Una de las cabezas trofeo halladas - Maria Cecilia Lozada
Los cuerpos se encuentran en un gran estado de conservación gracias al clima árido de la zona
Un grupo de investigadores ha descubierto en Perú los restos momificados de, al menos, 60 personas, así como seis cabezas trofeo con una antigüedad que gira en torno a los 1.500 años, según informa LiveScience. El hallazgo ha tenido lugar en unos profundos pozos ubicados en el valle de Vitor, al sur del país americano. El clima árido de la zona ha permitido que los restos se momificasen de forma natural, sin que haya rastro de ningún tratamiento humano en el proceso.
Los 27 pozos en los que han encontrado los restos están cavados en el suelo y tienen una profundidad que varía entre los 3 y los 4 metros. Los cuerpos datan del 550 d.C. y podrían pertenecer a miembros de la cultura Ramada, según afirma Maríz Cecilia Lozada, directora del equipo e investigadora y antropóloga de la Universidad de Chicago.
Esta sociedad residía en los valles cercanos de la fosa descubierta. Utilizaba, además, una vestimenta muy similar a la que lucían los cuerpos momificados. «Vemos muchos textiles hermosos y con plumas que parecen estar relacionados con esa cultura y se encuentran enterrados con estas personas», dijo Lozada. En cada fosa han aparecido varios cuerpos. Entre ellos restos de bebés que compartían la cavidad con mujeres adultas. Probablemente se trata de sus madres.
Respecto a las cabezas trofeo, estas se han encontrado en otras partes de Perú. Según los antropólogos, podrían pertenecer a enemigos derrotados en batalla. Sin embargo, según la directora de la excavación, es más probable que perteneciesen a miembros de la misma sociedad. «Las cabezas pueden no pertenecer a enemigos, pero tal vez a combatientes del mismo grupo», dijo Lozada.
Fuente: ABC
Un grupo de arqueólogos rumanos y alemanes descubrieron una fortaleza prehistórica que se remonta a 3.400 años de antigüedad en el oeste de Rumanía. El arqueólogo Florin Gogaltan dijo a The Associated Press que el hallazgo representaba "una de las mayores fortalezas prehistóricas de Europa en la Edad del Bronce".
Gogaltan, un investigador del Instituto de Arqueología en Cluj, al noroeste de Rumania, dijo que el equipo utilizó equipo magnético arqueológico especializado para tomar medidas subterráneas. La semana pasada completaron una excavación descubriendo 55 hectáreas del sitio de 80 hectáreas, construido entre 1.400 a.C. y 1.200 a.C., ubicado cerca de la ciudad de Sântana, y planean continuar el próximo año.
Gogaltan trabajó con Rudiger Krause, profesor de la Universidad Goethe en Frankfurt, y dijo que los arqueólogos alemanes ayudaron con el financiamiento y el equipo especializado. Los arqueólogos rumanos comenzaron a excavar el sitio en 2009. Los expertos creen que la vieja ciudadela es mucho mayor que Troya, la ciudad ubicada en la costa noroeste de Turquía que fue eventualmente conquistada por el ejército griego.
Gogaltan explicó que, a diferencia de Troya, con sus edificaciones construidas en piedra, en Sântana estos han sido fabricados en arcilla y madera, "un signo de que la civilización estaba más desarrollada y adaptada a los materiales que tenía a disposición".
"La fortaleza de Santana esta bordeada por grandes cercas de más de 13 pies" explicó el experto. "Es una de las fortificaciones más grandes construidas en dicho periodo. Nuestro propósito es descubrir por qué fue levantada" concluyó.
Fuentes: Elnuevodía | Aradon, 9 de agosto de 2018
La calidad de la joya y el hecho de que fuera descubierta donde se elevaba el templo judío de Jerusalén hacen suponer que su propietario pertenecía a una clase privilegiada.
Arqueólogos israelíes han descubierto en una excavación en Jerusalén Este un pendiente de oro datado en el periodo helenístico (siglo II o III a.C) que recrea la cabeza de un animal con cuernos, probablemente un antílope o venado, informó hoy la Autoridad de Antigüedades de Israel.
El pendiente, que se corresponde con el denominado período helenístico temprano, perteneció a alguien de "la clase alta de Jerusalén" y forma parte de "una época fascinante" de la que aún se desconocen muchos detalles, dijo uno de los directores de la excavación, Yuval Gadot, profesor de la Universidad de Tel Aviv, que destacó la excepcionalidad del hallazgo.
Los investigadores aseguran que debió pertenecer a un miembro de las clases altas, ya que fue encontrado en un yacimiento cercano a la Ciudad Vieja y a la actual Explanada de las Mezquitas o Monte del Templo, donde se erigió el Templo de Herodes, destruido por los romanos en el año 70 d.C, y que reemplazó al templo de Salomón, que destruyeron los babilonios en el 587 a.C.
