Sacrificios Humanos usando milenarios cuchillos de obsidiana en Mesoamerica

Las puntas de obsidiana, con restos de sangre, fueron encontradas en la ciudad de Cantona, Puebla. EL UNIVERSAL
Vía: informador.com.mx| 3 de mayo de 2012
Estudio sin precedentes.
La restauradora del Instituto nacional de Antropología e Historia (INAH), Luisa Mainou, identificó —en colaboración con especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)— células sanguíneas humanas mineralizadas de hace dos mil años.

El hallazgo se hizo en 31 cuchillos de obsidiana que eran usados para sacrificios y que fueron encontrados en la ciudad prehispánica de Cantona, Puebla.

Una de las canchas de juego de pelota en Cantona. Foto: Wikipedia

De acuerdo a un comunicado del INAH, algunos de estos artefactos también conservan fragmentos de tejidos musculares, tendones, piel y cabello, con lo que verifica, con pruebas de laboratorio, el sacrificio humano entre las culturas mesoamericanas, y abre nuevas posibilidades para solventar el desafío metodológico que implica estudiar esta antigua práctica religiosa.

La observación de las partes microscópicas del cuerpo humano que quedaron adheridas a los cuchillos de Cantona fue posible luego de 20 años de investigación, trabajo en laboratorio y prácticas aplicadas en diversos materiales recolectados en otros sitios arqueológicos que también presentan restos de materia humana.

Mainou detalla en su informe que fue en 1992 cuando detectó por primera vez vestigios de sangre humana en un cuchillo de sacrificio, hallado por el arqueólogo Luis Morlet, en el sitio Zethé-Hidalgo.

La especialista precisa que al revisar la pieza a través del microscopio electrónico de barrido descubrió elementos que por su apariencia, su forma y dimensiones, definitivamente se trataba de células sanguíneas, específicamente eritrocitos, y así comenzó su investigación.
Rastros de carbón, oxígeno, nitrógeno y fierro, propios de la materia orgánica (Notimex).

“Poco a poco fueron llegando más piezas al Laboratorio de Restauración de Material Orgánico, de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural del INAH. Había que conjuntar los resultados de varios casos para poder afirmar científicamente que en esas piezas cortantes se preservaron las pruebas irrefutables (tejidos orgánicos) de los sacrificios”.

Mainou recibió un conjunto de 31 cuchillos de obsidiana, encontrados por los arqueólogos: Yadira Martínez Calleja y Ángel García Cook, en el sitio prehispánico de Cantona, donde se realizaban importantes rituales y ceremonias religiosas, que incluían prácticas como la decapitación, mutilación y desmembramiento, como parte de la cosmovisión religiosa, según afirman estudios arqueológicos.

“Esta es una ventana a otros mundos culturales, el umbral que puede conducir a la realidad biológica de tiempos antiguos”.

Como si se tratara de la piel de una persona a la que se le va hacer el diagnóstico de una enfermedad, cada cuchillo fue reconocido milímetro a milímetro por la experta del INAH, a través del lente del microscopio estereoscópico.

Con navajas de bisturí despegó una milimétrica cantidad de aquellas manchas y las fue colocando en guardas especiales para preparar las muestras que analizaría en un microscopio más potente, llamado electrónico de barrido, que permite obtener los componentes químicos de esas “cascaritas”que quitó de los artefactos prehispánicos.
Foto
En los artefactos prehispánicos también se encontraron restos de tejido muscular, piel, pelo, colágena y fibrina. “Estos hallazgos confirman que los cuchillos se usaron para sacrificio”, dice Luisa Mainou.

Pero encontró algo más, en algunas piezas se halló mayor cantidad de eritrocitos, mientras que otras tienen más piel, y algunas presentan más número de fragmentos de tejido muscular o fibras de colágena o fibrina, “lo que hace suponer que la forma de la herramienta cortante determinaba el uso que se le daba”.

