No solo los genes: también el medio ambiente dio forma a la variación de los primeros pobladores de América

Puntos de referencia craneofaciales comunes utilizados en el estudio. North Carolina State University

Los primeros humanos que cruzaron el continente de América del Norte y luego se dispersaron por América Central y del Sur, comparten una ascendencia común. Pero a medida que se asentaron en diferentes áreas, las poblaciones divergieron y se hicieron distintas.

Un nuevo estudio de la Universidad Estatal de Carolina del Norte, publicado en Scientific Reports, muestra que las diferencias faciales resultantes de esta divergencia se debieron a la compleja interacción del medio ambiente y la propia evolución de estas poblaciones, y arroja luz sobre cómo se produjo la diversificación humana después de su asentamiento en el Nuevo Mundo.

"Si queremos comprender la variación en las poblaciones modernas de América Central y del Sur, específicamente, entonces debemos examinar la misma en las poblaciones prehistóricas de América durante el período formativo, después de que se asentaron en el continente, pero antes de que se produjera el contacto europeo", dice Ann Ross (izquierda), profesora de ciencias biológicas y autor principal del artículo de investigación.
En el primer estudio sobre variación craneofacial -tomando el continente en su conjunto, y que ha supuesto 20 años de desarrollo-, Ross y el coautor del trabajo de investigación, Douglas Ubelaker (derecha), de la Institución Smithsonian examinaron cráneos de toda Mesoamérica y América del Sur. Los cráneos datan desde los años 730 a 1630 d.C., y provenían de entornos que iban desde áridos hasta alpinos y costeros.

Mediante el empleo de un digitalizador 3D, los investigadores pudieron registrar puntos de referencia anatómicos estándar en los cráneos con el fin de obtener una configuración de consenso para cada grupo poblacional. Posteriormente, llevaron a cabo una comparación de las configuraciones de cada grupo para determinar los tipos de variación asociados a cada uno de ellos.

"Hay mucho debate sobre los modelos de variación craneal moderna", dice Ross. “Las mutaciones insertarían la mayor variación, pero son muy raras. La adaptación al medio ambiente es otra posibilidad, pero muchos investigadores creen que la variación se debe en gran medida a un proceso neutral, como la deriva genética, la cual ocurre cuando las poblaciones se separan y dejan de intercambiar sus genes".


Mapa que muestra la ubicación de los datos craneales obtenidos según la zona geográfica. Los gráficos vectoriales de diferencia muestran la dirección y la magnitud del cambio de forma de los mismos.

Ross y Ubelaker descubrieron que las poblaciones de las tierras altas eran similares entre sí, al igual que las poblaciones de las tierras bajas. Pero al comparar las poblaciones de las tierras altas con las de las tierras bajas se observó una mayor variación entre los dos grupos.

"Eso tiene sentido", dice Ross. “Probablemente no viajarías desde las montañas hasta la playa para encontrar pareja. Y sabemos que estos grupos intercambiaban algo más que simples vasijas".
Si bien estos resultados podrían atribuirse en parte a la deriva genética, los investigadores encontraron que otros factores, como las adaptaciones al clima y la altitud, también jugaron un papel en la diferenciación craneofacial de las poblaciones. Ross espera que su trabajo de investigación pueda servir como base de futuros estudios al respecto.

"La divergencia poblacional es un proceso multifactorial, una compleja interacción de factores", dice Ross. "Si deseas averiguar por qué estas poblaciones divergieron, debes considerar múltiples aspectos, no solo la genética o el ADN".

Fuente: North Carolina State University | 13 de agosto de 2019

Encuentran unas pinturas rupestres en una pared rocosa de la foz de Sigüés (Zaragoza)

Ana Baquedano, junto a las pintura que descubrió a mediados de julio. Iosu Anton

Agentes de protección de la naturaleza del Gobierno de Aragón encontraron hace unas semanas unas pinturas rupestres de color rojizo en una pared rocosa de la foz de Sigüés, en la Jacetania zaragozana. Según las primeras valoraciones, este hallazgo supone el descubrimiento de un nuevo núcleo del denominado arte esquemático, un estilo figurativo muy presente en Aragón que, como su propio nombre indica, se caracteriza por la simplicidad de sus trazos.

