilo que ha compartido.

"Se trata de un hallazgo fortuito, carece de contexto para poder decir más del mismo, aunque parece claro que se hacían en serie mediante moldes, y que hace más de 2000 años la zona en la que se ha encontrado pertenecía al golfo tartésico, o a unas jóvenes lagunas de Doñana".

El descubrimiento fue comunicado y entregado a las autoridades pertinentes y ha sido descrito junto con arqueólogos del Museo Arqueológico de Sevilla. Aquí puedes leer el documentado trabajo del hallazgo: https://revistas.uned.es/index.php/rdh/article/view/38599/28825

En un trabajo publicado por la UNED por Teresa Murillo Díaz, del Departamento de Prehistoria y Arqueología, UNED Sevilla (España); Miguel de Felipe, de la Estación Biológica de Doñana - CSIC y Fernando Fernández Gómez Real, de la Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría se explica que "analizando detalladamente su forma, es ligeramente acampanada, algo más ancha en la parte superior, para irse estrechando a partir del tronco, hacia las extremidades inferiores. La figura consta de cabeza, cuello, ancho, y pectoral; los brazos estarían extendidos, adosados al cuerpo mejor que sobre los senos, como en otros ejemplares. En la cara resaltan unas cuencas de ojos grandes, sin detalles, poco más que dos abultamientos separados por una nariz ancha y recta, ligeramente desviada hacia un lado.

Por debajo, apenas puede distinguirse la línea de la boca por el desgaste de la pieza, pero podríamos detallar una ligera comisura en su lado derecho; el mentón, por el contrario, muy pronunciado, dibujando una suave curva, muy femenina, que se prolonga hacia arriba en unas también suaves pero abultadas mejillas. La cabeza aparece cubierta con voluminoso tocado que deja caer sobre la espalda una delicada túnica o manto que se ajusta a los hombros, cubriría los brazos y se desliza por toda la espalda. La cara queda enmarcada por sendas trenzas que aparecen bajo el tocado y se alargan hasta los pechos".

La investigación tras el hallazgo resalta que "se trata de un vulgar 'pito' que todavía funciona, emitiendo un agudo silbido, como pudo sonar en tiempos, aunque no podemos imaginar con qué fin, si como herramienta de trabajo para comunicarse o transmitir mensajes, dar órdenes a una cuadrilla de remeros o cualquier otro tipo de trabajadores marcando pautas en las tareas".

La investigación afirma que tanto una pieza como otra, "la sonaja de Valencina y el pito de Doñana, son ejemplares dignos de tenerse en cuenta para una historia de la música en nuestra tierra, para esa arqueología musical que, dentro de la arqueología cognitiva, está conociendo en nuestros días un amplio desarrollo".

Sonajero de la Edad del Cobre hallado en Valencina de la Concepción (Sevilla) (2.500 a.C).

En un reciente trabajo de Margarita Díaz-Andreu y su equipo de investigación (Jiménez Pasalodos et al., 2021), recogiendo los testimonios más antiguos de evidencias materiales de prácticas musicales en el pasado remoto, nos hablan de la existencia de silbatos y sonajeros ya en el Neolítico, realizados unos sobre hueso y otros sobre caparazones de tortuga e incluso realizados en cerámica, como en nuestro caso, instrumentos a los que habría que sumar otros que no han dejado restos, por ser de materia orgánica.

Fuente: diariodejuelva.es | 30 de enero de 2024

Descubren la tumba de un rey maya desconocido enterrado con una impresionante máscara de jade

Máscara de mosaico de jade descubierta en el interior de un tumba de un gobernante desconcido en Chochkitam. Francisco Estrada-Belli/Tulane University.

Chochkitam, una antigua ciudad maya que se ubica en Guatemala, cerca de las actuales fronteras entre México y Belice, se ha convertido en el centro de la arqueología maya. Sus ruinas, que fueron exploradas ahora hace 100 años por Fran Blom, uno de los primeros directores del Instituto de Investigación Medio Americano (MARI) de Tulane, proporcionaron en 2022 a los arqueólogos un impresionante descubrimiento, que ha sido estudiado a fondo y que se ha dado a conocer ahora.

Y es que fue en este sitio arqueológico donde Francisco Estrada Belli (izquierda), un arqueólogo de la Universidad de Tulane (Nueva Orleans), descubrió la tumba de un rey maya desconocido que fue enterrado con una maravillosa máscara de mosaico de jade que representa al dios de la tormenta. "Los mayas nunca dejan de sorprenderme", ha manifestado el autor del sensacional descubrimiento.

"Este hallazgo milagrosamente se perdió entre dos túneles de saqueadores. Y ahora sabemos un poco más sobre la historia maya temprana", ha declarado Estrada Belli sobre la relevancia del descubrimiento. Por su parte, la Universidad de Tulane ha emitido un comunicado en el que que resalta que "un descubrimiento como este es un poco como 'ganar la lotería' en términos de información".

Hueso de fémur inciso descubierto dentro de una antigua tumba maya que data de hace 1.700 años en Chochkitam, Guatemala | Foto: Francisco Estrada-Belli / Universidad de Tulane.