Los especialistas consideran que el estudio del sacrificio humano, a partir de materiales y contextos arqueológicos, implica un desafío metodológico, analítico e interpretativo, debido a la diversidad de formas y circunstancias en que ocurrieron éstos, y que fueron descritos en crónicas de evangelizadores, códices, cerámica, pintura y escultura.

Curiosas fotografías sobre los moáis



Curiosas fotografías sobre algunas de las últimas excavaciones en torno a los moáis.
¡Las estatuas de la Isla de Pascua tienen cuerpo! 
Normalmente son conocidas por ser apenas grandes cabezas, pero éstas esconden muchos secretos, entre ellos, como más de la mitad de su tamaño se encuentra enterrado en el subsuelo y revela la existencia de cuerpo y manos.
Aunque la noticia pueda parecer actual, debo comentar –como me recuerda Javier Sierra– que Thor Heyerdahl ya hizo excavaciones similares en Pascua y descubrió el "cuerpo" de varios moáis. Algunos incluso llevaban inscrita la efigie de barcos de vela occidentales, como recuerdo de las primeras observaciones pascuenses de "nuestros" buques en el siglo XVIII. 
Lo publicó en su libro Aku-Aku, publicado en 1958. Ahora mismo, muy difícil de conseguir, y que –por cierto– tradujo el añorado Antonio Ribera.


Científicos confirman que la Sábana Santa no es Medieval

Congreso Internacional Sábana Santa Valencia

Varios expertos participantes en las sesiones del Congreso Internacional de la Sábana Santa de Valencia ratificaron los "errores" del estudio con la prueba del Carbono 14, realizado por un equipo de científicos en 1988, que dató la reliquia en la Edad Media, entre 1260 y 1390, según ha informado el Arzobispado. Así, según el químico norteamericano Robert Villarreal, responsable del Laboratorio de los Álamos en Colorado (EE.UU.), la muestra de tela de la Sábana Santa empleada para su datación por radiocarbono, con plena seguridad "contiene algodón, el cual no existe en absoluto en la tela de lino original de la Síndone". Villarreal, que pronunció la conferencia 'Condiciones de las muestras en la datación de 1988', asegura que "la muestra que se tomó no es representativa de todo el lienzo" y que esa parte contiene, además, un remiendo "invisible" añadido durante "una reparación en época medieval".

Además, el científico ha explicado los análisis efectuados, posteriormente, en el laboratorio de Los Álamos, con el que advirtieron que la muestra de C14 "concluye mal su datación".
Por su parte, Emanuela Marinelli, licenciada en Ciencias Naturales y Geológicas por la Universidad de La Sapienza de Roma, disertó en la jornada acerca de las "circunstancias de la datación con C14 de la Síndone".

Marinelli calificó de "erróneos" e "inadecuados" los procedimientos y conductas que se llevaron a cabo para realizar el estudio del C14 ya que "se rechazó tomar más muestras" y la que se tomó "no era representativa de toda la Síndone". Además, recordó que "hubo filtraciones de datos a medios sensacionalistas" porque "desde el principio el estudio se vició por problemas de publicidad".

Según Marinelli, "la idea fue desacreditar la autenticidad de la Síndone". Por tanto, ese estudio de 1988 "no ofrece resultados fiables". Igualmente, en la sesión dedicada al análisis de la 'edad de la Síndone', intervinieron otros expertos como el ingeniero técnico químico y miembro de la Sociedad Española de Microbiología, Felipe Montero, que abordó la datación de los lienzos por el método del C14, en el caso particular del Sudario de Oviedo.

 ESTUDIO COMPARATIVO CON EL SUDARIO DE OVIEDO

Durante las sesiones matutinas, expertos en medicina forense defendieron las similitudes entre las huellas de la Síndone y el Sudario de Oviedo y destacaron la importancia de "hacer un estudio comparativo con las dos reliquias".

