"Athanatos" expone en Tenerife momias y elementos funerarios de todo el mundo

Ejemplares de momias egipcias, andinas, muiscas, asiáticas, guanches y de Gran Canaria se exponen a partir de hoy en "Athanatos. Inmortal. Muerte e inmortalidad en las poblaciones del pasado", que además muestra en Tenerife elementos relacionados con los rituales fúnebres.

La exposición, que estará abierta hasta el 4 de junio de 2018, fue inaugurada hoy por el presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, y en ella se exhiben además amuletos, esculturas, vasos y urnas funerarios, textiles y ajuares, informa la corporación insular en un comunicado.


La muestra se enmarca en una iniciativa a gran escala que, bajo el título "Athanatos. Inmortal" engloba también un congreso mundial extraordinario de estudios sobre momias que se celebrará en mayo del próximo año, así como un proyecto de investigación.

El presidente insular afirmó que Athanatos es un gran impulso para mantener vivo el estudio y el conocimiento de los guanches, y para despertar también la curiosidad de los más jóvenes por conocer cuáles son sus raíces.

La consejera de Museos, Amaya Conde, afirmó en su intervención que esta exposición habla del pasado pero también del presente, de que la relación con la muerte es una constante en el ser humano de todos los tiempos.
El comisario de la exposición y director del Museo Arqueológico de Tenerife y del Instituto Canario de Bioantropología, Conrado Rodríguez, destacó la importancia "transmitir el conocimiento creado en el apasionante mundo de la bioantropología y arqueología funeraria y crear vocaciones científicas entre la población joven, para consolidar al Cabildo y sus museos en la cima de esta rama de la Ciencia".
La exposición analiza el proceso biológico de la muerte e introduce al público en los distintos tipos de fenómenos y tratamientos que propician la conservación del cadáver, a la vez que explica, desde una perspectiva histórica, la labor que han realizado los equipos multidisciplinares de científicos para tratar de reconstruir la vida de las poblaciones del pasado.

Cuenta, además, con piezas procedentes de instituciones internacionales que abarcan prácticamente todos los ritos funerarios existentes en la historia del planeta y su acercamiento al mundo de la muerte.
La sede del Museo de la Naturaleza y el Hombre ha acogido obras para poder albergar en la muestra todas las piezas. Fotos: Fran Pallero.

Al respecto, destacan las aportaciones realizadas por el Museo de antropología y etnografía de la Universidad de Turín (Italia), y el Instituto Colombiano de Antropología e Historia (Colombia).
Y por parte de España, el Museo de Antropología Médica, Forense, Paleopatología y Criminalística "Profesor Reverte Coma" de la Universidad Complutense de Madrid, el Museo Arqueológico Nacional de Madrid, el Laboratorio de Antropología Física de la Universidad de Granada, y el Museo Canario, en Las Palmas de Gran Canaria.

La exposición tendrá distintos ámbitos, que son "Actitud ante la muerte en las poblaciones del pasado", "La muerte como proceso biológico", "Rituales funerarios" y "Los congresos mundiales de estudios sobre momias".


Esta iniciativa, que se lleva a cabo desde el Instituto Canario de Bioantropología y el Museo Arqueológico de Tenerife, conmemora el 25 aniversario del Proyecto CRONOS. Bioantropología de las momias guanches, que dio pie a la primera gran exposición de momias celebrada a nivel internacional en febrero de 1992, así como al primer congreso mundial de estudios sobre momias.
Fue la base de partida para los futuros congresos de la especialidad en el mundo y al que asistieron más de 300 científicos de diferentes lugares del planeta. EFE

Fuentes: lavanguardia.com |diariodeavisos.elespanol.com | 20 de diciembre de 2017

La tercera dimensión devuelve a las termas de Caracalla a su máximo esplendor

Las antiguas termas romanas de Caracalla, consideradas unas de las más grandes y lujosas del Imperio Romano, recuperaron desde hoy su aspecto original gracias a la realidad virtual, con la que han mostrado de nuevo su máximo esplendor.

