20 años y un premio perdido.

El municipio pacense de Alange se ha enterado veinte años después de que sus termas romanas, uno de los principales reclamos de su conocido balneario, fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco el 8 de diciembre de 1993, incluido en el Conjunto Arqueológico de Mérida.



Así lo ha indicado a Efe su alcalde, Juan Pulido (PSOE), que ha mostrado su sorpresa "y algo de indignación" por esta noticia que se ha conocido después de que ayer el Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida aprobase una modificación, a instancia de la UNESCO, sobre la lista de elementos incluidos dentro del Conjunto Arqueológico de Mérida, entre los que aparecen las termas.
Sin embargo, este hecho "ha permanecido todo estos años en un cajón", según ha reconocido hoy a Efe Pulido, que, no obstante, no piensa pedir responsabilidades sino intentar sacar a partir de ahora el máximo provecho turístico a este galardón.
"No voy a entrar en de quien fue la culpa o que ocurrió para que no se nos informase", ha señalado a Efe el alcalde de Alange, que lleva en el cargo desde 1999 "y nunca he tenido conocimiento de esta declaración", lo mismo que la empresa encargada de la gestión del balneario.

'Un premio que uno se encuentra'

Juan Pulido, que ha calificado este conocimiento como "un premio que uno se encuentra", ha explicado que han celebrado una reunión en el Ayuntamiento y con la empresa mixta encargada de la gestión del balneario para estudiar que acciones llevar a cabo para intentar rentabilizar este nuevo reconocimiento.
El alcalde de Alange, que ya ha anunciado la preparación de un "acto de proclamación" de la declaración aunque sea 20 años después, tampoco descarta contactos con el Ayuntamiento de Mérida con el fin de que las termas romanas puedan ser incluidas en la promoción que se haga del Conjunto Arqueológico de la capital extremeña.
El Gobierno extremeño ha hecho pública una nota en la que reitera que las termas de Alange forman parte del conjunto arqueológico emeritense, declarado Patrimonio de la Humanidad en 1993 en Cartagena de Indias (Colombia).

Confusión de décadas

El Ejecutivo señala que "desde el primer momento, porque así venía recogido en el expediente, la UNESCO contó con la lista de todos los elementos que reconocía como Patrimonio de la Humanidad dentro del Conjunto Arqueológico de Mérida, una lista que ha sido modificada ahora, pero con el único objeto de unir algunos elementos que son colindantes bajo una misma numeración.
"Por tanto -añade la nota- no se ha producido ninguna modificación en los enclaves declarados Patrimonio de la Humanidad hace 19 años, dentro de los cuales siempre han estado incluidas las termas romanas de Alange", y recuerda que en aquella época estas termas formaban parte del término municipal de Augusta Emerita y del excelente sistema vinculado a los usos del agua que poseía.
Las termas romanas son el monumento por antonomasia de Alange, que ya existían en época de Trajano y Adriano, en el siglo III d.C., cuyas aguas son de tipo medicinal. Se encuentran al pie del Cerro de la Mesilla y el Gobierno de la República lo declaró en el siglo pasado Monumento Nacional.

Fuente El mundo.es y Wikipedia. 

Como ver el transito de Venus la próxima semana.