El doctor Alfonso Sánchez Hermosilla, miembro del Equipo de Investigación del Centro Español de Sindonología (Edices), advirtió de que "estamos perdiendo cada día información" de las dos reliquias, por el paso del tiempo y que es necesario que los dos lienzos "se estudien al mismo tiempo, valorando las aportaciones de cada uno". Asimismo, destacó "la similitud en el número de heridas y la distancia entre ellas" en los dos lienzos históricos.

Por su parte, el catedrático de Medicina Legal de la Universitat de Valencia José Delfín Villalaín analizó el estudio "de la rigidez cadavérica" del hombre de la Síndone y señaló que el cadáver retratado en la Síndone se encontraba extremadamente rígido debido, entre otras causas, a la deshidratación, el intenso estrés al que fue sometido, al "shock hipovolémico" y la "muerte extremadamente violenta que sufrió". Asimismo, el doctor Villalaín citó a otros patólogos como Hyneck, Barbet o Guedda que ya habían observado este fenómeno en sus estudios.

Enlace noticia original:
http://www.europapress.es/sociedad/ciencia/noticia-cientificos-constatan-error-dato-sabana-santa-edad-media-20120430102515.html
Informa: Pedro M. Fernández / www.historiayciencia.es

El próximo domingo, mi reportaje para Cuarto Milenio


Tal como prometí, comentar a los lectores que el próximo domingo, 6 de mayo, podrán ver el reportaje que grabé  hace algunas fechas para Cuarto Milenio.
Versará sobre un  caso acontecido en Higuera de la Serena (Dos gigantes en el interior de una esfera).
He leído a través de Facebook que el programa del próximo domingo se adelante a las 11,30 h.
¡Queda notificado!
Imagen: Pablo Villarrubia, guionista y reportero de Cuarto Milenio (izquierda), quien esto les escribe (centro) y Alejo González Portalo, uno de los testigos del suceso (derecha) 

El Titanic volverá a navegar de nuevo

El multimillonario Clive Palmer, uno de los hombres más ricos de Australia, ha anunciado que construirá el Titanic II, un gran trasatlántico que será una replica más o menos exacta del buque original que se hundió hace 100 años y cuyo primer viaje entre Inglaterra y Nueva York está previsto para 2016, según informó el diario australiano The Herald Sun.

Palmes explicó que el barco supondrá un "tributo" al espíritu de los hombres y mujeres que trabajaron en el Titanic original, que naugrafó después de chocar con un iceberg el 15 de abril de 1912.
Con 840 cabinas y nueve puentes "será en todos los aspectos tan lujoso como el Titanic, pero dotado obviamente de la última tecnología y de sistemas de seguridad y navegación modernos", indicó el empresario en un comunicado    
El nuevo buque tiene previsto zarpar de Londres a Nueva York a finales de 2016, si todo va según lo previsto, pero su promotor no ha querido desvelar la inversión que supondrá, según la cadena BBC.

El barco será lo más parecido posible al original en su diseño y detalles de lujo, pero con la tecnología más avanzada en navegación y sistemas de seguridad. "Aunque si eres supersticioso, nunca sabes lo que puede ocurrir", explicó el magnate.
Palmer ha confirmado la firma de un memorando de entendimiento con el astillero chino estatal CSC Jinling Shipyard que será el encargado de su construcción.
El anuncio se produce apenas unas semanas después del centenario del hundimiento del Titanic, que se conmemoró con la apertura del Titanic Belfast Experience (con una inversión de 116 millones de euros) y la realización de un travesía conmemorativa del Titanic un siglo después de su hundimiento.
Palmes explicó que el barco supondrá un "tributo" al espíritu de los hombres y mujeres que trabajaron en el Titanic original, que naugrafó después de chocar con un iceberg el 15 de abril de 1912.
Con 840 cabinas y nueve puentes "será en todos los aspectos tan lujoso como el Titanic, pero dotado obviamente de la última tecnología y de sistemas de seguridad y navegación modernos", indicó el empresario en un comunicado.
El nuevo buque tiene previsto zarpar de Londres a Nueva York a finales de 2016, si todo va según lo previsto, pero su promotor no ha querido desvelar la inversión que supondrá, según la cadena BBC.
El magnate de la minería de Queensland mantiene estrechas relaciones con China y ahora ha decidido ampliar sus negocios hacia el ámbito de turismo donde tiene resorts de lujo y prevé construir una flota de cruceros de máximo nivel.