Construidas en el siglo III (211-217 d.C.) por el emperador romano que les da nombre, estas antiguas termas son en la actualidad un conjunto de ruinas que a simple vista solo dan una idea del grado de belleza que alcanzaron cuando aún corría el agua en su interior.



Sin embargo, gracias a un proyecto de realidad virtual presentado hoy, ahora los restos arqueológicos cobran vida a través de un visor que permite al espectador un viaje al pasado y un paseo por sus escultóricas instalaciones.


Colores, formas y materiales originales se presentan con todo lujo de detalles sobre los impresionantes mosaicos con teselas en blanco y negro que antaño cubrieron los pavimentos del Apodyterium (vestuario) o las baldosas rojas y verdes del gimnasio.


Entre las diez estancias recreadas con esta tecnología tridimensional, es posible pasear bajo los techos abovedados o los pórticos que delimitaban los baños y cuyos capiteles y grabados parecen cobrar vida con esta tecnología.

El recorrido comienza con una introducción sobre la figura, las campañas militares y las políticas del emperador Caracalla (188-217 d.C), de la dinastía de los Severos, y posteriormente inicia la visita por las termas, de las que cada día disfrutaban entre seis mil y ocho mil personas.


En el frigidarium, lugar en el que los romanos se zambullían en gélidas aguas, se topará asimismo el visitante con una reproducción de la gran escultura del "Toro Farnesio", famosa y majestuosa escultura de mármol que hoy alberga el Museo Arqueológico Nacional de Nápoles.


Y también podrá adentrarse por los varios kilómetros de galerías y recovecos que recorrían el suelo de las termas para calentar sus ambientes.

Con una perspectiva que cubre todo el espacio visual, las gafas logran envolver entre las cristalinas aguas de la piscina al visitante, antes de despedirle de un complejo arquitectónico que incluía entre sus espacios sauna, sala de masajes y espacios destinados a los baños calientes.
Más allá de centro para el cuidado del cuerpo, estas termas imperiales fueron también lugar de estudio y reunión, siguiendo aquel precepto clásico de la "mens sana in corpore sano" (mente sana en un cuerpo sano).



De ahí que a través del visor, las ruinas den paso a las dos bibliotecas que el lugar atesoraba en su interior, una griega y otra latina.
En la presentación de este recorrido virtual, el superintendente del área arqueológica de Roma, Francesco Prosperetti, destacó que el proyecto permite una confrontación continua entre la realidad física y la realidad virtual.


Un instrumento que a su juicio "enriquece la visita" y demuestra "la grandeza arquitectónica" de un lugar que, con el paso de los siglos, fue saqueado y algunas de sus partes acabaron en otros edificios de la capital del Tíber, como las columnas de sus bibliotecas, ahora en la basílica de Santa María de Trastevere.

En definitiva "las gafas ofrecen la impresión de estar dentro" de este lugar, a pocos pasos del Circo Máximo o del Coliseo y del que quedan solo ruinosos vestigios.


Prosperetti subrayó la facilidad de uso de la herramienta tecnológica, de la que "valoró su aplicación en términos de comprensión del mundo antiguo".

La iniciativa, denominada "Caracalla IV Dimensione" ("Caracalla 4ª Dimensión), es fruto de una meticulosa investigación arqueológica por parte de la asociación Coopculture, promotora del proyecto, en colaboración con la Superintendencia de Roma y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas.