TUMBAS SAQUEADAS

"Han pasado cien años y ningún arqueólogo había excavado allí, pero, desgraciadamente, sí muchos saqueadores de tumbas", recuerda con consternación el arqueólogo. Su equipo empezó la excavación en Chochkitam en 2019, y gracias a la tecnología LiDAR (una técnica que utiliza la luz de un láser para obtener imágenes de la superficie de la tierra), los arqueólogos lograron descubrir los túneles excavados por los saqueadores en una pirámide abandonada de Chochkitam, donde vieron un espacio que se les habían pasado por alto.

A tan solo dos metros de donde los saqueadores afortunadamente habían dejado de buscar, los arqueólogos localizaron la tumba oculta, de 1.700 años de antigüedad. "Por suerte, el único daño que había sufrido la sepultura fue el derrumbe de su techo de piedra", declaró Belli.

Lugar de excavación de una antigua tumba maya descubierta en Chochkitam, Guatemala | Foto: Francisco Estrada-Belli/Universidad de Tulane.

En el interior de la tumba, los investigadores encontraron un cráneo humano, varios dientes, una caja de piedra, ofrendas funerarias compuestas por una vasija,16 conchas de spondylus (una rara ostra espinosa que era utilizada por la realeza como joya y también como moneda) y numerosos fragmentos de jade que, al ensamblarse, formaban una increíble máscara de jade.

Además de todos estos fabulosos elementos, se hallaron en la tumba algunos huesos en los que se habían grabado escenas que mostraban a un gobernante sosteniendo la cabeza de una divinidad igual a la de la máscara, así como un nombre, Itzam Kokaj Bahlam, que, según los investigadores, podría tratarse del nombre del rey maya allí enterrado, que gobernó Chochkitam hacia el año 350 d.C.

Fémur inciso junto al dibujo de las escenas en él representadas realizado por Alexandre Tokovinine, de la Universidad de Tulane.

CONEXIÓN CON OTRAS CIUDADES

Las ofrendas localizadas en la tumba se han datado precisamente hacia 350 d.C., y han proporcionado una amplia información acerca de la conexión que pudieron haber mantenido los gobernantes mayas de Chochkitam con los de ciudades tan importantes como Tikal y Teotihuacán. También arrojan luz sobre los ritos funerarios y las dinastías reales que gobernaron la ciudad en un momento de la historia maya muy poco conocido.

"Todo me sugiere que se trataba de un rey maya que formó parte de una red de la realeza en la esfera de influencia de Tikal y Teotihuacán", afirma convencido Belli.

Desde el descubrimiento de la tumba del gobernante maya de Chochkitam en 2022, los arqueólogos han trabajado para conservar, escanear, fotografiar e interpretar todos los hallazgos que se han realizado. Los investigadores también tienen el objetivo de descifrar cuál fue el papel que jugaron Chochkitam y sus reyes en el mundo maya de su época, y para ello llevarán a cabo pruebas de ADN en los huesos encontrados y seguirán con las excavaciones en el interior de la antigua pirámide.

Fuentes: historianationalgeographic.com.es | news.tulane.edu | 7 de febrero de 2024

Descifran con Inteligencia Artificial un papiro carbonizado de la antigua Herculano de hace 2.000 años

Papiro carbonizados de Herculano. Vesuvius Challenge

El 24 de agosto del año 79 d.C. el monte Vesubio explotó. La violenta erupción volcánica cubrió de lava y ceniza centenares de hogares y engulló por completo las ricas ciudades romanas de Pompeya y Herculano. Estas localidades napolitanas fueron descubiertas de forma accidental en el siglo XVIII y, en el marco de sus primeras excavaciones, financiadas por el rey Carlos III de España, se descubrió en la segunda de ellas una inmensa biblioteca perdida en la historia en una lujosa villa que había pertenecido al suegro de Julio César.

Los cerca de 800 pergaminos encontrados y conservados en Nápoles están completamente carbonizados y cualquier intento de desenrollarlos de forma física los haría desintegrarse en mil pedazos. Leer su contenido ha sido una quimera... hasta hoy. Gracias al uso de tomografías computarizadas, reproducciones en 3D, un adecuado uso de herramientas de inteligencia artificial y el trabajo de cientos de investigadores se ha podido "desenrollar" y leer un 5% de uno de estos pergaminos.

El texto descifrado está escrito en griego y pertenece a una obra filosófica inédita posiblemente escrita por el epicúreo Filodemo de Gadara. En ella el autor habla sobre la música, la comida y reflexiona sobre los placeres de la vida. Después de algunas disertaciones lanza una pulla hacia sus adversarios, tal vez los estoicos, que "no tienen nada que decir sobre el placer, ni en general ni en particular".

Texto descifrado y reconstruido de la obra de Filodemo Vesuvius Challenge.

Jugosa recompensa

El 15 de marzo de 2023, Nat Friedman, exdirector de la empresa de software GitHub, Daniel Gross, inversor, ingeniero y una de las personas más influyentes en el mundo de la IA, y Brent Seales, informático de la Universidad de Kentucky y primera persona en desenrollar de forma virtual un pergamino en 2016, lanzaron el Vesuvius Challenge en el que ofrecían hasta un millón de dólares en premios, obtenidos mediante donaciones, a quienes fueran capaces de recuperar el texto de unos pocos papiros de Herculano.