Científicos constatan el error que dató la Sábana Santa en la Edad Media

Congreso Internacional Sábana Santa Valencia


Varios expertos participantes en las sesiones del Congreso Internacional de la Sábana Santa de Valencia ratificaron los "errores" del estudio con la prueba del Carbono 14, realizado por un equipo de científicos en 1988, que dató la reliquia en la Edad Media, entre 1260 y 1390, según ha informado el Arzobispado. Así, según el químico norteamericano Robert Villarreal, responsable del Laboratorio de los Álamos en Colorado (EE.UU.), la muestra de tela de la Sábana Santa empleada para su datación por radiocarbono, con plena seguridad "contiene algodón, el cual no existe en absoluto en la tela de lino original de la Síndone". Villarreal, que pronunció la conferencia 'Condiciones de las muestras en la datación de 1988', asegura que "la muestra que se tomó no es representativa de todo el lienzo" y que esa parte contiene, además, un remiendo "invisible" añadido durante "una reparación en época medieval". Además, el científico ha explicado los análisis efectuados, posteriormente, en el laboratorio de Los Álamos, con el que advirtieron que la muestra de C14 "concluye mal su datación".
Por su parte, Emanuela Marinelli, licenciada en Ciencias Naturales y Geológicas por la Universidad de La Sapienza de Roma, disertó en la jornada acerca de las "circunstancias de la datación con C14 de la Síndone".
Marinelli calificó de "erróneos" e "inadecuados" los procedimientos y conductas que se llevaron a cabo para realizar el estudio del C14 ya que "se rechazó tomar más muestras" y la que se tomó "no era representativa de toda la Síndone". Además, recordó que "hubo filtraciones de datos a medios sensacionalistas" porque "desde el principio el estudio se vició por problemas de publicidad".
Según Marinelli, "la idea fue desacreditar la autenticidad de la Síndone". Por tanto, ese estudio de 1988 "no ofrece resultados fiables". Igualmente, en la sesión dedicada al análisis de la 'edad de la Síndone', intervinieron otros expertos como el ingeniero técnico químico y miembro de la Sociedad Española de Microbiología, Felipe Montero, que abordó la datación de los lienzos por el método del C14, en el caso particular del Sudario de Oviedo.

 ESTUDIO COMPARATIVO CON EL SUDARIO DE OVIEDO

Durante las sesiones matutinas, expertos en medicina forense defendieron las similitudes entre las huellas de la Síndone y el Sudario de Oviedo y destacaron la importancia de "hacer un estudio comparativo con las dos reliquias".
El doctor Alfonso Sánchez Hermosilla, miembro del Equipo de Investigación del Centro Español de Sindonología (Edices), advirtió de que "estamos perdiendo cada día información" de las dos reliquias, por el paso del tiempo y que es necesario que los dos lienzos "se estudien al mismo tiempo, valorando las aportaciones de cada uno". Asimismo, destacó "la similitud en el número de heridas y la distancia entre ellas" en los dos lienzos históricos.
Por su parte, el catedrático de Medicina Legal de la Universitat de Valencia José Delfín Villalaín analizó el estudio "de la rigidez cadavérica" del hombre de la Síndone y señaló que el cadáver retratado en la Síndone se encontraba extremadamente rígido debido, entre otras causas, a la deshidratación, el intenso estrés al que fue sometido, al "shock hipovolémico" y la "muerte extremadamente violenta que sufrió". Asimismo, el doctor Villalaín citó a otros patólogos como Hyneck, Barbet o Guedda que ya habían observado este fenómeno en sus estudios.