Ver vídeo en el enlace de abajo:
http://www.romatoday.it/eventi/cultura/video-caracalla-realta-virtu...
  • Luogo: TERME DI CARACALLA
  • Indirizzo: Viale delle Terme di Caracalla - Roma - Lazio
  • Quando: dal 20/12/2017 - al 20/12/2017
  • Vernissage: 20/12/2017
  • Generi: archeologia, new media
  • Orari: Aperto tutti i giorni, tranne il lunedì pomeriggio. Orari Dall’ultima domenica di ottobre al 15 febbraio dalle 09.00 - 16.30 Dal 16 febbraio al 15 marzo dalle 09.00 - 17.00 Dal 16 marzo all’ultimo sabato di marzo dalle 09.00 - 17.30 Dall’ultima domenica di marzo al 31 agosto dalle 09.00 - 19.15 Dal 1 settembre al 30 settembre dalle 09.00 - 19.00 Dal 1 ottobre all’ultimo sabato di ottobre dalle 09.00 - 18.30 Il lunedì 9.00 – 14.00
  • Biglietti: Ingresso al monumento 8 euro (ridotto 4 euro) Video guida virtuale 7 euro, prenotazione consigliata (2 euro)
  • Sito web: http://www.coopculture.it
  • Telefono: +39 0639967700
  • Patrocini: Promosso Soprintendenza Speciale di Roma Archeologia Belle Arti e Paesaggio con CoopCulture Realizzazione CoopCulture in collaborazione con il Cnr
Fuentes: informe21.com |roma.repubblica.it| 20 de diciembre de 2017

Los primeros humanos quemaban huesos de animales para calentarse cuando no había leña

Fotografía facilitada por la Universidad del País Vasco (UPV/EHU). EFE/Álvaro Arrizabalaga

Las condiciones glaciares de hace 40.000 años, cuando los primeros humanos modernos llegaron a la península ibérica, pusieron en serias dificultades a nuestros antepasados, quienes tuvieron que recurrir a los huesos de animales como combustible, en un medio de tundra donde escaseaba la madera.

Expertos de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) han llegado a esta conclusión, tras analizar los sedimentos de los yacimientos de Labeko Koba (Gipuzkoa), Esquilleu (Cantabria) y Coimbre (Asturias), en varios estudios en los que también han participado arqueólogos de la Universidad Complutense, la UNED, la Universidad Autónoma de Madrid y el Museo Nacional de Ciencias Naturales.

El clima que se encontraron en la cornisa cantábrica estos primeros Homo sapiens era "extremadamente frío", con presencia de rinocerontes lanudos, mamuts y muy poca vegetación. "Un paisaje propio del actual norte de Escandinavia" donde había muy poca madera y probablemente situada a largas distancias, ha explicado a Efe el profesor titular de la UPV/EHU, Álvaro Arrizabalaga (izquierda).

En este contexto, la crudeza de los inviernos obligó a los humanos prehistóricos a aguzar el ingenio y a utilizar todos los recursos que tenían a mano, como los huesos de animales que emplearon como combustible tras extraerles el tuétano, un alimento "muy nutritivo" al que, ha recordado Arrizabalaga, nuestros antepasados no estaban dispuestos a renunciar.
Los expertos de la UPV/EHU constataron los primeros indicios de este peculiar uso de los huesos en el yacimiento de Labeko Koba, una gruta de Arrasate en la que localizaron varios "tramos de sedimento ennegrecido por el fuego donde, sorprendentemente, apareció una cantidad enorme de restos óseos de bisonte quemados, pero ninguno de carbón vegetal, algo que resultaba difícil de entender".

En ese momento, los responsables de la excavación comenzaron a plantearse la hipótesis, puramente teórica, de que los huesos podrían haber sido usados, entre 41.000 y 36.000 años atrás, para alimentar las llamas. Poco después, decidieron comprobar su tesis de manera práctica mediante un experimento con restos de vaca.

Arrizabalaga ha aclarado que, para ello fue necesario trocear el material con el fin de utilizar como combustible la grasa retenida en los poros de los huesos, a la que, por otra parte, los humanos prehistóricos no tenían otra forma de sacar rendimiento.