Se tomaron imágenes de pergaminos del Instituto de Francia en el acelerador de partículas Diamond Light Source cerca de Oxford y se publicaron las tomografías computarizadas de alta resolución de los mismos. Para evitar una competencia feroz por el primer premio y fomentar la acumulación de conocimiento, fueron ofreciendo toda una serie de premios menores y publicando los avances de su comunidad. Así, cuando se lograron descifrar las primeras letras compartieron los resultados en una serie de foros con explicaciones de cómo lo habían logrado.

Las imágenes más completas fueron obtenidas por Youssef Nader, estudiante de doctorado en Berlín y primero en leer algunas columnas del texto, Luke Farritor, universitario y pasante de SpaceX, y Julian Schilliger, estudiante suizo de robótica que pudo realizar un mapa 3D del papiro. Su trabajo, metodología y resultados han sido examinados por arqueólogos e informáticos para garantizar su fiabilidad. Este equipo de expertos consideró su trabajo el más legible y claro de todos los presentados, motivo por el cual han sido recompensados con 700.000 dólares.

Funcionamiento del detector de tinta. Vesuvius Challenge.

¿Cómo lo hicieron? Al parecer, el algoritmo utilizado por Farritor descubrió sutiles diferencias en la textura superficial del papiro. Ello le permitió sacar a la luz diversas letras como πορφυρας (porphyras), término que significa "púrpura" en griego, un color asociado en la antigua Roma con el poder.

El principal método utilizado para obtener una imagen tan precisa de los papiros ha sido la detección de tinta mediante técnicas informáticas utilizando como base las tomografías en alta resolución y mapas 3D. Así, una IA y varias aplicaciones informáticas identificaban si existía tinta o no. De esta manera, se fue dibujando el texto evitando falsas interpretaciones de la IA.

La inteligencia artificial permite descifrar algunas de las palabras ocultas en los papiros de Herculano. Vesubius Challenge.

Imagen de la primera palabra descifrada por la IA: porphyras, que en griego significa "púrpura". Vesubius Challenge.

En una entrevista, Brent Seales (izquierda), investigador Universidad de Kentucky, declaró que "hemos logrado saber cómo leer la tinta de los papeles de Herculano. Eso nos da la oportunidad de revelar el 50, el 70, o tal vez el 80 % de toda la colección. Hemos construido un barco y ahora queremos que todo el mundo suba a bordo", afirma con entusiasmo. "Leer las palabras de los papiros de Herculano es como pisar la Luna".

Revolución

"Este es el comienzo de una revolución en la papirología de Herculano y en la filosofía griega en general. Es la única biblioteca que nos ha llegado desde la época de los antiguos romanos", explica la doctora Federica Nicolardi (derecha), papiróloga de la Universidad Federico II de Nápoles.

Este paso de gigante en la arqueología y la papirología abre la puerta a un universo de conocimiento que se creía perdido para siempre. Por el momento, aún no se sabe el título de la obra descifrada, pero podría ser una parte de Sobre la música -de la que sólo se conoce uno de sus cuatros libros- escrito por Filodemo, maestro de Virgilio y filósofo que organizó la biblioteca de Herculano.

Ruinas de la Villa de los Papiros. Wikimedia Commons.

Ante los resultados tan prometedores, el equipo de Vesuvius Challenge espera encontrar muchas más obras del filósofo griego una vez se domine la técnica de descifrado. Las esperanzas sobre los rollos de papiro carbonizado son muchas y el equipo sueña con descubrir más obras inéditas. ¿Un diálogo de Aristóteles? ¿Un poema de Safo? ¿Una historia perdida de Homero o de Tito Livio?

Para acrecentar el misterio, aún quedan dos niveles sin excavar en la antigua biblioteca que podrían contener muchos más papiros enterrados por más de 2.000 años en la ceniza de aquel volcán que creó toda una cámara del tiempo.

Los hallazgos de la investigación llevada a cabo se han publicado en la revista Nature.

Fuentes: elespanol.com | nationalgerographic.com.es | 6 de febrero de 2024

Utilizan ADN antiguo para mapear la migración durante el Imperio Romano

Un estudio dirigido por investigadores de Stanford Medicine encontró que había un alto grado de diversidad en el Imperio Romano y sus alrededores.

A lo largo del reinado de mil años del Imperio Romano, poblaciones dispares comenzaron a conectarse de nuevas maneras: a través de rutas comerciales, colaboración económica y política y esfuerzos militares conjuntos. Ahora, un equipo internacional dirigido por investigadores de la Universidad de Medicina de Stanford ha utilizado material genético de esqueletos antiguos para reunir una imagen detallada de los patrones de viaje y migración ocurridos durante el apogeo del imperio.

Su estudio, publicado en eLife, ha analizado el ADN de miles de humanos antiguos, incluidos 204 que no habían sido secuenciados previamente, y en el se muestra cuán diversas eran muchas áreas del Imperio Romano: al menos el 8% de las personas incluidas en el estudio no procedían originalmente del área de Europa, África o Asia en la que fueron enterrados.