De hecho, la foz de Sigüés está muy próxima a la foz de Forniellos, otro paraje escarpado situado dentro del término municipal de Salvatierra de Esca en el que en los últimos años se han descubierto más de una decena de conjuntos de arte rupestre esquemático en los que también predomina el color rojo.

Las pinturas fueron localizadas a mediados de julio, pero ha sido esta semana cuando han sido visitadas por una técnico de la Dirección General de Patrimonio de la DGA y por los profesores de la Universidad de Zaragoza, Pilar Utrilla y Manuel Bea. Desde el Gobierno de Aragón prefieren ser cautos e insisten en que para confirmar “la autenticidad y el interés” del hallazgo hace falta estudiarlo más a fondo. Sin embargo, ayer Utrilla no tuvo ninguna duda tras ver in situ los dibujos.
Se trata de cinco dedadas (manchas hechas con los dedos) en rojo. No se puede decir la época en la que fueron hechas, pero este es un motivo frecuente en el arte esquemático que también se encuentra en otras pinturas rupestres aragonesas, por ejemplo en las de Arén, Castillonroy, Estadilla o el río Vero”, explica esta catedrática de Prehistoria.

Primer plano de las cinco dedadas (manchas hechas con los dedos) de color rojizo que forman el conjunto descubierto en la foz de Sigüés. Iosu Antón.

“Ahora el profesor Manuel Bea y el espeleólogo Mario Gisbert van a prospectar la zona porque seguro que tiene que haber más pinturas, pero por de pronto este hallazgo supone el descubrimiento de un nuevo núcleo de arte esquemático situado en el mismo ámbito que el de Salvatierra de Esca”, destaca Utrilla, quien considera que los dibujos encontrados pudieron ser “un signo marcador”.

“Están al comienzo o al final de la foz de Sigüés, según se mire, en un lugar muy bonito que se encuentra situado en el medio del farallón y desde el que las vistas son magníficas”, detalla esta experta subrayando que el lugar encaja con el tipo de emplazamientos que los artistas rupestres elegían para sus pinturas.

La foz de Sigüés es un angosto cañón excavado por el río Esca que separa las sierras de Leyre y Orba. Se encuentra entre los municipios de Sigüés y Salvatierra de Esca, y por sus características es un lugar muy apreciado por los amantes de la escalada. El hallazgo de las pinturas fue totalmente casual, pero estuvo relacionado con ese deporte.

“Normalmente revisamos las nuevas vías que van abriendo los escaladores para que no afecten a los nidos de buitre o a otros animales”, explica la agente de protección de la naturaleza (APN) Ana Baquero. “Hacia mediados de julio, estaba inspeccionado una de esas vías junto con otro compañero cuando me llamaron la atención unas manchas rojizas que descubrí en un abrigo (una cavidad poco profunda que no llega a ser una cueva) y que me parecieron que eran dibujos”.

Baquero estudió Geología y sabe distinguir la oxidación natural que puede sufrir la roca de un pigmento utilizado para colorearla. Por eso decidió avisar a la Dirección General de Patrimonio para que inspeccionara el lugar y confirmase si se trata de pinturas rupestres. Se encuentran a cierta altura y se puede llegar a ellas sin necesidad de cuerdas, aunque es un terreno muy escarpado, explica esta APN.

En los distintos conjuntos de arte esquemático descubiertos anteriormente en la foz de Forniellos, en Salvatierra de Esca, se pueden ver importantes agrupaciones de digitaciones (marcas dejadas con los dedos), barras verticales y oblicuas, antropomorfos (formas con apariencia humana), signos abstractos...

Ejemplo de arte levantino. Escena de caza (Valltorta, Castellón).

Los diferentes estilos de arte rupestre en Aragón

Aragón es una de las automomías con más pinturas rupestres y cuenta con ejemplos de los tres estilos que se han diferenciado para clasificar estas manifestaciones artísticas en la Península Ibérica: el arte rupestre cantábrico, el levantino y el esquemático.

En 1978 se descubrió la cueva llamada Fuente del Trucho en Asque-Colungo (Huesca), ocupada hace 22.000 años y en la que había restos de grabados y pinturas, los más antiguos encontrados en Aragón. Su hallazgo confirmó la existencia de manifestaciones de arte paleolítico en Aragón, hasta entonces solo atribuido a las cuevas de la cornisa cantábrica. Cabe destacar otros ejemplos como la cueva del Formón en Toledo de la Nata (Huesca) y Roca Hernando en Cabra de Mora (Teruel).