Seguidamente, iniciaron un fuego con hierbas secas y fueron calentando los fragmentos óseos, poco a poco, para alimentar con ellos una hoguera que demostró que "el uso de huesos como combustible no sólo era viable sino también muy eficiente" pues, como ha subrayado el arqueólogo vasco, "aunque no se alcanzaron temperaturas tan altas como con la madera, su durabilidad era mucho más larga".
Hasta siete horas de fuego por kilo de hueso triturado

Fotografía facilitada por la Universidad del País Vasco (UPV/EHU). EFE/Álvaro Arrizabalaga

Un kilo de hueso triturado puede proporcionar hasta seis o siete horas de fuego, cuando con uno de pino se obtienen sólo treinta minutos, y con uno de encina algo más de una hora, ha precisado el experto.

"Eso es porque el carbonato cálcico del hueso funciona como una mecha y hace que la grasa se consuma poco a poco, como si se tratara de una vela, y por eso la temperatura es menor, pero dura mas tiempo, lo que te permite pasar toda una noche sin preocuparte del fuego", ha relatado el profesor de la UPV/EHU, quien ha recordado además que "este tipo de combustión no huele en absoluto".

Los hallazgos realizados poco después en la cueva cántabra de Esquilleu corroboraron estos resultados, tras descubrirse que sus primitivos habitantes, en este caso neandertales que vivieron en aquel lugar hace entre 40.000 y 100.000 años, también habían empleado huesos de cabras montesas con el mismo fin.

Más recientemente, el yacimiento de Coimbre, esta vez en Asturias, ocupado hace entre 15.000 y 25.000 años por humanos modernos, arrojo unas "pautas muy similares" pero esta vez con restos óseos de cabras y rebecos.

Fuente: rtve.es | EFE | 17 de diciembre de 2017

Nuevos descubrimientos subacuáticos en Grecia revelan el carácter de la ingeniería romana antigua

Los diques monumentales L-M1 (izquierda) y L-M2 (derecha) dominando el puerto exterior de Lequeo. Foto: K. Xenikakis & S. Gesafidis

Nuevas excavaciones arqueológicas en la antigua ciudad de Corinto, en Grecia, han revelado evidencia de la ingeniería romana a gran escala. Lequeo era uno de de los dos puertos que conectaban la ciudad de la antigua Corinto con las redes comerciales mediterráneas.

Lequeo se encuentra en el golfo de Corinto, mientras que Céncreas se encuentra al otro lado del estrecho de Corinto en el mar Egeo. Estos dos puertos estratégicos convirtieron a Corinto en un lugar de gran poder en el período clásico, pero los romanos destruyeron la ciudad en el año 146 a.C. cuando conquistaron Grecia. Julio César reconstruyó la ciudad y sus puertos en el año 44 a.C. Ahora, las excavaciones realizadas por el Lechaion Harbor Project han revelado la impresionante ingeniería del Imperio Romano.


La colonia corintia de César se convirtió en uno de los puertos más importantes del Mediterráneo oriental. Las naves llenaron Lequeo con productos internacionales y Corinto se hizo tan famoso por el lujo y el vicio, que un proverbio griego afirmó que “no todos pueden permitirse ir a Corinto”.
Sin embargo, mientras en las monedas antiguas se representa un formidable puerto con un gran faro, los restos visibles de Lequeo son escasos. Actualmente los visitantes de la costa pueden ver los cimientos de dos grandes estructuras que forman el puerto exterior, pero todo el resto está enterrado bajo siglos de sedimentos. Las excavaciones recientes están empezando a revelar los secretos de este antiguo puerto.

