Así convivieron osos y humanos hace dos millones de años en Dmanisi

Mandíbula de 'Ursus etruscus' de Dmanisi. / Bienvenido Martínez-Navarro (IPHES)

El yacimiento de Dmanisi en Georgia es conocido por haber proporcionado los fósiles más antiguos de homínidos registrados fuera de África. Varios cráneos excavados a finales del siglo XX y principios del XXI revelan la presencia hace 1,8 millones de años del género Homo en esta zona geográfica que linda entre Asia y Europa.

El buen estado de conservación de los fósiles humanos y de otros mamíferos lo convierten en un yacimiento excepcional para estudiar las relaciones entre estos primeros humanos y otros grandes mamíferos que habitaron en esta zona, especialmente los carnívoros.

Ahora, un estudio liderado por investigadores del Institut Català de Paleoecologia Humana y Evolució Social (IPHES) con la participación del investigador del Institut Català de Paleontologia Miquel Crusafont (ICP), Joan Madurell (izquierda), analiza gracias a un fósil de mandíbula la taxonomía y la dieta de los osos que coexistieron con estos humanos allí hace casi dos millones de años.

Las conclusiones del estudio publicados en la revista Scientific Reports revelan además que, a diferencia de lo que se creía hasta ahora, hay una única especie de oso en esta zona: Ursus etruscus (derecha).

“El registro fósil siempre es incompleto y muy a menudo es difícil saber si dos restos parecidos pertenecen a una misma especie o especies distintas”, explica Madurell. A partir del análisis estadístico, los investigadores demuestran que las diferencias observadas en los restos de Ursus etruscus se pueden explicar por el dimorfismo sexual.

“Pensamos que los machos de esta especie eran mucho más grandes que las hembras, como ocurre con los osos pardos actuales”, comenta el investigador. El estudio también revela que los huesos de Dmanisi corresponden a los primeros representantes del linaje de los osos de las cavernas, un grupo muy conocido en cronologías posteriores en Europa.

¿Qué comían los osos?

El estudio ha inferido la dieta de estos osos a partir del análisis de las microabrasiones que producen los alimentos en el esmalte dental.

“Cada tipo de alimento deja una marca característica en los dientes. Comparándolas con las de animales actuales de los que conocemos su dieta podemos inferir de qué se alimentaban especies extintas”, explica el investigador del ICP. En el caso del oso de Dmanisi, se ha podido determinar que tenía una dieta omnívora donde el pescado y la carne tenían una presencia importante.


Análisis de las microabrasiones en piezas dentales del 'Ursus etruscus'.

Por otra parte, en Dmanisi, humanos y osos debían hacer frente a una estacionalidad más marcada de la que había en África subtropical y es posible que esto condicionase su dieta. “Seguramente ambas especies tenían que alimentarse de carroña en algunas épocas del año, cuando los vegetales eran más escasos”, indica Joan Madurell.

“Es posible que compitieran por determinados recursos, pero no hasta el punto de impedir la coexistencia”, afirma. Hay que tener en cuenta, también, que los osos hibernan durante los meses más fríos, por lo que, cuando las condiciones eran más duras, no competían por los recursos con los humanos.

El estudio también revela que los jabalíes de la zona se extinguieron con la llegada de los humanos, probablemente porque la competencia por los recursos era más feroz que con los osos.

Fuente:agenciasinc.es| 29 de noviembre de 2019

Aragón recupera siete de los cascos celtíberos expoliados en Aranda de Moncayo (Zaragoza)

Cascos celtíberos que forman parte de los miles de piezas expoliadas en Aranda de Moncayo (Zaragoza)

El próximo 4 de diciembre, el Gobierno de España entregará a Aragón siete cascos celtíberos que fueron expoliados del yacimiento de Aranda de Moncayo y que tras un tortuoso periplo judicial permanecen en el museo de arte clásico de Mougins, a 30 kilómetros de la localidad francesa de Niza. La recepción de las piezas, de incalculable valor histórico, se celebrará en un acto simbólico en la sede de la Unesco en París, con la presencia de autoridades galas, españolas, miembros de la Guardia Civil y 25 embajadores. A falta de la confirmación de la agenda, están invitados el presidente de Aragón, Javier Lambán y el consejero de Cultura, Felipe Faci.