Junto al arte rupestre cantábrico, Aragón conserva importantes ejemplos de pinturas de estilo levantino y esquemático. El estilo levantino es un arte eminentemente pictórico desarrollado en cuevas y abrigos habitadas entre los años 6.000 y 4.000 a. C. Se caracteriza, sobre todo, por la figuración, y son representativas las escenas de animales y seres humanos en actos rituales, cacerías, danza, guerra. Existe una larga lista de yacimientos de arte rupestre levantino que se extiende desde el Prepirineo oscense, pasando por Caspe en Zaragoza, hasta Albarracín y la ribera del río Martín en Teruel.

Las pinturas esquemáticas

Aunque su cronología aún se discute, el arte rupestre esquemático se data en el periodo aproximado que va desde el año 4.000 al año 1.000 a. C., a finales de la Edad del Bronce. En unas zonas parece que tiene un origen propio, pero en otras sugiere ser una evolución del naturalismo propio del arte levantino a través de una progresiva simplificación de sus diseños.
En las pinturas esquemáticas las figuras son muy sintéticas y a veces resultan inidentificables, pero esa simplificación no debe entenderse como una pérdida de técnica pictórica, sino como una mayor capacidad de simplificación. No obstante, las principales diferencias respecto al arte rupestre levantino se dan en la temática, ya que lo más habitual son los signos abstractos, un tipo de dibujos casi desconocido en las pinturas levantinas.
La Ley del Patrimonio Cultural de Aragón considera bienes de interés cultural (BIC) las cuevas, abrigos y lugares que contengan manifestaciones de arte rupestre en toda su tipología. En diciembre de 1998, la Unesco declaró el arte levantino Patrimonio Mundial.

Fuente: amp.heraldo.es | 11 de agosto de 2019

Hallan en Pompeya enigmáticos objetos rituales en la excavación de la "Casa del Jardín"

Conjunto de antiguos amuletos encontrados en Pompeya. Imagen: © Copyright Parco Archeologico di Pompei (Parque Arqueológico de Pompeya).

Las ruinas de la ciudad de Pompeya, destruida por la erupción del volcán Vesubio en el año 79 d. C., siguen dando sorpresas como la anunciada este lunes. Un equipo de arqueólogos que trabajan en una excavación en la denominada "Casa del Jardín" recuperaron una caja -ya descompuesta- con múltiples "objetos preciosos".

Massimo Osanna, director del Parque Arqueológico de Pompeya, explicó en un comunicado que "Son objetos de la vida cotidiana en el mundo femenino y son extraordinarios porque cuentan micro historias, biografías de los habitantes de la ciudad que intentaron escapar de la erupción".


"En la misma casa descubrimos una habitación con diez víctimas de la erupción volcánica, incluidos mujeres y niños, y ahora estamos tratando de establecer las relaciones de parentesco gracias al análisis de ADN. Quizás la preciosa caja pertenecía a una de estas víctimas. Interesante es la iconografía de los objetos y amuletos, los cuales invocan fortuna, fertilidad y protección contra la mala suerte. Los numerosos colgantes en forma de falo pequeño, una oreja, el puño cerrado, un cráneo, la figura de Harpócrates, los escarabajos, etc., son símbolos e iconografías que ahora se están estudiando para comprender su significado y función", añade Osanna.
No está claro si la mujer propietaria de los amuletos escapó de la horrible erupción, aunque la mayoría de los residentes lo hicieron, como lo demuestra la evidencia de que muchas personas se reasentaron en ciudades cercanas. Sin embargo, si logró huir a un lugar seguro, la mujer aparentemente no tuvo tiempo de agarrar sus encantos de buena suerte, observó Osanna.


En la colección en caja de la antigua mujer había, además, dos espejos, piezas de un collar, adornos de cerámica vidriada y amuletos de forma fálica, una figura humana y un puñado de gemas, incluida una amatista púrpura con una figura femenina y una cornalina roja con una figura de artesano, y cuentas de vidrio, una grabada la cabeza de Dioniso, el dios romano del vino y la fertilidad, y otra con un sátiro danzante.


Las tallas de ámbar y vidrio están tan bien hechas, que quien las haya comprado probablemente tenía dinero sobrante. No obstante, si el coleccionista compró los objetos para su protección, es posible que los mismos no hayan hecho su trabajo previsto.