La madrugada del miércoles de la próxima semana, 6 de junio, se producirá un acontecimiento astronómico que nunca más tendremos oportunidad de contemplar en nuestras vidas, a menos que la medicina moderna descubra un milagro para prolongar la vida humana. Se trata del tránsito de Venus por delante del Sol, un fenómeno para el que científicos y astrónomos de todo el mundo se preparan desde hace tiempo. Solo hay una oportunidad, ya que no se repetirá hasta el año 2117.
Justo después de la medianoche del 5 al 6 de junio (hora peninsular española), el planeta Venus, visto desde la Tierra, empezará a cruzar el disco de Sol, un paseo que le llevará seis horas. El tránsito planetario solo será visible desde el hemisferio diurno terrestre y los más afortunados para la observación serán los habitantes de la costa este de Australia. En España, resultará algo más complicado. Solo se podrá contemplar el final del show a la salida del Sol desde la costa norte mediterránea y las islas Baleares, según informa el Instituto de Astrofísica de Canarias. Sin embargo, será posible seguir el tránsito en directo y sin perderse detalle a través de diferentes webs. Estas son algunas de las propuestas más interesantes:
-Proyecto GLORIA: 
El proyecto europeo GLORIA (GLObal Robotic-telescopes Intelligent Array, Red Global de Telescopios Robóticos), con participación del Instituto de Astrofísica de Canarias, relizará una retransmisión en directo desde Noruega, Japón y Australia. Los participantes de las expediciones realizarán comentarios en vivo, en español e inglés, durante las retransmisiones. Se realizarán tres conexiones en directo con una duración total de 70 minutos coincidiendo con los momentos más interesantes del fenómeno (entrada de Venus al disco solar, 0.04-0.34; punto medio del tránsito, 3.25-3.35; salida del disco solar, 6.25-6.56). Puedes seguirlo aquí.
-Agencia Espacial Europea (ESA): 
La ESA retransmitirá el tránsito en directo desde la isla ártica de Spitsbergen, en el archipiélago de Svalbard, Noruega. Allí se encontrará el equipo de científicos de Venus Express, reunidos para discutir los últimos resultados de la misión y para contemplar el tránsito bajo el «Sol de medianoche». El Sol nunca se pone en Spitsbergen durante el mes de junio, lo que ofrece una oportunidad excepcional para observar el tránsito completo desde territorio europeo. Comenzará a las 0.04 del 6 de junio y terminará a las 6.52. Puedes seguirlo en esta web.
-Observatorio Solar Nacional (NSO) de EE.UU.: 
El NSO realizará un gran cantidad de pruebas científicas durante el tránsito y pondrá a la disposición del público imágenes en tiempo real. Utilizará telescopios de Arizona, Nuevo México, California, Hawai, Australia e India. Las imágenes estarán accesibles aquí.
-ServiAstro: 
El sitio web de divulgación de la astronomía del Departamento de Astronomía y Meteorología (DAM) de la Universidad de Barcelona emitirá en directo el tránsito de Venus desde Svalbard (Noruega), a partir de las 23.50 (hora peninsular española) del día 5. Síguelo en esta dirección.
Si tienes previsto observar el evento por ti mismo, recuerda que nunca debes mirar directamente al Sol, ni siquiera con gafas oscuras, y mucho menos a través de un telescopio, ya que puede causar ceguera permanente. Los observadores deben utilizar un filtro solar, fabricado específicamente para ello, o proyectar una imagen del Sol sobre una hoja de papel blanco.

¿Qué es un tránsito planetario?

El nacimiento del germen de la Familia

En el género «Ardipithecus» se dieron los primeros emparejamientos
El concepto de lo que hoy conocemos como familia o, al menos el germen, nació hace más de cuatro millones de años. En esa etapa tan precoz de la evolución humana, nuestros antepasados los «Ardipithecus», apenas unos primates que caminaban sobre dos patas, dieron el paso necesario para que surgieran los valores familiares. Lo consiguieron al abandonar la promiscuidad por la fidelidad y la relación de pareja.
El cambio no fue casual y fue fruto de una combinación de variables que hizo cambiar la estrategia de las hembras para garantizar la supervivencia de su prole y también la de los machos menos favorecidos, según una investigación del Instituto Nacional de Matemáticas y Síntesis Biológica de la Universidad de Tenessee (Estados Unidos). Los detalles se publican en la revista científica «Proceedings».

Intereses mutuos

La estrategia femenina cambió las reglas de la evolución. Ya no triunfaba ni se reproducía el más fuerte. Las hembras dejaron de elegir a los machos dominantes como pareja reproductiva por aquéllos menos importantes en la jerarquía, pero que les proporcionaban otras seguridades, desde alimento hasta protección para sus crías. A cambio, ellas se convirtieron en sus fieles compañeras.
Esta nueva investigación plantea dos asuntos interesantes, reflexiona Antonio Rosas, profesor de investigación del CSIC y del Museo Nacional de Ciencias Naturales. «Una es la estrategia combinada entre las hembras y los machos inferiores en la jerarquía de la dominancia. Ellos terminan llevándose el gato al agua, frente a los más fuertes. En lugar de pelearse con otros machos, utilizan su energía en ganarse a una hembra con comida y protección para las crías. Pero eso solo funciona con el requisito de la fidelidad. Si no sería una pérdida de tiempo y de energía».