El pendiente se elaboró a partir de una técnica llamada filigrana, de origen griego, con la que se crean objetos de patrones delicados con hilos y cuentas de metal.
Los investigadores también señalan que se han encontrado pendientes con características similares por toda la cuenca del Mediterráneo, especialmente en Grecia, pero se trata de un hallazgo "extremadamente excepcional" en lugares como Jerusalén.
"Hasta ahora solo se han encontrado algunos pendiente en Israel, muchos de ellos en la región costera", explicó Gadot, que agregó, esta es la primera vez que se halla tal objeto en un yacimiento arqueológico de tiempos helenísticos.
Fuentes: La Vanguardia | Infobae, 8 de agosto de 2018
Un grupo de arqueólogos que trabajaba en una cueva en Corea del Sur encontró indicios que sugieren que los seres humanos comenzaron a utilizar sofisticadas técnicas de pesca con redes hace 29.000 años, mucho antes de lo que se creía hasta ahora.
Las dataciones con carbono 14 de catorce lastres de pesca hechos de piedra calcárea descubiertos en junio en el condado de Jeongseon, en el este del país, situaron "la historia de la pesca con redes 19.000 años antes" de lo que se pensaba, explicó el martes a la AFP Han Chang-gyun, director del museo de la Universidad de Yonsei.
Foto: Algunos de los lastres de pesca descubiertos.
Los arqueólogos habían descubierto anteriormente este tipo de lastres —piedras destinadas a hundir las redes de pesca— en la prefectura de Fukui, en Japón, y en la ciudad de Cheongju, en Corea del Sur. Pero dichos hallazgos había sido datados en el período Neolítico, hace unos 10.000 años, agregó.
"Este nuevo descubrimiento hace pensar que los humanos del Paleolítico superior pescaban de forma muy activa para subsistir", subrayó Han.
Los lastres de caliza, que pesan entre 14 y 52 gramos y tiene un diámetro de 37 a 56 milímetros, presentan surcos aparentemente destinados a atarlos en el fondo de una red,s posiblemente utilizada para atrapar peces pequeños en ríos poco profundos, explicó.
Los investigadores también encontraron huesos fosilizados pertenecientes a peces y otros animales, así como herramientas de piedra y escamas, dentro de la cueva de Maedun, añadió.
Antes del hallazgo surcoreano, se creía que los artilugios de pesca más antiguos eran anzuelos hechos con conchas de caracoles de mar, los cuales se encontraron en una isla del sur de Japón y que datan de hace unos 23.000 años (derecha).
Fuente: panorama.com.ve | 7 de agosto de 2018
La alcaldesa de Cantillana ha explicado a Europa Press que el espectacular mosaico, descubierto el pasado mes de noviembre en la calle Sacristán José Díaz Hidalgo junto con otros vestigios históricos de la antigua Naeva romana, como el pozo que coronaba la composición de teselas, cordones, columnas y otros restos, se encuentra actualmente en el centro de Historia Local siendo sometido a un laborioso proceso de restauración a manos del especialista Jesús Serrano.
Tal es así, que el citado centro, que acoge el museo de la localidad, se encuentra actualmente cerrado para permitir el avance de los trabajos de restauración del mosaico, datado en el siglo II después de Cristo, toda vez que la extracción de las teselas desde su enclave original y su proyecto de restauración cuentan con el aval de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico.
EL DESTINO DEL MOSAICO
En ese sentido, la alcaldesa ha recordado que la idea es que una vez que concluya la restauración del mosaico, el mismo sea expuesto temporalmente en el Centro de Historia Local, hasta su reinstalación en la calle Sacristán José Díaz Hidalgo, donde habrá de ser construido un espacio o cripta arqueológica que proteja el mosaico y permita su contemplación.
Y mientras avanza la citada labor de restauración del mosaico, la alcaldesa ha manifestado que el Ayuntamiento de Cantillana, de la mano de la Delegación Territorial de la Consejería de Cultura, está preparando además el Centro de Historia Local, para que el mismo acoja la exposición del mosaico hasta su reinstalación definitiva en la calle Sacristán José Díaz Hidalgo.
La habilitación de este espacio municipal para la muestra del mosaico, según ha recordado, requiere una serie de medidas y trabajos, con lo que la idea es que sea a comienzos de octubre cuando el Centro de Historia Local reabra sus puertas, pues actualmente sigue cerrado al acoger las labores de restauración del mosaico, incluyendo temporalmente en su muestra el citado conjunto de teselas.
Además, recordemos que después de aquel hallazgo acontecido en noviembre de 2017, en enero de este año la alcaldesa informaba de que en la calle de la Iglesia, cercana a la calle Sacristán José Díaz, habían sido descubiertos diferentes segmentos de muro procedentes de edificaciones romanas y un gran trozo de friso de mármol decorado, generando aún más expectación respecto al legado histórico que descansa en el subsuelo de Cantillana.