El conjunto de amuletos pronto se exhibirán, junto con otros hallazgos recientes de Pompeya, en la Palestra Grande, en una exposición que será un seguimiento de "Vanity", una exposición dedicada a las joyas de las Cícladas y Pompeya y otros sitios cercanos (abajo).


Fuentes: livescience.com | bbc.com | 13 de agosto de 2019

Científicos recrean un perfume del antiguo Egipto que podría haber usado Cleopatra

"Cleopatra sobre las Terrazas de Philae", de Frederick Arthur Bridgman (1847-1928). Dahesh Museum of Art, New York, USA

Cleopatra VII, la última goberante de Egipto antes de caer en poder de los romanos, siempre ha sido imaginada como una mujer bellísima, a pesar de que los científicos nunca han podido determinar su aspecto real -de hecho, existen estudios que apuntan a que realmente no era una persona muy agraciada-. Sin embargo, los arqueólogos sí han podido determinar a qué pudo oler, ya que un equipo de expertos ha recreado los perfumes más comunes del imperio a través de las muestras y restos que aún quedaban en las vasijas que los contenían.

«Este era el Chanel No. 5 del antiguo Egipto», afirmaba Robert Littman (izquierda), arqueólogo de la Universidad de Hawái, el cual, junto a su colega Jay Silverstein, son los responsables de la recreación. Durante años, ambos realizaron excavaciones en un sitio llamado Tell-El Timai, que en la antigüedad se conocía como la ciudad de Thmuis. También fue el hogar de dos de los perfumes más conocidos del mundo antiguo: Mendesian y Metopian. Ayudó también el hecho de que en 2012 encontraran lo que parecía la casa de un comerciante de perfumes, que incluía un área para fabricar algún tipo de líquido, así como ánforas y botellas de vidrio con residuos.

Si bien las botellas no olían, el análisis químico de los residuos reveló algunos de los ingredientes. Los investigadores llevaron sus hallazgos a dos expertos en perfume egipcio, Dora Goldsmith y Sean Coughlin, quienes ayudaron a recrear los olores siguiendo las fórmulas encontradas en textos griegos antiguos y otros.

La base de ambos aromas, Mendesian y Metopian, es la mirra, una resina extraída de un árbol espinoso nativo del Cuerno de África y la Península Arábiga. Se agregaron ingredientes como el cardamomo, el aceite de oliva y la canela para producir los perfumes antiguos, que en general eran mucho más espesos y pegajosos que los perfumes de hoy en día, lo que les conferían aromas fuertes, picantes y ligeramente almizclados que tendían a durar más que las fragancias modernas.

Frascos con perfumes recreados de tiempos de Cleopatra en una exposición en el Museo de National Geographic en Washintong D.C., titulada Queens of Egypt. (Crédito de la foto: National Geographic)

«Es una gran emoción olfatear un perfume que nadie olió en 2.000 años y que Cleopatra podría haber usado», afirma Littman en un comunicado de prensa de la universidad.
En el antiguo Egipto, la gente usaba fragancias en los rituales y aromas en conos de ungüentos, que eran como sombreros de cera que goteaban aceite sobre el cabello durante el día. "Los perfumes antiguos eran mucho más espesos de lo que usamos ahora, casi como una consistencia de aceite de oliva", dice Littman.

La perfumista Mandy Aftel (derecha), quien en 2005 ayudó a reproducir un perfume utilizado para perfumar a una momia infantil basada en los raspados de una máscara mortuoria, explica que, en realidad, no es seguro que Cleopatra haya usado ese perfume, ya que la dirigente tenía su propia fábrica de perfumes y creó fragancias exclusivas en lugar de usar lo que sería el equivalente relativo de ponerse una marca comprada en la tienda. De hecho, incluso hay una leyenda que relata que roció las velas de su barco real con tanto olor que Marco Antonio podía olerla llegar a la orilla cuando lo visitó en Tarso.

Incluso si Cleopatra no usara el perfume, es probable que la élite en el mundo antiguo usara algo que huele similar esta recreación, por lo que el valor de esta fragancia es incalculable, al menos para la arqueología.

Si usted está o va a ir a Washington D.C. en los próximos días, podrá oler la recreación de este perfume en la exposición Queens of Egypt organizada por el National Geographic Museum hasta el 15 de septiembre.