Las gestiones que han concluido con esta entrega comenzaron hace 14 meses, gracias al empeño personal del propio embajador de España en la Unesco, Andrés Perelló (izquierda), que realizó las gestiones oportunas con las autoridades galas y los propietarios de las piezas, que se han ofrecido voluntariamente para devolver las mismas a la comunidad autónoma de la que salieron de forma ilegítima por un expolio cometido en el yacimiento de Aratikos y del que salieron más de 4.000 piezas que fueron vendidas a distintas fortunas europeas.

Los dos autores del expolio fueron condenados a penas de seis y tres años de prisión. Ambos eran vecinos de la comarca del Aranda y llegaron a robar miles de piezas como estos cascos, que se conservan en perfecto estado, para venderlas a fortunas privadas de toda Europa.
Es la primera ocasión en la que dos estados colaboran para recuperar de fondos privados obras que fueron robadas en su día y se implica personalmente la Unesco, que ha cedido sus instalaciones para darle solemnidad al acto. Y sienta un precedente “ante las miles de obras que fueron sacadas ilegítimamente de sus emplazamientos originales, señala el embajador de España en la Unesco, Andrés Perelló. El dirigente español está “muy sensibilizado con este asunto” y también destaca “la buena predisposición” de los propietarios actuales, “que no estaban obligados a devolver las piezas”, ya que ellos las adquirieron legítimamente sin conocer que provenían de un robo y la propia Justicia así lo indicaba. “Los políticos tenemos que propiciar este tipo de actos y generar situaciones favorables para que se puedan dar. Hay que destacar la buena predisposición de las autoridades francesas y del museo de Niza que han permitido revertir una situación injusta”.

Larga historia

Estos siete cascos forman parte de un lote de 18 piezas celtíberas producidas entre el siglo IV y II antes de Cristo que fueron a parara en manos del coleccionista alemán Axel Guttmann a principios de los años 90. Ya entonces el arquéologo alemán Michael Müller-Karpe alertó de que se estaban ofreciendo piezas de incalculable valor a diversas fortunas europeas, sin que ninguna autoridad se tomara en serio la advertencia. El propio director del Museo Central Romano Germánico, Markus Egg, declaró en sede judicial que había alertado al Estado español en tres ocasiones del expolio sin que ni siquiera le respondieran. Fue la propia Fiscalía de Munich la que llegó a retener durante varios meses las piezas. Egg, junto al especialista Raimon Graells i Fabregat denunciaron en el 2012 ante la Fiscalía de Urbanismo y Medio Ambiente del Supremo el expolio, y a partir de ahí las operaciones de la Guardia Civil denominadas Helmet I y Helmet II consiguieron detener a dos personas que arrasaron el rico yacimiento de Aranda de Moncayo. Más de 4.000 piezas arqueológicas consideradas por los expertos como de un valor “excepcional”.


Material incautado por la Guardia Civil durante las operaciones denominadas 'Helmet'. ULY MARTÍN.

Los herederos del anticuario alemán vendieron los cascos tras su fallecimiento. Seis de ellos fueron subastados por la sala Hermann Historica en 2008 y 2009 y adquiridos por el museo de Mougins. Otros tres fueron subastados por Christie's.

Hasta el año 2016, el yacimiento no fue protegido como Bien de Interés Cultural por el Gobierno de Aragón. El año pasado se celebró el juicio que acabó con la condena a prisión de los dos principales autores del expolio. Previamente, el juzgado de La Almunia sobreseyó el caso en 2013, e incluso se le denegó al ayuntamiento de Aranda de Moncayo ejercer la acusación, a pesar del interés del Consistorio por personarse y recuperar una parte del yacimiento expoliado.

Aunque poco se podía hacer por recuperar los casos, finalmente ha sido el empeño personal del embajador de España en la Unesco el que ha conseguido a través de sus gestiones recuperar estas piezas, que la próxima semana serán devueltas a Aragón, la comunidad de la que no debieron salir nunca. Su destino podría ser el Museo Provincial de Zaragoza.

Fuente: elperiodicodearagon.com | 28 de noviembre de 2019
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Aragón elogia la llegada de los cascos y espera «recuperar todo lo pendiente» en patrimonio

Tres de los cascos de bronce de origen celtíbero subastados en Christie's el 25/10/2012

La confirmación de la entrega a Aragón por parte de un museo francés de siete cascos celtíberos expoliados de Aranda de Moncayo se ha recibido con gran satisfacción por parte de las autoridades autonómicas y los propios vecinos. «Estamos ante un nuevo ejemplo de patrimonio emigrado que se recupera ahora gracias al trabajo realizado desde el propio Departamento de Cultura y a la cooperación entre instituciones», señaló el consejero Felipe Faci. Las gestiones del embajador de España en la Unesco, Andrés Perelló, han sido fundamentales para el éxito de la operación.
El Gobierno de Aragón tiene asimismo constancia de la intención de que se depositen posteriormente en el Museo de Zaragoza, que es de titularidad estatal y gestión autonómica. Además, el centro cumple con las condiciones de seguridad requeridas para las piezas.