Los arqueólogos subacuáticos Matej Školc y Alex Tourtas excavan el dique L-M2 en el puerto exterior. Foto: Spyros Kokkinakis & Bjorn Lovén / LHP 2017


El arqueólogo subacuático Matej Školc excava cuidadosamente la cimentación del dique L-M2. Foto: Vassilis Tsiairis / LHP 2017

El equipo encontró un puerto complejo que cambió con el tiempo. En el siglo I d.C., Lequeo tenía un gran puerto exterior de 40.000 metros cuadrados y un puerto interior de 24.500 metros cuadrados. Las cuencas y el acceso al puerto fueron delineados por grandes moles y muelles construidos con bloques de piedra de cinco toneladas cada uno, incluyendo un dique de 45 metros de longitud y 18 de ancho. Alguna vez Lequeo tuvo la gloria de una serie de edificios monumentales extraordinarios, como un faro que aparece representado en monedas y una estructura monumental en una isla en el medio de la cuenca interior.
Moneda corintia de época romana (177-192 d.C.) que muestra un faro. Foto: Münzkabinett der Staatlichen Museen zu Berlin Acc. 1852/955

El monumento a la isla sigue siendo un misterio, pero los arqueólogos especulan que podría ser un santuario religioso, la base de una gran estatua o una oficina de aduanas. Sin embargo la isla fue utilizada solo por un breve período. “El monumento a la isla fue destruido por un terremoto entre el 50 y el 125 d.C. Puede ser la primera evidencia del terremoto de alrededor del año 70 d.C., bajo el emperador Vespasiano, mencionado en fuentes literarias antiguas”, dice Guy Sanders (izquierda), quien previamente dirigió excavaciones en Corinto.

En el siglo VI dC, una nueva cuenca, que medía aproximadamente 40.000 metros cuadrados, tuvo que ser construida para servir al Corinto bizantino. El sedimento había llenado áreas de las cuencas más tempranas y un gran terremoto levantó el área alrededor de Lequeo en más de un metro.

Los restos del misterioso monumento situado en una isla en el centro de la dársena 3 del puerto de Lequeo. Foto: Spyros Kokkinakis & Bjorn Lovén / LHP 2017

Las estructuras de bloques de piedra son hazañas impresionantes de la ingeniería, pero el proyecto está revelando información sobre el proceso de construcción del puerto a través de cajones de madera y pilotes utilizados como cimientos. Los elementos de madera raramente sobreviven a lo largo de los siglos, pero los depósitos subterráneos están entre los pocos lugares donde se pueden conservar materiales orgánicos.

“Durante casi dos décadas he estado buscando el contexto arqueológico perfecto donde se conserva toda la materia orgánica que normalmente no se encuentra en la tierra”, dice el director del estudio, Bjørn Lovén (derecha).

Si bien se puede inferir mucho de los restos de piedra, el descubrimiento de elementos de madera proporciona más información sobre el antiguo proceso de ingeniería. La madera es el santo grial para los arqueólogos y algunos de los artefactos descubiertos en Lequeo están tan bien conservados que parecen haber sido cortados ayer. Además de la infraestructura de madera, el equipo excavó delicados objetos orgánicos que incluían semillas, huesos, parte de un polea de madera y pedazos de madera tallados.

Foto: Pilotes de madera.

Poste de madera de 2.000 años de antigüedad perfectamente conservado. Foto: Angeliki Zisi / LHP 2017

Los arqueólogos también están encontrando evidencia de la vida cotidiana en la antigua Corinto. Han encontrado cerámicas que transportaban bienes comerciales que se originaban en Italia, Túnez y Turquía. Los artículos marítimos, como anclas y anzuelos, hablan de la vida a lo largo de la costa.
El trabajo en Lequeo se encuentra en aguas poco profundas pero presenta varios desafíos significativos. Es un entorno marino altamente activo, que hace que las zanjas de excavación se llenen rápidamente con sedimentos de la acción de las olas. Durante la noche se pueden acumular varias toneladas de arena en las áreas de excavación.