"Hasta ahora, teníamos que confiar en el registro histórico y arqueológico para tratar de reconstruir cómo la población interactuaba y cambiaba durante ese tiempo", dice Jonathan Pritchard (izquierda), profesor de genética y biología en la Escuela de Humanidades y Sciences y uno de los autores principales del artículo. "Ahora podemos agregar nuevos detalles desde una perspectiva genética".

Geografía en expansión

Anteriormente, el grupo de Pritchard utilizó ADN antiguo para estudiar la diversidad genética de las personas en Roma y sus alrededores durante un período de 12.000 años de historia que abarca desde la Edad de Piedra hasta la época medieval. Mostraron cómo el área romana se volvió rápidamente más diversa en la época de la fundación oficial de la ciudad de Roma, que data del 753 a. C.

El equipo se preguntó qué parte de esa diversidad era exclusiva de Roma, la capital del imperio, y qué tan diversas podrían haber sido las áreas más remotas. En el estudio, se centraron en una ventana de tiempo más estrecha (desde el final de la Edad del Hierro, hace 3.000 años, hasta la actualidad), pero observaron un área geográfica que cubre todo el Imperio Romano. Utilizaron datos de ADN existentes de miles de esqueletos que habían sido recolectados en Europa central, Europa del este, Asia central, Gran Bretaña, el norte de Europa y el norte de África. Además, secuenciaron 204 nuevos genomas de 53 sitios arqueológicos en 18 países. La mayoría eran de personas que murieron durante los períodos conocidos como Roma imperial y la antigüedad tardía, del siglo I al VII a.C.

"Cuando comenzamos este estudio, no había muchos genomas históricos de este período, por lo que las nuevas muestras llenaron este vacío", dijo Clemens Weiss (derecha), ex becario postdoctoral en el laboratorio de Pritchard el cula ha codirigido el estudio.

Lo primero que notó el equipo fue que, durante el período en cuestión, las áreas menos diversas tendían a ser aquellas que estaban geográficamente aisladas, como las tierras altas de Armenia, que están rodeadas de montañas. Sin embargo, en general, la mayoría de las áreas del Imperio Romano tenían esqueletos de diversos orígenes genéticos. Entre las zonas particularmente diversas se encontraban Cerdeña, los Balcanes y partes de Europa central y occidental.

"En su mayor parte, las observaciones complementan lo que los historiadores y arqueólogos han planteado en sus hipótesis", dijo Margaret Antonio (izquierda), estudiante de posgrado en el laboratorio de Pritchard y coprimera autora del artículo. “Por ejemplo, la cerámica norteafricana se encontró en todo el Imperio Romano, y ahora también hemos encontrado evidencia genética de personas del norte de África que residían en las actuales Italia y Austria”.

Conexiones en el mapa

Para comprender mejor qué áreas estaban conectadas entre sí, el equipo llevó a cabo un gran análisis de las personas desenterradas en cada lugar cuya ascendencia genética no coincidía con el lugar donde fueron encontradas, lo que sugiere que ellos o sus ancestros recientes habían viajado o migrado al lugar de su entierro.

Descubrieron que, entre las personas que no eran locales del lugar donde fueron encontrados, existían patrones comunes de ascendencia. Las personas encontradas en Gran Bretaña e Irlanda eran más probablemente del norte o centro de Europa, por ejemplo, y mucho menos probable que procedieran del suroeste de Europa o del norte de África. El análisis les ayudó a explicar cómo las rutas comerciales y los movimientos militares podrían haber impulsado la diversidad.

"La expansión del imperio romano fue una empresa enorme que requirió miles de tropas, práctica del comercio, trabajo, esclavitud y desplazamiento forzado", dijo Weiss. "A medida que el mismo se expandió, atrajo a más y más personas y aumentó la movilidad en continentes enteros".

Los investigadores concluyeron que el aumento de la movilidad significó que, por primera vez, las personas viajaran a través de un continente durante su vida. Si bien la mayoría de los análisis de ADN antiguo revelan una difusión de poblaciones a lo largo de muchas generaciones, los nuevos resultados muestran que muchas personas se desplazaron grandes distancias durante sus vidas.

Cronología de genomas nuevos y publicados.

(A) 204 genomas recientemente informados (círculos negros) se muestran junto con los genomas publicados (círculos grises), ordenados por tiempo y región (coloreados de la misma manera que en (B). (B) Las ubicaciones de muestreo de los genomas recientemente informados (negro) y publicados (gris) se indican mediante diamantes, cuyo tamaño varía según la cantidad de genomas en cada ubicación.

Una población estable

Los nuevos datos llevaron a los investigadores a un enigma desconcertante: si la gente hubiera seguido moviéndose al ritmo observado durante el período estudiado, las diferencias regionales habrían comenzado a desaparecer gradualmente. Los genomas de las personas de Europa del este, por ejemplo, se habrían vuelto indistinguibles de los de Europa occidental y el norte de África, y viceversa. Sin embargo, la mayoría de estas poblaciones (incluso hoy en día) siguen siendo genéticamente distintas.