Otros estudios ya habían apuntado al intercambio de sexo por comida entre nuestros antepasados. Lo original de este trabajo es el cambio de comportamiento simultáneo de machos y hembras por un interés mutuo, la acción combinada. Aunque ellas siempre marcan el paso: «Una vez que las hembras empiezan a mostrar cierto interés para que las abastezcan con comida, son ellos los que dejan de competir con otros machos por el favor femenino, explica el autor del estudio Sergey Gavrilets. En su opinión, su investigación describe «una auténtica revolución sexual».

Fórmulas de cooperación

El trabajo también deja ver en el género «Ardipithecus» los primeros rasgos de reconocimiento entre padres e hijos y el nacimiento de una nueva forma de sociedad con fórmulas de cooperación dentro del grupo

Todo esto ocurrió hace más de 4 o 5 millones de años, «aunque sin duda no hubo una barrera nítida que marcó el cambio de comportamiento», apunta Antonio Rosas. «Si en nuestras sociedades aceptamos cierta holgura en el concepto de emparejamiento, imaginemos a unos homínidos de hace millones de años».

El fin del mundo... casi.



Un estudio realizado por investigadores chinos y británicos revela que la vida en la Tierra tardó diez largos millones de años en recuperarse de lagran extinción del Pérmico durante la que, hace 250 millones de años, desaparecieron más del 90 por ciento de todas las especies vivas del planeta. El estudio se acaba de publicar en Nature Geoscience.
Que sepamos, los habitantes de la Tierra han estado en serio peligro por lo menos en cinco ocasiones. Cinco grandes episodios catastróficos durante los que, por diversos motivos, la vida misma estuvo a punto (o cerca) de desaparecer. Durante esos eventos de extinción masiva miles de especies, tanto en el mar como en la tierra y el aire, desaparecieron en muy poco tiempo y para siempre.
Entre todas esas catástrofes planetarias, los científicos están de acuerdo en que la peor de todas fue la que tuvo lugar hace 250 millones de años. Conocida como "La gran Mortandad", a la gran extinción del Pérmicosólo sobrevivieron un 10 por ciento de las especies animales y vegetales de cuantas habitaban entonces el planeta. Las causas de la gran extinción siguen sin estar del todo claras: El impacto de un gran meteorito, erupciones volcánicas masivas, acidificación de los océanos... Sea como fuere, nunca nuestro planeta había estado tan cerca de convertirse en una roca desierta, despoblada y estéril.
Los supervivientes fueron tan escasos que los científicos se preguntan desde hace décadas cómo consiguió la vida recuperarse después de un golpe tan tremendamente duro. Y cuanto tiempo tardó en hacerlo. Se sabe, por ejemplo, que justo después de esa gran extinción la Tierra se volvió, durante varios millones de años, un páramo casi desierto, despoblado, sin vegetación y dominado casi por completo por los hongos. Evidentemente, al final, el planeta se recuperó. Pero la cuestión es: ¿Cuánto tiempo tardó en hacerlo?