Foto: "Encuentro de Antonio y Cleopatra: 41 a.C.", de Sir Lawrence Alma-Tadema (1836-1912)

Fuente: abc.es | atlasobscura.com | 13 de agosto de 2019

Encuentran en el Monte Sion vestigios de la histórica conquista de Jerusalén por el imperio de Babilonia

Pieza de joyería encontrada en las excavaciones. MT ZION ARCHAEOLOGICAL EXPEDITION/RAFI LEWIS

El descubrimiento de un pequeño fragmento de una joya de oro y plata en el Monte Sión en Jerusalén, anunciado el sábado por la noche por el Proyecto Arqueológico del Monte Sión, es evidencia de la conquista babilónica de Jerusalén, según los investigadores.

Los babilonios, bajo el reinado del rey Nabucodonosor II, sitiaron Jerusalén y luego conquistaron la ciudad, arrasándola, incluido el Templo de Salomón, y quemándola hasta los cimientos. Los investigadores descubrieron más evidencia de la destrucción de Babilonia en capas de cenizas en el Monte Sión. Se confirmó que las capas de cenizas pertenecían a la era de la conquista de Babilonia a través de los artefactos y materiales específicos encontrados que son únicos de ese período, como las puntas de flecha escitas y los fragmentos de cerámica.

"Para los arqueólogos, una capa cenicienta puede significar varias cosas diferentes", dijo Shimon Gibson (izquierda), profesor de historia de UNC Charlotte y codirector del proyecto. “Podrían ser depósitos cenicientos retirados de los hornos; o podría ser la quema localizada de basura. Sin embargo, en este caso, la combinación de una capa cenicienta llena de artefactos, mezclada con puntas de flecha y un adorno muy especial indica algún tipo de devastación y destrucción. Nadie abandona las joyas de oro y nadie tiene puntas de flecha en su basura doméstica".

"Las puntas de flecha se conocen como 'puntas de flecha escitas' y se han encontrado en otros sitios de conflicto de los siglos VII y VI a. C. También se conocen en otros lugares fuera de Israel. Eran bastante comunes en este período y se sabe que eran utilizadas por los guerreros de Babilonia. Juntas, estas evidencias apuntan a la conquista histórica de la ciudad por Babilonia, pues la única destrucción importante que tenemos en Jerusalén para este período es la conquista del 587/586 a. C.".


Foto: Punta de flecha de tipo escita encontrada en la capa de destrucción de 587/586 a. C.

"Es el tipo de restos que esperarías encontrar en una casa en ruinas después de una escaramuza o batalla", dijo Gibson. "Objetos domésticos, lámparas, pedazos rotos de cerámica que habían sido volcados y destrozados ... y puntas de flecha y una pieza de joyería que podría haberse perdido y enterrado en la destrucción".

"Francamente, las joyas son un hallazgo raro en los sitios de conflicto, porque este es exactamente el tipo de cosas que los atacantes saquearán y luego se derretían".


Vista del monte Sion. Foto: Kevin Caldwell

"Me gusta pensar que estamos excavando dentro de una de las 'casas del Gran Hombre' mencionadas en el segundo libro de Reyes 25: 9. Este lugar habría estado en una ubicación ideal, ya que está cerca de la cumbre occidental del ciudad con una buena vista sobre el Templo de Salomón y el Monte Moriah al noreste".

El fragmento de joyería es parte de una borla o un arete con una zona superior de oro en forma de campana y otra de plata debajo en forma de racimo de uvas. Según Gibson, "Es un hallazgo único y una clara indicación de la riqueza de los habitantes de la ciudad en el momento del asedio".

Rafi Lewis (izquierda), profesor titular en el Ashkelon Academic College y miembro de la Universidad de Haifa y codirector del proyecto, le contó a Haaretz sobre el fragmento de joyería: "Pasó por un trauma en sí mismo, se rompió de alguna manera. El pequeño racimo plateado de uvas está casi separado de su caja dorada, como si la joya hubiera sido arrancada violentamente de alguien. Casi puedes sentir la violencia en el artefacto mismo”.