Esto puede deberse, en parte, a que los individuos no siempre se reproducían en los lugares donde murieron, y es posible que algunos hayan viajado durante su vida, pero que también pudieron haber regresado a sus casas de origen antes de tener hijos.

"Todo lo que podemos decir con certeza es dónde murieron estas personas", afirma Weiss. "Si alguien murió durante un despliegue militar, no significa, obviamente, que se hubiera reasentado permanentemente en el área donde se encontró su cuerpo".

Sin embargo, el equipo tiene otra hipótesis: la movilidad de las personas disminuyó drásticamente con el colapso del Imperio Romano. No tienen suficientes datos de ese período para saberlo con seguridad, pero esperan realizar estudios futuros que se centren en la época medieval, la Ilustración y la Revolución Industrial para ver cómo se comparan los patrones de movilidad.

Por ahora, el equipo está emocionado de poder vislumbrar cuán móviles eran las personas durante el Imperio Romano.

“Esto demuestra que el movimiento no es nuevo; la gente del Imperio Romano realmente viajaba de la misma manera que lo hacemos nosotros hoy en día”, asegura Antonio. “Se mudaron por motivos de comercio y trabajo, y algunas personas se establecieron donde se mudaron y otras no”.

Fuente: Universidad de Stanford | 30 de enero de 2024

La Puerta de Ishtar de Babilonia pudo construirse con otro propósito, según sugiere un nuevo estudio

La Puerta de Isthar se construyó en tres fases y servía de entrada a la antigua Babilonia.

Se pensaba que la Puerta de Ishtar de Babilonia, de color azul brillante, había sido construida para celebrar la conquista de Jerusalén, pero un nuevo análisis sugiere que pudo haber sido erigida años después.

El icónico edificio de ladrillo vidriado, que cerraba y abría el acceso al templo de Marduk, conocido como el 'soberano de la humanidad', y que el rey Nabucodonosor II ordenó construir y decorar con toros salvajes y dragones mušhuššu mientras gobernaba el imperio babilónico del 605 al 562 a. C., se construyó en tres fases y sirvió como entrada a la antigua ciudad de Babilonia, situada al sur de Mesopotamia. Sin embargo, las fechas exactas de cada fase de construcción han sido objeto de debate durante mucho tiempo, según un estudio publicado en la revista PLOS One.

Si bien se sabe que Nabucodonosor II ordenó la primera fase, ya que estos ladrillos tienen inscrito su nombre, no estaba tan claro si había pasado algún tiempo antes de que se completaran la segunda y tercera fases, según el estudio. Algunos investigadores incluso se preguntaron si Nabucodonosor II había muerto antes de que se terminara la puerta.

Dragón Mušḫuššu. Museo de Pérgamo.

Para dejar las cosas claras, los arqueólogos recolectaron pequeñas muestras de cinco de los ladrillos de barro cocidos de la Puerta de Ishtar (ahora reconstruida en el Museo de Pérgamo en Berlín) distribuidos en las tres fases y midieron los campos geomagnéticos de cada una en un proceso conocido como arqueomagnetismo.

El arqueomagnetismo mide el efecto del campo magnético de la Tierra que se conserva en el registro arqueológico de un objeto, según el Museo McClung de Historia Natural y Cultura de la Universidad de Tennessee, Knoxville. Ofrece una marca de tiempo aún más precisa que la datación por radiocarbono, el método más común de medición arqueológica.

Este nuevo análisis determinó que no hubo "lagunas cronológicas significativas" entre cada fase de construcción y que el "complejo de puertas se construyó algún tiempo después de la conquista babilónica de Jerusalén"que tuvo lugar en el 586 a.C.". Durante la conquista de Jerusalén, los babilonios destruyeron el Templo de Salomón, también conocido como el Primer Templo, quemó la ciudad y exilió a los judíos a babilonia al sur de Mesopotamia.

a) Puerta de Ishtar reconstruida en el Museo de Pérgamo en Berlín, Alemania. b) Ladrillo con vidriado azul en el lado izquierdo. c) Parte trasera del ladrillo. Se tomaron pequeños fragmentos (0,1 g) del ladrillo y se colocaron en pequeños tubos como el que se muestra en el recuadro. Fotos, con autorización de Staatliche Museen zu Berlin, Vorderasiatisches Museum / Olaf M. Teßmer.

Los investigadores concluyeron que, debido a que todas las mediciones del campo magnético llevada a cabo en los cinco ladrillos eran similares, las reconstrucciones se realizaron aproximadamente en la misma época: 583 a.C., según el estudio.

"La edad se basa en el período del reinado de Nabucodonosor II, durante el cual se dio la orden de construir la puerta", escribió el equipo en el estudio, indicando que el rey estaba vivo cuando se completó la puerta.

El hallazgo sugiere que la Puerta de Ishtar no cambió de estilo durante el proceso de construcción sino que "las fases II y III están relacionadas con el diseño original de la puerta y reflejan el proceso de construcción en lugar de adiciones posteriores, separadas de la construcción original de la fase I", escriben los autores.