Lluvia ácida

Algunas pruebas apuntan a la posibilidad de que se produjera un rápido "rebote" de la vida y que en un tiempo relativamente corto (algunos cientos de miles de años) nuevas especies poblaran rápidamente los nichos que habían quedado vacíos. Fue justo entonces, al final del Pérmico, cuando aparecieron los primeros representantes de lo que después sería la era de los dinosaurios, un periodo de prosperidad que duró más de 80 millones de años y que terminó con otra gran extinción, hace 65 millones de años.
Sin embargo, un nuevo estudio llevado a cabo por Zhong-Qiang Chen, de la Universidad de Geociencias de China, y por Michael Benton, de la Universidad de Bristol, sugiere que la recuperación tras la extinción del Pérmico fue mucho más lenta de lo que se pensaba. Y que fueron necesarios diez largos millones de años para que las cosas volvieran a ser como antes.
Para los investigadores, hubo dos razones principales para ello: por un lado, la enorme intensidad de la crisis; y por otro, la larga duración de unas condiciones pésimas para la vida en la Tierra tras la primera oleada de la extinción.
Sea cual fuere la causa inicial, la extinción del Pérmico se vio "alimentada" por toda una serie de graves crisis ambientales: calentamiento global, lluvia ácida, anoxia de los océanos... una auténtica e interminable pesadilla para la vida. Todo ello contribuyó a la enorme tasa de mortalidad. En menos de un millón de años desde su comienzo, nueve de cada diez especies vivas habían desaparecido sin remedio de la faz del planeta.
En palabras del doctor Chen, "Es difícil imaginar cómo se puede acabar con tanta vida, pero no cabe duda de lo que nos dicen las secciones de roca estudiadas en China y en muchos otros lugares del mundo. Aquella fue la mayor crisis a la que nunca se ha enfrentado la vida en la Tierra".

Cangrejos y langostas

Para el científico, las consecuencias directas de la crisis continuaron notándose durante cinco o seis millones de años tras el episodio inicial, que debió de ser tremendo. Durante ese periodo, en efecto, se fueron produciendo desastres y desequilibrios medioambientales de forma casi continua y, de alguna forma, enlazados unos con otros. Algunos grupos de animales, tanto en el mar como en la Tierra, lograron recuperarse con rapidez y comenzaron a repoblar sus ecosistemas, pero sólo para ver cómo éstos desaparecían poco después, haciendo vanos todos sus esfuerzos. La vida, en general, no pudo restablecerse con la fuerza suficiente hasta que los distintos ecosistemas volvieron a ser estables.
Para el profesor Benton, profesor de Paleontología de Vertebrados en la Universidad de Bristol y coautor del estudio, "La vida parecía estar volviendo a la normalidad cuando otra crisis la golpeaba y la obligaba de nuevo a empezar desde el principio. La crisis del carbono se repitió varias veces, y las condiciones no volvieron a ser normales hasta por lo menos cinco millones de años después".
Por fin, cuando las crisis medioambientales dejaron de producirse, empezaron a emerger nuevos y complejos ecosistemas. En el mar surgieron nuevos grupos, como el de los cangrejos y langostas ancestrales, así como los primeros reptiles marinos y otras criaturas que sentaron las bases de los futuros ecosistemas modernos.
Según Benton, "Nosotros vemos una extinción masiva como algo completamente negativo, pero incluso en este caso tan devastador la vida logró recuperarse, después de muchos millones de años, con el surgimiento de nuevas criaturas. El evento de extinción puso a cero el contador de la evolución. Las causas de la catástrofe, calentamiento global, lluvia ácida, acidificación oceánica..., nos suenan extrañamente familiares en la actualidad. Quizá deberíamos aprender añgo de estos antiguos episodios".

Fuente: Abc.es

Préstamos de riesgo: 21 siglos de historia.