Enlace noticia original:
http://www.europapress.es/sociedad/ciencia/noticia-cientificos-constatan-error-dato-sabana-santa-edad-media-20120430102515.html

El Enigma del Osario de Jonás

Reproducción del 'Osario de Jonás' con el pez a la izquierda.
Vía: Universidad de Carolina del Norte, Charlotte | James Hathaway | 19 de abril de 2012
Tras el reciente anuncio del descubrimiento de las primeras imágenes cristianas, a raíz de la exploración de una tumba sellada del siglo I d. C., en Jerusalén, la controversia como era predecible estalló, con numerosos miembros de la comunidad de estudiosos de la Biblia ofreciendo interpretaciones alternativas sobre la iconografía hallada y rechazando que se afirmase que la tumba estuviera vinculada con los cristianos.
Ahora, el equipo de exploración ha anunciado un detalle que anteriormente pasó desapercibido, pero que es altamente significativo, pues parece confirmar la interpretación original de las imágenes inscritas. James H. Charlesworth (izquierda) del Seminario Teológico de Princeton, ha anunciado la identificación y el desciframiento de una inscripción de cuatro letras en hebreo antiguo, que fue pasada por alto, en el controvertido osario de "Jonás". La inscripción parece deletrear el nombre de "Jonás" en hebreo.
La tumba, correspondiente al siglo I d.C., y situada en el suburbio de Talpiot, en Jerusalén, dos metros por debajo de un edificio en condominio, se exploró a través del uso de cámaras-robot. Las imágenes asociadas y su interpretación polémica se anunciaron el 28 de febrero de 2012.
Foto: Robot fotografiando la tumba donde se halló el "Osario de Jonás".
La expedición, llevada a cabo en 2010-2011, fue dirigida por el historiador James D.Tabor (izquierda) de la Universidad de Carolina del Norte, en Charlotte, y el arqueólogo Rami Arav, de la Universidad de Nebraska, en Omaha, y financiada por Discovery Channel, siendo objeto de una documental producido por el cineasta Simcha Jacobovici el cual se transmitió en el Discovery Channel el pasado 12 de abril.
Entre los hallazgos más controvertidos de la exploración robótica estaba un osario, o "caja de huesos", con un grabado que el equipo identificó como "Jonás y el pez", un símbolo asociado a los primeros seguidores judíos de Jesús en Jerusalén. Si es correcta esta interpretación haría del osario el primer grabado artístico cristiano que se ha encontrado, así como la primera evidencia arqueológica relacionada con la fe en la resurrección de Jesús.

La imagen de Jonás y el pez fue utilizada más tarde por los primeros grupos cristianos como símbolo de Cristo y su resurrección, en base a una referencia de Jesús sobre Jonás en un pasaje del evangelio de San Mateo (12:39-40). El "símbolo" de Jonás se convirtió en la expresión por excelencia de la fe en la resurrección cristiana en los siglos posteriores, con más de un centenar de ejemplos de imágenes de Jonás en las catacumbas cristianas de Roma.

El descubrimiento de una imagen de Jonás en una tumba del Jerusalén del siglo I -un tipo de tumba que dejó de usarse en el 70 d.C., cuando los romanos destruyeron la ciudad- fue una sorpresa y una controversia predecible. Varios investigadores han cuestionado la identificación de Jonás insistiendo en que la imagen es más probable que fuera un monumento funerario, o una vasija parecida a una ánfora de algún tipo, y no un pez en absoluto.
Foto: Posible interpretación de la figura del supuesto pez.

Tras el anuncio en febrero de los resultados de la exploración, el equipo continuó el examen de las fotografías del grabado. Al observar unas misteriosas marcas crípticas sobre la cabeza del pez se dieron cuenta de que parecía ser escritura hebrea dentro del diseño. James H. Charlesworth, al ser un experto en escritura hebrea de la época, fue llamado para que analizara tales marcas.