Ancla encontrado durante la excavación del misterioso monumento en la isla. Foto: Vassilis Tsiairis / LHP 2017

El equipo está usando los métodos científicos más recientes para superar estos obstáculos. Los geoarqueólogos perforaron y usaron drones para mapear los cambios costeros en el área, lo que resultó en el sorprendente descubrimiento de una nueva cuenca portuaria. El estudio de sedimentos muestra cómo el puerto se sedimentó con el tiempo y qué áreas habrían sido accesibles en diferentes períodos. Ahora realizan un análisis de ADN para comprender el “paisaje genético” de los árboles, plantas y animales que habitaron la región hace 2.000 años. La información de estos diferentes métodos científicos algún día puede permitir una reconstitución de Lequeo en cada periodo.


El proyecto es una cooperación entre el Instituto Danés en Atenas, la Universidad de Copenhague y la Delegación de Antigüedades Subacuáticas del Ministerio de Cultura griego. Está dirigido por el Dr. Bjørn Lovén y el Dr. Dimitris Kourkoumelis, y por los subdirectores Paraskevi Micha y Panagiotis Athanasopoulos.

Fuentes: elciudadanocl. | The Guardian | National Geographic | 15 de diciembre de 2017

Descubren 28 yacimientos de arte rupestre de hace 2.500 años en una isla de Indonesia

La Australian National University ha comunicado el hallazgo de pinturas rupestres en una pequeña isla de Indonesia. La zona no había sido explorada con anterioridad por los arqueólogos y ha resultado ser especialmente rica en este tipo de pinturas.


El equipo encargado de explorar la isla de Kisar, que mide solo 81 kilómetros cuadrados y se encuentra al norte de Timor-Leste descubrió un total de 28 yacimientos de arte rupestre que datan de hace al menos 2.500 años.


La profesora Sue O'Connor, de la Escuela de Cultura, Historia y Lenguaje, ha explicado en un comunicado (Aquí) que las pinturas ayudan a contar la historia de la historia del comercio y la cultura en la región: "Arqueológicamente, nadie ha explorado esta pequeña isla antes".


Así, O'Connor también ha relatado que: "Estas islas de Indonesia fueron el corazón del comercio de especias desde hace miles de años. Las pinturas que encontramos muestran barcos, perros, caballos y personas que a menudo sostienen lo que parecen escudos. Otras escenas muestran personas tocando la batería quizás haciendo ceremonias".


La profesor ha explicado que el descubrimiento apuntaba a una historia compartida más fuerte con la vecina isla de Timor de lo que se había sabido previamente. "Las pinturas de Kisar incluyen imágenes que son notablemente similares a las del extremo este de Timor-Leste", ha asegurado.


"Una característica distintiva del arte en ambas islas es el tamaño excepcionalmente pequeño de las figuras humanas y animales, la mayoría de las cuales mide menos de 10 centímetros. "A pesar de su tamaño, sin embargo, son notablemente dinámicos", ha comentado O'Connor.


La profesora O'Connor ha dicho que la relación entre las dos islas probablemente se remonta al período neolítico hace 3.500 años, que vio una afluencia de colonos austronesios que introdujeron animales domésticos, como el perro, y tal vez cultivos de cereales.


Sin embargo, el estrecho paralelismo entre algunas de las figuras pintadas y las imágenes proyectadas en los tambores metálicos que comenzaron a producirse en el norte de Vietnam y el suroeste de China hace unos 2.500 años y que se comercializan en toda la región, indican una fecha más reciente para algunas de las pinturas.


Por último, ha querido relatar que "estas pinturas tal vez anuncian la introducción de un nuevo sistema simbólico establecido hace unos dos mil años, siguiendo el intercambio de bienes de prestigio y el comienzo de sociedades jerárquicas".

Fuente: Cuatro, 15 de diciembre de 2017
Fotos: S. O'Connor | Cambridge Archaeological Journal

El misterio envuelve el origen del templo de Tutmosis III, el faraón guerrero

Un misterio con potencial para reescribir un capítulo de la historia del antiguo Egipto envuelve el origen del templo de Tutmosis III, el faraón guerrero, e intriga a la misión de arqueólogos que dirige la española Myriam Seco, que esta semana concluye el décimo año de excavaciones.