La pobreza, o la expectativa de caer en ella, es un lujo que no pueden permitirse ni los afectados ni sus países. Todo sale más caro. Con la prima de riesgo al alza, y con la deuda bajo vigilancia de los bancos alemanes y franceses, que aspiran a recuperar su dinero, España está refrescando una lección que se conocía en la Antigüedad: las clases humildes de Roma, que constituían la inmensa mayoría de la población, solo podían acceder al crédito pagando tipos de interés más altos que la elite, pues esta última ofrecía mayores garantías al acreedor y en consecuencia mayores expectativas de devolución.
Jerry Toner, investigador de la Universidad de Cambridge, recuerda en su libro ‘Sesenta millones de romanos’ (Ed. Crítica) que en el Imperio también existían créditos ‘subprime’, una alternativa que no servía exactamente para que el pueblo se comprara un piso en el extrarradio (si bien Roma conoció una ‘burbuja inmobiliaria’ en tiempos de Augusto), sino para cubrirse frente a los golpes del destino, que eran muy acusados y frecuentes (la gente corriente solía pagar el alquiler a diario).
El autor se pregunta por qué los romanos pudientes se arriesgaban a conceder créditos a los que no pertenecían a la elite, ya que estos tenían un horizonte tan incierto. Un motivo era que, entre los siglos I a. C. y el V d. C., periodo que estudia en el ensayo, a quien acumulaba excedentes de dinero le salía a cuenta moverlo, puesto que no lo podía guardar en casa con seguridad. Los préstamos eran, además, una fórmula “de amistad o patrocinio”. “Sin embargo -enfatiza Toner-, la principal razón que explica el floreciente mercado de deuda es que era rentable”.
Basándose en diferentes testimonios, el especialista sostiene que el tipo de interés a largo plazo que más se aplicaba en Roma al pueblo llano era del 12%, aunque los préstamos al consumo a corto plazo podían llegar al 50%. En cambio, las operaciones que contaban con el aval de “tierras italianas de primera”, en manos de los latifundistas, conseguían crédito al 6%.
Toner cifra en un 50% la ‘tasa de recuperación’, es decir, lo que el prestamista podía recuperar en caso de impago, ejecutando los bienes del deudor. Para hacer ese cálculo rescata un papiro egipcio del siglo IV d. C. sobre un comerciante de vinos que no pudo devolver un préstamo cuantioso. Después de enajenar todas sus posesiones, también las que “cubrían sus vergüenzas”, todavía quedó pendiente la mitad de la deuda, así que sus hijos de corta edad fueron vendidos como esclavos.
Según Jerry Toner, de los tipos de interés vigentes en Roma y de la tasa de recuperación implícita en el triste relato del vinatero se deduce que “entre un 10% y un 44%” de los individuos de la plebe que pedían préstamos podían declararse en bancarrota cada año. No obstante, esa estimación no incluye la posibilidad de que la tasa de recuperación se redujera con la venta de los parientes del deudor. Ni tampoco computa “los beneficios extraordinarios, la prima de riesgo, que los prestamistas habrían incluido en sus tipos para compensar la probabilidad de que se produjera un impago”. De todos modos, el autor cree esos beneficios extraordinarios no podían ser muy elevados. “En tal caso -sostiene- otros prestamistas habrían entrado al mercado proporcionando tipos más competitivos”.
Las tragedias que acarreaban los impagos en la Antigüedad explican que la cancelación de las deudas haya figurado con frecuencia entre las reivindicaciones planteadas a los gobernantes en periodos de turbulencia social y política. Sin ir más lejos, Julio César tuvo que lidiar con ese problema, aunque cuando llegó al poder solo perdonó sus propias deudas, que eran astronómicas, pero no las de los demás.
Prestar era un negocio delicado ayer y hoy. Jerry Toner cita a Gregorio de Nisa, del siglo IV d. C., uno de los padres griegos de la Iglesia, quien describió cómo los prestamistas se informaban sobre la situación del deudor y se angustiaban pensando en el dinero pendiente de devolución. “Si el usurero ha prestado a un marinero, permanece en la orilla, preocupado por los movimientos del viento (...) y esperando las noticias de un naufragio o alguna otra desgracia”.
Las palabras de Gregorio de Nisa cobran un significado interesante en nuestros días, cuando existen los denominados seguros de impago y las agencias de calificación.

Fuente: El correo.com

Una postal desde Marte.

 cráter Endeavour, en Marte, fotografiado por el robot 'Opportunity'. / NASA/JPL-CALTECH/ARIZONA STATE UNIVERSITY

s el mundo vecino y parece familiar. Se trata de una fotografía de Marte enviada, como si fuera una postal, por el robot Opportunity. Su propia sombra y uno de sus aparatos se aprecian a la derecha y en primer plano, sobre el fondo del cráter Endeavour, de unos 22 kilómetros de diámetro, en cuyo borde occidental está el vehículo de la NASA. La escena (compuesta por varias imágenes) fue captada el pasado 9 de marzo, con el Sol muy bajo en el cielo, y ha sido tratada en laboratorio para enfatizar las diferencias entre los materiales del suelo del planeta, con las dunas oscurecidas que destacan el relieve. Es una Imagen del Día de la NASA. El vehículo rodante Opportunity llegó a Marte en 2004 y sigue funcionando.


Fuente: ABC.ES