Los descubridores del osario de Jonás reclaman que las líneas (en amarillo) en la boca del pez significan la palabra YONAH. Sin embargo, los escépticos argumentan que la segunda letra son en realidad dos líneas desconectadas, al margen de que no se tienen en cuenta otras lineas anexas.



Foto: Jonás escrito en hebreo moderno y en escritura antigua similar a la de los Rollos del Mar Muerto.


El descubrimiento de Charlesworth parece confirmar la interpretación original del equipo. Parece que las líneas que el equipo originalmente interpretó como la representación de una figura esquemática en la boca del pez también forman cuatro letras hebreas crípticas (en la escritura hebrea familiar de los Rollos del Mar Muerto): Yod, Vav, Nun, Heh, deletreando (de derecha a izquierda) YONH o YONAH, el nombre hebreo del profeta Jonás. La inscripción está grabada con letras de menos de 4 centímetros de altura, están demasiado profundas como para haber sido unos rasguños naturales en la piedra, y son demasiado intrincadas en su forma como para que sean señales al azar realizadas por un grabador.

James H. Charlesworth es profesor de Lengua y Literatura del Nuevo Testamento en el George L. Collord, y director del Proyecto sobre los Rollos del Mar Muerto en Princeton. Ha dedicado su carrera al estudio epigráfico de los textos originales de la Rollos del Mar Muerto y se ha especializado en descifrar los escritos herodianos de este período. Hasta ahora, el epigrafista israelí Robert Deutsch ha confirmado la lectura de Charlesworth de YONAH, y Hageo Misgav, de la Universidad Hebrea, dice que allí hay definitivamente letras, aunque él las interpreta como ZOLAH en lugar de YONAH. Charlesworth ha invitado a otros epigrafistas a evaluar también la inscripción.

"Este descubrimiento, realizado por el profesor Charlesworth, es bastante notable y había sido pasado por alto en nuestro análisis inicial", señaló el Tabor. "El grabador había al parecer combinado ingeniosamente lo que nosotros tomamos como una figura esquemática de Jonás con las cuatro letras hebreas que deletrean su nombre".


Tabor considera que la inscripción confirma ahora la imagen como "el símbolo de Jonás", lo que apoya firmemente la opinión de que la tumba ofrece la primera evidencia arqueológica encontrada que puede vincularse con los primeros seguidores judíos de Jesús. La importancia de esta tumba se ve incrementada en que está a menos de 60 metros de la polémica "tumba de la familia de Jesús", descubierta en 1980, la cual tenía osarios con las inscripciones "Yehshúah Bar Yoshef" ("Jesús hijo de José"), "Mariamne", "Yoshe" y "Yehudah Bar Yehshúah" ("Judas hijo de Jesús"), nombres que Tabor ha vinculado a Jesús de Nazaret en su reciente libro, en coautoría con Simcha Jacobovici, The Jesus discovery: The new archaelogical find that reveals the bi... (El descubrimiento de Jesús: el nuevo descubrimiento arqueológico que revela el nacimiento del cristianismo. Simon & Schuster, 2012).

Pero a pesar del posible descubrimiento de esta inscripción, avalado por tan importantes especialistas en la materia, la polémica sobre su real existencia y su significado no ha hecho más que aumentar con opiniones en contrario de otros especialistas de no menor categoría profesional. Tal como se pueden leer sus opiniones resumidas, por ejemplo en msnbc.com, paso a reflejarlas seguidamente:

¿Jonás, Jesús o Yo Yo Ma?
Los escépticos están calificando las nuevas interpretaciones como "el test Rorschach de la arqueología". Steve Caruso (izquierda) un traductor profesional que analiza inscripciones en artefactos antiguos para los distribuidores de antigüedades, dijo que la interpretación de Charlesworth de la inscripción es "más bien un ejercicio de lectura de hojas de té".