La fecha prevista de llegada a Aragón es el 4 de diciembre, aunque su presentación en público todavía no está confirmada. Las valiosas piezas son originarias de la antigua ciudad celtíbera Arátikos, situada donde hoy se encuentra el municipio de Aranda del Moncayo. En este municipio la ilusión se ha desbordado y reclaman ser tenidos en cuenta a lo largo del proceso. «Esperemos que sea un revulsivo para la localidad y que podamos participar con algún tipo de cesión temporal», expresó su alcalde, Javier Jordán.

Una vez cerrado este proceso de reclamación, desde el Gobierno de Aragón recordaron que quedan abiertas otras batallas por el patrimonio histórico. «Vamos a seguir insistiendo en recuperar los casos que quedan pendientes», alegó Faci al señalar que las últimas sentencias judiciales también «avalan» las pretensiones autonómicas. «La labor y la responsabilidad del Gobierno de Aragón es seguir trabajando en esta materia», indicó en referencia a los conflictos por los bienes de la Franja.

Fuente: elperiodicodearagon.com | 30 de noviembre de 2019

La era oscura de los visigodos en Valencia sale a la luz en una exposición

El Museo de Prehistoria de la Diputación de Valencia acogerá, a partir del 18 de diciembre, la exposición temporal "El tiempo de los visigodos en el territorio de Valencia", una muestra que presenta cerca de un centenar de objetos arqueológicos recuperados de los yacimientos visigodos.
El objetivo es aportar una perspectiva actualizada sobre esa época que, a menudo, ha sido considerada "oscura", según ha informado la Diputación en un comunicado.

La exposición está comisariada por los arqueólogos Esperanza Huguet Enguita, Josep Maria Macias Solé y Albert Ribera y Lacomba, quienes han realizado "un riguroso trabajo de investigación, así como un gran esfuerzo de síntesis histórica".
Los fondos expuestos pertenecen al Servicio de Investigación Prehistórica de la Diputación, al Servicio de Investigación Arqueológica Municipal del Ayuntamiento de València, al Museo del Pla de Nadal del Ayuntamiento de Riba-roja de Túria y al Museo Arqueológico del Ayuntamiento de Llíria.

El Museo de Prehistoria ha aumentado la presencia romana y visigoda con muestras como las excavaciones de 'Horta Vella' (Bétera), el reinicio de las campañas en 'València la Vella' y los conjuntos recuperados en los yacimientos de Llíria.


Los visigodos, sin ser conscientes, en sus 200 años de gobierno, vivieron una etapa de transición absoluta, siendo protagonistas de un período donde todavía se observan muchas reminiscencias clásicas junto a numerosos elementos innovadores procedentes del mundo germánico y también del romano oriental.

El conocimiento del mundo visigodo es imprescindible para valorar la implantación del mundo musulmán así como para entender la génesis de los tiempos feudales en nuestras tierras, según las mismas fuentes.

"Esta exposición abre una ventana al conocimiento de una época histórica que en muchas ocasiones ha sido despreciada y escasamente valorada".
Sin embargo, los procesos identificados en esta época reflejan la capacidad de adaptación de un pueblo a un período "poco floreciente", señalan desde la Diputación. EFE

Fuente: valenciaextra.com | 5 de diciembre de 2019

Inauguran la exposición 'La Granada zirí y el universo beréber' en el Palacio de Carlos V de la Alhambra (Granada)

La exposición 'La Granada zirí y el universo beréber', inaugurada este jueves por la Reina Doña Letizia en el Palacio de Carlos V de la Alhambra, reúne más de 300 piezas procedentes de colecciones públicas y privadas de todo el mundo --entre ellas un brocal de pozo del Museo de Santa Cruz de Toledo-- que resumen la cultura material asociada a al-Ándalus, tanto en la taifa granadina como en otros centros de poder de la península y el Magreb.

Según ha informado la Junta en una nota de prensa tras el acto de inauguración, en el marco de una visita de Doña Letizia al monumento, que se ha prolongado por aproximadamente hora y media, la muestra contextualiza y da a conocer el pueblo beréber y la influencia que ejerció en la Península Ibérica tras su llegada a al-Ándalus.