Los investigadores esperan realizar análisis arqueomagnéticos similares en otras estructuras antiguas de Mesopotamia, ya que los ladrillos de barro cocidos han demostrado ser fuentes fiables para esta técnica de datación y eran un material de construcción común durante esa época.

Fuente: livescience.com | 17 de enero de 2024

Encuentran indicios de un sistema de ascendencia patrilineal para las comunidades de la cultura Campaniforme de Eurasia occidental

Tumbas de adultos y niños del periodo de la cultura Campaniforme. (A) Altwies ''Op dem Boesch'', Luxemburgo (fotografía: Le Brun-Ricalens et al. 2011; Institut National de Recherches Archéologiques); (B) Dunstable Downs, Southern Bedfordshire, Reino Unido (grabado: WG Smith 1894). Crédito: Zedda et al., Scientific Reports.

Los conmovedores entierros prehistóricos que contienen los restos de un adulto y un niño depositados en una tumba, como si se abrazaran en la muerte, han fascinado a los arqueólogos durante mucho tiempo.

Utilizando ejemplos de la Edad del Bronce temprana de Luxemburgo y Gran Bretaña, un nuevo estudio dirigido por investigadores de las universidades de Mainz y Ferrara y publicado en Scientific Reports proporciona información sobre las relaciones familiares en las comunidades prehistóricas y la transición del entierro colectivo al individual en el tercer milenio a.C. en Eurasia occidental.

Los resultados proporcionan la primera evidencia genética de que las comunidades pertenecientes a la cultura Campaniforme del noroeste de Europa enterraban a sus niños con sus madres biológicas y otros parientes biológicos cercanos.

Ubicación de Altwies “Op dem Boesch” (punto rojo) y Dunstable Downs (punto azul). Crédito: Zedda et al., Scientific Reports.

Asombrosas similitudes entre un doble entierro en Luxemburgo y una tumba británica a 500 kilómetros de distancia

En el año 2000, los arqueólogos luxemburgueses que trabajaban en la construcción de una carretera en el sur del país, en Altwies "Op dem Boesch", descubrieron tumbas que datan del período de la cultura Campaniforme (2450-1800 a.C.). Una de ellas contenía los esqueletos de una mujer y un niño, enterrados uno frente al otro, mientras la mujer sostenía la cabeza del niño muerto en su mano en un gesto final de amor maternal.

Como parte de un nuevo proyecto sobre la prehistoria de Luxemburgo, esta antigua tragedia familiar ha brindado a un equipo de investigadores europeos la oportunidad de responder a preguntas más amplias sobre las prácticas funerarias de la Edad del Bronce y las relaciones familiares en Europa a través de la arqueología, la antropología y el ADN antiguo, dado que este tipo entierro no fue único.

El trabajo del Dr. Foni Le Brun-Ricalens, director del Institut National de Recherches Archéologiques (INRA) y uno de los instigadores del estudio, descubrió otra tumba, inquietantemente similar, en un túmulo redondo en Dunstable Downs, en Bedfordshire, Gran Bretaña: a más de 500 kilómetros de Altwies.

Este entierro, descubierto en 1887, llevó al arqueólogo Dr. Maxime Brami, de la Universidad Johannes Gutenberg de Mainz (JGU), uno de los autores principales del estudio, a investigar si las dos tumbas estaban conectadas de alguna manera. ¿Cuál fue el significado particular del doble entierro? ¿El adulto y el niño murieron juntos, tal vez violentamente? ¿Se conocían estas familias? ¿Por qué los rituales funerarios eran tan similares? Para responder a estas preguntas, se formó un equipo para analizar y comparar el ajuar funerario y los restos óseos de las tumbas de Gran Bretaña y Luxemburgo.

La tumba de Altwies, a la izquierda: los huesos de la madre y el niño resaltados; Derecha: reconstrucción hipotética de la tumba basada en rasgos fenotípicos inferidos en parte de los genomas antiguos. Crédito: Zedda et al., Scientific Reports.

Un análisis de ADN antiguo revela que los adultos y los niños estaban estrechamente relacionados

Los huesos de Dunstable Downs fueron rastreados hasta Luton Cultural Trust con la ayuda de Elise Naish, directora de Patrimonio y Colecciones de Luton Cultural Trust, y la Dra. Katie Meheux de la Biblioteca del Instituto de Arqueología del Colegio Universitario de Londres (UCL). A pesar de su temprana fecha de excavación, a finales del siglo XIX, la procedencia de los esqueletos estaba bien documentada y los huesos se encontraban en buen estado de conservación.

La antropóloga Dra. Nicoletta Zedda, de la Universidad de Ferrara, autora principal del estudio, pudo examinar los restos, y junto con genetistas de la Universidad Johannes Gutenberg de Mainz (JGU), analizar los genomas de los cuatro esqueletos de los dos entierros con adultos y niños.

El ADN reveló información fascinante sobre la ascendencia y la cultura compartidas en la Europa de la Edad del Bronce Temprana. Sobre los cuatro individuos, aunque separados por cientos de kilómetros, se pudo rastrear la mayor parte de su ascendencia en poblaciones esteparias que emigraron desde Europa central y oriental en el III milenio a.C. Quizás lo más significativo fueron las intrigantes relaciones familiares reveladas.