Robert Cargill (izquierda) profesor de clásicas y estudios religiosos en la Universidad de Iowa, está de acuerdo. "Uno debe hacer algo más extenuantes los ejercicios de gimnasia mental para llegar a las letras del nombre de Jonás en esta imagen, incluso haciendo caso omiso de las líneas que están claramente presentes, pero no se ajustan a la inscripción deseada, uniendo las líneas que no están claramente unidas, remodelando las letras, y eliminando cualquier atisbo de la alineación lineal", dice Cargill en su blog.

Si todos estos ajustes son permisibles en la interpretación de textos antiguos, las líneas de la inscripción se pueden hacer para explicar cualquier cosa, desde "Jesús" a "Yo Yo Ma", anotan los especialistas.


Garabatos al azar
Además del hecho de que varias líneas deben ser ignoradas para leer la inscripción como YONAH, la segunda supuesta letra de la serie, que Charlesworth afirma que es la letra 'nun' hebrea (en forma de L al revés), parece tener dos líneas inconexas en lugar de una línea continua. "Esto no es una letra 'nun'; se trata de dos líneas al azar", escribió Mark Goodacre, profesor de Nuevo Testamento en la Universidad de Duke, en Carolina del Norte.

En su blog académico, Goodacre explica que era común que las bases de los monumentos funerarios (que, según él, esta parte del grabado representa, en lugar de la cabeza de un pez) estuvieran decorados con diseños geométricos, los cuales podrían fácilmente representarse con la líneas de la imagen.
Los críticos dicen que los descubridores del osario de Jonás están viendo lo que quieren en las líneas grabadas al azar en el artefacto. Foto: Steve Caruso
Las líneas de la letra "nun" se representan como dos líneas, no como una.
Los escépticos también señalan que las propias fotos del equipo del descubrimiento, proporcionadas antes de que Charlesworth y Tabor comenzaran a reclamar que la inscripción dice "YONAH", muestran claramente dos líneas inconexas, en lugar de una 'L' vuelta del revés representando una letra hebrea 'nun'. Tabor ha proporcionado, desde entonces, una imagen diferente de la inscripción en la que la letra "nun" aparece ininterrumpida, y ha abordado la controversia de este modo: "La 'nun' no está rota. Hay algunas manchas blancas en la superficie del osario en nuestras fotos de cercanía, y una de ellas (las manchas) está en la junta, lo que podría hacer parecer que la línea se rompe, sino que se cruza".

La discrepancia entre las fotos levanta aún más escepticismo acerca del descubrimiento. "Cada fotografía de la supuesta 'inscripción' parece que pinta un cuadro diferente, y desde el inicio de este desastre una serie desconcertante de fotografías se han encontrado para ser filtradas, alteradas o mal etiquetadas", dijo Caruso en Life's Little Mysteries.

Charlesworth no respondió a las peticiones sobre estos comentarios.

Afirmaciones acerca de los primeros cristianos
Hace un año, durante la temporada de Pascua, otra reclamación surgió sobre el descubrimiento de unos artefactos sobre los primeros cristianos -en aquel tiempo, los libros de plomo que contenían referencias a Jesús- y Caruso, y otros, también demostraron de manera decisiva que estos eran falsos.

Como Kimberley Bowes, una arqueóloga de la Universidad de Pennsylvania, dijo en su momento: "El deseo de la gente moderna de encontrar pruebas materiales del cristianismo en los dos primeros siglos es mucho más fuerte que la evidencia actual en sí misma. Esto es porque el número de cristianos de este período fue increíblemente pequeño -probablemente menos de 7.000 en el año 100 d.C.- y no se distinguían sustancialmente de sus hermanos judíos".

"Parece que cada Pascua hay algún 'gran descubrimiento'", agregó Caruso. "En gran parte son cineastas u otros sensacionalistas tratando de golpear mientras el hierro está caliente, durante la temporada donde cada uno está más bien centrado en Jesús. El descubrimiento de una tumba originaria, relativamente inalterada, en sí mismo es fascinante; sin embargo, una tumba genérica judía del primer siglo no vendería bastante".