Se centra principalmente en la influencia de la dinastía zirí que, procedente del norte de África, y de los gobernadores de la taifa de Elvira, tras la decisión en el siglo XI de establecer capital en Granada, influyendo decisivamente en su configuración urbana.
En la exposición, comisariada por el catedrático de Historia Medieval de la Universidad de Granada, Antonio Malpica, se combina historia con huellas arqueológicas, referencias etnográficas y antropológicas.

Junto con la Reina, que ha estado acompañada por el presidente de la Junta, Juanma Moreno, el ministro de Cultura y Deporte, José Guirao, y el delegado del Gobierno en Andalucía, Lucrecio Fernández, han asistido al acto de inauguración, entre otras autoridades, el alcalde de Granada, Luis Salvador; la consejera de Cultura y Patrimonio Histórico, Patricia del Pozo; la consejera de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, Marifrán Carazo; y las directoras del Patronato de la Alhambra y Generalife, Rocío Díaz, y de la Fundación Legado Andalusí, Concha de Santa Ana.


La reina Letizia conversa con la presidenta de la Fundación Doctora Leila Mezian, este jueves en la exposición 'La Granada zirí y el universo bereber', en el Palacio de Carlos V de la Alhambra. MIGUEL ÁNGEL MOLINA (EFE).

Durante el recorrido, han visitado las cuatro salas en las que se distribuye esta exposición, que estará abierta al público hasta el 21 de abril de 2020. Doña Letizia ha conocido posteriormente la restauración llevada a cabo en la Sala de los Reyes, en el área de los Palacios Nazaríes, y ha firmado, en el Peinador de la Reina, en el Libro de Honor del monumento.

En concreto, lo ha hecho, según han indicado fuentes del Patronato de la Alhambra y el Generalife, estrenando el tomo número 14, encuadernado por Cáritas. Camino de la Sala de los Reyes, en el famoso Patio de los Leones, la Reina se ha cruzado con un grupo de escolares a los que se ha acercado a saludar, departiendo con ellos y haciéndose alguna fotografía para el recuerdo, según han informado estas fuentes a Europa Press.

Una imagen similar se ha repetido, a su salida por la puerta del Palacio de Carlos V, sobre las 12,15 horas, cuando ha podido saludar también a curiosos y turistas que la han recibido con algunos "viva España" y aplausos. Los más atrevidos le han pedido los consabidos 'selfies', y Doña Letizia ha accedido, departiendo, también en inglés, con distintos grupos de visitantes.


MUESTRA EN CUATRO SALAS

La exposición, cuyo acto de inauguración ha dado comienzo poco después de las 11,00 horas, cuando, puntual, con un traje de Felipe Varela de chaqueta y falda de capa gris, con bordados azules y zapatos 'estileto' a juego, ha llegado al Palacio de Carlos V, comienza con una primera sala, en que se aborda el origen del mundo beréber, mientras que en la segunda se analiza su influencia en la Península Ibérica y la impronta de la Granada zirí.

Así, entre otras piezas, se exhiben el surtidor de fuente con forma de león de la colección del Museo Nacional de Setif, procedente de la Qla de los Banu Hammad, el bote de marfil de la catedral de Narboma, la arqueta de marfil y esmaltes de Santo Domingo de Silos, que se encuentra en el Museo de Burgos, o la colección de piezas del siglo XI del Museo del Louvre, en especial el pequeño fragmento de loza dorada con epigrafía.

El brocal de pozo del Museo de Santa Cruz de Toledo, el tesorillo de moneda del Museo de Jaén o los huevos de avestruz de la necrópolis de Vilarricos de Almería del Museo Arqueológico Nacional, son otras de las obras que acoge esta exposición, cuya sala central gira en torno a las grandes dinastías norteafricanas como son los almorávides y luego los almohades.


La cuarta sala, ubicada en el Zaguán y la Cripta, está dedicada a las formas de vida de los beréberes a través de la colección de la Fundación Doctora Leila Mezian, que sirve, además, de prolongación y actualización de la entidad cultural de los amazigues, que, si bien han estado situados en el mundo islámico, siempre han contado con una marcada personalidad propia y ofrece el testimonio etnográfico y antropológico de formas de vida tanto campesinas y ganaderas como urbanas y artesanales.