"De los misterios más fascinantes, desde el punto de vista histórico, es el origen del templo", indica a Efe el egiptólogo Javier Martínez Babón, desde el polvoriento sitio de las excavaciones en Luxor (sur),donde un enjambre de obreros trata de recomponer las ruinas de este santuario de 3.500 años de antigüedad.

Analizando el puzzle que componen los relieves grabados en piedra arenisca, rotos en 16.000 pedazos, los arqueólogos han descubierto que las obras del Templo de Millones de Años de Tutmosis III se iniciaron, de forma sorprendente, antes de que accediera al trono este faraón, durante el gobierno de su tía y madrastra, Hatshepsut.

El epigrafista, que rehuye extraer cualquier conclusión prematura, desliza que en las paredes del templo quedaron evidencias de que se produjo una "persecución" posterior contra la legendaria faraona de la XVIII dinastía.

En unos jeroglíficos referidos a ella como "hija de Ra", una mano aún desconocida borró la desinencia femenina y reconvirtió el texto en "hijo de Ra", un proceso similar al ocurrido en otros templos dedicados a Hatshepsut.

El supresión de la imagen de la faraona ha llevado a varios egiptólogos a defender la hipótesis, no confirmada, de que Tutmosis pudo haberse vengado así de su tía por usurparle el trono, en lo que, de ser cierto, sería una de las intrigas palaciegas más antiguas de la historia.

Antes de hacer cualquier valoración, los arqueólogos españoles aspiran a precisar la fecha del inicio de las obras, para saber si empezaron durante la regencia de Hatshepsut, cuando Tutmosis era niño, o después de su proclamación como faraona.

"Hay que ser muy prudentes y contrastarlo. El origen del templo es sumamente interesante. Va a dar de qué hablar", vaticina Martínez.

Los epígrafes y relieves encontrados en el templo, aunque por lo general están muy fragmentados, también han aportado informaciones valiosas sobre las expediciones militares que llevaron a Tutmosis III a levantar un imperio y expandir las fronteras de Egipto desde el actual Sudán hasta las orillas del río Eúfrates en Siria.

Martínez explica que hasta ahora "no había constancia" de la existencia de relieves que ilustrasen las campañas militares de este faraón, que vivió aproximadamente entre el 1490 hasta el 1436 a.C.

No obstante, en el templo de Karnak, ubicado en la ciudad de Luxor y mucho mejor conservado, sí hay jeroglíficos que reproducen los textos escritos por los cronistas de la corte, que dan cuenta de las batallas vencidas por este faraón, considerado el fundador de un imperio con una extensión inédita para la época y que duró tres siglos.

Entre otros detalles curiosos, los relieves han mostrado que el faraón se dedicaba a la cacería de elefantes -de raza asiática- en territorio sirio al término de sus campañas militares.

Los arqueólogos también han encontrado vestigios en el templo que demuestran la importancia que los egipcios dieron a Tutmosis III mucho después de su muerte.

En concreto, se han encontrado miles de escarabeos -amuletos con forma de escarabajo-, de recipientes de barro y tapones con sellos en los que se homenajeaba a Tutmosis III y que servían para realizar ofrendas de vino.

Estas ofrendas se realizaron en el mismo templo, en las épocas de varios faraones, a lo largo de unos 250 años, entre ellos Tutmosis IV,

Amenofis III, Horemheb, Ramsés I y Ramsés II, se encuentran entre los reyes que de este modo mostraron su veneración hacia el fundador del imperio.

Los arqueólogos españoles, que llevan diez años explorando la historia de Tutmosis III, esperan prolongar sus trabajos por lo menos otros siete años, para lo que cuentan con el apoyo de patrocinadores entre los que se destaca la Fundación Botín y también cuenta con el Santander Universidades, Cemex y Cajasol, además de la recién incorporada FCC.

Por Manuel Pérez Bella
Fuente: El Diario