"Nunca se ha encontrado evidencia de este tipo de riqueza de la cultura material dentro de los muros de Jerusalén", agrega Lewis. "Los libros bíblicos de Reyes y Daniel hablan de la riqueza de Jerusalén que Nabucodonosor llevó a Babilonia, y describen festividades usando los recipientes de oro y cobre que vinieron de la ciudad. Este pequeño artefacto muestra el potencial de cuán rica era realmente Jerusalén".

Fuente: israelnationalnews.com | 8 de agosto de 2019

La villa romana de Salar busca el rostro de su 'Dominus'

Imagen de archivo de la excavación en Salar. / ÁLEX CÁMARA

La localidad granadina de Salar busca en una campaña de excavaciones arqueológicas en un yacimiento..., que data del siglo I, al Dominus representado en un gran mosaico de cacería, que fue hallado en muy buen estado de conservación.

El Dominus mandó construir en las inmediaciones de la localidad granadina de Salar una lujosa villa integrada por decenas de edificaciones repletas de mosaicos, esculturas y demás elementos que daban buena cuenta del poder económico y social de ese terrateniente en la antigua Hispania romana que mandaba traer desde los talleres de Roma las obras de arte con los que decorar sus estancias.
De hecho, todas las excavaciones realizadas hasta ahora han desenterrando nuevos tesoros; esculturas de Venus junto a mosaicos, teselas, cerámicas y columnas.

Estatua de la Venus Capitolina hallada en Salar. JULIO RAMOS NOGUERA

La aparición de este valioso material convierte a la villa romana de Salar, de la cual sólo se ha excavado un 10%, en uno de los yacimientos más importantes de la península equiparable al yacimiento de Noheda, en Cuenca.

Julio Román (izquierda), arqueólogo y coordinador de la campaña arqueológica lo tiene claro: "La villa romana de Salar es uno de los espacios con más expectación y futuro debido al buen estado de conservación de sus mosaicos y esculturas localizadas".

Un equipo de veinte personas entre estudiantes de Historia y Arqueología de la universidad de Granada, voluntarios y arqueólogos- dirigidos por Julio Román- trabajan estos días en tres puntos diferentes del recinto: el ninfeo (espacio consagrado a las ninfas) donde ha aparecido un brazo de una nueva escultura, el peristilo (patio central de la villa) y el complejo estructural tres que podría albergar las termas.
El peristilo es el eje central de la villa en línea con el triclinium (salón de la villa) y donde también se localiza el vestíbulo principal de entrada.

Es en este punto donde se ha ampliado hasta 24 metros la zona de excavación para terminar de desenterrar uno de los muchos mosaicos, en este caso, de cacería que decoraba dichas estancias.
"Si el ritmo de las excavaciones continúa como hasta ahora, a finales de agosto podríamos tener todo el mosaico de cacería donde esperamos que esté representado el 'Dominus' en gesto triunfal" adelanta el coordinador de la campaña.

La aparición estos primeros días de una nueva columna en el peristilo confirma, según los arqueólogos, la espectacularidad de la villa romana de Salar en cuanto a la conservación de sus estructuras arquitectónicas.

Foto: El jabalí herido en uno de los mosaicos hallados. / Noelia Jiménez García

El trabajo en el yacimiento va paralelo al que se realiza en el laboratorio donde los arqueólogos intentar explicar y reconstruir cómo sería la vida en esa época; el medio ambiente Y los alimentos que se consumían.

Los sondeos se realizan sobre una superficie municipal de unos 8.000 metros cuadrados, si bien los arqueólogos coinciden en señalar que el yacimiento es muchísimo mayor.

Mientras los arqueólogos se afanan en desenterrar el Dominus, la otra gran tarea se libra en el plano político donde el alcalde de la localidad, Armando Moya (IU) está decidido a buscar un patronum para la villa, es decir, financiación para dar continuidad a las excavaciones, para adecentar los accesos, señalizar el lugar y continuar los trabajos de conservación e investigación de este espacio que va camino de convertirse en la "gallina de los huevos de oro" de este pequeño pueblo de unos 2.600 habitantes dedicado principalmente a la agricultura.


"Cada campaña cuesta al Ayuntamiento unos 30.000 euros", según Moya, que no oculta su queja por la falta de apoyo económico de las administraciones y que sí prestan voluntarios y empresas locales como Asigran y la fundación Caja Rural que se ha sumado al proyecto.
Desde que se descubriera a finales de 2004, el interés por conocer este espacio crece al mismo ritmo que se va excavando, y para cuando finalice el año, este espacio lo habrán visitado más de 9.000 turistas, según el alcalde de Salar.