La muestra está organizada por el Patronato de la Alhambra y Generalife y la Fundación Legado Andalusí, en colaboración con el Consejo de Europa, y se completa con un espacio audiovisual donde se proyectan videos sobre la Granada zirí y las taifas de la Península Ibérica, así como varios trabajos producidos por Dounia Benjelloun sobre el pueblo amazig, del que se estima que actualmente está conformado por más de 35 millones de personas y cuyo legado histórico y artesanal aún pervive en muchas de las producciones del norte de África.

"CHOQUE DE CULTURAS"

Antes del acto de inauguración, Antonio Malpica ha explicado a los periodistas que la exposición parte de la base de un "choque de culturas que es normal a lo largo de la historia, en concreto en el Mediterráneo, a raíz de que el Islam se instala y se establece un principio de unidad religiosa en el norte de África".

En este sentido, según este profesor de la Universidad de Granada, la muestra quiere servir de punto de "entendimiento entre dos culturas que han estado ajenas la una a la otra", siendo la bereber la más importante "numéricamente" en la cultura mediterránea, con influencias del mundo fenicio púnico y romano, entre otras civilizaciones.

En la imagen, la consejera de Cultura, Patricia del Pozo, junto a representantes institucionales en la inauguración de la exposición sobre el uso y significados de los baños árabes en Granada

El Legado Andalusí e inaugura una exposición sobre el uso y los significados de los baños árabes

Es la segunda muestra que inaugura la Junta esta semana en Granada, después de la que, también organizada por la Fundación El Legado Andalusí, presentó, este pasado miércoles por la tarde, la consejera de Cultura y Patrimonio Histórico, Patricia del Pozo.

Se trata de la exposición Los baños en al-Ándalus, que se puede visitar el Museo Casa de los Tiros de Granada, en la que destaca la importancia de la "preservación, estudio y difusión del legado andalusí para entender la historia actual de Andalucía".
Del Pozo puso en valor el proyecto de El Legado Andalusí, que hace "el esfuerzo más importante hasta la fecha por determinar el uso, el número y el estado de conservación de los baños o hammam".

Fuente: eldiadigital.es | 5 de diciembre de 2019
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León saca a la luz 900 pinturas rupestres inéditas

El Bierzo es ‘la cueva del tesoro’ del arte rupestre leonés. El arqueólogo Feliciano Cadierno lleva años embarcado en la tarea de localizar e inventariar la gran pinacoteca prehistórica, básicamente, en esta comarca. No quiere hablar de «descubrimientos», por si aparece alguien que reclama haber visto «primero» alguna de estas pinturas esquemáticas del Neolítico y de la Edad del Bronce. En los ocho años que lleva ‘peinando’ enclaves como Villafranca, Vega de Espinareda, Fabero, Toreno, Candín y Peña Piñera, aunque también Castrocontrigo o los Ancares ha registrado más de 900 pinturas.

Son figuras esquemáticas, algunas representan a hombres y animales o figuras solares; pero las hay realmente extrañas, como un antropomorfo con cuernos; o realizadas con una técnica «muy inusual», como la que representa a un ídolo oculado, realizado con 120 puntos, al estilo de los pintores puntillistas del siglo XIX —pero 7.000 años antes—.

Cuando Cadierno inició la búsqueda, únicamente había 351 pinturas catalogadas. Muchas de ellas solo se ven con un programa de ordenador, de ahí que los aficionados a garabatear en cuevas y abrigos rocosos hayan daño algunas sin saberlo. Cadierno, que actualmente trabaja de profesor en Londres, emplea el verano y las vacaciones en rastrear el legado prehistórico de la provincia. Afirma que «en Babia tiene que haber pinturas rupestres» y también en otros enclaves del Bierzo y Ancares. «Las posibilidades son infinitas, pero se necesita tiempo y dinero».


Su propósito es que el inventario de estas pinturas prehistóricas sirva para protegerlas. Lamenta que el arte rupestre es la hermanastra del patrimonio. «Ni siquiera la Universidad de León tiene un departamento que investigue». A ello añade el desinterés de las instituciones. «No dan dinero y no se investiga y no se investiga porque no hay dinero». Él trabaja sin subvenciones, aunque este verano llevó a cabo una excavación en el castro Peña Piñera, con una inversión de 6.000 euros, cofinanciados por el Instituto Leonés de Cultura y el Ayuntamiento de Vega de Espinareda, que ha arrojado interesantes resultados. Se trata del mayor castro de León, con 14 hectáreas, que pudo ser el último reducto de los astures en las guerras cántabras.