"Los esqueletos de Altwies pertenecían a una mujer y a un niño de unos tres años de edad, y el análisis de ADN reveló que en realidad eran madre e hijo", explicó la doctora Nicoletta Zedda (izquierda). "Sin embargo, el parentesco era diferente en Dunstable Downs: una mujer joven y una niña de unos 6 años eran en realidad tía y sobrina paternas".

Los datos genéticos sugieren un sistema de descendencia patrilineal

En Europa continental, la disposición de las tumbas de la cultura Campaniforme seguía reglas estrictas basadas en el sexo del individuo. En Altwies, la disposición de la tumba estaba alineada con el sexo del niño, un varón, y no con el de su madre biológica. En Dunstable Downs, la mujer y la niña tenían un parentesco de segundo grado por parte paterna, lo que sugiere que aquí una tía paterna quizás desempeñaba el papel de padre sustituto o cuidador principal de la niña, al menos en caso de muerte.

"Los datos podrían indicar un sistema de descendencia patrilineal para el pueblo de la cultura Campaniforme de Eurasia occidental", indica el arqueólogo Dr. Maxime Brami (derecha). "Y nuestros hallazgos sugieren que, al menos en algunas comunidades de la Edad del Bronce Temprano, las familias extensas vivían y enterraban a sus muertos juntas, poniendo énfasis en las relaciones biológicas y de parentesco".

Una práctica funeraria altamente codificada con un significado perdido

Aún se desconocen la causa de la muerte y los motivos de los entierros conjuntos. No se encontraron marcas de violencia en los esqueletos. Investigaciones adicionales del proyecto de investigación descubrieron más de cien entierros conjuntos de adultos y niños similares a los descritos aquí en toda Eurasia, los cuales datan del III y II milenio a.C.

Los investigadores podrían proponer muchas explicaciones para el entierro conjunto y la muerte simultánea, tal vez producidas por violencia, infecciones o pandemias, pero las sorprendentes similitudes entre los entierros de Luxemburgo y Gran Bretaña sugieren que las comunidades, e incluso quizás las familias, en la Europa de la cultura Campaniforme lloraron a sus muertos de acuerdo con creencias y rituales ampliamente extendidos y seguidos de modo muy similar.

"El cuerpo de una mujer, acostada como si durmiera y sosteniendo a un niño en sus brazos es conmovedor y emotivo. Aunque esa imagen pacífica puede tener un significado que se diría perdido, dado que refleja una costumbre o ritual que se ha conservado a lo largo de miles de kilómetros y entre muchas culturas diversas", concluye el Dr. Maxime Brami.

Fuente: Universidad de Mainz | 29 de enero de 2024

La agricultura comenzó en el norte de África hace unos 7.500 años gracias a la inmigración, revela el ADN de entierros neolíticos

En Marruecos crecen campos de trigo dorado. (Crédito de la imagen: foto de Akdi/Shutterstock).

La era Neolítica, cuando se adoptaron la agricultura y la ganadería, se ha convertido en uno de los períodos de transición social y económica más estudiados en los últimos años. Fue un período que impulsó grandes cambios en la evolución de la sociedad humana.

Investigaciones recientes, fruto de proyectos que combinan excavaciones arqueológicas y análisis de ADN antiguo, apuntan a un rápido desarrollo en Oriente Medio, en la región conocida como el Creciente Fértil. Las innovaciones que surgieron allí se difundieron posteriormente y fueron adoptadas por las comunidades de cazadores-recolectores de la península de Anatolia (actual Turquía).

Hace unos 8.500 años, miembros de comunidades agrícolas cruzaron el mar Egeo, llevando a Grecia y los Balcanes técnicas similares a las utilizadas en Anatolia. Cinco siglos después, algunos cruzaron a Italia.

El Neolítico llega a la península ibérica

La agricultura apareció por primera vez en la península ibérica hace unos 7.600 años. Esto se produjo paralelamente a su aparición en las islas de Córcega y Cerdeña, así como a su paulatina expansión por los valles fluviales de la Europa continental.

Ello condujo a un marcado aumento del tamaño de la población y se produjo un enorme cambio demográfico cuando los cazadores-recolectores locales fueron asimilados, lo que provocó una amplia variación genética y cultural. Estas comunidades fueron las últimas de la era Mesolítica.

En la península ibérica, las prácticas que trajeron las poblaciones neolíticas fueron similares a las que habían aparecido unos siglos antes en Italia. La decoración de la cerámica es particularmente significativa, ya que es un fuerte indicador de afinidades culturales. Generalmente consistía en motivos impresos, conocidos como cerámica Cardial, en la que a menudo se utilizaban conchas marinas de berberechos para crear impresiones de borde dentado.

Este tipo de cerámica se ha encontrado en las zonas costeras de todo el Mediterráneo, por lo que se cree que los pueblos del Neolítico viajaban en sencillas embarcaciones que navegaban cerca de la orilla. En un tiempo relativamente corto, estas poblaciones llegaron a ocupar toda la península ibérica, donde experimentaron una rápida evolución cultural.