Fuente: 20minutos.es | 6 de agosto de 2018
Un gen implicado en afectar el habla y el lenguaje, FOXP2, se ha venido presentando como un ejemplo de "libro de texto" de selección positiva, como un rasgo específico del ser humano. Pero en un artículo publicado en la revista Cell el pasado 2 de agosto, un equipo de investigadores cuestionan este hallazgo. Su análisis de los datos genéticos, de una muestra diversa de personas modernas y neandertales, no vio evidencia de una reciente selección específica en humanos del gen FOXP2 y cuestiona la historia de cómo los humanos adquirieron el lenguaje.
En un artículo publicado en 2002 se afirmaba que hubo un barrido selectivo relativamente reciente en la historia evolutiva humana que podría explicar en gran parte nuestras habilidades lingüísticas e incluso ayudar a comprender cómo los humanos modernos pudieron florecer tan rápidamente en África en los últimos 100.000-50.000 años, comenta una de las autoras, Brenna Henn (izquierda), genetista de poblaciones en la Stony Brook University y UC Davis. Henn ha estado muy interesada en la datación de las mutaciones y barrido selectivo de este gen. Ella ha querido volver a analizar FOXP2 con conjuntos de datos más grandes y diversos, especialmente en más poblaciones africanas.
Ahora hay más información genética disponible
Henn dice que cuando se realizó el trabajo original de 2002, los investigadores no tuvieron acceso a la tecnología de secuenciación moderna que ahora proporciona datos sobre genomas completos, por lo que solo analizaron una pequeña fracción del gen FOXP2 en aproximadamente 20 individuos, en su mayoría de ascendencia euroasiática.
"Queríamos comprobar si su hipótesis se mantenía en pie contra un conjunto de datos más amplio y diverso que controle más explícitamente la demografía humana", dijo.
FOXP2 se expresa significativamente durante el desarrollo del cerebro y regula algunos movimientos musculares que ayudan en la producción del lenguaje. Cuando el gen no se expresa, causa una afección llamada alteración específica del lenguaje, en la cual las personas pueden realizar normalmente pruebas cognitivas pero no pueden producir un lenguaje hablado. También se ha demostrado que FOXP2 regula los comportamientos del lenguaje en ratones y pájaros cantores.
"En los últimos cinco años, varios genomas arcaicos de homínidos han sido secuenciados, y FOXP2 fue uno de los primeros genes examinados, dado que es tan importante y supuestamente específico para los humanos", dijo la primera autora, Elizabeth Atkinson (derecha), de la Stony Brook University, y del Broad Institute of Harvard, MIT. "Pero los nuevos datos obtenidos arrojan un problema en el marco temporal del documento de 2002, y es que resulta que las mutaciones de FOXP2, que pensamos que son específicas de un ser humano, no lo son", añade.
Atkinson y sus colegas reunieron la mayoría de los datos públicos disponibles de diversos genomas humanos, tanto modernos como arcaicos, y analizaron exhaustivamente el gen FOXP2 comparándolo con la información genética disponible a fin de comprender mejor el contexto de su evolución. A pesar de intentar una serie de diferentes pruebas estadísticas, no pudieron replicar la idea de que había ocurrido alguna selección positiva reciente en la evolución humana con el gen FOXP2.
Los investigadores esperan que este nuevo trabajo sirva como modelo para otros genetistas de poblaciones que quieran llevar a cabo proyectos similares sobre la historia evolutiva humana.
"Estamos interesados en descifrar, a nivel genético, qué es lo que nos hace humanos", declara Henn. "Este documento muestra cuán importante es utilizar un conjunto diverso de individuos para estudiar la evolución de todos nosotros como especie. Hay un sesgo eurocéntrico severo en muchos estudios médicos y otras investigaciones, pero disponemos del impulso científico para enfatizar la diversidad e incluirla en la recopilación de datos, pues produce resultados más precisos de un modo claro".
Sin embargo, Simon Fisher (izquierda), director del Instituto Max Planck de Psicolingüística en Nijmegen, Países Bajos, y coautor del estudio de 2002, declara en Scientific American que "Aunque no haya habido una evolución reciente de FOXP2, todavía hay muchas pruebas de que este gen está involucrado en el lenguaje".
Las mutaciones en FOXP2 causan trastornos del lenguaje en humanos, y en ratones el gen es importante para las vocalizaciones y el movimiento, ambas funciones son cruciales para el habla humana. El lenguaje es complicado, y nunca se explicará por una sola mutación en humanos modernos, agrega Fisher. "Necesitamos abarcar aspectos más complejos que involucren cambios de genes múltiples. En ese sentido, FOXP2 solo sería una pieza más de un rompecabezas enrevesado".
Fuentes: University of California, Davis | Scientific American | 2 de agosto de 2018