El castro de Peña Piñera ocupa una extensión de 14 hectáreas. CADIERMO Y SASTRE

Cadierno ha encontrado dos colaboradores excepcionales, José Anglés y Miguel Ángel González, que también han localizado numerosas pinturas y revisan las que están en peligro, como cuando se produjo el año pasado un devastador incendio en el valle de Fornela.

Según Cadierno, algunas pinturas rupestres del Bierzo, Peña Piñera, Librán y San Pedro Mallo tendrían una finalidad precisa: un enorme calendario lunar y solar en plena naturaleza.


Fuente: diariodeleon.es | 2 de diciembre de 2019

El ADN confirma la hipótesis de la autodomesticación del ser humano

Un nuevo estudio, publicado en Science Advances, propone que el gen BAZ1B regula la apariencia del rostro humano moderno al incidir en las células de la cresta neural, las cuales están implicadas en el desarrollo de los tejidos. Por eso, podría haber influido en los cambios faciales que se han producido a lo largo de la evolución humana.

Estos resultados apoyan por primera vez de manera experimental la teoría de la autodomesticación humana, una hipótesis la cual explicaba que los primeros humanos seleccionaban a las parejas que estaban dispuestas a comportarse en beneficio de la sociedad, dando lugar a unos humanos modernos menos agresivos que los de sus ancestros, con rasgos faciales esbeltos y más adecuados para comunicarse de manera no verbal.

La idea de la autodomesticación data del siglo XIX. Se cree que los rasgos anatómicos y de conducta cognitiva de los humanos modernos, como la docilidad o una fisonomía grácil, pueden venir de un proceso evolutivo que poseería semejanzas significativas con la domesticación de los animales.
Los científicos llevaban tiempo buscando evidencias para esta hipótesis debido a las incertidumbres que todavía había acerca de sus mecanismos subyacentes y los desafíos que planteaba para probarlos experimentalmente.
"Ya se han propuesto hipótesis sobre un déficit leve de las células de la cresta neural como factor subyacente a la domesticación animal. ¿Es posible que durante la evolución los humanos modernos desarrollaran una cognición más prosocial en comparación con otros humanos ya extinguidos como resultado de los cambios que afectan a las células de la cresta neural?", plantea Alejandro Andirkó (izquierda), doctorando en el departamento de Filología Catalana y Lingüística General de la Universidad de Barcelona que ha participado en el estudio.

Caras diferentes a los neandertales
Para realizar el estudio, los expertos buscaron si en ciertos trastornos del desarrollo humano neurológico, como el síndrome de Williams, había circuitos reguladores que diesen forma a la cara humana. Los pacientes de este trastorno poco frecuente tienden a tener rasgos faciales más pequeños y a actuar de una manera particularmente amistosa.

Para ello, Matteo Zanella (derecha), coautor del trabajo, estudió el gen BAZ1B en células madre de pacientes con genes duplicados o eliminados en la región Williams-Beuren 7q11.23, que afecta al comportamiento humano y a la función de las células de la cresta neural. Tras percatarse de que el gen actúa como regulador de los rasgos faciales humanos, los investigadores examinaron genotipos de un denisovano y dos neandertales para estudiar cómo el gen influyó en las diferencias entre los humanos modernos y arcaicos.

"Queríamos saber si las redes genéticas de las células de la cresta neural se veían afectadas en la evolución humana comparándolas con las de los genomas neandertales", explica Cedric Boeckx (izquierda), profesor ICREA de la Sección de Lingüística General del departamento de Filología Catalana y Lingüística General de la UB y autor principal.

Los resultados muestran que BAZ1B afecta a un gran número de genes que acumulan mutaciones de alta frecuencia en las poblaciones de humanos modernos y que no se encuentran en los genomas arcaicos de los que disponemos.
"Esto significa que la red genética de BAZ1B es una razón importante por la que nuestra cara es distinta comparada con la de otros antepasados ya extinguidos, como los neandertales", dice Boeckx.


En particular, los humanos modernos tenían mutaciones casi fijas en las regiones reguladoras de los genes dependientes de la dosis de BAZ1B en comparación con los humanos arcaicos, y los autores proponen que la expresión génica alterada condujo a cambios en las características faciales impulsados por la variabilidad de las células de la cresta neural.
Este estudio abre la puerta para estudiar el papel de las células de la cresta neural en la prosocialidad y otros campos cognitivos, pero también es el primer ejemplo de un campo potencial para estudiar afirmaciones evolutivas.

Fuentes: agenciasinc.es | phys.org | 4 de diciembre de 2019