Cuenco con decoración cardial. Cueva de la Sarsa. V-IV milenio a.C., Museo de Prehistoria de Valencia. Jerome Roure Pérez/Wikimedia Commons

Cruzando el estrecho de Gibraltar

Mientras el Mesolítico se desarrollaba en Europa, las comunidades norteafricanas también subsistían gracias a la caza y la recolección. Genéticamente eran muy similares a grupos de varios miles de años antes, del final del Paleolítico superior, de los que se han descubierto restos en la cueva de Taforalt en Oujda, Marruecos. Estos grupos no parecían disponer de alfarería, al menos no los del norte del Magreb.

Más al sur, el Sahara tenía un aspecto muy diferente al de hoy. Era más húmedo e incluso contaba con zonas de sabana, bosques, ríos y lagos. Allí, la población cazadora-recolectora sí parecía disponer de cerámica, concretamente en zonas como los actuales Mali, Níger y Sudán.

Hace unos 7.500 años, comenzaron a aparecer signos de agricultura y ganadería en el norte de Marruecos, junto con cerámica impresa Cardial, la cual tenía muchas similitudes con piezas encontradas en la península ibérica mediterránea. Estas se han encontrado principalmente en la península de Tingitana, cerca de la actual Tánger.

Las innovaciones agrícolas incluyeron cultivos de cereales (trigo y cebada) y leguminosas (frijoles, guisantes y lentejas), así como la cría de ovejas y cabras. Junto con la aparición de la cerámica, hay evidencia de cuentas que decoraban pequeños gasterópodos marinos, así como cuentas hechas de cáscaras de huevos de avestruz que estaban muy extendidas en sitios anteriores y en toda la antigua África en general.

Cómo se difundió la innovación

Estos acontecimientos plantean la cuestión de si estas innovaciones podrían haberse extendido desde la península ibérica. Si es así, ¿Cómo fueron adoptados?

El estudio de los restos humanos de esta época, descubiertos en Kaf Taht el-Ghar, cerca de Tetuán, en Marruecos, ha aportado respuestas. El análisis del ADN antiguo de cuatro individuos, que datan de hace entre 7.400 y 7.100 años, cuenta una historia de mestizaje y cruces transcontinentales.

A diferencia de hallazgos anteriores, los habitantes neolíticos de esta cueva eran genéticamente similares a los pueblos neolíticos europeos, en su mayoría de herencia anatolia (del área que corresponde aproximadamente a la actual Turquía), con contribuciones de los antiguos cazadores-recolectores mesolíticos europeos. La población local sólo constituía entre el 15 y el 20% del acervo genético.

Esto indica una población neolítica en la zona que podríamos definir como "criolla". Era genéticamente similar a la que se hallaba presente en la misma época en la península ibérica, y muy diferente a la que había habitado la región unos siglos antes.

Por el contrario, en una necrópolis de 7.100 años de antigüedad, situada apenas a 200 kilómetros al sur (la cueva Ifri N'Amr Ou Moussa), se descubrió una comunidad entera de agricultores. Aunque tenían cerámica impresa, su perfil genético era enteramente autóctono de la región. Esto parece ser evidencia de que la población local simplemente adoptó las prácticas neolíticas sin asimilarse a una nueva sociedad.

Youssef Bokbot, del Instituto Nacional de Arqueología de Marruecos, y Cristina Valdiosera, de la Universidad de Burgos, sostienen dos cráneos del yacimiento marroquí de Ifri Ouberrid. C. V.

Siguiendo la huella de la cerámica

Mil años después, hace unos 6.500 años, aparecieron nuevos tipos de cerámica en yacimientos neolíticos de la costa atlántica de Marruecos. Tenían decoraciones moteadas y, a menudo, impresiones de cuerdas similares a las que se ven en el Sahara.

El análisis genético de tres individuos vinculados a este tipo de cerámica, hallados en la necrópolis de Skhirat-Rouazi, cerca de Rabat, revela una vez más un proceso de cambio. Parecen descender de poblaciones neolíticas, no de Anatolia sino del Levante mediterráneo (Oriente Medio). Se cree que viajaron desde el Sinaí, atravesando un Sahara mucho más húmedo y hospitalario que el actual, y acompañando a manadas de animales. Conocidos como grupos de pastores, su genética también incluye un pequeño porcentaje de cazadores-recolectores locales.

Finalmente, hace 5.700 años, hacia el final del Neolítico, el ADN humano descubierto en el yacimiento de Kelif el Baroud, también cerca de Rabat, parece cerrar el círculo, con evidencias de mestizaje entre todos los grupos anteriores. El genoma encontrado allí es una mezcla derivada de cazadores-recolectores indígenas del norte de África, agricultores de Anatolia mezclados con cazadores-recolectores europeos y grupos de pastores del Levante.

En el contexto general del Magreb Occidental, esto constituye la base de un crisol ancestral de culturas que ahora comparten la mayoría de sus habitantes. El acervo genético de la población actual de la región es una unión, formada durante millones de años, de tres continentes.

Fuente: theconversation.com | 30 de enero de 2024