Los demás pueblos del interior miran con cierta "envidia" a Salar que está sabiendo aprovechar el tirón de este espacio arqueológico, ya que se abren nuevos negocios como una floristería, se sirven comidas romanas en los bares del pueblo y se puede comprar miel del lugar con el sello de "Villa romana de Salar" y además el ayuntamiento ha impulsado rutas y visitas teatralizadas.

Mientras la villa romana intenta salvar uno de sus grandes escollos, la falta de financiación, vive expectante la próxima declaración de este espacio como Bien de Interés Cultural.

Fuente: granadahoy.com | 10 de agosto de 2019

Una inscripción en un tronco revela la identidad de los arquitectos de las vías romanas en la actual Holanda

La inscripción COH II CR en el tronco indica quien construyó la carretera. Consejo Provincial de Holanda Meridional.

La inscripción en un tronco (ver la foto) que formaba parte de una carretera romana en el siglo II d.C. otorga el crédito de la vía a los arquitectos originales de la misma. Según un comunicado de prensa publicado en el sitio web de la provincia de Holanda meridional, eran soldados de una unidad adicional formada por ciudadanos romanos que se llamó Cohors II Civium Romanorum (segunda cohorte de ciudadanos romanos).

Cómo los romanos protegían sus fronteras

Durante la época romana los soldados construyeron fortificaciones fronterizas, también conocidas como limes, constituidas por murallas con torres de vigilancia. Por un lado, sirvieron para la defensa del territorio, y, por otro, como puestos de aduana.

Una de tales fortificaciones se extendía a una distancia de 568 kilómetros desde el Danubio hasta el delta del Rin, en el territorio de los modernos Países Bajos. Los romanos comenzaron a construir fragmentos separados de limes fronterizos bajo el emperador Augusto en el año 14 d.C., y posteriormente los conectaron entre sí en el año 83. Estas fortificaciones defendieron las fronteras del imperio de invasiones bárbaras entre los años 83 y 260 d.C., y luego fueron abandonadas. Debido a las frecuentes inundaciones las fortificaciones en los tramos más bajos del Rin casi no se preservaron.

Un descubrimiento inesperado

En septiembre de 2018, durante unas excavaciones previas a la construcción de una carretera en el sur de los Países Bajos, los arqueólogos encontraron 125 metros de una carretera romana. Junto a la misma hubo una antigua fortificación, de la cual solo quedaron restos de algunas casas, así como un sistema de drenaje y un cementerio. En las zanjas de drenaje los arqueólogos hallaron fragmentos de cerámica, restos de zapatos de cuero, tejas y monedas. Las casas formaban parte de las fortificaciones romanas.

Emplazamiento de la excavación. Consejo Provincial de Holanda Meridional

Los arqueólogos notaron que uno de los troncos de la fortificación tenía la inscripción COH II CR, que indica quiénes fueron los constructores de la carretera. Es la abreviatura de Cohors II Civium Romanorum, una unidad auxiliar formada por ciudadanos romanos que se dedicaban a la construcción. Según el comunicado de prensa, esa cohorte contaba con 500 soldados.

El arqueólogo Jasper de Bruin, del museo arqueológico de RMO, en Leiden, calificó el hallazgo como "único en los Países Bajos".

"No sabíamos si la calzada romana había sido construida por soldados, civiles o quizás esclavos. Ahora podemos concluir que hace 2.000 años, la segunda cohorte de civiles romanos construyó la calzada cerca de Valkenburg, de donde toma su curso la actual Ruta de Rijnland".


La inspección de los postes de madera muestra la forma sistemática en que los constructores hicieron su trabajo. Se utilizaron troncos de árboles específicos del mismo ancho y largo. La construcción de la calzada romana se llevó a cabo con precisión militar y no tenía precedentes en los Países Bajos, dijo De Bruin. Aunque la inscripción arroja algo de luz sobre la historia de la construcción de la calzada romana, algunas preguntas siguen sin respuesta. Saber exactamente lo que hizo la segunda cohorte y si otras cohortes estuvieron implicadas también, algo que se analizará a medida que se continúe con la investigación, cuyos resultados finales se esperan para 2020.

Fuentes: nmas1.org | dutchnews.nl | 25 de julio de 2019